Para llevar a cabo El Nuevo Mundo TERRENCE MALICK ha reunido a un distinguido reparto encabezado por COLIN FARRELL, uno de los actores más versátiles y dinámicos del cine actual, que da vida a John Smith. Además de presentar a Q'orianka Kilcher, el reparto internacional cuenta con CHRISTOPHER PLUMMER (La búsqueda, Una mente maravillosa, El dilema), CHRISTIAN BALE (Batman Begins, American Psycho), AUGUST SCHELLENBERG (Manto negro, Voluntad de hierro, Iron Will, Liberad a Willy), WES STUDI (Bailando con lobos, El último mohicano, Heat), DAVID THEWLIS (Harry Potter y el prisionero de Azkaban, Siete años el Tíbet), YORICK van WAGENINGEN (Las crónicas de Riddick, Amar peligrosamente), RAOUL TRUJILLO (Manto Negro, The Song of Hiawatha), MICHAEL GREYEYES (Señales de humo, Crazy Horse), KALANI QUEYPO (Los Tenenbaums: una familia de genios), BEN MENDELSOHN (Limite vertical, The Year My Voice Broke), NOAH TAYLOR (Casi famosos, Shine), BEN CHAPLIN (La delgada línea roja, Washington Square), JOHN SAVAGE (La delgada línea roja, El cazador), IRENE BEDARD (Señales de humo, Lakota Woman: Siege at Wounded Knee), EDDIE MARSAN (ganador del premio del cine independiente británico por Vera Drake, dirigida por Mike Leigh) y MYRTON RUNNING WOLF (Skins).
En el equipo, Malick ha reunido a especialistas tan destacados como el director de fotografía EMMANUEL LUBEZKI (Una serie de catastróficas desdichas de Lemony Snicket, Y Tu Mamá También, Sleepy Hollow), el diseñador de producción JACK FISK (Malas tierras, Días del cielo, La delgada línea roja, Una historia verdadera, Mulholland Drive), la diseñadora de vestuario JACQUELINE WEST (Quills, Sol naciente), los montadores RICHARD CHEW (ganador del Oscar por La guerra de las galaxias y candidato por Alguien voló sobre el nido del cuco), HANK CORWIN (Asesinos natos, Nixon), SAAR KLEIN (dos veces nominado al Oscar por La delgada línea roja y Casi famosos) y MARK YOSHIKAWA (Apocalypse Bop) y el compositor JAMES HORNER (ganador de dos Oscars por Titanic y nominado por Casa de arena y niebla y Una mente maravillosa). Los productores ejecutivos son WILLIAM M. MECHANIC (Dark Water), TOBY EMMERICH, ROLF MITTWEG, MARK ORDESKY - los tres de New Line - y TRISH HOFMANN (Igby Goes Down, Tres estaciones) y la productora es SARAH GREEN (Frida, Girlfight, State and Main).
Acerca de la producción
"Terry escribió El Nuevo Mundo hace unos veinticinco años", explica la productora Sarah Green. "Tuvo la idea en los años setenta y la conservó en su imaginación. Y como todas sus películas, El Nuevo Mundo muestra una profunda comprensión del ser humano".
Y también es una película que es más que una simple historia, como confirma Green: "Es la historia de los americanos, con todos nuestros defectos y virtudes y nuestra conciencia del elemento más sencillo de todos, el amor, que es lo que nos hace humanos. Es una historia en la que la gente se traiciona, intenta rectificar y vuelve a traicionarse. Finalmente aprenden que hay muchas verdades y cada uno sólo puede vivir la suya. No hay ni héroes ni villanos. Simpatizamos con todos los personajes - con algunos más que con otros - y todos tienen defectos, también algunos más que otros".
Uno de las aspectos más excepcionales de El Nuevo Mundo es el modo en que Malick combina su visión personal de los acontecimientos de hace 400 años en Jamestown con una investigación detallada de ese periodo.
"No sabemos realmente todo lo que ocurrió en 1607. Tenemos las versiones escritas de personas que vivieron en esa época, muchas de las cuales se contradicen, y la principal es la de John Smith. Lo que hemos intentado hacer ha sido coger el mito de John Smith y Pocahontas y utilizarlo para presentar la perspectiva de Terry sobre la conexión entre distintas culturas y las graves consecuencias de los malentendidos".
"Está claro que nos hemos tomado bastantes libertades creativas", añade Green. "Como todos los dramas históricos desde el tiempo de los griegos, El Nuevo Mundo utiliza acontecimientos reales como punto de partida. Por ejemplo, hay una cierta idealización de la cultura nativa en la narración de John Smith que se ha tomado directamente de sus escritos y de los de James Barlowe, Robert Beverly y otros. Pero vemos la realidad cuando la coexistencia apacible se convierte en una guerra declarada. Además, hemos comprimido la secuencia de ciertos acontecimientos y modificado los detalles y destinos de ciertos personajes reales con el fin de aumentar la fluidez de la historia. Es una interpretación dramática, no un documental".
Acerca del reparto
"Malick sólo tiene que mencionar un proyecto y los actores acuden en tropel", constata el Colin Farrell, riéndose. "Ni siquiera hace falta leerse el guión porque la pureza de todas y cada una de sus películas es más que suficiente. Terry es como un sabio, tiene la sabiduría de muchos más años de los que lleva viviendo en esta planeta, además de una gentileza asombrosa y una ferocidad increíble a la vez. Es un poeta".
Además de la oportunidad de trabajar con Malick, a Farrell le atrajo la idea de encarnar a un personaje de una historia que se ha convertido en leyenda y que se ha plasmado en las artes - la literatura, el teatro y el cine - desde hace muchas generaciones.
"El Nuevo Mundo es la interpretación artística de Terrence Malick de la colonización de las Américas por los ingleses", afirma el actor. "Y los actores simplemente confiamos en la mente, el alma y el espíritu de Terry. El mayor don que tiene, aparte de la inteligencia, es que ve lo que no vemos los demás, la belleza y la tragedia de la vida cotidiana. Sabíamos que respetaría a todas las partes involucradas, incluyendo a los indígenas, a quienes Terry hace un homenaje a su cultura y su pueblo y cuya belleza no sólo ha sido malinterpretada, sino ignorada, por los colonos de este gran país".
A Christopher Plummer, actor veterano que hemos visto últimamente en películas como Una mente maravillosa y El dilema, también le gustó la visión de Malick de la historia de John Smith y Pocahontas y aceptó el papel del capitán Christopher Newport.
Christian Bale, que acababa de interpretar a Bruce Wayman/Batman en Batman Begins, asumió el papel de John Rolfe. La productora Sarah Green señala que tanto ella como Malick son grandes admiradores del actor: "Tiene mucho corazón, inteligencia y una gran intuición. Una de las cosas que le hizo perfecto para dar vida a John Rolfe fue su capacidad para desparecer dentro del papel y casi pasar desapercibido si la situación lo requería. Pocahontas no se fija en Rolfe inmediatamente y es maravilloso descubrir con ella todas sus buenas y nobles cualidades".
La selección del reparto también presentó retos, el mayor el de encontrar a la actriz apropiada para encarnar a la legendaria Pocahontas. Con este fin los cineastas lanzaron una campaña internacional en busca de una joven capaz de retratar a esta mujer mítica.
Este reto supuso un gran dilema para los productores, según nos explica Sarah Green: "Encontramos actrices maravillosas para interpretar a Pocahontas a una edad más madura y también estupendas jóvenes llenas de luz, pero fue complicado dar con una actriz con la suficiente capacidad para hacer la transición de una edad a otra. Buscamos durante meses en Estados Unidos, luego en Canadá y después en otros países. En el último mes antes de empezar el rodaje recibieron información en la oficina de Rene Haynes sobre Q'orianka Kilcher en relación con otra película. Uno de los ayudantes de Rene vio por casualidad la foto de Q'orianka y pensó en El Nuevo Mundo. La foto cautivaba y la impresión aumentó cuando vimos a Q'orianka en persona. Tenía una calma y una profundidad mucho mayores de lo que corresponde a su edad".