Harry Potter se enfrenta a tiempos duros.
Acosado por pesadillas que hacen que su cicatriz duela más que de costumbre, Harry (DANIEL RADCLIFFE) está feliz por escapar de sus sueños inquietos al poder asistir al Campeonato Mundial de Quidditch y estar con sus amigos Ron (RUPERT GRINT) y Hermione (EMMA WATSON).
Pero algo siniestro está apareciendo en el cielo del campo de Quidditch - la Marca Oscura, la señal del malvado Lord Voldemort (RALPH FIENNES), había sido vista la última vez hace trece años - la noche en la que asesinó a los padres de Harry.
Harry está deseando de regresar dentro de los muros del Colegio Hogwarts de Magia y de Hechicería, donde el profesor Dumbledore (MICHAEL GAMBON) le puede proteger. Pero parece que este año las cosas van a ser un poco diferentes.
Dumbledore anuncia que Hogwarts va a albergar este año el Torneo de los Tres Magos, una de las competiciones mágicas más excitantes y peligrosas de la comunidad de magos y hechiceros. Se elegirá a un campeón de cada una de los tres colegios de magia y hechicería más grandes y prestigiosos para competir en una serie de pruebas arriesgadas y conquistar la codiciada Copa de los Tres Magos.
Los estudiantes de Hogwarts no salen de su asombro al ver a las hermosas chicas de la Academia de Beauxbaton y a los oscuros y siniestros chicos del Instituto Durmstrang que entran en la Gran Sala esperando impacientemente la selección de sus campeones.
El oficial del Ministerio de Magia, Barty Crouch (ROGER LLOYD PACK) y el Profesor Dumbledore presiden una ceremonia con velas, esperando tensamente como el Cáliz de Fuego elige a un estudiante de cada colegio para competir en el torneo. Entre un halo de chispas y llamas, la copa saca a la superestrella de Quidditch de Durmstrang Viktor Krum (STANISLAV IANEVSKI), seguido por Fleur Delacour (CLÉMENCE POÉSY) la bella estudiante de Beauxbaton y, finalmente, al chico más popular y admirado de Hogwarts Cedric Diggory (ROBERT PATTINSON). Pero, de forma inexplicable, el cáliz escupe un último nombre: Harry Potter.
Con solo 14 años, a Harry le faltan tres años para poder participar en esta dura competición. Él insiste en que no ha introducido su nombre en el cáliz y que realmente no quiere competir. Pero la decisión del cáliz es vinculante y tendrá que hacerlo.
Abundan las sospechas y los celos y la periodista sensacionalista, Rita Skeeter (MIRANDA RICHARDSON), alimenta las llamas de la reacción contra Harry Potter con sus columnas llenas de chismes e inventos. Incluso Ron empieza a creer que su amigo sólo busca la fama y que de alguna manera ha logrado engañar al cáliz para que lo seleccione a él.
Profesor Dumbledore sospecha que quién haya introducido el nombre de Harry Potter en el cáliz persigue deliberadamente poner en peligro la vida de Harry, por eso pregunta a Alastor "Ojoloco" Moody (BRENDAN GLEESON), el nuevo y excéntrico Profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras, de mantener su ojo perceptivo y mágico sobre el joven mago.
Harry se prepara para las duras pruebas del torneo - evadir al dragón de fuego, penetrar en las profundidades de un gran lago y entrar en un laberinto que tiene vida propia. Pero nada es tan desalentador como el reto más terrorífico de todos - preguntar a una chica, si le quiere acompañar al Baile de Navidad.
Para Harry, enfrentarse a dragones, sirenas y otros seres marinos es como un simple paseo por el parque comparado al reto que supone preguntar a la encantadora Cho Chang (KATIE LEUNG) si quiere acompañarle al Baile de Navidad. Y si Ron no fuese tan distraído, quizás pudiera darse cuenta de que sus sentimientos hacia Hermione estaban cambiando.
Las cosas toman un giro dramático cuando alguien es asesinado en Hogwarts. Asustado y todavía perseguido por los sueños sobre Voldemort, Harry se dirige a Dumbledore, pero incluso el venerable director del colegio tiene que admitir que ya no hay respuestas fáciles.
Cuando Harry y los otros campeones compiten en su última prueba y los zarcillos del laberinto avanzan algo o alguien permanece vigilante. La victoria está a la vista, pero cuanto más se acercan al final del torneo, nada parece como es - y Harry se ve arrojado hacia un encuentro inevitable con el verdadero mal ...