Inspector Jacques Clouseau, un nombre que aterroriza los corazones de los criminales, allá donde estén, y de cualquiera que se cruce también en su camino.
Quizás sea porque su capacidad lógica es tan deficiente, su control de lo obvio tan fugaz, su dominio del lenguaje tan tremendamente limitado y su coordinación física tan completamente insuficiente.
Pero aunque su metodología pueda resultar heterodoxa y a menudo desconcertante, siempre logra resolver los casos; eso sí, a su manera.
Al menos hasta ahora.
En La Pantera Rosa, una comedia llena de acción, el torpe Inspector Clouseau (Steve Martin) se enfrenta al caso más importante de su carrera.
El famoso entrenador de fútbol, Yves Gluant, acaba de llevar al equipo de Francia a la victoria frente a la selección de China. Rodeado de agradecidos fans que le adoran y con su guapa novia, la estrella del pop internacional Xania (Beyoncé Knowles), a su lado, Gluant muere a causa de un dardo venenoso. En el pánico subsiguiente, el anillo de diamantes de inestimable valor de Gluant, "La pantera rosa", desaparece de forma enigmática.
El asesinato se convierte en una obsesión nacional y en carnaza para los medios de comunicación. El caso cae en las manos del Inspector Jefe Dreyfus (Kevin Kline), quien aspira a la prestigiosa Medalla de Honor por séptima vez en su carrera. Consciente de que no puede permitirse ni un error (al menos ninguno que se le pueda atribuir a él), Dreyfus le pasa el marrón al incansable Inspector Clouseau.
Clouseau y su nuevo ayudante, el inmutable y estoico gendarme Gilbert Ponton (Jean Reno), siguen una maraña de pistas que les conducen hasta París y posteriormente a la ciudad de Nueva York.
En la Gran Manzana, Clouseau y Ponton se acercan a Times Square y al cercano distrito de los diamantes, así como también a la elegante Quinta Avenida de la ciudad y al archifamoso Hotel Waldorf Astoria. En el camino, Clouseau y Ponton se topan con astutos talladores de diamantes, aspirantes a asesino, reconocidos malhechores, zalameros propietarios de casino, agentes secretos, misteriosos entrenadores y con una exótica bebida llamada "The Flaming Mojito".
Uno a uno, Clouseau va circunscribiendo su investigación y localiza a los sospechosos sobre los que más indicios hay. Entre ellos figuran Xania, una estrella del fútbol en declive (William Abadie), un millonario propietario de casino (Roger Rees) y una coqueta y ligona especialista en relaciones públicas (Kristin Chenoweth).
El procedimiento de Clouseau es fascinante, aunque resulta tremendamente tortuoso. Pero nunca pierde su concentración, ni su determinación ni su orgullo, para consternación de Dreyfus, quien podría desear, o no, lo mejor a Clouseau en sus pesquisas. Al final, con la ayuda de Ponton y su entregada secretaria Nicole (Emily Mortimer), Clouseau tendrá que desenmascarar al asesino y evitar que Dreyfus se lleve todo el mérito.