Cinemanía > Películas > Kebab Connection > Comentario
Destacado: Un grupo de inadaptados busca su destino en 'Mufasa: El Rey León'
Kebab Connection cartel reducidoKebab ConnectionDirigida por Anno Saul
¿Qué te parece la película?

Después de Corto y filo, Im Juli, Solino y Contra la pared, bajo la dirección de Fatih Akin, ganador de la Berlinale, y de Anam, de Buket Alakus, Ralph Schwingel y Stefan Schubert, directores de la productora WÜSTE, presentan KEBAB CONNECTION, su sexto trabajo cinematográfico centrado en un entorno multicultural. KEBAB CONNECTION es una comedia ambientada en el barrio de Schanzen, en Hamburgo.

"Al poco tiempo de trabajar juntos, Fatih Akin nos sorprendió con la idea de rodar la primera película de kung fu alemana", cuenta el productor Ralph Schwingel. "Con el tiempo la idea fue evolucionando y, en lugar del primer largo alemán de kung fu, decidimos hacer una película sobre un joven turco con el que Fatih simpatizaba: Ibo, que anhela filmar esa primera película de kung fu alemana, pero que inicialmente ha de conformarse rodando un pequeño anuncio para el establecimiento de kebab de su tío".

Sin embargo, aún pasó cierto tiempo antes de que el proyecto de KEBAB CONNECTION se materializara. Para empezar, era poco corriente en Alemania que una historia de la escena multicultural se relatara a modo de comedia. Las películas rodadas en el país y que podían servir como antecedentes, Yasemin de Hark Bohm (1988) y 40 qm Deutschland de Tefvik Baser (1986), eran melodramas. En realidad, Im Juli encajaba mucho más con el tono que se pretendía dar, así como también los dos cortos de WÜSTE con Fatih Akin: Sensin, Du bist es! (1995) y Getürkt (1996).

De mientras fueron llegando de países vecinos películas que habían cosechado un éxito increíble y que, en parte, habían aparecido años después de que surgiera la primera idea de KEBAB CONNECTION: en 1999 Oriente es oriente, de Damien O’Donnell, en el 2001 Jalla! Jalla!, de Josef Fares, una comedia romántica sobre la subcultura libanesa en Suecia, y finalmente, en el 2002, Quiero ser como Beckham, de Gurinder Chadhas, todas ellas éxitos de taquilla tanto en sus respectivos países como en el extranjero. Por último, también la escena off-Hollywood estadounidense se apuntó a las comedias sobre el choque de culturas y con Mi gran boda griega obtuvo unos ingresos notables. Por su parte, la aportación alemana se limitaba a otros dos cortos: Mehmet de Philipp Fleischmann y Lassie de Sinan Akku, un spin-off de KEBAB CONNECTION con las mismas figuras y la misma base argumental, producido por WÜSTE Film WEST y que tres años antes había despertado un gran entusiasmo.

Paralelamente, algunos formatos televisivos demostraron con su éxito que el tema de las subculturas estaba de moda y que admitía perfectamente un enfoque humorístico. Series como "Was guckst Du?!" han sabido aprovecharse de la vitalidad de la escena multicultural y son seguidas por millones de espectadores de forma entusiasta. Según Stefan Schubert, el éxito de esos precedentes facilitó notablemente la financiación de la película. A la empresa FilmFörderung Hamburg, que ya había expresado su predisposición desde un principio por financiar el proyecto, se unieron la Fundación cinematográfica NRW, WDR/ARTE como socio televisivo y, en último lugar, Universum Film, tras convencerles del potencial comercial de la cinta.

A lo largo del año se trabajó intensamente en la adaptación del guión que Fatih Akin había escrito a partir de la idea original de Ralph Schwingel. Ese trabajo, sin embargo, entró en una nueva fase cuando en el año 2000 Akin se decidió por Solino, con lo que a pesar de haber colaborado en el desarrollo del concepto, no pudo asumir la dirección de KEBAB CONNECTION. Fue entonces cuando la guionista de éxito Ruth Thoma (Jetzt oder nie, Solino) rescató al personaje de Titzi de su papel de víctima (de embarazada abandonada) y le confirió una vida propia. "Prácticamente todas las escenas femeninas importantes salen de la pluma de Ruth", cuenta Schwingel, "aun cuando la temática del embarazo se narra entre los temas de la primera hora".

La mano de Jan Berger, quien ya había colaborado con WÜSTE Film en la segunda película de Buket Alakus (Ofsayt), se deja ver más allá de los gags. El director Anno Saul, que entretanto se había unido ya al proyecto, se mostró entusiasmado con su trabajo: "Jan Berger recibió el encargo de supervisar las escenas divertidas: dónde podían ser un poco más agudas, dónde se podía mejorar alguna broma relacionada con el idioma… Y lo hizo realmente bien".

El propio Saul fue el encargado de adaptar la última versión del guión para el rodaje. Ralph Schwingel ya había visto Zur Zeit zu zweit y Grüne Wüste, dos películas dirigidas por Saul y con enfoques completamente distintos (una era una comedia romántica ligera y la otra, un drama serio), y quedó tan convencido de su calidad que le ofreció a Saul, que acaba de cumplir los 41 años, la dirección de KEBAB CONNECTION. Una decisión que resultó ser un acierto total.

Bajo su dirección, la película combinó la vertiente humorística y la romántica en una comedia que abordaba los diversos entornos culturales (el turco, el griego y el alemán) con respeto, sin que eso supusiera un freno a su naturaleza cómica. Escenas de una gran sensibilidad harmónicamente coordinadas con pasajes electrizantes y un sutil sentido del humor.

Su admiración y su profundo conocimiento de las películas de kung fu y de tortazos de los años setenta predestinaron a Saul a ocupar la butaca de director y evitaron la aparición de reservas contraproducentes: aceptó gustosamente el desafío de introducirse en los ambientes descritos en compañía de unos productores con una gran experiencia en entornos multiculturales, y también de aportar su experiencia personal sobre el tema de las "escenas contundentes". "Mis experiencias son las mismas que las de muchos otros coetáneos: Bud Spencer, Terence Hill y naturalmente Bruce Lee fueron mis héroes. Sus películas nos divertían y cuando hace poco volví a ver algunas de ellas, todavía me parecieron fantásticas. Las comedias italianas tienen realmente mucho humor".

Tampoco Denis Moschitto (Verschwende Deine Jugend), que interpreta a Ibo, el protagonista de la película, es un novato de las artes marciales, pues practicó activamente kung fu durante diez años. Durante el casting, y según el productor Stefan Schubert, sus habilidades en la lucha desempeñaron un papel importante: "No esperábamos que ningún actor aprendiera kung fu especialmente para el papel. Denis enriqueció la película también en ese sentido… y, para los expertos, no hemos utilizado dobles: él y todos los demás actores han rodado personalmente las escenas de lucha.

Cuando Nora Tschirner, presentadora de la MTV, se presentó para el papel de Titzi, pronto quedó claro que habían cubierto además la otra mitad de la pareja. A la vista del trabajo de Nora Tschirner, incluso los productores abandonaron rápidamente su idea original de encontrar una actriz rubia para el papel de Titzi. "Primero queríamos a una Titzi rubia para marcar aún más el contraste óptico entre el mundo alemán y el turco. Sin embargo, Nora logra conectar poderosamente con adolescentes y jóvenes. Realizará una gran aportación a la película, e influirá sobre todo en otras chicas de su edad. Eso por no mencionar su trabajo de interpretación, que dota a Titzi exactamente de la energía y el poderío que encierra el guión. Su personalidad misma es un indicio claro de que es una mujer que no se conforma con el papel de víctima".

Otro gran acierto fue dar el papel de Mehmet a Güven Kiraç, que algunos espectadores reconocerán como el amigo de Cahit en Contra la pared. Su participación, sin embargo, planteó un problema complicado a la producción: "En Contra la pared comprobamos que los gags subtitulados, y en especial la escena donde los dos hombres piden la mano de Sibel, funcionaban con cierto retraso, por lo que sugerí que KEBAB CONNECTION se realizara sin subtítulos", cuenta Stefan Schubert.