Jim Carrey es el protagonista de este thriller psicológico dirigido por Joel Schumacher (La última llamada, Asesinato en 8MM, Día de furia) adaptada de un obra de teatro original escrita por el novel guionista Fernley Phillips. Beau Flynn y Tripp Vinson (El gran golpe, El exorcismo de Emily Rose) son los productores. Los productores ejecutivos son Mike Drake y Toby Emmerich, Richard Brener, Keith Goldberg, Brooklyn Weaver y Eli Richbourg. El co-productor es Fernley Phillips y la productora asociada es Linda Fields Hill.

Virginia Madsen (Entre Copas) y Danny Huston (El jardinero fiel) lideran un equipo de actores secundarios que incluye a Logan Lerman (Pequeños salvajes), a Rhona Mitra (de la serie de televisión "A golpe de bisturí") y a Lynn Collins (El Mercader de Venecia), entre otros.

Otros que también aportaron su visión a la película fueron el aclamado director de fotografía Matthew Libatique, ASC (Requiem por un sueño), el diseñador de producción Andrew Laws (Abajo el amor), el diseñador de vestuario Daniel Orlandi (El Código Da Vinci), el editor Mark Stevens (La última llamada) y el compositor Harry Gregson-Williams (Las crónicas de Narnia: el león, la bruja y el armario.

Esta película, cuya producción comenzó el 23 de enero de 2006, fue filmada tanto dentro como fuera de los escenarios enteramente en el área de Los Ángeles, incluyendo la comunidades de Altadena, Pacific Palisades, Monterey Park y Temple City. Para realzar el mundo estilizado del libro, algunos interiores fueron filmados dentro de los Estudios Sunset Gower en Hollywood, y en Los Angeles Center Studios en el centro de Los Ángeles.

El guionista británico Fernley Phillips se sintió atraído por primera vez por el enigma del Número 23 a través de un amigo. Y al igual que Walter Sparrow, el personaje principal de Número 23, Philips se sumergió rápidamente en los misterios del Número y de su significado. Philips devoró la vasta literatura y la subcultura alrededor del Número y se sintió inspirado para utilizar el enigma como espina dorsal de una película única.

"Mi amigo mencionó el enigma del Número 23, lo que me llevó a leer una diversidad de autores como al futurista Robert Antón Wilson, quien escribió obras como The Illuminatus Trilogy", recuerda Phillips, para quien Número 23 fue su primer guión vendido. "Comencé a abrirme a los fenómenos numerológicos, así como a la represión de la memoria, a la hipnosis y al poder de la sugestión. Decidí incorporarlos todos en una historia única".

"Inmediatamente me encantó el guión y pensé que era totalmente original y muy único", dijo Schumacher. "Me intrigó porque siempre estoy buscando algo que los demás no estén haciendo y esto era totalmente original y representaba un gran reto. En ese momento no sabía nada acerca del fenómeno del número 23, por lo que decidí investigar en Google y me percaté que existía una locura total por el Número 23. Existe incluso una página web donde la gente toma fotografía del número 23 donde lo encuentra alrededor del mundo. Es un culto y desconocía su existencia".

Sin embargo, este no era el único aspecto de la numerología que intrigaba a Schumacher. Lo que percibió en el guión de Phillips fue un material especial y único que podía funcionar a diferentes niveles.

"Fernley no inició el fenómeno del 23. Sólo tejió esta fantástica historia alrededor de él, que creo es mucho más que un número", dice Schumacher. "Se trata de cómo la obsesión puede convertirse en algo muy destructivo. Y creo que la mayoría de nosotros reconoce algo de esto en sus propias vidas. Creo que todos tenemos alguna obsesión".

Para el papel principal de Número 23, Schumacher y los productores pensaron en un actor con el que habían trabajado en Batman Forever en 1994: Jim Carrey. La variedad de registros de Carrey lo convertían en la elección perfecta para representar los papeles duales de Walter Sparrow y el Detective Fingerling, pero sólo podían esperar a que a él le interesase aceptar un papel tan distante de sus orígenes en la comedia.

"Creo que la gente ha comenzado a percibir a Jim como el gran actor que realmente es", dijo Schumacher. "De alguna forma, nuestra cultura no reconoce a los grandes y brillantes cómicos de la misma forma que lo hace con los actores dramáticos, lo que es una locura. Jim ciertamente ha sido una de las más grandes estrellas cómicas desde hace ya largo tiempo, pero también tiene muchas otras facetas y creo que ciertamente las demuestra claramente en esta película. No le teme a nada".

"En realidad, cambié el nombre de mi compañía a JC23 hace unos años porque hacía ya algún tiempo que estaba obsesionado con este número", comentó Carrey. "Uno de mis amigos en Canadá estaba obsesionado con el número y me contó historias al respecto, mostrándome cosas, como matrículas de coche y demostrándome cómo la suma de los números daba 23. Pensé que era ridículo, pero luego comencé a encontrarme ese número en todas partes hasta culminar con el descubrimiento de que el Salmo 23 habla de vivir sin temor. Por eso fue por lo que lo utilicé en el nombre de mi compañía".

Algunos años más tarde, el Número 23 volvió a surgir en la vida de Carrey.

"Cuando me llegó el guión, fue puramente una coincidencia", dijo Carrey. "Le estaba contando a un amigo acerca de mi relación con el número 23, y él me contó que acababa de leer un guión llamado Número 23. Entonces, lo leí y quedé totalmente sorprendido. Era increíblemente irresistible y me estaba volviendo loco, página tras página. Le pasé el guión a otro amigo para que lo leyese y después de una hora y media, lo volví a ver. Había leído todo el guión y había vuelto a la página 23 donde estaba subrayando cada 23era palabra para ver si había algún patrón. Esto es lo que creo que la película va a hacer con la audiencia: saldrán del cine diciendo allí está!".

El aspecto único del proyecto resultó ser exactamente lo que Carrey estaba buscando.

"Número 23 es diferente y eso es lo que busco en una película", dijo Carrey. "Sólo quiero que alguien tenga una idea que yo nunca haya visto; eso es lo que busco en un guión. Quiero que algo en la idea represente un reto, como con Olvídate de mí. En esta película la idea era ¿a quién borrarías? ¿a quién volverías invisible? ¿te han borrado alguna vez? Esta es otra de estas ideas que trata de temas que nunca han sido realmente explorados".

Carrey estaba también muy entusiasmado por tener la oportunidad de trabajar nuevamente con Joel Schumacher.

"Joel es fantástico con los actores porque se sienta y te deja hacer lo que necesitas hacer para llegar donde quieres", dice Carrey. "Pero también tiene ideas y es muy fuerte. Necesito a alguien que me plante cara alguna vez porque soy realmente obstinado con mis ideas. No siempre tengo razón; eso lo sé".