Elsa Pataky
O Ninette Sánchez, es una rubia con voz morena, casi la misma de Marlene cantando Lili Marleen; sus ojos de jade tienen esa tonalidad que inunda los atardeceres de Shangai; y su boca, de un rojo Minnelli, es en CinemaScope y color DeLuxe. Cuando se ríe, la Lolita de Nabokov parece a su lado Gloria Swanson enterrando el mono en el jardín. Esta francesita atesora la felinidad de Carmen Jones, los muslos de Cyd y, si la miras de espaldas, su aspecto es idéntico al de Lana Turner cuando empezaba. Algunos afortunados aseguran que besa como Grace Kelly en La ventana indiscreta. Ninette Sánchez, perdón, Elsa Pataky, es ya una bomba en Francia y un icono en España. Pero la verdadera sorpresa que nos aguarda es descubrir su enorme talento como actriz. Atentos. Ha nacido una estrella. Si no me creen, vayan a verla.

Joe Gillis

Después de ver su trabajo en la película de Garci, algún atento espectador bien podría dedicarle a Elsa aquella expresiva réplica de un juguete cómico -El seductor- que Mihura escribió con motivo de las 500 representaciones de su primera Ninette: "Muchas gracias por haberme dejado mirar... Y buenas noches". J. G.

Jose Luis Garci
Tipo raro este Garci. Lleva veinticinco años filmando y jamás ha puesto "Un film de" en los títulos de crédito, en los carteles o en la publicidad de sus películas. Y eso que, desde Asignatura pendiente a Ninette, viene siendo el productor o el coproductor. Tampoco usa Combo en sus rodajes y me consta que no ha visto un Story-Board en su vida. Por si fuera poco, nunca ha dicho "¡Acción!" a sus actores, sino -muy suave, cuando ya la cámara lleva girando un buen rato- "Tómate la acción". Ah, y sólo rueda, como máximo, una media de seis horas. Si no me creen, pregunten a los que trabajan con él. Otra cosa que José Luis no ha hecho, a lo largo de treinta años de carrera, es un Casting. Y cuatro veces, que yo sepa, se ha negado a que escriban un libro que repase su filmografía. No me digan que esto no tiene mérito en los tiempos que vivimos, cuando a cualquier chico que hace un par de cortos -no digamos ya un largometraje- le dedican ensayos de doscientas páginas. Por eso digo que es un tipo sospechoso este Garci. Sobra decir que no tiene página Web ni ordenador y que escribe a mano o, si tiene prisa, a máquina, una Olympia preciosa.

Desde sus comienzos como crítico y guionista, casi de niño, José Luis ha sido fiel a muy pocas cosas, pero profundamente: al plano, a la secuencia, al movimiento, a la radio, al fútbol, al cine -americano-, a las pistolas enfundadas, a Somerset Maugham, a Stefan Zweig, a Borges, a un puñadito de actores, a una luz elaborada, al Dry Martini, a un diálogo escrito para ser dicho exactamente así, a otro puñadito de sentimientos, a muchos o pocos espectadores... La corriente del cine actual aconseja mirar muy al futuro, por eso es un acto de osadía y un ejercicio a contracorriente saltar de espaldas, mirando hacia atrás, que es la única manera posible de avanzar sin perderse nada y sin que nada se pierda. Ahí están Canción de cuna, El abuelo, YouŽre the one, Historia de un beso, Tiovivo c.1950 o Ninette; y, ahí, me parece, estarán mucho tiempo.

José Luis Garci -que ha obtenido casi medio centenar de premios y otros tantos sus películas, quién lo diría-, ha estado cuatro veces, cuatro, Nominado al Oscar, ganándolo en una ocasión. Se dice pronto. Además "no es que escriba bien, sino que es escritor", dice Umbral. ¿Le han leído cuando teclea sobre cine o sobre fútbol, o sobre cócteles, su otra gran pasión? Por sus artículos en prensa ha sido galardonado con los prestigiosos González-Ruano y Continente de periodismo, y por sus narraciones con el Puerta de Oro de relatos. En fin, más honores: dirige y presenta desde hace diez años el programa ¡Qué grande es el cine! (TVE), ha editado la revista Nickel Odeon, que es una joya, y el Rey le entregó en 1997 la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes. Es miembro de la academia de Hollywood y de la Europea; también, de las Academias de Bellas Artes de San Fernando (Madrid) y de Granada. Premio Nacional de Cinematografía 1997. Ha publicado varios libros, entre los que yo destacaría su ensayo Ray Bradbury, humanista del futuro, Adam Blake, y su serie Morir de cine, Latir de cine, Beber de cine y Querer de cine.

Mi amigo Garci.
H.V