La película es un verdadero trabajo de amor para el director Mark Levin y la guionista Jennifer Flackett. Tras una década formando un exitoso equipo escribiendo para el cine y la televisión, Levin y Flackett, que son marido y mujer, decidieron que estaban listos para dirigir su primer largometraje.
"Como pareja casada que somos", afirma Flackett, "el amor es obviamente importante para nosotros y siempre figura en los lugares más altos de nuestra lista de cosas sobre las que escribir. Con PEQUEÑO MANHATTAN queríamos explorar el momento en el que empieza el amor".
"Todo el mundo recuerda las sensaciones que produce descubrir el amor por primera vez", añade Levin. "Queríamos captar ese descubrimiento día a día, el obsesivo choque de sentimientos maravilloso-doloroso, maravilloso-terrible que se produce con el primer amor".
Estos temas, aunque se exploran a través de los ojos de dos jóvenes, atañen a todas las edades, a cualquiera que haya tenido un primer amor. "Desde el comienzo, quisimos que PEQUEÑO MANHATTAN fuera para todo el mundo", señala Flackett. "La hicimos para gente de todas las edades".
PEQUEÑO MANHATTAN "nació" poco tiempo después de que Flackett diera a luz al segundo hijo de la pareja. Después de terminar el guión, se lo pasaron al productor Gavin Polone, un antiguo agente y manager que en tiempos había ejercido como representante de Levin y Flackett. "Hacía mucho tiempo que no había leído nada tan fresco", dice Polone. "Creo que el guión tiene un gran potencial como película para adultos y adolescentes. Funciona a muchos niveles".
Con Regency a bordo financiando PEQUEÑO MANHATTAN, llegó el momento de elegir al reparto de la película. Para el papel protagonista de Gabe, los productores y el director eligieron a Josh Hutcherson, quien había participado en la mesa redonda de lectura del guión que ayudó a vender el proyecto a Regency. "Josh fue el primer actor con el que me reuní", señala Levin, "e hizo suyo el papel. En la mesa de lectura hizo que la película cobrara vida".
"Josh realmente nos cautivó ese día [el de la lectura del guión]", dice Polone, quien había sugerido el nombre de este joven actor para el papel. "La elección de Gabe fue fundamental porque la historia está contada a través de sus ojos y su voz, y Gabe hizo que el personaje cobrara vida".
El papel protagonista de Hutcherson en PEQUEÑO MANHATTAN le llega tras haber participado en "Polar Express" y "Kicking and Screaming". Pero en PEQUEÑO MANHATTAN, Hutcherson es el personaje central y sale prácticamente en todas y cada una de las escenas. A Hutcherson le encantó tener la oportunidad de hacer su debut como protagonista en el cine con PEQUEÑO MANHATTAN. "Me gustaba de verdad que Gabe esté viviendo lo que todo el mundo, en un determinado momento de su vida, experimenta", dice el joven actor. "Para Gabe, como lo ha de ser para todo el mundo, el primer amor es una gran transición para él. ¡Antes pensaba que las chicas contagiaban a los chicos los piojos!".
El papel de Hutcherson requería que jugara al baloncesto y al fútbol americano, que hiciera kárate, condujera un patinete e interpretara escenas de riesgo usando cables y un arnés. Padeció tres semanas de entrenamiento intensivo con el coordinador de especialistas Manny Siverio, centrándose en especial en el kárate. Para cuando se empezó a rodar la película, Hutcherson ya era cinturón amarillo.
Hutcherson también tuvo que poner su voz en una extensa narración. "La narración que acompaña la imagen puede ser una técnica muy efectiva", dice Levin, quien perfeccionó la escritura narrativa en las cinco temporadas que estuvo como productor y guionista en la aclamada serie de televisión "Aquellos maravillosos años".
La narración de Gabe es un importante elemento a la hora de contar la historia y una ventana en la mente del personaje. "Es un modo de yuxtaponer lo que Gabe está pensando y lo que está sintiendo con lo que de verdad hace, creando un segundo nivel en toda sus experiencias", dice Flackett.
Las frases empleadas y las observaciones no son las propias de un adulto pero tampoco las de un niño, sino las de alguien que está en el medio. "La voz interior de Gabe tiene una especial de omnisciente e instruida cualidad", añade Levin.
El objeto del discurso narrativo de Gabe y el objeto de su amor es Rosemary, interpretada por la recién llegada Charlie Ray. Ray, que procede de la ciudad de Nueva York, se hizo con el papel tras un extenso casting y un largo proceso de audiciones. A diferencia de Hutcherson, que cuenta en su haber con algunas películas y trabajos en televisión, Ray era novel en esto de la actuación y acudió a la llamada tras ver su tía un anuncio de búsqueda de actrices para PEQUEÑO MANHATTAN en la sección "Chicos al día" del Newsday.
"Charlie es una actriz increíblemente instintiva y siempre honesta", dice Flackett. "Nos entusiasmó con su disposición, su aplomo y su confianza en sí misma". La decisión sobre Ray quedó tomada cuando, durante una lectura del guión con Hutcherson, surgió un lazo especial entre los dos jóvenes.
Hutcherson le ofreció a Ray sus consejos a la hora de trabajar en el cine, tales cómo mirar a su "marca" con la visión periférica o cómo saber adaptarse a los diversos retrasos inherentes a la realización de una película. Su amistad fue cada vez más fuerte a medida que se sucedían las semanas de rodaje. "El primer día, no me podía creer lo nerviosa que estaba", dice Ray. "Pero Josh fue muy dulce conmigo, y tras un par de tomas y ayudándome a acostumbrarme a esta nueva situación, ya nunca más me puse nerviosa".
A Ray, como a Hutcherson, le encantaron las escenas físicas de la película. Desde los tres años de edad, Ray había estudiado diversos tipos de baile, lo que le permitió aprender rápidamente, casi sin esfuerzo, los movimientos de kárate que se requerían para su papel.
De hecho, esas escenas y otras por el estilo fueron fáciles comparadas con una secuencia clave en la que los personajes tenían que darse su primer beso. Delante de casi cien miembros del reparto y del equipo de realización, Ray y Hutcherson se vieron interpretando una escena que podría haber resultado muy embarazosa, pero que les salió sin ninguna dificultad.
PEQUEÑO MANHATTAN tiene una segunda historia de amor que discurre en paralelo al primer amor que surge entre Gabe y Rosemary. Los padres de Gabe, Adam y Leslie, interpretados por Bradley Whitford ("El ala oeste de la Casa Blanca") y Cynthia Nixon ("Sexo en Nueva York"), se han separado, aunque siguen viviendo en el mismo piso, esperando que el divorcio ponga punto final a su relación.
"El suyo es un tipo de romance muy de Manhattan", dice Levin. "La idea de que cuidar y "tutelar" un piso puede ser tan complicado como cuidar de un chico no es algo inhabitual en Nueva York. Eso generaba a veces un tenso hartazgo en la casa, lo cual hace aún más conmovedora la exploración de la gran ciudad por parte de Gabe. Éste se siente liberado estando en la calle, incluso aunque sus incursiones se limiten a diez manzanas del Upper West Side".
Bradley Whitford, amigo desde hace mucho tiempo de Levin y Flackett, estaba encantado de unirse a este dúo creativo de PEQUEÑO MANHATTAN. Como mucha otra gente, Whitford todavía recuerda su primer amor y su primer beso. "Tenía diez u once años", cuenta el actor, "y no entendía lo que me estaba pasando. Mi primer beso, en séptimo grado, fue con una chica que vivía cerca de Filadelfia. La cosa ocurrió en un garaje, que por supuesto es un sitio muy romántico, justo al lado de las manchas de aceite y de anticongelante que había en el suelo".