Sofía nace prematuramente en una barbería, rodeada de hombres que necesitan un corte de pelo el mismo día de junio de 1968 en que Bob Kennedy es asesinado.
Durante quince años, crece entre los fogones y las mesas de la casa de comidas de sus padres.
Mujer trabajadora, ambiciosa e imprevisible, muy pronto se enamora de dos hombres: con uno, Toni, el yerno que toda madre querría tener, se casa y tiene tres hijos; con el otro, Frank, el representante que todo artista querría tener, descubre el secreto de la alta cocina.
Con los dos llega a un acuerdo profesional y amoroso que revolucionará el mundo de la cocina.
Los personajes
Paco León (Toni)
Él es un hombre de pueblo. Nace feliz y crece feliz dando más de lo que recibe, y por eso acaba recibiendo más de lo que nunca hubiese soñado. Sabe manejar el dinero, la familia, los hijos y, sobre todo, a su mujer, Sofía. Es el más fuerte, el más honesto, el más caliente, el más persona. Es la sal.
Olivia Molina (Sofía)
Es la estrella de la historia: una chica de pueblo que llega a convertirse en "la mejor cocinera del mundo". La vemos nacer y crecer detrás de la barra de un bar. Asistimos a la creación de sus primeros platos, al descubrimiento de su vocación. La vemos querer, odiar, sufrir, manipular, ser explotada y explotar. Es atractiva, imprevisible, clara por fuera, oscura por dentro; es un genio... Es el Mediterráneo.
Olivia Molina (Sofía)
Detrás de todo gran cocinero hay un cerebro que lo guía, y en nuestra historia es Frank. Un Pigmalión que descubre de inmediato el talento de Sofía y dedica su vida a transformarlo en un éxito. Es un lobo solitario, o una serpiente cuando se trata de que alguien caiga en la tentación, o un perro abandonado cuando es incapaz de conseguir una familia por sí mismo. Es una isla.