La logia de la canalla

A las incursiones musicales por el tango, swing y rock n roll, Le Punk suma un recorrido por el folklore balcánico, mas en concreto por las raíces gitanas de esta zona del mundo famosas por la difusión dada al trabajo de Goran Bregovic y la No Smokin Band. Con todos estos componentes y con un intenso trabajo de estudio se elabora La Logia de la Canalla primer L.P. de esta genuina formación madrileña.

"...se trata de un experimento musical basado en la mezcla de estilos fraguados en el primer tercio del siglo recién muerto, tangos, musica gitana, centroeuropea, sonidos mediterraneos, blues y algo del sonido añejo de nueva orleands, todo interpretado por una banda de rock contemporanea...".

Opinan:
La Luna del Siglo XXI Nº240 - Diario El Mundo (24/10/03)
El disco español más sorprendente del otoño es el debut de este quinteto formado por veteranos de la escena madrileña. Se llaman Le Punk, pero aquí no hay escupitajos nihilistas sino milonga eléctrica, swing desencajado, tango castizo, música gitana centroeuropea, aires tabernarios, estrofas derrotadas y un poco cínicas. Todo, ejecutado con una credibilidad que les acerca a otros ilustres cronistas de la mala vida como Los Rodríguez, Goran Bregovic, Bunbury, La Cabra Mecánica o Tom Waits. Bravo.

Juan M. Bellver (Redactor-Jefe de La Luna)

Rock Sound - Noviembre '03
Ha valido la pena esperar los casi tres años que hace que se formó esta banda de reputados músicos madrileños (en Le Punk podemos encontrar a ex miembros de grupos como Buenas Noches Rose o Yoghourt Daze), para que cayera en nuestras manos este interesantísimo "la logia de la canalla". Un disco que en lo lirico desprende vitalismo etílico por los cuatro costados, rebosa de filosofía de barra de bar, aquella que dice las verdades como puños pero que, como dice la canción, duelen como puñales. Un alegato pro crápula que describe a la perfección el costumbrismo decadente de los arrabales de medio planeta y copa de dignidad los amores desgraciados e imposibles. Y si grande es la aportación literaria del disco al panaorama nacional, más importante, y novedosa , lo es la musical. Siendo canciones rock, "chucho", "Sol de Enero", "Tan muerto como vivo" o "Tristeza" se disfrazan, escondiendose tras arrebatos de tango, de milonga, de swing y de música tradicional bálcanica. Es decir, la de por ejemplo, y solo por citar el nombre más conocido, interpretan Goran Bregovic & The No Smoking Band, haciendo de Le Punk un grupo de características únicas en nuestra geografía y de la "Logia de la Canalla" un disco que gustará tanto a os amantes de Tom Waits, del Calamaro más trasnochado o de los Pleasure Forever más accesibles.

Oscar Gomez

El país de las tentaciones - 12/12/03
Ex componentes de Buenas Noches Rose, Yoghourt Daze y Pereza presentan en su estreno una alternativa noctámbula y cabaretera a la verbena mestiza. Suman afán jaraganero própio de los cíngaros, tango, teatralidad sonora estilo Bunbury, vientos a lo Mastretta, bases rockabillies, regusto swing, más sonidos transatlanticos y otros que nos arrastran hasta Italia. Divertidos y distinguidos, se separan del pelotón y marcan diferencias con particular voz y los sonidos que mezclan.

Igor Cubillo

Monso Sonoro - Diciembre 03
Niñerias y malabares hace Le Punk con los juegos del (des)amor. Las letras destilan una poesía de la experiencia de los más altos vuelos del panorama patrio musical. Canciones como "La Noria" o "Canalla" son también intentos de apuntar una reflexión madura sobre las preocupaciones de la vida, y otras -como "Febrero", "Veneno" o "El delito del amor"- a donde apuntan es, certeras y sinceras, al corazón mismo de los corazones más desterrados en la soledad. Buena, muy buena literatura en versos afilados como los sonidos a lo Robot de la guitarra y los aires de cabaret bunburynero y chanson arrabalera de café-concert lleno de humo. Tango, blues, bolero y topicazos de slow para voz clara y diáfana y banda básica de rock con apoyo de vientos. Un disco minúsculo que, invisible y taimado, mancha y grita sin embargo cosas tristes pero, por suerte, relativas (y es que rompérsele a uno el alma no es tan grave como romperse un hueso). Beban, beban, verán que Le Punk es adictivo y peleón, y las abstinencias entre escucha y escucha son cada vez más cortas.

Iván Sánchez