Tras graduarse de una escuela de artes dramáticas de Londres, Nathaniel Parker entró en la Royal Shakespeare Company antes de trabajar en el West End, y posteriormente en Broadway, junto a Dustin Hoffman, en El Mercader de Venecia. Ha protagonizado múltiples producciones de época de la BBC, entre ellas Vanity Fair, The Nuremburg Trials y Bleak House, y durante siete años tuvo su propia serie, The Inspector Lynley Mysteries, en la que interpretaba el papel protagonista.
En el mundo del cine, ha trabajado a ambos lados del atlántico. Empezó haciendo el papel protagonista en War Requiem, de Derek Jarman, junto a Lawrence Olivier y Tilda Swinton. Desde entonces ha trabajado en dos adaptaciones cinematográficas de obras de Shakespeare: Hamlet, con Mel Gibson y Othello, con Lawrence Fishburne. Más tarde, ha trabajado junto a Eddie Murphy en The Haunted Mansion, Fade To Black y Stardust. Al mismo tiempo que The Perfect Host se estrena en Sundance, otra película en la que trabaja, Malicia en el país de las maravillas, se estrena en los cines de Londres. Acaba de terminar otra película, The Domino Effect, dirigida por Paula van der Oest, directora que ya ha sido nominada a un Oscar.