Ice Cube ha sido un verdadero "perro guardián" de la cultura, proporcionando perspicaces comentarios, análisis y pormenores del amplio acervo americano en términos rigurosos, así como con inquebrantable honestidad y aleccionadora perspectiva además de un hábil toque cómico, lo cual le ha granjeado el aprecio de varias generaciones de admiradores.

Ciertamente, al haberse criado en la zona South Central de Los Ángeles, infestada de crimen y bandas durante los años 70 y 80, Ice Cube aprendió a manejarse en un mundo donde las fronteras entre el bien y el mal cambiaban constantemente. E igualmente relevante, este magnate del entretenimiento, asentado en Los Ángeles, también encontró una forma perdurable de mostrar la comedia que surge en medio de situaciones difíciles.

Tras escribir letras memorables para las rompedoras canciones del grupo N.W.A. "Straight Outta Compton" y "Fuck Tha Police", Ice Cube abandonó la banda en la cima de su popularidad porque no se consideraba bien pagado. Este hecho le condujo a una de las carreras más exitosas de la historia de la música. Como artista solista, Ice Cube ha vendido más de diez millones de álbumes, al tiempo que sigue siendo considerado uno de los artistas más respetados e influyentes del mundo del rap.

Más allá de la música, Ice Cube se ha consolidado como una de las figuras más fiables, exitosas y prolíficas de la industria del entretenimiento. En el ámbito cinematográfico, Ice Cube es un consumado productor (Todo en un viernes, La barbería 2: Vuelta al negocio, ¿Cuándo llegamos?), guionista (Todo en un viernes, El club de las strippers, The Janky Promoters), director (El club de las strippers) y actor.

Su filmografía incluye las aclamadas franquicias Todo en un viernes, La barbería y ¿Cuándo llegamos?, así como su interpretación de adolescente conflictivo en Los chicos del barrio, de soldado ambicioso en Tres reyes y de destacado agente del gobierno en xXx2: Estado de emergencia. La habilidad de Ice Cube para aportar naturalidad y aspecto de hombre corriente en cualquier género cinematográfico hace que sus personajes resulten convincentes y memorables, independientemente de que encarne a un controvertido estudiante universitario (Semillas de rencor) o a un escéptico entrenador de fútbol (The Longshots).

Como productor de televisión, Ice Cube logró que las diferentes temporadas de las series Barbershop y Are We There Yet? tuvieran un gran éxito de audiencia, y también fue muy exitosa la controvertida serie Black. White, entre otras.

En 2012, Ice Cube apareció en el gran éxito de taquilla Infiltrados en clase así como en el thriller independiente Rampart. Otros de sus proyectos cinematográficos en desarrollo son: un biopic sobre N.W.A y otra película de la franquicia Friday. Ice Cube también promociona Coors Light y ha aparecido en varios anuncios de la marca.

Más recientemente, Cube ha tenido un enorme éxito con la taquillera película Novato en apuros, que produjo su propia compañía, Cube Vision. La película fue número uno de taquilla durante tres fines de semana consecutivos y fue el filme que más recaudó durante el fin de semana de celebración del Día de Martin Luther King Jr. Novato en apuros tiene ya luz verde para la realización de su secuela, lo cual demuestra, una vez más, que Cube es el rey en el área de las franquicias cinematográficas.

A principios de este año, Ice Cube actuó en Infiltrados en la universidad, secuela del gran éxito comercial Infiltrados en clase. La compañía Cube Vision está asimismo en fase de preproducción del esperado biopic del grupo N.W.A., Straight Outta Compton, que será dirigido por F. Gary Gray.

Aunque Cube adora hacer películas, su primera pasión siempre será la música. Su próximo álbum, Everythang’s Corrupt, será el número 18 de su carrera musical, como artista en solitario o miembro de un grupo (N.W.A, Da Lench Mob, Westside Connection), y su lanzamiento está previsto para finales de este año.

En este nuevo disco, Ice Cube incide en la evolución de los Estados Unidos de América, un territorio donde la honestidad, el amor y el respeto han sido sustituidos por una superficial e infructuosa persecución de migajas de índole material.

"Todo el mundo intenta conseguir más de lo que realmente necesita y eso vuelve loca a la gente", dice Ice Cube sobre la reflexión que ha inspirado la canción "One For The Money", donde el piano es protagonista. "Si no pueden alcanzarlo, entonces buscan escapar de otra forma, ya sea bebiendo, drogándose, bailando, teniendo sexo, lo que sea. Todo el mundo intenta ser alguien, lo cual es sensacional. No hay nada malo en ello. Pero una persona ya es alguien. Ya eres alguien antes de intentar ser alguien. Conozco a muchos tipos famosos que no son buena gente. Conozco a muchas personas que no son famosas pero que son personas geniales, que dan un buen ejemplo y hacen lo correcto".

Pero hacer lo correcto parece mucho más difícil para las personas cuyo único propósito es acumular dinero y poder. En el premonitorio tema "Everythang’s Corrupt", Ice Cube explica cómo el dinero es a menudo la respuesta a la pregunta de por qué las cosas funcionan como lo hacen. "No puedes dejar que el mundo te confunda", explica. "Todo lo que tienes que hacer es seguir al dinero y verás por qué se hace algo o no se llega a hacer. Es una lástima que para tantas personas el dólar se haya convertido en algo más importante y valioso que la propia vida".

Así que mientras tantos populares raperos se centran en manidos tópicos, Ice Cube sigue siendo innovador e inflexible. Es una postura que Ice Cube mantiene desde mediados de la década de los 80, cuando empezó a abrirse camino como miembro de la pionera banda de gangsta rap N.W.A. En el tema funky "Can I Hit Some Of That West Coast Shit?", Ice Cube reta a la nueva generación de artistas a avanzar en el género, algo que él ha venido haciendo a lo largo de toda su carrera. "Básicamente es decirles: lo que tú estás a punto de hacer, yo ya lo he hecho", manifiesta. "Es algo así como, ‘¡Vamos, hombre! Haz algo nuevo. Y si haces algo nuevo, destacarás’".

Precisamente en este punto es donde Ice Cube ha despuntado a lo largo de su extraordinaria carrera. Su habilidad para adaptarse a las nuevas tendencias y estilos, y llevarlos a su terreno sin perder su propia identidad, le sitúa dentro de un selecto grupo de artistas, independientemente del género musical. En el vitalista tema "Sic Them Youngins On ‘Em", Ice Cube ejecuta una sinuosa interpretación que contrasta con su habitualmente estoico e imperativo flow (forma de rimar en el rap).

Este tipo de alquimia artística también le permite a Ice Cube crear una canción como "The Big Show", donde comunica al mundo que en la vida real va a seguir manteniéndose fiel a sí mismo sin importar con quien se relacione.

Colosal adalid de las experiencias multimedia, Ice Cube se ha construido una carrera que aún se mantiene vigorosa, si bien resulta difícil de catalogar. "No es fácil de definir", señala. "Mi sello, si pudiera resumirlo en pocas palabras, es que creo que soy un artista sólido. Siempre vuelvo a esa palabra, sólido. Sólido, igual que una Harley Davidson es sólida. Espero que la gente confíe en que cuando pongo mi nombre en algo es que eso no es una basura. Yo no sólo te estoy endosando algo. Mi intención es proporcionarte una experiencia".

Y a ese respecto, Ice Cube se supera, una y otra vez.