Happy people

Happy people es el segundo álbum de Peace, con singles avance como World pleasure, Money y Lost on me, estrenados ya durante el año 2014. También I'm a girl.


Nota promocional
La banda en directo más fascinante de Reino Unido. Peace, cuyos integrantes provienen de la región central de Inglaterra, se ganó el corazón del público con su alegre y escapista álbum debut In love en 2013. El álbum intentó captar la energía del directo y la espontaneidad que habían hecho de Peace una de las bandas en directo más buscadas en el Reino Unido, recibiendo excelentes críticas, tocando dos conciertos 'sold-out' en el Shepherds Bush Empire, y alcanzando el Top 20 con su álbum debut.

Algo estaba pasando. Jonny Greenwood de Radiohead cambió uno de sus pantalones militares por uno de sus demos, y Usher se abrió camino entre la multitud para verlos en directo en un concierto en el festival SXSW. La música, en algunos puntos, hace guiños cómplices a la era de los 90's cuando se usaba la ropa holgada (The Guardian ha dicho "la ropa holgada conoce a My Bloody Valentine") pero existe algo más en Peace que gusta mucho, y es adictivo y convincente a partes iguales. Quizás sea su entrañable inocencia juvenil, pero también podría ser el encanto del cantante Harry Koisser, a quien algunos han llamado el líder más cautivante de una nueva banda; un romántico con los ojos muy abiertos que se viste con un gusto parecido al de un joven Nicky Wire, y la actitud de rock'n'roll de Mick Jagger. Sus famosísimos conciertos en directo nacieron después de una noche de 'tech house' en The Rainbow en Birmingham, donde Peace tocaron sin interrupción meses y meses, y donde reunían a un ejército de fans cada vez que tocaban. Fueron el entusiasmo y la intensidad, al igual que una fuerte sensación de estar haciendo una travesura, los que empujaron a la banda hacia adelante: en pocos años pasaron de dar conciertos nocturnos mal pagados en la región central de Inglaterra, para firmar un acuerdo con un sello importante y conseguir éxito internacional.

Ya sea debido a un déficit de atención o a un inquieto apetito por la música, el sonido y la composición, se puede sentir un extraordinario deseo de aventura en el segundo disco de la banda Happy people. Algunas de estas sensaciones de exploración tienen su origen en la apertura del mundo para Koisser, su hermano Samuel (bajo), Douglas Castle (guitarra) y Dominic Boyce (batería). Originarios de varias ciudades del centro de Inglaterra y formando la banda en 2010, los cuatro músicos firmaron con Columbia Records y pronto salieron de gira por todo el mundo – visitando países nuevos para ellos y de los cuales ni siquiera habían oído hablar. En consecuencia, 'Happy people' se escribió "en la carretera" y en habitaciones de hotel, dejándose influenciar por las extrañas experiencias vividas en todo el mundo, de escenarios que cambiaban continuamente, de movimientos, de sabores variados, sentimientos que decaen y fluyen; siendo todo ello un reflejo de sus nuevas e itinerantes vidas.

La mayor parte del álbum fue producido por Jim Abbiss (Arctic Monkeys, Kasabian, Bombay Bicycle Club), que también produjo In love. La banda estuvo jugueteando con el equipo de grabación, persiguiendo un sonido sucio y hermoso a la vez, lo-fi y arisco, pero de alguna forma, con brillo. Duncan Mills produjo 'Someday', I'm a girl y Perfect skin. Mills anteriormente había producido Drain en la edición deluxe del primer álbum de Peace y también ha trabajado con Beyond The Wizards Sleeve, Malcolm McLaren y Crocodiles.

La brillantez de estas canciones está en su efervescencia – en cómo, gracias al trabajo creativo, la reflexión y la experimentación en el estudio, estas canciones tiene un sonido irresistible e incontenible. Son canciones de alegría y juventud, son estribillos para cantar a viva voz y en masa; éste es el sonido de una banda en llamas.