Maribel (Natalia Dicenta) es una pilingui de veintitantos que ejerce su profesión en el Madrid de finales de los cincuenta.
Una noche conoce en un bar de alterne a Marcelino (Carlos Hipólito), un hombre tímido y tranquilo, que se enamora de ella sin darse cuenta ¿o sí? de su condición.
La relación se desarrolla de modo sorprendente para Maribel. Ella lo toma al principio como un cliente más pero le desconcierta la actitud de él en cada una de las citas. A la vez, comienza a sentirse atraída poco a poco por el tímido provinciano, dueño de una fábrica de chocolate en Soria.
Pili (Nathalie Seseña), Rufi (Mireia Ros) y Niní (Malena Alterio) son las compañeras de pensión y profesión de Maribel. Truculentas y exageradas por naturaleza, se alarman por la relación de ella con el misterioso sujeto, ante la posibilidad de que se trate de un asesino de mujeres de mala vida que ha ido sembrando el pánico entre ellas.
Desde entonces, y más desde que Marcelino le pide a Maribel que se case con ella, toman cartas en el asunto decididas a terminar por acoso y derribo con esa relación, procurando alejar a Maribel del provinciano y de su "extraña familia": dos candorosas viejecitas (María Isbert y María Ángeles Acevedo) que bien podrían ser cómplices del chocolatero en sus horrorosos crímenes.
Maribel, harta de la mente calenturienta de sus compañeras, se debate entre la atracción que le supone su conquista y el miedo a que todo resulte un desastroso desengaño.
Los personajes:
Marcelino. Joven viudo, serio e introvertido, con una gran dosis de ingenuidad provinciana.
Marilbel es una chica con especial encanto. Pese a su aparente frialdad, aún conserva parte de su ilusión e inocencia.
Rufi. La veterana del grupo, con mente calenturienta. Descarada y bastante cínica, está de vuelta de todo.
Pili. Muy imaginativa, truculenta y algo morbosa. Se pasa el día elucubrando siniestras historias alrededor de Marcelino. Su look a lo "Marilyn española" le da un toque sexy y atractivo.
Niní. La más ingenua de las tres. Vive con ilusión el romance de Maribel pero sus amigas le transmiten dudas acerca de las intenciones de Marcelino.
Doña Paula. Es la tía de Marcelino. Lleva cuarenta años sin salir de su vetusto piso de Madrid. Últimamente, se ha especializado en el Gin fizz y también, según parece, en otros misteriosos brebajes. Ve de muy buen ojo los nuevos aires de modernidad que rodean a su sobrino.
Doña Matilde. Es la madre de Marcelino. Vive por y para su hijo. Lo que más desea es ver a Marcelino feliz.
Cásate conmigo, MaribelDirigida por Ángel Blasco