Demonstration

Trampoline es el primer avance del segundo disco de Tinie Tempah, Demonstration. Producido por Diplo, el título de Trampoline es un guiño a las habilidades acrobáticas de Tinie en el escenario, desafiando la ley de la gravedad.

"Estoy entusiasmado más que nervioso... Hacer Demonstration ha sido un proceso completamente diferente al del primer álbum. Cuando hice Disc-Overy, no me di cuenta de que podía tener control completo".

Inicialmente Tinie comenzó a grabar el álbum en Estados Unidos, mientras estaba de gira. Pero tras unas cuantas sesiones en Los Angeles y Nueva York se desilusionó. "Empecé a perder la esencia de lo me he había hecho ser yo", señala. Decidió regresar a sus raíces, grabar todo el álbum en el mismo estudio de Greenwich donde había hecho los éxitos callejeros Wifey y Tears. También rechazó conformarse con nada que no fuese perfecto; volvía a retocar la producción de las canciones, volvía a mezclar y a poner la voz varias veces hasta estar 100% seguro de que estaban perfectas. También reclutó a Manny Marroquin, ingeniero de sonido para muchos artistas desde Tupac a Kanye y Usher. "Cuando hice Disc-Overy, me reunía con un productor, pasabas unas cuantas horas con él, hacíamos un tema y luego era 'Ok, gracias', agradecido realmente. Ahora sé lo que hago, así que trabajo muy duro en ello. Lo escudriño todo, hasta la última letra, cada flow. Si pudiera volver a hacer una canción, la volvería a hacer después de eso. Le digo a Zane lo que tiene que añadir, a Diplo que cambie esto o lo otro, con una confianza recién ganada que no tenía cuando hice Disc-Overy".

La primera publicación fue el tema donde aparece 2 Chainz y producido por Diplo, Trampoline, un guiño a la habilidad de Tinie para dar saltos en el escenario desafiando la gravedad. Al igual que con el tema que define un género, Pass Out, Trampoline también engloba varios componentes y sonidos, sirve de recordatorio de la disposición de Tinie a tomar riesgos musicales. "No quería pensar demasiado el primer single pero sabía que tenía que ser una transición entre el primer y el segundo álbum. Lo describo como un clímax", declara con una descarada sonrisa sobre el tema cargado de bajos que abarca Calypso, Trap, Dance, Dancehall y Rap y referencias a Banksy, Claridges y Jordans antes de enumerar los muchos lugares alrededor del mundo que hasta ahora ha #disturbed (trastornado). Es un tema audazmente efervescente y ligeramente loco que se podría esperar de Diplo, y sirve como un excelente recordatorio de lo flexible que puede llegar a ser el flow y la interpretación de Tinie. "Cada línea es un pensamiento, una visión sobre cómo funciona mi cerebro y cómo escribo música", explica. "La canción me sintetiza, cómo soy y cómo funciona mi cerebro, pero de forma divertida".

En el siguiente single antes de la publicación del álbum, Children of the sun, Tinie se reúne con el productor de Written In The Stars, Ishi. Con la participación a la voz de John Martin, a quien escuchamos en el tema "Don't You Worry Child" de Swedish House Mafia. Un single que dicen que suena a Toto, una balada con la fuerza rock de los 70. "Menciono tener algunos arrepentimientos e inseguridades aquí", puntualiza. "No quiero que piensen que voy volando por todo el mundo dándome la gran vida con famosos y sin centrarme en la música, porque sí que lo estoy. Estoy muy centrado. La música es arte y mi arte es por lo que voy a ser juzgado siempre".

Otros momentos destacables en Demonstration incluyen Moshpit, la muy esperada colaboración de Tinie con Dizzee Rascal. "Esta es la canción que me habría gustado tener con Dizzee cuando yo era un chaval de 12 años", cuenta Tinie que lleva siendo un ávido fan del MC de E3 desde hace más de una década, Paloma Faith canta en Lost ones mientras que Emeli Sandé hace equipo con Naughty Boy en A heart can save the world. Naughty Boy está a cargo de la producción una vez más en el tema embaucadoramente rebelde con predominancia de piano Hero (con la participación de Laura Mvula) que revela un lado ligeramente más oscuro de Tinie cuando despotrica contra becas y diputados cínicos antes de concluir diciendo Heaven (Emeli Sandé) toca el piano, yo estoy intentando aprender a tocar la guitarra. Tom Rowlands crea otro punto álgido con el tema con gusto a Johnny Cash Looking down the barrel, una canción que puede hacer arquear unas cuantas cejas con asombro gracias a algunos bulliciosos coloquios y chistes finales a carcajadas. Pero como Tinie dice encogiéndose de hombros, esa es la cuestión. "Debe ser divertido", exclama. "¿No debería ser ese el objetivo de la música? Quiero que la gente se pare a pensar '¿Qué acaba de decir?'".

"En la introducción digo 'Sigo siendo la misma persona que conociste, sólo que multiplicada por 10'", cuenta Tinie. "El primer álbum funcionó sorprendentemente bien y espero que este segundo lo supere. Pase lo que pase, este es un álbum en el que creo, que representa quien soy. Estoy deseando que la gente lo escuche".