Chris Vaughn (interpretado por The Rock) es un hombre que regresa al pueblo de su infancia en el noroeste de los Estados Unidos después de una condecorada y prestigiosa carrera en las Fuerzas Armadas de su país emprendida tras haber terminado el instituto. Al regresar a su pueblo sin previo aviso, Chris se queda anonadado y deprimido con lo que ve. Su querido pueblo se ha visto invadido por la pobreza y la corrupción, su importante aserradero ha cerrado y un casino lleno de criminales es ahora el principal motor económico del pueblo.
El antiguo rival de Chris en el instituto, el adinerado Jay Hamilton (Neal McDonough), se ha convertido en el nuevo aristócrata ladrón y amo de Ferguson, Washington. Su riqueza y su influencia le han permitido abrir un casino, una Meca del juego llamada La Cereza Salvaje. Incluso la novia de Chris en el instituto, Deni (Ashley Scott), trabaja ahora en el casino donde se gana la vida bailando como streaper.
Al regreso de Chris, él y algunos colegas, incluyendo a Ray Templeton (Johnny Knoxville), su mejor amigo, visitan La Cereza Salvaje con una invitación de "buena voluntad" que les da Jay. Pero Chris descubre que hacen trampas en las mesas de dados, y se desencadena una pelea con los guardias de seguridad de Hamilton que deja al final a Chris vejado, molido a palos y dado por muerto.
La familia de Chris - su padre Chris senior (John Beasley), su madre Connie (Barbara Tarbuck), su hermana Michelle (Kristen Wilson) y el hijo de ésta, Pete (Khleo Thomas) - le ayudan a recuperarse y le ruegan encarecidamente que deje las cosas tal y como están. Pero Chris es un tipo que nunca da un paso atrás. Decide presentar su candidatura a sheriff y eliminar el crimen de su ciudad haciendo de la ley su principal arma.
Con Ray de lugarteniente, Chris se propone limpiar toda la mierda que ha creado Hamilton. Ahora, convertido en el sheriff Chris Vaughn, maneja un enorme palo al que ha dado forma en el aserradero. Es un hombre contra muchos hombres, pero él se siente importante y va pisando fuerte.