Kintsugi
ClásicaFecha de publicación del disco: 10 de noviembre de 2022
1.180º - 4:09
2.Kintsugi - 5:38
3.Obsessed - 3:33
4.Butterflies - 6:58
5.Resurgence - 3:41
6.Vals a 2 - 4:39
7.Run - 2:32
8.Open arms - 5:54
9.Notte - 4:33
10.Prière sans Dieu - 2:50
Kintsugi es el segundo álbum en solitario de la pianista y compositora Laura Andrés. El título -utilizado por Death Cab For Cutie para su disco de 2015- hace referencia al arte de la reconstrucción de la cerámica japonesa, e inspira las composiciones de la artista. Es una filosofía que plantea que las roturas forman parte de la persona y que no solo no se tienen que esconder, sino mostrar y superar hasta hacerlas embellecer. Una obra, según se anuncia, enmarcada dentro del minimalismo musical de autores como Ludovico Einaudi o Yann Tiersen.
Forman parte de 'Kintsugi' piezas como 'Resurgence', dedicado a las mujeres de la historia; 'Open arms', un tema solidario; 'Butterflies' o nuestra capacidad de ilusionarnos y amar la vida; y la intimidad de la 'Notte'. Como avance la pista titular.
Concierto presentación el 10 de noviembre de 2022 en el Centre Artesà Tradicionàrius de Barcelona. Firmas de discos en FNAC El Triangle de la misma ciudad el 23 de noviembre de 2022.
El arte de reconstruirse
Todas las personas tenemos heridas, marcas y cicatrices que hemos ido adquiriendo con el correr de los años. De eso se trata vivir. Pero, por esta cuestión tan humana y quizás tan moderna donde parece no estar permitido mostrar todo lo que nos pasa y solo hacer foco en el éxito y la felicidad, decidimos ocultar esas cicatrices.
Kintsugi
El Kintsugi es el arte japonés de la reparación y reconstrucción de piezas de cerámica rotas en la que, en lugar de disimular las líneas de rotura, se les otorga un nuevo valor y se las hace más visibles utilizando una pasta a base de resina vegetal y polvo de oro. Y mucha, mucha paciencia. Este método exhibe esas heridas del pasado y así, los objetos de cerámica adquieren una nueva vida.
La maravilla de uno mismo
Con esta técnica además, nunca se consiguen dos piezas iguales. Al contrario, plantea la maravilla de lo genuino que hay en cada individuo. Hoy, esta técnica ha traspasado las fronteras de la alfarería y se ha convertido en una filosofía de vida y una herramienta emocional, que revalida las heridas del alma y nos enseña sobre la resiliencia, una competencia clave en nuestra era.
Aceptación
No ser tan críticos, aceptarnos con toda nuestra historia y carga emocional. Si aprendemos de nuestros errores y traumas del pasado, dejar ver esas cicatrices no tiene por qué ser un tabú ni mucho menos. Somos imperfectos y eso está bien. Es imposible ser “perfectos en este plano”. Tenemos que ser resilientes y ver cómo aprender del dolor o los errores;.
Perfecta imprefección
Animarnos a mostrarnos imperfectos, nos hace humanos, más sabios y mejores personas en todos los aspectos de nuestra vida.
Reconocer y darle entidad nuestra hoja de ruta en la vida es la que nos lleva a encontrar el mejor camino, por más curvas y desvíos que nos presente. El resultado de ser transparentes siempre es positivo.
Así es como entra la luz
Nuestras experiencias, nuestras heridas, las enseñanzas y aprendizajes son los que nos convierten en lo que somos y lo que estructura nuestra personalidad.
Estamos formados de todo eso y nada debe ocultarse. Hay que resignificar y darle un valor. Como dice el poeta Leonard Cohen: “Hay una grieta en todo, así es como entra la luz”.
Escúchalo
- En Spotify
- En YouTube