El director y guionista George Gallo, autor de las clásicas comedias Dos tipos geniales (Chicos listos) y Huida a medianoche, y director de Cautivos en Paradise y Local Color, es un tipo carismático. Tiene una energía contagiosa y la gente siempre disfruta de su compañía.

El productor Richard Salvatore, propietario de los restaurantes Poppolini's en Manhattan, recuerda, "Mi chef, Rocky Savastano, era amigo de George Gallo y yo siempre le decía, 'Rocky, Rocky, Rocky, ¡tienes que presentarme a George!'. Insistí tanto que acabó dándome su teléfono, e invité a George a una barbacoa en mi casa. Nos caímos fenomenal, ¡dos italianos en Nueva York!".

"Allí estábamos hablando en italiano sobre comida, pasándonoslo en grande y conociéndonos. Cuando le conté que trabajaba mucho con Millennium Films me dijo que siempre había querido hacer una película independiente, y yo le pregunté, '¿Qué tienes por ahí?'", cuenta Salvatore.

Finalmente Mi novio es un ladrón recibió luz verde del productor Avi Lerner de Millennium Films. Tras obtener el visto bueno de la productora comenzó la búsqueda del reparto.

Según Salvatore, "George está representado por Creative Artists, así que organizó una reunión con su agente en la que analizamos una larga lista de actores. Decidimos que queríamos que el ladrón fuera muy sexy, a lo Cary Grant o Steve McQueen, y un nombre sobresalía por encima de todos los demás: ¡Antonio Banderas! Es interesante porque incluso antes de que Antonio leyera el guión, ya se sentía atraído hacia la película porque Huida a medianoche es uno de sus largos favoritos, y quería conocer a George. Se cayeron genial. Cuando Antonio leyó el guión, quiso hacer la película y en cuanto él confirmó su presencia, sabíamos que lo tendríamos bastante fácil porque ¿qué actriz no iba querer trabajar con él? Le mandamos el guión a Meg Ryan y le encantó. En cuanto lo leyó quiso trabajar con Antonio y George".

En cuanto al extraño proceso de casting, la productora Heidi Jo Markel opina, "Ha sido una experiencia de casting totalmente diferente. Tras dar con el 'actor gancho', se suele contratar a un director de casting que se encarga de hacer ofertas y audiciones… pero ése no fue el caso. El hecho de que tuviéramos el apoyo de Antonio convenció al resto, y casi todos los que leyeron el guión nos dijeron que querían trabajar en Mi novio es un ladrón. No tuvo nada que ver con el dinero ni con las ofertas, no tuvimos que rogarle a nadie que se uniera al equipo. El casting fue una tarea conjunta que realizamos con amigos, conocidos, agentes con los que tenemos amistad, etc. Nuestra directora de casting, Lynn Kresell, ha sido estupenda porque gracias a ella hemos conseguido el maravilloso reparto final que tenemos".

Salvatore se une, "La verdad es que fue como una gran bola de nieve, en cuanto se puso a rodar no paró y conseguimos un reparto de grandísimos actores: Colin Hanks, Selma Blair, Keith David, Enrico Colantoni".


¡Manos a la obra!
Antonio Banderas, adorado por las mujeres, respetado por los hombres y amado por los niños, interpreta a un ladrón de arte buscando por todo el mundo llamado ‘Tommy'. "Mi personaje guarda un secreto durante toda la película", dice el actor sonriendo. "Es un buen secreto y, de cierta manera, me permite hacerlo todo con una sonrisa".

Meg Ryan nos hizo reír con Cuando Harry encontró a Sally y llorar con Cuando un hombre ama a una mujer, y esta vez interpreta a Marty. "Mi personaje comienza siendo una persona temerosa y muy limitada, que no se atreve a hacer nada con su vida pero que se transforma en una persona positiva y abierta a todo, que cree firmemente en las oportunidades".

Colin Hanks (hijo de Tom Hanks) que participó en King Kong, interpreta al hijo de Marty, Henry. Cuenta, "Cuando Henry se marcha al extranjero para participar en una misión secreta del FBI, la madre que deja atrás es una mujer con sobrepeso que no se cuida nada. Cuando vuelve tras dos años sin tener contacto alguno con ella, es una persona nueva. Se ha convertido en una mujer bella y atractiva, con varios admiradores, algo que pone bastante nervioso a mi personaje".

En cuanto al renovado apetito sexual de su personaje y la opinión de su hijo cinematográfico al respecto, Meg Ryan comenta, "La trayectoria básica de su relación es que ambos deben aprender a soltarse el uno del otro y darse cuenta de que son adultos independientes".

El que ha sido agente del FBI, siempre lo será. Hanks añade, "Se hace todavía más incómodo cuando uno de sus muchos admiradores resulta ser el blanco de una investigación del FBI. La nueva misión de Henry requiere que espíe a su madre y a su nuevo novio".

Así comienza Mi novio es un ladrón.

Selma Blair, recordada por su papel en Hellboy además de por su papel secundario en Una rubia muy legal, interpreta a Emily. "Es un guión muy abierto, tierno y gracioso y me encantó el personaje porque nunca había interpretado a una novia maja que apoya a su novio. Podríamos decir que mi personaje es como los ojos del público, porque simplemente observo lo que pasa y espero que todos se reúnan y sean felices".

Cuando Emily se entera de que el FBI le ha encargado a Henry la misión de espiar a su madre porque sospechan que el novio de ésta sea un ladrón de arte, debe tomar una decisión. "El cariño que Emily siente por Marty hace que esté dispuesta a desobedecer las reglas del FBI para protegerla. Hay un punto en la película en el que debe decidir entre ser una buena agente del FBI o contarle a Marty lo que está pasando y que la están utilizando. Emily siente mucha lealtad hacia Marty".

En palabras de George Gallo, "Es como una antigua historia de amor, una vuelta a aquellas películas que me recuerdan a Cary Grant y Eva Saint Marie en Con la muerte en los talones de Hitchcock. Básicamente tenemos a un criminal sofisticado y seductor que conoce a una mujer que le quita el hipo, y hace que reconsidere su vida. En esta película le damos otra vuelta de tuerca porque el ladrón internacional debe lidiar con un hijo demasiado protector que está dispuesto a alejar a todos los hombres que le rondan a su madre…".


¡Todo el mundo ama a George!
Los éxitos pasados del guionista/director George Gallo le granjean el cariño de todo el equipo que tiene la fortuna de trabajar con él.

"Para ser un director, ¡George está loco!... y ¡eso me encanta! Ve el mundo como una gran comedia, y me gusta su perspectiva porque el sentido del humor denota ironía y la ironía denota inteligencia. Creo que George es muy inteligente", se ríe Antonio Banderas.

"Lo que me gusta de George es que a pesar de ser el autor del guión no tiene miedo de decir, '¡Corten! ¡Lo cambiamos! No me importa'. Eso me parece genial. Además creo que sabe lo que es gracioso y sabe lo que es real, y encima es un buen público", dice Meg Ryan.

Banderas coincide, "George siempre está con los actores, está muy abierto a las ideas, sientes que puedes proponerle algo sin cortarte. Te da libertad para insertar tus propias ideas y eso te permite sentirte muy cómodo en un plató como éste".

Colin Hanks añade, "George tiene mucha presencia en el rodaje… ¡porque tiene una risa atronadora! Sabe lo que le gusta a la gente y sabe lo que les hace reír. Disfruta mucho del trabajo que realiza día a día y siempre se le están ocurriendo cosas graciosas. Sabes que lo has hecho bien cuando de repente oyes una risa atronadora que proviene desde detrás de los focos".

La productora Julie Gallo lleva más de 23 años casada con George y cuenta, "Como George es guionista y director, puede cambiar las cosas sobre la marcha. Cuando algo sale mal en el rodaje, George dice, 'No, es en directo, es la vida real, es un regalo de Dios'. A George le encanta la espontaneidad y permite que los actores creen su propio personaje sin tener que ceñirse estrictamente a unas directrices. Su perspectiva hace que sea más real, y por eso es un director tan estupendo".

Con ese entusiasmo tan infeccioso, no es de extrañar que George Gallo sea tan querido por todo el reparto. "George es el único director con el que he trabajado que se pasa el día dándote las gracias", comenta Meg Ryan con una sonrisa.


Todo amor
Gallo se mostró encantado al ver que todos los actores encajaran tan bien. "¡La verdad es que nos queremos mucho! Nunca me lo había pasado tan bien rodando una película. Antonio es fenomenal, es un gran actor cómico y tiene un sentido de la oportunidad buenísimo. Meg es fabulosa, cuando interpreta un papel cómico hace que cosas que supuestamente no eran divertidas en el guión lo sean en la película. Encuentra chistes en escenas que parecían más serias, ¡así que simplifica tremendamente mi trabajo!".

Colin Hanks interpreta al ‘hombre hecho y derecho’ que hace de contrapunto a todo el caos que le rodea. Gallo sostiene que "El personaje de Colin es una especie de rememoración de aquellos arquetípicos personajes policiales. Algunas de las cosas que le he visto hacer me recuerdan un poco a Alan Arkin en Los suegros. Una película como ésta no puede funcionar sin un gran sentido de la oportunidad, y el elenco de actores, Antonio Banderas, Meg Ryan, Colin Hanks y Selma Blair, son la monda juntos. ¡Ha sido todo un espectáculo!".


Rodemos en Shreveport, Louisiana
"Rodé Local Color a las afueras de Nueva Orléans doce días antes de que el Katrina arrasara la ciudad, así que quería volver porque como experiencia de trabajo había sido increíble y quería ayudar a la economía de la región", comenta George Gallo. "Además a los realizadores también les pareció interesante porque el gobierno da beneficios fiscales por trabajar en la zona. Cuando empecé a buscar localizaciones en Shreveport, pensé que sería genial dejar que Shreveport pareciera Shreveport, en vez de convertirla en una ciudad completamente diferente".

La película se rodó en el centro de Shreveport, el paseo River Front, el Hotel y Casino El Dorado y la galería R.W. Norton, por nombrar algunos de los exteriores, además del aeropuerto. La casa de Marty estaba situada en el vecindario de Highland Park, una zona de clase alta. Según Gallo, "aprovechamos los exteriores. Shreveport tiene muchos estilos muy diferentes, así que al final la ciudad se convirtió en otro personaje más de la película".


Cariño, vamos al cine
La coproductora Heidi Jo Markel se muestra entusiasmada, "La película es la opción perfecta para una cita porque hay muchas admiradoras de Meg Ryan que van a estar encantadas porque llevan años pidiendo que Meg haga otra película tipo Algo para recordar/Cuando Harry encontró a Sally. Meg está en un momento de su vida en el que está guapísima, la verdad es que todas las mujeres que se acercan a la cuarentena deberían ser así. Ellas acudirán encantadas a ver a Meg y ellos irán encantados porque saben que quedarán bien con su chica y encima se lo pasarán en grande. En cuanto a Antonio, él es un crack, tiene en el bote a hombres, mujeres y niños (gracias a El gato con botas). También están Selma –Una rubia muy legal y Colin –Orange County (Colgado, pringado y sin carrera), King Kong–, con lo que la película tiene actores para atraer a todas las generaciones. Esta comedia romántica se va a convertir en un mini-Titanic".

"Creo que esta película tiene todos los ingredientes que necesita un filme comercial. Seguro que va a ser un exitazo", predice Richard Salvatore.

"Rodamos la película en muy poco tiempo, sin forzar las escenas y creo que eso es un factor muy positivo para el impacto del filme", opina Antonio Banderas.

"Espero que la gente salga del cine diciendo ‘Me lo he pasado fenomenal, qué divertida'. Durante el rodaje, los actores acabábamos las escenas y nos quedábamos alucinados", sonríe Meg Ryan.

"Es una película muy divertida y muy romántica. Es una vuelta a muchas de las películas que vi de pequeño, porque me encantaban La pantera rosa y Un diamante al rojo vivo, con Robert Redford y George Segal. Disfruto con esas peripecias y toda esa comedia romántica, así que esta película me ha dado la oportunidad perfecta para mezclar esos dos géneros", sostiene George Gallo.

"El humor proviene de las situaciones reales. Al ser una película hemos podido exagerar un poco algunas cosas y minimizar otras, pero un filme es bueno si cuando se acaba te da pena porque quieres seguir en ese mundo. Realmente opino que hemos logrado crear esa sensación con esta película", comenta Julie Gallo. George Gallo concluye con un deseo, "Quiero que la gente se ría durante la película y que sigan riéndose cuando salgan del cine. ¡Quiero que se lo pasen genial!".