Finaliza el rodaje de "La mosquitera"

La productora Eddie Saeta concluye la fase de rodaje de La mosquitera, el último trabajo del catalán Agustí Vila ('Un banco en el parque', '3055 Jean Leon') que dió comienzo a principios de noviembre en la ciudad de Barcelona. Una historia urbana que su director define como una "comedia dramática sobre la imposibilidad de tragedia".

Eddie Saeta incorpora con La mosquitera un proyecto novedoso dentro de una larga filmografía que ha sido galardonada por algunos de los principales festivales internacionales (entre ellos el Festival de Paris y diversas Filmotecas como Sevilla, Tetuán, Cali, Tánger, Casa Encendida, etc., que han presentado una reciente retrospectiva).

Acaba de finalizar el rodaje de una película que, desde una vocación independiente, apuesta por un casting inédito hasta ahora para la productora de Luis Miñarro. Encabezado por Emma Suárez y Eduard Fernández, su reparto se completa con la actriz colombiana Martina García ('Rabia'), Àlex Batllori ('[Rec]2'), Anna Ycobalzeta ('Semen, una historia de amor) y Fermí Reixach ('The Frost'), con la participación especial de Geraldine Chaplin.

En este rodaje ha suscitado mucho interés la aparición de Geraldine, quien ha manifestado repetidas veces su fascinación por el proyecto. En declaraciones de la hija del mítico Charlot, "'La mosquitera' es uno de los tres mejores guiones que he leído en mi vida". La actriz encarna el papel de María, una anciana enferma de Alzheimer que habla a través de Robert, el personaje interpretado por Fermí Reixach.

Eduard Fernández y Emma Suárez dan vida a una familia en crisis, cuyos miembros viven atrapados en un mundo de culpabilidad y sentimientos enfrentados. Entre el fuego cruzado de sus padres está Lluís, interpretado por el debutante Marcos Franz, un adolescente refugiado en un silencio que se rebela contra el mundo de los adultos.

Alícia (Suárez) y Miquel (Fernández) retratan los desencuentros de una familia a punto de desmoronarse. Ella ama todo demasiado. A él lo ahoga el exceso de amor de Alícia. Querría vivir en un mundo donde el amor fuese ordenado y donde los deseos tuviesen horario. A su hijo Lluís (Franz) el mero hecho de vivir le hace sentirse culpable. Acoge en casa a todo tipo de animales. Este es el punto de partida de un relato de malentendidos cruzados, atrapados por una red invisible que los aisla, la mosquitera.