Endlessly
Pop-RockFecha de publicación del disco: 30 de noviembre de 2010
1.My Boy
2.Too Hurt To Dance
3.Keeping My Baby
4.Well Well Well
5.Don't Forsake Me
6.Endlessly
7.Breath Away
8.Lovestruck
9.Girl
10.Hard For The Heart
Endlessly es el segundo álbum de Duffy. Grabado y compuesto en Nueva York y Londres, junto al veterano Albert Hammond, conocido por componer canciones como "When I need you", "The air that I breathe" y "To all the girls I loved before". Juntos han compuesto y producido Endlessly.
Como primer single Well, Well, Well, con una sección rítmica en la que colabora Ahmir "Questlove" Thompson (batería de The Roots).
Se anuncia como un sonido de los 60, más en la vena de inspiración de Dusty Springfield, que incluso su debut, Rockferry.
Tras los Grammys (nominada a tres, ganado uno al Mejor álbum Vocal), los Brits (ganó 4 incluyendo el Mejor álbum), 6.5 millones de discos vendidos, sería razonable pensar que regresaría con "Rockferry 2ª Parte". En cambio ha hecho todo lo contrario. El segundo álbum de Duffy se anuncia que muestra numerosas nuevas facetas. "No soy la misma que entonces", dice. "Era una chica".
Endlessly muestra simultáneamente canciones que son más movidas y bailables de lo que haya hecho anteriormente la galesa de 26 años de la Península Llyn además de temas acústicos y desnudos que nos enseñan a una Duffy más filosófica. "En un determinado momento pensé '¿Esto va a ser un disco indie?'" se ríe. "Es así como empecé a sonar". A nivel de letras tiene más poderío, es más sentido y mundano y también con más salsa y diversión ('I'm his lover/ Not his mother' son la primeras palabras que escuchamos). "Creo que se puede tener algún miedo a ser frívolo con la música, miedo de decirlo con la boca pequeña", dice. "A veces se trata de pasárselo bien".
Diez canciones grabadas en tres semanas con Albert Hammond (famoso por grandes éxitos como 'The Air That I Breathe', 'When I Need You', 'It Never Rains In Southern California', y otros) e interpretados por The Roots.
Especialmente porque Duffy no estaba segura de querer hacer un segundo álbum. "Pensé en dejarlo, en serio" dice. "No porque pensara 'Lo he hecho'. Es sólo porque echaba de menos las cosas sencillas de la vida. La vida se me ha complicado mucho". Tras meses en la carretera con la gira de 'Rockferry', volviéndose famosa en América, estando en los Grammys, incluso con un narciso galés que lleva su nombre Duffy estaba en una encrucijada.
"Al final de todo ese ciclo necesitaba que me recordasen lo que había venido a hacer. Se me olvidó por un momento cuál era mi trabajo y mi rol. No soy una modelo, ni una celebridad. Entonces ¿Quién soy? Todo es muy complicado. Ser fiel a tu integridad es muy difícil. Tener todo lo que quieres es insano, ¿sabes?".
Insegura de cómo continuar y de cuáles iban a ser sus próximos movimientos, el destino intervino en forma de persona : Albert Hammond de 66 años. O para ser más precisos, de su mujer. "Él estaba en su casa de Los Ángeles un día y su mujer le dijo '¡Albert! ¡Albert! Mira a esta chica de la tele. ¡Su voz suena como una mujer negra!' Miró y dijo 'Oh dios mío'". Duffy interpretaba 'Stepping Stone' en Saturday Night Live. Hammond llevaba desconectado de la música durante una década, no había querido (a lo mejor había pensado que era mejor dejarlo para su hijo, Albert Hammond Jr, de The Strokes) pero estaba intrigado. "Me quiso conocer. Yo no sabía nada de su trayectoria tampoco esta vez (igual que no sabía nada de Suede cuando conoció a Bernard Butler). Y me dijo que tenía una canción titulada 'Don't Forsake Me'. Y le dije 'Eso suena a la banda sonora de mi vida'".
"En esa época en LA, había muchas fiestas importantes", continúa Duffy. "Yo tenía una opción: o me iba a bailar con Hollywood o pasaba mi tiempo con Albert. Así que fui a casa de Allbert y su mujer me hizo un té". Hammond había trabajado en la música de su tema 'Don't Forsake Me' pero Duffy no estaba muy segura (es una artista que sabe lo que quiere). "Tiene 66, es uno de los compositores más reconocidos y yo tengo las pelotas, la audacia de destrozarlo", Duffy se ríe "Miro atrás y pienso '¡Qué maleducada!' Pero sabía que la canción reflejaba algunos elementos de mi vida. Albert entonces dijo: 'Chica valiente. Bien hecho'".
Desde ese momento las canciones surgieron de forma rápida sobre todo teniendo en cuenta el proceso de gestación de 4 años de 'Rockferry'. "Hicimos unos pocos días en LA, una semana en España y una semana aquí en Londres, se terminó con rapidez" dice Duffy. "Teníamos las canciones y en mi interior sonaban tan encantadoras en las maquetas acústicas. Y eso es lo que quería escuchar, sin complicaciones. Eso pasa cuando trabajas muy duro. Cuando todo el mundo hace demasiado puedes matar algo. Pero éramos Albert y yo divirtiéndonos".
La mitad del tiempo parecía que Albert se lo pasaba mejor que ella. "Eran las 4 de la mañana y recuerdo mirarle y pensar: 'Tienes 40 años más que yo. No sé de dónde sacas la energía. Está bailando y abogando por todo. Yo no tendría que ser la disciplinada, tendría que ser justo al revés. Yo le decía: vale, céntrate: '¡Albert, ya sé que estas bailando pero tenemos que grabar la segunda estrofa!'".
Se convirtieron en firmes aliados. La mujer de Albert incluso participó con consejos de indumentaria aprobando la recatada indumentaria sesentera de Duffy. "Me decía: 'Me gustan las faldas largas'", dice Duffy. "Cuando encendían la televisión, la gente de esa edad no está acostumbrada a ver a estrellas del pop casi sin ropa, ¡lo encuentran muy ofensivo!" se ríe.
En el camino Albert encontró otra fuente de inspiración en el programa Late Night With Jimmy Fallon ("Creo que ve mucho la tele", comenta Duffy con una risita. "Es de dónde saca todas sus ideas"), una banda que no conocía. Ella se temió lo peor. "Sé que su hijo está en The Strokes, y probablemente tiene buen gusto pero ¡Yo pensé que iban a ser una especie de grupo ruidoso de Nashville!". En cambio el grupo de la tele eran las leyendas del hip-hop de Filadelfia The Roots ampliamente considerados como una de las mejores bandas en directo. Duffy se quedó impresionada. Cuatro años antes había ido al Jazz Café de Londres con Geoff Travis de Rough Trade a ver al DJ de la misma banda. Se quedó boquiabierta. Incluso le dió al fundador de Roots Ahmir '?uestlove' Thompson un CD de Rockferry. Así que Duffy (tras la insistencia de Albert) llamó a LA Reid "¡A las 2 de la mañana con las manos temblándome al sujetar el móvil!" el jefe de Island Def Jam Music Group, y de su etiqueta Mercury en América, para pedirle un favor. ¿Podía organizar una reunion con The Roots? En 48-horas se había solucionado. Duffy y la banda conectaron inmediatamente. El compacto sonido en directo de The Roots, un mundo aparte con respecto al sonido de máquinas de todo el pop que lidera el top ten del momento era la pieza final del interminable puzle. "Le dije a Ahmir ':¡Te di una copia de Rockferry hace unos años nunca llamaste de vuelta!' Él dijo: '¡Ahora a muerte!'".
"Era como si desde siempre fuera a ser del modo en que ha sido hecho" dice Duffy con sus ojos azules muy abiertos. "Todas estas canciones han estado manando en mi interior todos estos años. Y lo he hecho. He encontrado al padrino de las canciones, mi amigo Albert".