Pierre Bonnard no sería el famoso pintor sin Marthe, su enigmática musa y compañera, que aparece en más de un tercio de su obra. La película explora su compleja relación, marcada por la reclusión y la dependencia mutua. Marthe, con su fuerte personalidad y misterioso pasado, inspira profundamente a Bonnard, influyendo en su arte hasta el final.


Sinopsis extensa
BONNARD, el pintor y su musa, es una obra dirigida por Martin Provost que explora la vida del pintor francés Pierre Bonnard y su relación con su enigmática esposa y musa, Marthe. Protagonizada por Cécile de France y Vincent Macaigne, la película presenta un retrato detallado de la pareja y su influencia mutua.

Pierre Bonnard, maestro del color y la luz, encuentra en Marthe no solo una modelo recurrente sino una inspiración vital. Marthe, presente en más de un tercio de las pinturas de Bonnard, es retratada como una figura omnipresente y enigmática. La película muestra su vida en La Roulotte, su hogar en Normandía, un refugio que alimenta la creatividad de Bonnard y donde ambos encuentran paz y tensión.

Marthe es una mujer de carácter fuerte y misterioso, que oculta partes de su pasado incluso a su marido. Intenta emerger como artista bajo el seudónimo Marthe Solange, pero tras su primera exposición, se retira y cae en la locura, dejando solo unas pocas pinturas.

La relación entre Pierre y Marthe es compleja. Cada obra de Bonnard refleja las tensiones y conflictos de la pareja. La película destaca la devoción de Pierre hacia Marthe, incluso en su deterioro mental.

BONNARD, no es solo una biografía, sino una meditación profunda sobre la intersección del amor, el arte y la locura. Marthe no es presentada como una musa estereotipada, sino como una figura compleja con una influencia innegable en la obra de Bonnard. El film ofrece una reflexión sobre la creatividad, el sacrificio y la naturaleza del arte y las relaciones humanas, presentando un retrato íntimo de dos personas unidas en su búsqueda de belleza y verdad.