Slipstream se adentra en el terreno de lo onírico, situándose en un punto entre la realidad y el sueño. Este relato surrealista incorpora algunos de los momentos más impactantes de la vida de Felix Bonhoeffer (Anthony Hopkins), un actor y guionista que ha vivido su vida repartida en dos planos de existencia: el mundo real y su propio y poderoso mundo interior. Mientras trabaja en un guión de misterio, Felix ve cómo algunos de los personajes que ha creado comienzan a entrometerse en su vida real.

De manera inconsciente Bonhoeffer llevará su cerebro al límite, viéndose inmerso en una vorágine donde el tiempo, sus sueños y la realidad colisionaran. Felix descubrirá dentro de esta estela danzante que la vida es aleatoria y la fortuna es ciega.