Pues bien, el videoclip tiene dos versiones. La oficial cuenta con la dirección de Hype Williams. El segundo vídeo ha sido rodado por Anton Corbijn como una versión del que hiciera para el Enjoy the silence de Depeche Mode. Es quizá una versión más ególatra con Chris Martin casi como protagonista absoluto y con corona de rey.
En cualquier caso estos chicos nos caen fenómeno. No por vender discos como churros y ser famosos, hemos de ver puntos negros donde no los hay. Coldplay es el grupo de pop del siglo XXI.