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Collateral cartel reducidoCollateralDirigida por Michael Mann
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Comentario personal
Más que colateral, se trata de un película circular en la que Foxx (Max) y Pinkett Smith (Annie) inician y zanjan esta nueva historia de persecuciones (después de "Heat"), dirigida con maestría por Michael Mann, en la que Vincent (Cruise) se enfrenta física e intelectualmente a Max, un taxista cuyo destino va a cambiar de forma sustancial en el transcurso de una sola noche.

Cinta que cuenta con el cameo de Jason Statham (el Turco de Snatch), como "el hombre del aeropuerto" con el que Cruise cruza las primeras palabras.

Un film cuya estética avanza de lo lento, al dinamismo en las imágenes (sin llegar a la trepidante "Heat"), y del enfoque cercano a los rostros de los protagonistas, a planos más globales.

Road Movie dentro de una misma ciudad, en la que la racionalización es primordial para que todo suceda en un espacio de tiempo mínimo.

Cabe destacar la capacidad de Cruise para pasar relativamente desapercibido a la vez que no pierde su título de "protagonista". Nos encontramos con un nuevo "Chacal" que esta vez no consigue por completo tener de su parte al público, puesto que la empatía que provocan en éste Foxx y Pinkett Smith opaca la admiración del auditorio hacia la superestrella (Cruise).

María Fernández

Tom Cruise, nominado tres veces al Oscar, (Magnolia, Jerry Maguire, Nacido el cuatro de julio), Jamie Foxx (Ali, Un domingo cualquiera) y Jada Pinkett Smith (Matrix Reloaded, Matrix Revolutions) protagonizan el thriller Collateral, dirigido por Michael Mann (El dilema/The Insider), nominado tres veces al Oscar.

El reparto incluye a Mark Ruffalo (En carne viva/In the Cutt), Peter Berg (Cop Land), Javier Bardem, nominado a un Oscar, (Antes que anochezca), y Bruce McGill (El jurado).

Notas de producción
Collateral transcurre durante una sola noche en la ciudad preferida de Michael Mann, Los Ángeles. Durante esa única noche, la vida de dos hombres cambiará para siempre.

"En mi opinión", nos comenta el director y productor Michael Mann, "uno de los atractivos del proyecto era el espacio de tiempo mínimo, todo debía ocurrir en una sola noche. La historia transcurre entre las seis de la tarde y las cuatro de la mañana en un barrio de la periferia de una de las ciudades más contemporáneas de Estados Unidos, donde los coyotes patrullan de noche por las calles, como si la civilización fuera algo nuevo y temporal. Quería que Max y Vincent se movieran en ese mundo. Esa noche, sus vidas van a cambiar del todo, para siempre. La irrevocabilidad ha aparecido por el horizonte y se dirige hacia ellos. Dos vidas chocan en circunstancias extremas. Todo lo que han sido y lo que creen ser se comprime para caber en los acontecimientos de una única noche. Me gustaba la intensidad, la inmediatez de la idea".

Michael Mann añade que el guión rompía con la estructura tradicional en tres actos, introducción, desarrollo y desenlace. "Un poco como si hubiera dos actos antes del comienzo de la película. Han ocurrido muchas cosas, ha habido muchos descubrimientos y ahora llega el desenlace. Toda la película era un tercer acto y me pareció muy atractivo".

Pero el público no tendrá que preguntarse cómo llegaron los protagonistas hasta aquí, ya que los acontecimientos que llevan a la fatídica noche quedan muy claros mientras avanza la historia. Michael Mann explica: "Los miembros de un cartel de narcotraficantes descubren que están a punto de ser acusados por un tribunal de Los Ángeles. Deciden evitarlo matando a los cinco testigos clave. Disponen de un presupuesto muy amplio, ilimitado, diría yo. Pueden permitirse contratar a los mejores, a profesionales como Vincent. Llevan meses preparando la operación, todo está planeado al milímetro, ahora sólo falta hacerlo. Para eso llega Vincent esta misma noche. Pero una serie de imprevistos le obligan a improvisar y acaba por hacerse con un rehén, un taxista llamado Max".

Por una vez, Tom Cruise hace de malo en el papel de Vincent, pero este asesino frío y calculador tampoco es tan oscuro como parece. "He interpretado a héroes y antihéroes", dice Tom Cruise. "Vincent me pareció un personaje genial, muy dinámico. Quería explorar el personaje y llegar a entenderlo mejor, sobre todo porque su comportamiento es realmente antisocial", añade riendo. "Al principio, siempre intento encontrar el código moral del personaje. Todo el mundo tiene un código moral con el que podemos estar o no de acuerdo. A Vincent le contrataron para un trabajo; su código moral exige que realice dicho trabajo. Es un profesional hasta la médula. Me metí en la piel del personaje desde este punto de vista".

"Creo que las personas son muy complejas y que hay muchas cosas en su interior que pueden ser realmente fascinantes", comenta Michael Mann. El director podría estar hablando de Tom Cruise o del personaje de éste. "Hasta ahora, Tom no había interpretado a ningún personaje como Vincent y eso implicaba cierto riesgo. Tom tiene fuerza y autoridad interior y quería que saliera a la superficie en su interpretación. Se nota incluso a través del impecable y elegante aspecto de Vincent. No tardamos en darnos cuenta de que comercia con algo sucio a pesar de su bonito traje".

El aspecto de Vincent también es algo bastante diferente para Tom Cruise, no estamos acostumbrados a verle con el pelo canoso ni la barba grisácea. "Quería que el personaje fuera diferente del aspecto de Tom Cruise, que cobrase cierto anonimato", nos dice Michael Mann. "El vestuario también era importante porque Vincent lleva el mismo traje durante toda la película. Lleva un traje carísimo hecho a medida, pero se nota que no está confeccionado en Europa ni en Estados Unidos. Es lo más caro que puede comprarse en Kowloon o en algún lugar así, tiene un cierto elemento foráneo".

"Fue a Michael a quien se le ocurrió el aspecto del personaje", dice Tom Cruise, "el pelo, la barba, el traje. Primero lo probamos en el ordenador. Hay que reconocer que Michael tiene un ojo clínico. Me encantó trabajar con él, no se le pasa ni un detalle. Nos tomamos el tiempo necesario para crear la historia de Vincent, y gracias a ese pasado, pudimos escoger un punto de partida y una dirección para el personaje".

Según Jamie Foxx, en el papel de Max, una vez que su personaje consigue rehacerse de su asombro al descubrir quién es Vincent y lo que está pasando, la relación entre los dos hombres empieza a cambiar. "Lo más extraño de la relación entre los dos hombres es que, de algún modo, Max se siente inspirado por Vincent. Como si Max estuviera deseando encontrarse con algo diferente y, cuando ocurre, no deja pasar la ocasión".

Jada Pinkett Smith, que interpreta el papel de la fiscal Annie Farrell. La actriz nos dice: "Uno de los temas que me interesó de la película fue cómo se cruzan los destinos de las personas, y cómo conocer a alguien que no tiene nada que ver con nosotros puede afectarnos de modo sustancial. Es lo que ocurre entre Annie y Max. Él le da la oportunidad de expresarse sinceramente y ella se siente lo bastante cómoda como para abrirse y confiarle algo que no ha revelado a nadie. Al salir del taxi, piensa: 'Quizá no vuelva a verle nunca, quizá deba darle mi tarjeta, claro que no es más que un taxista...' Pero han conectado de forma increíble y eso puede más que cualquier idea preconcebida. Nos muestra que debemos estar abiertos y dispuestos, porque nunca se sabe qué nos reserva el destino a la vuelta de la esquina".