Cuatro Vidas se basa en un proverbio asiático que divide la vida en cuatro emociones: felicidad, tristeza, placer y amor. La película se compone de cuatro viñetas, cada una de ellas centrándose en un personaje que representa una de esas emociones (aunque no siempre de un modo obvio). Felicidad, la primera viñeta, se centra en el apuro de un corredor de bolsa desolado espiritualmente que acaba por hallarse a sí mismo sólo tras deshacerse de su vida conformista para tomar la impulsiva decisión de robar un banco. Tristeza resigue la historia de una emergente estrella del pop que se halla en un turbulento momento de su carrera. Placer es la historia de un gángster al que le es dado ver el futuro. Y Amor narra la historia de un medico del servicio de urgencias que trata de salvar la vida de una paciente desesperadamente. Todas sus historias, chocantes, llenas de suspense, y mordaces se entrecruzan espectacularmente y cobran relieve en este nuevo film que atraerá a los pocos tenaces, atrevidos y valientes que no teman amar.

Cuatro Vidas confronta la vida de nuestros personajes encerrados en un contexto urbano, y lo hace con emoción, diálogos rápidos y vigorosos, y una corriente de rabia acalorada y deseo sexual que zumba bajo la superficie de una estética sofisticada y elegante. Protagonizan la cinta Kevin Bacon, Julie Delpy, Brendan Fraser, Andy Garcia, Sarah Michelle Gellar, Emile Hirsch, y Forest Whitaker. La película es una producción de NALA Films que producen los directores de este sello, Emilio Díez Barroso y Darlene Caamaño Loquet, junto con Paul Schiff; el reparto corre a cargo de Mary Vernieu y Carla Hool, bajo dirección de Jieho Lee.

La cinta es el resultado de un largo trayecto que ha requerido dos años. El guión, escrito por Bob DeRosa y el coguionista y director Jieho Lee, era uno de los favoritos entre los más destacados talentos de Hollywood, sin embargo, los estudios lo consideraban un proyecto muy arriesgado, tanto más si además quien iba a dirigirlo era un director debutante.

Productores, director y reparto entendieron el film como un acto de amor. Cuando los productores Darlene Caamaño Loquet y Emilio Díez Barroso leyeron el guión, inmediatamente supieron que se trataba de la primera gran película de NALA Films. "Los personajes me conmovían de tal modo que me resultaba imposible abandonar la lectura del guión; era una mirada del todo inédita hacia conceptos conocidos" —recuerda Díez Barroso—. "Dado que Jieho es una persona sofisticada, tenía cada escena planificada y cada intervalo de tiempo en una gráfica. Era fácil darle una oportunidad porque en modo alguno daba la impresión de ser un director debutante". NALA Films se incorporó al proyecto para producir y financiar la película tras una reunión con Lee y el productor Paul Schiff, ya en el barco en aquel momento. "Se trata de una historia acerca de cómo todos cuantos se cruzan en nuestro camino a lo largo de la vida nos afectan en alguna medida, sea ello significativamente notorio o no, y de cómo nosotros también incidimos en la vida de los demás" —opina Caamaño Loquet—. "Y se narra con un tono hiperrealista, casi de cómic, que nos parecía muy innovador".