Paul, un joven y talentoso estudiante de música, es contratado en San Francisco para pasar las páginas de la partitura en un concierto de Richard Kennington, uno de los pianistas más famosos del mundo. Además de diligente, Paul es extremadamente atractivo, hecho que no pasa desapercibido para Kennington y su agente Mansourian, dos hombres en la cima de sus respectivas carreras. Kennington y Paul vuelven a encontrarse en Barcelona, donde el joven está de vacaciones con su madre, y se enamoran, pero esta relación tiene implicaciones muy distintas para los dos hombres.