David Thewlis es un actor, guionista y director nacido y criado en Blackpool. A la edad de 18 años se mudó a Londres y se matriculó en la prestigiosa escuela de música y artes dramáticas Guildhall School of Music and Drama, en donde se graduó en 1984.

Su primer papel relevante en el cine fue encarnando a Johnny, el hablador filósofo de la calle en INDEFENSO, dirigida por Mike Leigh, trabajo que le valió el calificativo de mejor actor por la National Society of Film Critics, el London Film Critics Circle, el Evening Standard, el New York Film Critics' Circle y el Festival de Cine de Cannes. Ese mismo año apareció en televisión encarnando a James Jackson, un depredador sexual, en Principal sospechoso: El guardián de las almas, junto a Helen Mirren y Ciarán Hinds. En el transcurso de la década de 1990, Thewlis apareció en una gama de películas variadas, entre las que se incluyen RESTAURACIÓN (1995), BELLEZA NEGRA (1994), VIDAS AL LÍMITE (1995) con Leonardo DiCaprio, LA ISLA DEL DR. MOREAU (1996), DRAGONHEART (1996) y SIETE AÑOS EN EL TÍBET (1997) junto a Brad Pitt. Fue nominado a los premios del British Independent Film por su papel en DIVORCING JACK (1998) y encarnó a Clov en la película para televisión ‘Endgame’ (2000) de Samuel Beckett. También realizó un trabajo destacado en la película de Bernardo Bertolucci, ASEDIADA (1998) y en la de Paul McGuigan, GANGSTER NO. 1 (2000) junto a Paul Bettany y Malcolm McDowell. Thewlis encarnó además a un comandante de los SS alemanes en un campo de concentración Nazi como padre del personaje principal, en EL NIÑO CON EL PIJAMA A RAYAS.

En 2004, Thewlis fue fichado para el papel de Remus Lupin en HARRY POTTER Y EL PRISIONERO DE AZKABAN. No tuvo que hacer ningún casting ya que fue la primera elección del director Alfonso Cuarón para el papel. Repitió el papel en cuatro entregas posteriores de la serie.

Parte de su filmografía reciente incluye EL NUEVO MUNDO de Terrence Malick, ANONYMOUS de Roland Emmerick, CABALLO DE BATALLA de Steven Spielberg, THE LADY de Luc Besson, RED 2 de Dean Parisot, TEOREMA ZERO de Terry Gilliam, EL QUINTO PODER de Bill Cordon, el último largometraje de la carrera de John Boorman titulado REINA Y PATRIA y por supuesto LA TEORÍA DEL TODO, con Eddie Redmayne y Felicity Jones, la aclamada película biográfica de Stephen Hawking ganadora de un Oscar® y dirigida por James Marsh para Working Titles Films.

En la actualidad David ha participado en largometrajes que van desde la evocadora adaptación de Justin Kurzel de MACBETH (nominada a un premio Palme d'Or en el Festival de Cannes de 2015) en la cual David encarna al Rey Duncan junto a Michael Fassbender y Marion Cotillard para See-Saw Films y Weinstein Company, pasando por la próxima película de suspenso psicológico de Alejandro Amenábar REGRESIÓN para Mod Productions con Emma Watson y Ethan Hawke hasta LEGEND, thriller mafioso sobre la vida de los gemelos Kray, dirigido por Brian Helgeland y donde comparte cartel con Tom Hardy, Taron Egerton y Emily Browning para Working Title.

David acaba de finalizar el rodaje de su próximo largometraje junto a Colin Firth y Rachel Weisz, dirigido por James Marsh y basado en la vida del extravagante regatista Donald Crowhurst; además, ha vuelto a las pantallas de la televisión británica encarnando al personaje principal en la adaptación de la BBC de la obra clásica de misterio de JB Priestley, AN INSPECTOR CALLS, dirigida por Aisling Walsh.

En su rol de director, Thewlis obtuvo una nominación a los premios BAFTA al mejor cortometraje por HELLO, HELLO, HELLO (1995); también escribió el guion, dirigió y protagonizó el largometraje CHEEKY (2003). Además fue guionista y protagonista junto con Craig Roberts del cortometraje SUNDAY ROAST, dirigido por Kevin Thomas. SUNDAY ROAST compitió en el Festival de Cine de Londres de 2014 y actualmente está siendo adaptado a largometraje bajo el título de CROAK y cuya producción comenzará en 2016.

La novela The Late Hector Kipling, escrita por el propio Thewlis, fue publicada en 2007 por la editorial Picador. Colin Greenland del diario The Guardian la describió como una visión "placentera y desestabilizadora" del mundo del arte.