Es uno de los intérpretes más intuitivos y característicos de los últimos años del cine español. Desde su papel en Arrebato, de Iván Zulueta a La ley del deseo, de Pedro Almodóvar, pasando por sus trabajos en teatro (Marta-Sade) o televisión (Los gozos y las sombras), su composición de personajes es tan interesante como expresiva. Entre sus trabajos recientes destacan Martín Hache, de Adolfo Aristarain o Intacto, de Juan Carlos Fresnadillo.