EL DESPERTAR DE LA INOCENCIA se enmarca en los primeros años de la década de los 80, en Washakie, New Jersey. Se trata de una comedia que resigue los contratiempos y sinsabores de un desgarbado e inexperto adolescente de 17 años, Pauly (Jeremy Hollingworth), en el suburbio donde vive, mientras explora y descubre cual es su verdadera naturaleza sexual. Incomprendido por sus bienintencionados progenitores -un padre incordiante y una sufrida madre, Elaine (magnífica Julie Kavner, siempre quejándose)-, que no cesan de discutir acerca de él y que intentarán sin éxito posible que su hijo se comporte como los demás chicos, y mal aconsejado por sus también bienintencionados amigos, Pauly intentará madurar mientras avanza por un camino traicionero. A la deriva, de escuela en escuela buscando algo de luz, finalmente aterriza en un centro donde se esfuerza por encajar entre la variopinta gente que integra los diversos clubes y actividades. Cuando se presenta a una prueba para la representación teatral de primavera, que resulta ser una hilarante e infumable versión musical vanguardista de LA LETRA ESCARLATA de Hawthorne, conoce al apuesto Noel (Christian Camargo), el nuevo y entusiasta profesor de teatro del centro, responsable del libreto y de la dirección de la pieza, y se enamora perdidamente de él. El modo en que reaccionan tanto sus padres como los compañeros de clase está lejos de reflejar la aprobación. Y además, tendrá que convencer a sus progenitores que, a parte de esta relación, puede atender sus actividades teatrales y ser el tamborilero mayor de una banda sin demérito de su rendimiento académico.