La película explora los oscuros secretos que se ocultan detrás de la terrorífica maldición sobrenatural que se desata sobre un grupo de víctimas sin relación aparente y, a partir de los restos calcinados de una misteriosa casa, se esparce por doquier.
El grito 2 es la secuela del éxito El grito (2004), que recaudó más de 188 millones de dólares en todo el mundo, protagonizada por Amber Tamblyn (Joan of Arcadia), y Sarah Michelle Gellar en el papel de Karen, de nuevo bajo la dirección de Takashi Shimizu, a partir de un guión escrito por Stephen Susco. Los productores son Sam Raimi, Rob Tapert y Taka Ichise.
La actriz japonesa Takako Fuji repite en el papel de la aterradora Kayako, Ryo Ishibashi también hace un cameo interpretando al Detective Nakagawa y el joven actor de nueve años Ohga Tanaka asume esta vez el rol del atormentado Toshio. Edison Chen (Infernal Affairs), Arielle Kebbel (Aquamarine), Teresa Palmer (December Boys), Sarah Roemer (Disturbia), Jenna Dewan (Déjate llevar), Matthew Knight (The Greatest Game Ever Played), Christopher Cousins (Obsesión), Jennifer Beals (The L Word) y Joanna Cassidy (A dos metros bajo tierra) completan el reparto de una historia coral.
La producción ejecutiva es de Joe Drake, Nathan Kahane, Roy Lee y Doug Davison, con Michael Kirk, Drew Crevello y Shintano Shimosawa como coproductores. La fotografía corre a cargo de Katsumi Yanagijima. El diseño de producción lo firma Iwao Saito. Jeff Betancourt es el montador. El diseño de vestuario es de Kristin M. Burke. La música es obra de Christopher Young. Y la supervisión de los efectos visuales corresponde a Hajime Matsumoto.
Cuando El grito se estrenó en octubre de 2004, aficionados al género de terror de todo el mundo aclamaron el inquietante thriller de Takashi Shimizu. La reacción entusiasta a la historia de Takashi Shimizu en torno a una horripilante maldición que hace que sus víctimas mueran presas de una cólera irreprimible tocó la fibra sensible del público y no hizo sino alimentar su avidez de más emociones fuertes.
Shimizu decidió ahondar más en la fascinante maldición vengativa que había explorado por primera vez en el éxito en lengua japonesa Ju-On. Como explica el propio Shimizu, "si El grito 2 hubiera repetido el mismo argumento que Ju-On 2, habría rechazado dirigirla, porque ya no me habría resultado divertido limitarme a hacer un remake del mismo material. En cambio, cuando los productores me prometieron una historia nueva, me sentí ansioso por ahondar más en el misterio del personaje de El grito y en sus nuevas víctimas".
El guionista Stephen Susco, que adaptó la primera película, se enfrentó al reto de dar el siguiente paso dentro de la leyenda de "el grito". "Queríamos que esta entrega iluminara una nueva senda, profundizara en la historia y enriqueciera la trama que ya conocemos", explica. "Por lo tanto el proceso de desarrollo fue mucho más intenso que en la primera película. Exploramos distintas líneas argumentales y multitud de personajes y seguimos perfeccionándolos hasta tener el núcleo de una narración sólida".
A lo que Shimizu añade: "el misterio de la maldición, que no se explicaba en la primera entrega de El grito, queda ahora desvelado. Sin embargo, incluso para quienes no vieron la primera película o alguna de mis versiones japonesas, he contado la nueva historia de manera que todo el mundo pueda entenderla y disfrutarla sin conocimiento o antecedentes previos".
Una historia coral
"Aunque la casa siga constituyendo el eje de esta película, su maldición viaja a muchos sitios diferentes en El grito 2", promete Shimizu. Las nuevas líneas argumentales continúan explorando el misterio y también muestran que la maldición se ha extendido más allá de los confines de la casa donde se inició.
Amber Tamblyn, que protagoniza El grito 2, afirma que lo que la cautivó del guión fueron las líneas argumentales interconectadas. "Cuando estaba leyendo el guión, recuerdo que saltaba entre mi historia y las otras historias tejidas en torno a ella y recuerdo igualmente sentirme muy ansiosa por ver qué iba a sucederles a continuación a los demás personajes".
Sarah Michelle Gellar, que regresa en El grito 2, señala que "desde un primer momento todo el mundo estuvo de acuerdo en que ésta daba más miedo que la primera peli, sobre todo porque llegas a encontrarte con los personajes y conocerlos mucho más en el plano personal. Por ejemplo, el personaje de Allison, interpretado por Arielle Kebbel, es alguien con quien el público llega realmente a familiarizarse y a saber de su vida antes de que se tropiece con la terrible maldición".
Como explica la propia Kebbel, "Como El grito 2 es una película de terror, no hay mucho tiempo para desarrollar los personajes. Shimizu-san y yo hicimos de Allison el tipo de personaje que no hacen falta palabras para comprenderlo. La primera vez que la ves intentando alcanzar a las chicas «guay» del instituto internacional, es imposible no sentir pena por ella. Desde sus calcetines desiguales, pasando por sus mocasines marrones baratos, su atuendo estrafalario, sin olvidar su incómoda postura... seríaa muy triste no sentir lástima por Allison".
Actor de fama consolidada en Asia, el canadiense Edison Chen, que debuta en un largometraje norteamericano con El grito 2, sólo tiene alabanzas para el guión. "Sin duda es uno de los mejores guiones que yo haya leído porque detalla minuciosamente lo que se supone que siente cada actor", afirma.
A otro integrante del reparto, Sarah Roemer, le enganchó el guión principalmente porque "ahonda en el argumento de la primera película. Se descubren todas las razones de la maldición. Es uno de los mejores guiones de terror que he leído en mucho tiempo porque incorpora muchos elementos diferentes".
Para el veterano actor Christopher Cousins, el hecho de que las líneas argumentales se entremezclen a lo largo de la película produce una sensación deliberada de desorientación. "Como espectador", dice, "comienzas a identificarte con esa sensación de desconcierto, que te hace sentir muchísimo más vulnerable".
Tamblyn, que comparte la mayoría de sus escenas con Edison Chen, está de acuerdo en que, a diferencia de la mayoría de las películas de terror, El grito 2 es una historia de personajes. "La película trata de cómo lo desconocido puede convertirse en personal, cuando se vuelve muy próximo y muy terrorífico, aunque continúe siendo inexplicable. La mayoría de pelis de terror no pierden el tiempo en eso. En esta película hay cosas tan espeluznantes que temblé de miedo leyendo el guión. Eso es lo fantástico de un buen thriller de terror: que mantiene al público permanentemente con los pelos de punta mientras le arroja escenas visualmente terroríficas".