Remake americano de la película dirigida por los hermanos Oxide y Danny Pang.
The eye es un thriller sobrenatural, que juega con los límites de la percepción y de la realidad que helará la sangre de los espectadores. Dirigida por David Moreau y Xavier Palud, el equipo responsable del exitoso filme francés de suspense ELLOS (ILS), THE EYE (Visiones) está interpretada por Jessica Alba, Alessandro Nivola, Parker Posey y Rade Serbedzija. THE EYE (Visiones) ha sido producida por Paula Wagner, Don Granger y Michelle Manning, con producción ejecutiva de Mike Elliott, Peter Chan, Roy Lee, Doug Davison, Michael Paseornek, Peter Block, Tom Ortenberg y Darren Miller.
¿Cómo podemos juzgar qué es real y qué no lo es? ¿Podemos fiarnos de que nuestros ojos no nos mienten y de que nos muestran las cosas tal y como son? ¿Cómo podemos saber que lo vemos está ahí de verdad? Cada año más de 30.000 estadounidenses se someten a transplantes de córnea, un procedimiento que se está convirtiendo rápidamente en una intervención rutinaria. Pero, ¿y si pasa algo inesperado? The eye (Visiones) presenta los escalofriantes hechos que vive una joven, Sydney Wells, que tras someterse a dicha operación descubre que gracias a sus nuevos ojos ve mucho más de lo que jamás esperó.
Sydney Wells, la protagonista de The eye (Visiones), no es la típica heroína cinematográfica. De niña sufrió un accidente que la dejó completamente ciega. Es una mujer bella y segura de sí misma que, a pesar de su invalidez, ha logrado forjarse una vida feliz y plena como violinista en Los Ángeles. Animada por su hermana, Sydney decide someterse a un transplante doble de córnea con la esperanza de recuperar la vista. Esta operación le cambia radicalmente la vida, catapultándola hacia una pesadilla que pone a prueba su cordura, identidad y percepción. ¿Es un caso del fenómeno de la memoria celular, o es algo mucho peor, que traspasa los límites de la imaginación? Para Jessica Alba, la impresionante estrella de éxitos como SIN CITY y LOS 4 FANTÁSTICOS, interpretar a Sydney se le presentó como una oportunidad única e interesante para crecer como actriz y sumergirse en un personaje complejo y versátil.
"Sydney es un papel duro, fue como un reto que requirió mucha preparación", dice Alba. "Quería hacer una película de terror o un thriller pero no encontraba uno de calidad, casi todos los que se hacen ahora son muy gore, con sangre a raudales, de temática muy vulgar. Pero The eye (Visiones) tiene mucha clase, el guión es elegante y bello, y Sydney es una persona muy interesante y diferente. Su viaje, el proceso de recuperar la vista y todo lo que vive a raíz de ello, me intrigaba mucho".
Creada por Lionsgate y Paramount Vantage, The eye (Visiones) está basada en el filme asiático homónimo de 2002 escrito por Jo Jo Yuet-chun Hui, Oxide Pang y Danny Pang y dirigida por el dúo de realizadores chinos los hermanos Pang. La película, que fue un éxito de taquillas en todo el mundo, llamó la atención de C/W Productions, que se apresuraron en comprar los derechos del remake americano. "Las grandes películas están interpretadas por personajes que intentan lograr algo, ya sea a nivel físico o emocional", comenta Paula Wagner, que sigue diciendo, "El personaje de Alba, Sydney, supera su discapacidad física, y tras el transplante de córnea se da cuenta de que debe reconsiderar quién es y qué quiere en la vida. Debe aprender a tomar las riendas de los cambios emocionales que experimenta tras la operación".
Michael Paseornek, productor ejecutivo de la cinta, apunta, "La película original asiática fue aplaudida por los críticos y por los seguidores del género del terror. Estamos muy contentos de estar reinventando este inteligente thriller con Jessica la segunda película que hacemos con ella en un año y la respetada y creativa realizadora Paula Wager y su equipo de C/W. Los directores Xavier y David han creado un producto que tendrá a los espectadores mordiéndose las uñas durante todo el filme". Al desarrollar el guión, el productor de C/W Don Granger colaboró estrechamente con el guionista Sebastian Gutierrez, dado que en su opinión "existe una línea muy fina a la hora de reinterpretar una película que ha cosechado tanto éxito internacional. Hay que intentar superar la fuente original y mantener, a la vez, la integridad de la historia".
Mientras que The eye (Visiones) se apoya en elementos sobrenaturales, la trama de la película se basa en un fenómeno científico real que se conoce como memoria celular. "Las personas que se someten a transplantes de órganos en ocasiones presentan conductas del donante del que recibieron el órgano en cuestión", explica el productor ejecutivo Darren Miller.
"Si uno recibe el órgano de un fumador, puede empezar a sentir el atractivo del tabaco. O pueden empezar a sentirse atraídos por el deporte y descubrir que el donante era deportista. La historia que presentamos en The eye (Visiones) es pura ficción, pero explora un fenómeno que se da en la vida real y lo lleva al mundo sobrenatural", añade Wagner.
A la hora de reclutar al director del proyecto, los productores se lo ofrecieron al dúo de directores franceses David Moreau y Xavier Palud, aclamados a nivel internacional gracias a su película ELLOS (ILS), un tenso thriller que escribieron y dirigieron sobre una joven pareja aterrorizada por fuerzas invisibles en la campiña francesa. Tras su gran éxito, Moreau y Palud recibieron gran cantidad de proyectos en ese mismo género, pero The eye (Visiones) destacó por encima de todas ellas. "Lo que más nos gustó fue el hecho de que podíamos trabajar mucho con elementos que no eran abiertamente sobrenaturales", explica Moreau. "Nos daba la posibilidad de jugar con las mentes de los espectadores, de mostrarles cosas sin que pudieran determinar si eran reales o no".
Moreau y Palud querían mantener la ambigüedad de la cordura de Sydney. Ella está convencida de que las oscuras y terroríficas visiones que la persiguen tras la operación son reales, pero su doctor y su hermana lo achacan a una crisis psicológica. Según Alba, "La historia da mucho miedo, pero desde una perspectiva diferente, porque el público nunca sabe si mi personaje realmente ve las cosas que ve o si está perdiendo la cabeza. Camina por ese fina línea que permite a los espectadores ponerse en el lugar de Sydney".
"Lo que no vemos da mucho más miedo de lo que se nos presenta abiertamente", comenta Moreau. "El quid de la cuestión es dar con el equilibrio perfecto entre lo que se muestra y lo que se oculta, y dejar que vuele la imaginación del público".
Los directores franceses recuerdan muy bien el momento en el que conocieron a Alba. "En cuanto entró en la habitación nos quedamos hipnotizados con sus ojos", dice Moreau. "Físicamente era exactamente como nos habíamos imaginado a Sydney". En el rodaje, Alba sorprendió a los directores con su talento y su preparación. "Todos los días nos asombraba el compromiso que sentía hacia el personaje", recuerda Moreau. "Siempre estaba en la misma onda que nosotros".
Alba debía enfrentarse al gran reto de convencer al público de que Sydney es ciega y una virtuosa del violín, con lo que empezó a preparase para el papel cuatro meses antes de comenzar a rodar. "Aunque parezca mentira, no acepté el papel de Sydney porque es una violinista de música clásica", se ríe Alba, "pero ha sido muy interesante enfrentarme a este gran reto". "Jessica Alba es una actriz de gran talento que cuando se compromete con un papel lleva ese compromiso hasta las últimas consecuencias y siempre muestra una gran integridad durante todo el proceso. Es una gran profesional e interpreta al personaje con sutileza, elegancia y autenticidad. Nos ha dado una interpretación realmente impresionante ", añade Wagner.
Debido al guión, Sydney tendría que aparecer en varias escenas demostrando su virtuosa habilidad para tocar el violín. Los directores estaban decididos a mostrar a Jessica tocando el violín, no haciendo playback con actuaciones musicales pregrabadas. "Empecé a dar clases de violín durante el rodaje de la segunda parte de LOS 4 FANTÁSTICOS", comenta Alba. "Me llevó varios meses aprender a coger el arco y a sostener el violín correctamente, pero eso fue sólo una parte de la batalla. En la película interpreto obras clásicas, así que tuve que aprender a tocarlas de verdad".
"El violín es uno de los instrumentos más difíciles", añade Moreau, que tiene un pasado musical y toca el piano. "Todos los violinistas dicen que si dejas de practicar dos días, te lleva meses recuperar el tiempo perdido. Afortunadamente, Jessica ha sido una estudiante buenísima".
Para Alba interpretar a una mujer ciega fue igualmente difícil. Pasó tiempo viviendo en la Comisión de Ciegos de Nuevo México (NMCB), y recibió formación con un instructor cualificado para la movilidad y la orientación. "Hizo el programa como toda persona que ha perdido la facultad de visión. El personal le ayudó a lograr la confianza necesaria para interpretar a una persona ciega convincentemente, dado que es una parte importante del personaje", explica Greg Trapp, directo ejecutivo del NMCB.
Impresionados con el guión y el personaje de Sydney Wells, durante el rodaje Trapp y su personal asesoraron al equipo técnico de la película sobre cómo retratar la ceguera de Sydney y también contribuyeron con muchos elementos del atrezzo como un grabador de Braille y un tomador de notas, frecuentes en los hogares de los invidentes. A todos ellos les gustó mucho cómo la película presentaba a una mujer ciega de manera tan convincente. Según Trapp, "Lo que nos gusta de Sydney es que es una persona competente, capaz, que se expresa muy bien
una persona completamente normal con la diferencia de que es invidente".
Alba encontró su fuente de inspiración principal en una joven intérprete que se quedó ciega de niña. "Pasé tiempo con ella y fui apropiándome de su manera de interactuar con la gente, cómo hace vida normal, cómo anda por la calle, entiende el paisaje urbano que la rodea, y, en resumidas cuentas, cómo se mueve con tanta facilidad". Para Alba la experiencia corrigió muchas ideas falsas que tenía sobre la ceguera. "La mayoría de la gente, yo incluida, somos muy ignorantes en cuanto a lo que significa ser invidente", comenta. "Muchas de las ideas preconcebidas que tenía se desvanecieron al conocer a esta señora. Vive con personas que ven, compite con ellos a la hora de buscar trabajo y a veces les supera en el entorno laboral".
"Sydney es una mujer muy fuerte, y queríamos que el público viera y sintiera ese aspecto a través de la película", añade Moreau. "Nunca quisimos representarla como una joven débil e indefensa. Jessica ha trabajado mucho ese elemento, para hacer que su personaje sea todo lo real y humano posible".
Para el papel del Dr. Paul Faulkner, el neurólogo que ayuda a Sydney a adaptarse a su nueva capacidad, los realizadores contactaron con Alessandro Nivola (CARA A CARA (FACE/OFF), LA CALLE DE LAS TENTACIONES (LAUREL CANYON), JUNEBUG). "El Dr. Faulkner se mete mucho en el caso porque la condición de Sydney es realmente extraña", comenta Nivola. "Es una persona con formación plenamente científica, que se muestra totalmente escéptico ante la existencia de cualquier realidad sobrenatural y achaca las visiones de Sydney a un simple fenómeno psicológico".
A Nivola, al que le encantó la primera película de Moreau y Palud, le cautivó la veta de realismo que los directores contribuyeron a The eye (Visiones). "En estas películas en las que el objetivo primordial es asustar a los espectadores, el hecho de crear una relación creíble entre los personajes es un plus añadido al efecto susto", apunta.
"Podríamos pasarnos horas hablando maravillas de Alessandro", comenta Moreau. "Al igual que Jessica, Alessandro se enamoró del guión y ha dedicado mucho esfuerzo a convertir a un doctor del montón en un personaje original e inteligente. Se le ocurrieron un montón de ideas que añadieron intensidad al papel".
"Alessandro añade un encanto juvenil a un papel muy serio. Al ver la película, uno siente que realmente se convirtió en su personaje", afirma Wagner.
Al igual que Alba, Nivola pasó tres semanas investigando y haciéndose con la psicología neural y los detalles de su profesión en el filme. "El periodo de investigación de la película siempre me parece la parte más emocionante del proceso", admite Nivola. "Tener la oportunidad de interpretar a gente que tienen un conocimiento especial de ciertos campos que desconozco siempre me ha parecido la oportunidad perfecta para educarme en algo o lograr una experiencia que nunca podría vivir de otra manera".
"Lo que más me asombró", sigue, "fueron las pruebas neuro-cognitivas que se realizan sobre los pacientes cuando llegan con una afección. Son muy exóticas, excéntricas y raras. Los médicos realmente no querían revelar de qué trataban las pruebas porque podría estropear la experiencia y restarle validez al proceso en el futuro".
Además del Dr. Faulkner, el otro apoyo principal de Sydney es su hermana mayor, Helen, interpretada en la película por Parker Posey (MOVIDA DEL 76 (AKA JÓVENES DESORIENTADOS), VERY IMPORTANT PERROS, SUPERMAN RETURNS: EL REGRESO). Helen se siente responsable por el accidente que sufrió Sydney de pequeña que provocó su ceguera, y está muy metida en tanto la operación como la recuperación de su hermana. "Helen tiene un elemento de tristeza", admite Parker Posey. "Ha vivido siempre con la culpabilidad, siempre ha querido cambiar el destino de su hermana, y cuando finalmente lo hace, las cosas no hacen más que empeorar, con lo que se siente más culpable que nunca".
"Parker combina habilidad y personalidad", dice Wagner. "En una película como The eye (Visiones) siempre queremos personajes intensos e interesantes, pero no siempre disponemos del tiempo necesario en pantalla, así que es una bendición trabajar con alguien como Parker".
Parker también quedó gratamente sorprendida por el modo de trabajar de Moreau y Palud durante el rodaje. Según la actriz, "Transmiten mucha pasión y emoción. Muchos directores estadounidenses son más reprimidos, pero Xavier y David tienen unas ideas alucinantes y consiguen lo que quieren. Los respecto muchísimo".
Aunque The eye (Visiones) se desarrolla en Los Ángeles y México, la producción comenzó en Albuquerque, Nuevo México, para aprovechar el tiempo y los recursos. Al trabajar con un plan de rodaje ajustado y con un equipo artístico de primera, entre los que se cuentan el diseñador de producción James Spencer, que ha estado detrás de clásicos como ROCKY y POLTERGEIST, y el director de fotografía Jeffrey Jur, ASC, la película se rodó en una planta semiconductora abandonada convertida en plató y en diez escenarios exteriores, como por ejemplo la vieja línea ferroviaria de Santa Fe, el centro de Albuquerque, la pista nacional de Albuquerque e Isleta Pueblo. La producción se trasladó después a Los Ángeles, para rodar en el centro y en el Royce Hall de la Universidad de California Los Ángeles, entre otras localizaciones. Al diseñar el apartamento de Sydney, James Spencer sabía que uno de los elementos clave era investigar cómo viviría una invidente, y colaborar con los directores para crear un ambiente de miedo. James
Spencer comenta, "Durante la pre-producción, Greg Trapp y su esposa, ambos ciegos, invitaron a quince personas del equipo a cenar a su casa para mostrarnos cómo viven los invidentes. Son gente muy normal, así que eso hizo que diseñar el apartamento de Sydney fuera todavía más interesante, porque se trataba de insertar sutiles diferencias y encontrar formas de hacerlo angustioso
Los pasillos hacen una ligera curva que impide a los espectadores ver lo que hay a la vuelta de la esquina. Jugar con la idea de que lo desconocido da tanto miedo como lo conocido, o incluso más, si cabe".
Al crear el mundo visual de Sydney Wells, Jeffrey Jur trabajó estrechamente con los directores para intentar determinar cómo querían retratar su perspectiva. A través de una combinación de técnicas de iluminación y un enfoque realmente rompedor, Jur permitió que el público viera a través de los ojos del personaje principal, a la vez que establecía el tono de la película, manteniendo la sensación de que Sydney está envuelta siempre de oscuridad.
A la hora de crear el aspecto irreal de la película, Moreau y Palud contaron con la ayuda de los maquilladores Matthew Mungle (BEOWULF, SPIDERMAN 3, X-MEN: LA DECISIÓN FINAL), Richard Redlefsen (INDIANA JONES Y EL REINO DE LA CALAVERA DE CRISTAL, PIRATAS DEL CARIBE: EL COFRE DEL HOMBRE MUERTO, UNDERWORLD) y el equipo de efectos visuales de Asylum (DÉJÀ VU, LA ISLA, LA BÚSQUEDA (NATIONAL TREASURE). Al crear otros elementos sobrenaturales, debían mantener la sutileza de la historia y jugar con la idea de cuestionar la cordura. Para ello, tuvieron que establecer un delicado equilibrio entre los efectos de maquillaje prácticos y los efectos especiales que se añadieron durante la postproducción. Al trabajar con Asylum y Mungle, los directores sabían que querían que los efectos subrayaran el mundo de los personajes sin quitarle importancia al conflicto mental interior que viven los protagonistas.
El toque final de la película, que se centra principalmente en un mundo visual y en el poder de la percepción individual, vino de la mano de la banda sonora compuesta por Marco Beltrami (3:10 TO YUMA, LA JUNGLA 4.0, THE OMEN (LA PROFECÍA)) y del diseño de sonido del ganador de tres Oscars Mike Minkler (DREAMGIRLS, CHICAGO, BLACK HAWK DERRIBADO). La banda sonora de Beltrami desempeña un papel muy importante a la hora de reflejar el estado mental y emocional de los personajes. La productora Michelle Manning añade, "Cuando uno piensa en cómo Sydney Wells percibe el mundo antes de someterse a la cirugía, lo hace a través del sonido. Al ser invidente, sus otros sentidos deben compensar esa falta, así que durante la película es importante darle al público la misma agudeza al adaptar la música y los niveles de los efectos de sonido para llamar su atención hacia los detalles que oye Sydney que podrían pasar desapercibidos para el oído de una persona que puede ver".
Ante el inminente estreno de The eye (Visiones), los realizadores creen que han creado una visión tan real como surrealista, a través del cuidado con el que han conducido a los protagonistas y de su narrativa, pero también darán a los espectadores un buen puñado de sustos. Según Wagner, "Creo que The eye (Visiones) funciona porque combina elementos que atraerán a entusiastas del género de terror clásico y a los que les encantan los thrillers puros y duros. Tiene momentos de susto que dan mucho miedo, pero por otro lado tiene una cualidad muy inquietante que permanece después de abandonar la sala, porque hasta el final uno nunca está seguro de qué es real y qué no. Es realmente escalofriante pensar que la historia está basada en fenómenos reales y que le podría ocurrir a cualquiera de los espectadores".
Para Moreau y Palud, todos los elementos de The eye (Visiones), desde las interpretaciones a la banda sonora pasando por los efectos visuales, fueron sobrepuestos meticulosamente para fusionarse y crear las últimas escenas en las que se dispara la adrenalina, haciendo que los espectadores se muerdan las uñas. En las últimas escenas se encuentra el sentido del viaje de esta joven hasta el centro de la locura y su vuelta a la realidad. "Creo que la gente entrará a la sala con una idea de lo que van a ver y saldrán con otra totalmente diferente. Creo que la película les va a afectar", añade Alba. "Esta película es mucho más profunda de lo que parece a primera vista, y espero que la gente sienta mucha más conexión con la película de la que esperaban".
Entrevista con Jessica Alba
La actriz protagonista de la película habla sobre su trabajo y sus proyectos en la siguiente entrevista.