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Footloose cartel reducidoFootlooseDirigida por Craig Brewer
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Remake del clásico de 1984.

Paramount Pictures y Spyglass Entertainment presentan una Producción Dylan Sellers Zadan/Meron Weston Pictures, "Footloose", protagonizada por Kenny Wormald, Julianne Hough, Andie MacDowell y Dennis Quaid.

La película está dirigida por Craig Brewer. Los productores son Craig Zadan, Neil Meron, Dylan Sellers y Brad Weston. Guión de Dean Pitchford y Craig Brewer basado en una historia original de Dean Pitchford. Los productores ejecutivos son Timothy M. Bourne, Gary Barber, Roger Birnbaum y Jonathan Glickman.

La película ha sido realizada por un equipo creativo compuesto por la directora de fotografía Amy Vincent, el director artístico Jon Gary Steele, la diseñadora de vestuario Laura Jean Shannon y el encargado de montaje Billy Fox.


Reviviendo un clásico: La pasión de un director
Craig Brewer es famoso por su estética característica y su imaginación, como pudo apreciarse en sus películas "Hustle & Flow" y "Black Snake Moan", aclamadas por la crítica. Con fama de ser un realizador que insufla realismo, crudeza y y pasión a sus obras, a Brewer no le da miedo arrojar luz sobre ciertos matices culturales que a algunos les parecen tabú. Aunque no era una opción obvia para dirigir un clásico comercial de los ochenta, a Brewer le encantó la idea de revisitar una película que tuvo un impacto significativo en su vida.

"Cuando yo tenía trece años, 'Footloose' tuvo un gran efecto en mi vida, y cambió mi forma de ser", explica Brewer. "La película contenía una rebelión adolescente en el seno de una comunidad y un argumento religioso que no decepcionaban. Me pareció que era realmente una historia que se podía contar hoy en día y seguir siendo relevante, entretenida y esencialmente 'Footloose'", dice Brewer.

Craig Zadan, quien fue también productor de la película original, estaba de acuerdo en la relevancia de la película en la época actual, y creía también que era algo que aún encontraría eco entre el público. "Ahora había toda una nueva generación que le iba a encontrar un nuevo significado a esta historia", dice Zadan. "La película aborda muchos problemas con los que se encuentra la gente actualmente, lo que sumado a los elementos musicales y la naturaleza clásica de la historia, hace que resulte muy contemporánea".

La sensación de intemporalidad de la película compartida por Brewer y Zadan configuraba una pareja perfecta. "Hay mucha gente que podía haber hecho un remake de 'Footloose', pero no habría sido único, original ni fresco. Hay muchos directores por ahí, pero hay muy pocos cineastas, y Craig Brewer es un auténtico cineasta".

La idea de Brewer incluía contar más detalles de la historia de Bomont, que era un pueblo conmocionado hasta la médula tras perder a cinco de sus adolescentes más brillantes, entre ellos un hijo del reverendo Shaw. "Cuando Craig y yo nos pusimos a hablar de la película, ambos sabíamos que queríamos arrojar más luz sobre el punto de vista de los padres, ya que los dos tenemos hijos jóvenes", recuerda el productor Brad Weston. "No queríamos que fuera solamente una película de rebeldía adolescente, porque también trata de la pérdida y de los extremos a los que están dispuestos a llegar los padres para intentar proteger a sus hijos".

Para introducir a los espectadores en el estado mental y emocional de la población, Craig Brewer comienza la película con el trágico accidente de coche. "La decisión de empezar la película con el accidente de coche le da a los espectadores una idea del dolor que fue lo que provocó esas restricciones tan extremas", afirma Zadan. "Es más fácil ver, desde un punto de vista compasivo, que esta localidad estaba llena de padres destrozados por el dolor e intentando proteger a sus hijos, y que no son simplemente un puñado de fanáticos religiosos conservadores".


Buscando unos zapatos que queden bien: El reparto
La 'Footloose' original catapultó la carrera de Kevin Bacon, quien en esa época era muy poco conocido por el público. "Cuando el reparto no está formado por actores consolidados, los espectadores pueden identificarse con un personaje sin el bagaje y la carga que le aporta una estrella", dice Brewer.

Brewer oyó hablar por primera vez de Kenny Wormald a la superestrella musical Justin Timberlake, quien apareció en la última película de Brewer, "Black Snake Moan". Amigo y antiguo bailarín secundario de Timberlake, Wormald ha tenido un gran éxito en el mundo del baile, y estaba esperando la oportunidad adecuada para hacer la transición a la interpretación. El papel de Ren MacCormack ofrecía una extraordinaria oportunidad para utilizar su gran talento como bailarín y suponía una presentación ideal como actor.

La magnitud de esta oportunidad no se le escapaba a Wormald. El momento en el que supo que había conseguido el ansiado papel fue algo que recordará toda su vida. "Estaba jugando al golf con mis amigos cuando recibí la llamada, y lancé un grito, tiré los palos de golf y salí corriendo como un rayo. Supe ya entonces que tenía una oportunidad extraordinaria no sólo para bailar, sino para trabajar junto a una gran compañía de actores".

"Encontrar un actor fenomenal que fuera también un bailarín impresionante era una especie de milagro, y Kenny nos ha ofrecido una interpretación de Ren increíblemente nueva y emocionante", dice Brewer.

Consciente de las inevitables comparaciones con el Ren original, Wormald sabía que tenía que abordar al personaje de manera diferente, y hacerlo auténticamente suyo. "Quería darle mi propio toque al personaje. Ciertamente, me sentía honrado y humilde ante esta oportunidad, pero también quería imprimirle mi propio sello".

Durante el proceso de casting, Brewer se dio cuenta de algo acerca de Wormald que haría que el personaje le perteneciera de verdad. "Observé que había algo raro, y finalmente me di cuenta de que Kenny estaba intentando disimular su acento de Boston. Le dije: '¿Sabes una cosa? Quiero que seas tú mismo de verdad', así que cambiamos lo de que Ren era de Chicago, y le hicimos de Boston. Desde ese momento, empezamos realmente a ver cobrar vida a su personaje".

Julianne Hough, actriz, cantante y bailarina, dos veces campeona del programa Dancing with the Stars, estuvo desde el principio totalmente entregada al papel de Ariel, la rebelde hija del predicador. Tras incorporarse Brewer al proyecto, se reunió con Hough para ver si encajaba o no con su idea de la película, así que voló a Nashville para verla.

"Quería averiguar por qué quería interpretar a Ariel. Yo pensaba que quería hacerlo porque es bailarina, pero después de conocerla y oírla contar cosas de su vida, vi que entendía a Ariel de verdad. Julianne es muy madura para su edad, y me sentí increíblemente impresionado por ella".

Recuerda Hough: "Tuve que luchar por el papel, pero de ninguna manera me iba a quedar sin hacer esta película".

Aunque el papel ofrecía la oportunidad de utilizar su conocido talento como bailarina, a Hough le pareció que realmente entendía los retos a los que se enfrentaba Ariel y por qué reaccionaba en la forma en que lo hacía. "Yo, criada en una familia religiosa con muchos hermanos y hermanas, ciertamente tuve que luchar para llamar la atención en muchas de las formas en que lo hace Ariel, y me identificaba completamente con ella. En la película de Craig, los espectadores verán más cosas del lado vulnerable de Ariel y de por qué actúa así, en lugar de retratarla simplemente como alguien con quien no querrías que saliera tu hijo".

Al productor Craig Zadan le entusiasmaba la idea de ofrecerle al público la oportunidad de descubrir a Hough como actriz, satisfaciendo a la vez el deseo de los espectadores de verla bailar. "Realmente tuvimos mucha suerte de encontrar a una nueva actriz con verdadero talento, y capaz de interpretar escenas difíciles y al mismo tiempo ser una bailarina famosa. Cuando se unen sus dotes como actriz y su increíble talento para el baile, es verdaderamente abrumador".

Brewer se quedó muy impresionado por la capacidad de Hough para controlar la profundidad y complejidad de las escenas con fuerte carga emotiva. "Hay algunas escenas escenas en las que tiene que desnudar realmente su alma. Ariel es un personaje complicado que se rebela por causa de su dolor, así que, aunque tiene que ser la niña mala y sexy, los espectadores tienen que ver grietas en su fachada. Julianne se trabajó cada escena y las llevó ciertamente al límite".

Sacar a la luz la complejidad de la tensa relación entre Ariel y su padre era otra de las grandes prioridades de Brewer. "Para mí, el conflicto entre Ariel y su padre es una de las más grandes narrativas de la historia del cine de los años ochenta", explica. "Recuerdo haber oído las exclamaciones de asombro en el cine cuando Ariel le espetaba al reverendo Shaw en la iglesia que no era virgen. Fue como un trueno dentro del cine. Ese argumento era una de las razones por las que tenía muchas ganas de hacer 'Footloose'".

Para el papel del reverendo Shaw, el predicador del pueblo y principal responsable de la larga lista de prohibiciones y ordenanzas de Bomont, los realizadores sabían que tenían que encontrar a un actor que pudiera encontrar el delicado equilibrio entre un padre cariñoso y atento y un autoritario líder local. Encontraron a su Shaw en el prolífico actor Dennis Quaid, y se sintieron eufóricos por su buena disposición y su pasión hacia el papel.

"Dennis es alguien con quien siempre he deseado trabajar", dice Brewer. "Cuando nos reunimos por primera vez, hablamos mucho acerca de la fe y compartimos el mismo respeto hacia la religión debido a cómo nos educaron. Tiene una auténtica comprensión del papel y del argumento desde la perspectiva de un hombre creyente y un padre".

"Cuando hicimos el casting, no queríamos al típico predicador fogoso e irascible", recuerda el productor Neil Meron. "Queríamos a alguien que fuera un ser humano, alguien a quien se pudiera comprender en todas sus facetas, y Dennis tenía la capacidad de lograr eso".

Quaid aceptó el papel después de comprender el enfoque que Brewer hacía de la película y de cómo se podía identificar con ella toda una nueva generación. "La razón por la que estoy aquí es Craig Brewer. Es un director realmente genial. Me gusta trabajar con directores que también escriban porque entienden la música de la palabra hablada".

Educado en la iglesia baptista y con un abuelo predicador, Quaid sintió que quería abordar el personaje con propiedad y con un gran respeto. "Me eduqué en esa cultura y mi vida fue una preparación, así que lo entendía. Nunca antes había interpretado a un predicador, y para mí era importante que tanto la interpretación como los sermones fueran auténticos".

Aunque trabajar con un actor legendario podría intimidar a la mayoría de los neófitos, Hough profundizó mucho y desnudó sus sentimientos con el apoyo de su compañero de reparto. "Fue impresionante oír a Dennis decir que yo era auténtica y que me preguntara si necesitaba alguna toma extra. No hay nada como el aporte de confianza que me dio y los consejos que me brindó. Estoy muy agradecida por ello, y nunca lo olvidaré".

"Tengo una hija de dos años, y fue como una especie de premonición de algunas de las conversaciones que voy a tener con ella en el transcurso de mi vida. Julianne es muy auténtica y fenomenal, y lo borda, eso está claro", dice Quaid.

Cuando llegó el momento de abordar el personaje de Vi, la mujer del predicador y madre de Ariel, Brewer quiso redefinir y actualizar su idea de una mujer de predicador contemporánea. "En la original, el papel de la mujer del predicador consistía más bien en una postura estrechamente reservada y puritana que Dianne Wiest llevó a cabo maravillosamente, pero me parece que hoy en día es diferente", explica Brewer. "Las mujeres de los predicadores ahora parecen menos separadas de la congregación, y esta Vi está mucho más implicada en la congregación y en su propia familia".

Los realizadores encontraron a su Vi perfecta en Andie MacDowell, famosa por sus contenidas y potentes interpretaciones. "Andie es del Sur y entiende perfectamente de dónde procede Vi, y está absolutamente radiante", dice el productor Neil Meron.

"Para mí es un honor formar parte de esta película, y creo que la gente va a entender muy bien el mensaje de la película", dice MacDowell. "Es un ejemplo de lo que puede surgir del miedo y de lo fácilmente que la gente puede cerrarse, convertirse en unos estrechos mentales, y luego intentar controlar cómo piensan y actúan los demás".

"Andie entendió muy bien la importancia de interpretar a este personaje de una manera contemporánea y real", dice Brewer.

Interpretar el papel de Vi volvía a reunir a MacDowell y Dennis Quaid como marido y mujer, pues ya habían interpretado anteriormente a un matrimonio en la película Cena entre amigos. "Aprecio mucho a Dennis. Es una persona realmente tierna. Le conozco, así que estamos cómodos el uno con el otro".

Y además, como madre protectora y compasiva de Ariel, Andie también tiene grandes cosas que decir de Julianne Hough., su joven compañera de reparto. "Me encanta ver nuevas estrellas jóvenes, y tanto Julianne como Kenny están destinados a hacer grandes cosas".

El papel de Willard, el chico de campo que se hace amigo de Ren, fue para el neófito Miles Teller, quien recientemente obtuvo sensacionales críticas por su actuación en 'Rabbit hole' junto a Nicole Kidman. Teller se presentó en principio para el papel de Ren, pero los realizadores vieron en él al perfecto Willard. "En el momento en que Miles hizo la prueba para Ren, le dimos el papel de Willard", dice Brewer riendo.

Casualmente, Teller tenía su propia historia con el papel, habiendo interpretado a Willard en una representación de 'Footloose' en el instituto, la cual supuso su primera incursión en la interpretación. "¿Quién iba a decir que años después iba a interpretar a Willard en una película. Hago una revisión del papel, pero ciertamente soy mucho más alto", dice Teller bromeando.

Cuando leyó por primera vez el papel junto a Kenny Wormald, los realizadores percibieron una química natural entre los dos que se trasladaría a la gran pantalla. "Yo ni siquiera había dicho aún '¡Acción!' y esos dos parecían ya dos grandes amigos", recuerda Brewer. "Se gastaban bromas el uno al otro y se hacían putadas, pero una vez que comenzaba la escena, se producía la magia".

"Ciertamente, Kenny y yo sintonizamos nada más conocernos, y fuimos capaces de improvisar el uno con el otro", recuerda Teller. "Salimos mucho por ahí después de los rodajes, y creo que eso le sienta bien a nuestra amistad en pantalla".

Con Teller, los realizadores vieron la oportunidad de presentar un nuevo actor al público, igual que se hizo con Chris Penn en la película original. Aún reconociendo que sustituir a Penn iba a ser difícil, se dieron cuenta de que Teller tenía la capacidad de imprimirle su propio sello al personaje y hacerlo auténticamente suyo. "Queríamos encontrar un actor que fuera capaz de hacer lo que hizo Chris Penn, pero que también fuera igual de original. Creo que Miles es un descubrimiento, y su interpretación es tierna y conmovedora a la vez que cómica e hilarante", dice el productor Craig Zadan.


Una historia de amor para Footloose (Acerca de las Localizaciones, la Producción y el Diseño de Vestuario)
Para complacer a los fans recalcitrantes de la película original, Craig Brewer salpicó el guión y las imágenes de la película con guiños a la original. Lo primero en la lista de Brewer fue el emblemático Volkswagen Escarabajo color amarillo canario. "El Escarabajo es un mensaje a los fans para que sepan que, aunque la película sea una actualización, no deja de ser la 'Footloose' que conocen y adoran", dice.

A la hora de crear la estética de cada uno de los personajes, el objetivo de Laura Jean Shannon, diseñadora de vestuario, era encontrar el equilibrio perfecto y crear una estética actual para cada personaje sin apartarse demasiado de su significativa estética original. "Nuestro reto en este proyecto tenía dos vertientes", explica Shannon. "Queríamos que hubiera momentos que resultaran nostálgicos para los espectadores, pero también queríamos crear nuestra propia película. Es como si fuera una carta de amor a la original, y siempre tuvimos eso en mente mientras la hacíamos".

Hubo muchos debates acerca de la "estética" de Ren en la película y de tener en cuenta sus raíces urbanas, pero Brewer no quería apartarse de la esencia de quién es Ren, que es alguien que no sigue las modas.

"Cuando estaba elaborando los conceptos para Ren MacCormack, quise incorporar la arrogancia de Kenny, y su forma de comportarse", dice Shannon. "Pensé en James Dean en 'Rebelde sin causa'. Quería que fuera muy accesible, pero que tuviera ese punto de estrella del rock".

Un ejemplo de cómo utiliza su estilo Ren McCormick para afirmarse socialmente fue su elección de la muy ridiculizada corbata estrecha para su primer día en el instituto de Bomont. "Ren sabía lo que hacía al ponerse esa corbata el primer día de clase", comenta Brewer. "Sabía que iba a ser ridiculizado por ello, pero creo que hay una parte de él que quería eso".

En cuanto a la estética de Ariel, el parecido con la original más destacado y memorable son las emblemáticas botas de cuero rojo. "Cuando vi la original siendo adolescente, yo y todas mis amigas queríamos desesperadamente tener unas botas camperas de cuero rojo, así que de ninguna manera íbamos a prescindir de ellas", dice Shannon.

La otra prenda que permaneció prácticamente inalterable en esta versión es el emblemático vestido de Ariel para el baile de fin de curso. Ese vestido de gasa color melocotón suponía una estética tremendamente más blanda para la chica rebelde, y complementaba a la perfección el registro del personaje de ella. "Ariel tiene un registro muy grande a lo largo de la película, y para mí era muy importante reflejar eso en sus ropas", dice Shannon.


Everybody cut, Everybody cut (La coreografía de Footloose)
Considerada una de las primeras películas en mezclar a partes iguales música y baile de una manera no tradicional, manteniendo a la vez un argumento dramático, fuerte y autónomo, para los realizadores era de suma importancia que esta película fuera potente y orgánica. Los productores de la original, Craig Zadan y Neil Meron, habían trabajado con el coreógrafo Jamal Sims en la adaptación cinematográfica de 'Hairspray' y sabían que era la opción perfecta para actualizar los elementos de baile de 'Footloose' para una nueva generación.

Sims, entre cuyos numerosos títulos de crédito están la saga de 'Step up', la gira 'Sticky and sweet' de Madonna, la 82ª Gala de los Óscars y varias apariciones en So You Think You Can Dance, aceptó gustoso la oportunidad de trabajar en un proyecto que tuvo un impacto en él mismo como bailarín. "En la 'Footloose' original fue la primera vez que vi esa clase de baile descarnado y callejero en la pantalla, e hizo que me entraran ganas de bailar", recuerda Sims. "No podía quedarme sin trabajar en esta película".

"Cuando Jamal y yo nos reunimos por primera vez, nuestra preocupación común era cómo conseguir una coreografía impresionante sin que pareciera que estaba demasiado coreografiado", dice Brewer.

Un obstáculo importante era aumentar la calidad del baile y la coreografía para satisfacer los sofisticados gustos del público sin apartarse del estilo libre y la naturaleza orgánica de cómo le sirve el baile a la historia. "Teníamos que estar siempre atentos a enfatizarlo o suavizarlo porque los espectadores saben mucho más de baile y esperan más cosas porque han visto muchísimos bailes geniales en la televisión y las películas", dice Sims.

Debido al hecho de que ambos protagonistas son bailarines profesionales, los realizadores contaban con la ventaja de no necesitar un extenso calendario de ensayos. Unas pocas semanas antes de comenzar el rodaje, Sims trabajó por separado con los protagonistas y con los bailarines secundarios, y luego juntó a los dos grupos el fin de semana antes del rodaje para trabajar la conjunción y hacer cambios de última hora. Para dar ocasión a los actores de concentrarse en su interpretación dramática antes de ponerse a bailar, el calendario del rodaje se estructuró de tal forma que todos los números de baile estuvieran al final del calendario. Para cuando los actores llegaron finalmente a las escenas de baile, después de haberlo dado todo en las escenas y tramas dramáticas, hubo una gran sensación de euforia y emoción.

"Cuando por fin llegamos a los números de baile fue como que, '¡Vaya, por fin vamos a poder bailar y divertirnos!' Nos sentíamos literalmente como si fuéramos los chicos de Bomont, hacía mucho tiempo que no bailábamos, y agradecimos mucho poder hacer algo ligero y divertido", recuerda Hough.

En la película, Ren tiene su primer contacto con las costumbres locales cuando le llevan al auto-cine donde se reúnen los chicos de Bomont para pasar el rato. El auto-cine es un refugio seguro en donde los chicos ponen música y se sueltan, lejos de la supervisión de los adultos y de los agentes de la ley locales. Para reflejar la naturaleza espontánea y rebelde de esas reuniones, el movimiento posee menos estructura y sincronía, y se deja llevar por el estilo libre y la subcultura.

A Wormald, cuyo estilo de baile tiende más bien hacia el baile callejero, el auto-cine le dio la oportunidad de sentirse cómodo y practicar su estilo libre sin el corsé de tener que marcar cada compás. "No elaboramos demasiado lo del auto-cine, y queríamos que fuera orgánico. Si se presentaban los polis o alguno de los adultos, podíamos dispersarnos rápidamente, así que era algo más bien consistente en movimientos libres y hip-hop divertido", explica Wormald.

Para Julianne Hough, cuyos bailes latinos y de salón la convierten casi en un patrimonio nacional, la secuencia del auto-cine se salía de sus costumbres y le resultó las más difícil. "Cuando empezamos a trabajar en la coreografía del auto-cine, con todos esos meneos y contoneos del trasero, no podía parar de reírme. No estaba segura de poder hacerlo sin sentirme completamente incómoda, pero Jamal estuvo fantástico y lo hizo muy divertido para mí".

En la película, Ren, Ariel, Willard y Rusty también van hasta el límite del condado a un bar de vaqueros, para relajar un poco la tensión y realizar una "investigación" para su lucha por levantar la prohibición contra el baile. "Mientras que lo del auto-cine entraba más bien dentro del repertorio de Kenny, a mí me pareció que lo de los vaqueros era del mío, y que era mi oportunidad para mover el trasero de la forma en la que sé hacerlo. No tuve que contener los movimientos de mi melena, o 'cabellografía', como lo llamaba Craig Brewer, y el número de los vaqueros me dio la oportunidad para soltarme y divertirme como una adolescente".

Aunque el estilo del baile es el baile country en fila, que ya se sabe que no es un baile muy apasionado, el objetivo de Brewer era amplificarlo y darle un nuevo giro. "Nuestra versión del baile country en fila es bastante cálida y enérgica. No es como el baile en fila de nuestros abuelos, eso seguro", dice Brewer riendo.

Huyendo de la presión y el atraso del pueblo, Ren va en su coche hasta un almacén para desahogar sus frustraciones y estar solo. Sólo un hombre y su música. Brewer se propuso captar la cruda emoción del momento y meterse dentro de la fuerza de la expresión y el movimiento. "Tanto Jamal como Kenny y yo mismo consideramos el baile del enfado como la cúspide de nuestra existencia. Sabíamos que teníamos que bordarlo, y es la conjunción perfecta de toda nuestra capacidad".

Uno de los números de baile más reconocidos y celebrados que se hayan filmado nunca, el "Baile del Enfado", como se le conoce comúnmente, era una de las mayores prioridades de Brewer y uno de sus principales motivos para hacer la película. "Todo cineasta tiene alguna razón para hacer una película. Yo tengo unas cuantas para 'Footloose', pero si tuviera que elegir sólo una, sería ciertamente el baile del enfado", dice Brewer.

Sacando inspiración del escenario de la historia y de la raíces sureñas del propio Brewer, el número tiende más al al rock y al blues, con un sentimiento más crudo y descarnado emocionalmente. "Nuestro baile del enfado es peligroso, y transmite una sensación de peligro", dice Brewer. "Ren se hace un corte y acaba cubierto de polvo. En este tipo de baile no se trata de que quede bonito, ya que es crudo y duele".

Para los realizadores y los actores, rodar el número final de baile fue uno de esos momentos en los que uno se pellizca para ver si está soñando. "Me puse la cazadora roja, empezó la canción, y en ese momento me di cuenta de que verdaderamente estábamos haciendo 'Footloose'. La realidad de lo que estábamos haciendo me caló hondo", recuerda Wormald.

Tampoco pasó desapercibida para Hough la magnitud de bailar la música de Kenny Loggins haciendo la coreografía original. "Estábamos en el ensayo del baile final y, en un momento dado, tanto Kenny como yo estábamos sentados en unos taburetes viendo a todos los bailarines antes de entrar nosotros a bailar, y me sentí completamente abrumada. Se me llenaron los ojos de lágrimas, y miré a Kenny y vi que a él también. La magnitud de lo que estábamos haciendo nos inundó, y fue verdaderamente estimulante".


La música
Brewer quería que la música y la coreografía de esta película reflejaran los gustos tan variados de la juventud actual, consecuencia de su acceso casi ilimitado a la música mediante la tecnología y las redes sociales. "La cultura juvenil actual es muy diferente a la de mi adolescencia", dice Brewer. "Mientras que yo puede que tuviera unos 20 discos, los chicos de ahora tienen miles de canciones en sus ipods que abarcan todos los géneros. Me hace más ilusión esta generación porque, al igual que el espíritu de la 'Footloose' original, nuestra música y nuestros géneros de baile son de todos los puntos del mapa".

Junto con una película rejuvenecida llega una música nueva y emocionante de unos artistas con un talento increíble. La contribución más significativa de la banda sonora de 'Footloose' será una versión actualizada del clásico de Kenny Loggins. Cantando el tema central está Blake Shelton, actual Vocalista Masculimo del Año de la CMA y presentador del programa The Voice. Y, mientras que la versión original de "Let’s Hear it for the Boys" de Denise Williams suena en la radio en una escena de la película, hay también una nueva versión de la popular melodía a cargo de Jana Kramer. Big N’ Rich también ponen sus voces en la acelerada "Fake I.D.", y a ellos se unen otros números increíbles como los de Zac Brown de la Zac Brown Band, Cee Lo Green y The Smashing Pumpkins.