Ambientada en el submundo de las mafias asiáticas asentadas en los Estados Unidos, El asesino (War) es un thriller de acción cargado de adrenalina que examina hasta qué punto está dispuesto a llegar un hombre para vengar la muerte de su mejor amigo. Crawford es un agente del FBI obcecado con la venganza, y el hombre al que busca es Rogue – un asesino con sus propios planes y sin lealtad, despiadado y con un gran talento para reaparecer justo en el momento necesario para luego desvanecerse como un fantasma…

Los guionistas de El asesino (War), Lee Anthony Smith y Gregory J. Bradley, son fans confesos de Jet Li y de las películas de acción influenciadas por lo asiático, lo que sin duda les sirvió de apoyo a la hora de crear el personaje de Rogue, con la idea, además, de implicar a su ídolo en el proyecto. Muchos guionistas escriben guiones pensando en unos actores concretos, pero en este caso, el productor Jim Thompson pudo conseguir hacer llegar el guión de Smith y Bradley a Li, quien firmó el contrato casi inmediatamente.

"Es una de esas raras ocasiones en la que los guionistas han tenido una visión, con un actor en concreto, y lo hemos podido hacer realidad", comenta Thompson. "Se lo hicimos llegar a la persona a la que queríamos y la película comenzó con él ya en el proyecto, lo cual no es habitual".

Jet Li, una estrella de fama internacional y un renombrado experto en artes marciales, comenzó a hacerse notar en Asia como participante en competiciones de wushu. Su notable éxito en este campo le brindó la posibilidad de consiguir su primer papel protagonista en la película de 1979 de Chang Hsin Yen, The Shaolin Temple, lo que inmediatamente convirtió a Li en una estrella de las artes marciales en Asia. Desde entonces, Li ha conseguido reunir una legión de seguidores en todo el mundo con películas como Fearless, Danny the dog, Hero, y El único.

Steven Chasman, que representa a Li y es uno de los productores de El asesino (War), comenta que se sintió sorprendido por el compromiso que Li mostró con el guión de la película. "Cuando leí el guión por primera vez no pensé que Jet fuera a estar interesado porque el personaje realmente es la antítesis de casi todo lo que él ha hecho en el cine, pero fue una agradable sorpresa que lo aceptara con tanto entusiasmo".

"Nunca había hecho un personaje como éste", coincide Li. "No sé si es malo o no. Sólo sé que este violento personaje tiene razones para hacer lo que hace".

Budista devoto, Li suele buscar proyectos que reflejen sus ideas sobre la violencia. Admite que ha tenido ciertos reparos contra el particular concepto de violencia y venganza despiadada de su personaje en esta película. "Aunque no esté de acuerdo con las cosas que hace mi personaje, tenía que comprometerme de todas formas", comenta. "Cuando iba al set, primero tenía que olvidar que soy Jet Li y luego meterme en ese mundo. Al volver a casa, solía pensar ‘¿porqué estoy haciendo esto?’ Tenía que recordarme a mí mismo que el personaje no soy yo, es otra persona".

Con Li a bordo como protagonista, los productores se centraron en encontrar a la figura adecuada para la Némesis de Rogue, John Crawford, el oficial de policía que lo arriesga todo para saciar su sed de venganza. "John Crawford es la fuerza conductora de gran parte de la historia", explica el director Phillip Atwell. "Es un agente del FBI caído en desgracia que se embarca en la aventura de encontrar al culpable de la muerte de su compañero".

El papel de Crawford pedía un actor capaz de escenas de gran destreza física y también escenas emocionales e intensas; con su fuerte presencia y su intensidad en la pantalla, Jason Statham, conocido por películas como Crank y Transporter, era el candidato ideal. Chasman comenta, "Es un gran actor que además aporta muchas más dimensiones al papel, más que lo meramente físico. Lo tiene todo".

Statham también aceptó inmediatamente, ansioso por trabajar con Li de nuevo, tras aparecer juntos en El único, en el 2001. "En aquella película no pudimos luchar juntos", ríe Jason. "Trabajar con Jet Li y a la vez tener una historia más profunda y personal, con un personaje con sentido, fue algo que no pude disfrutar en El único".

A Statham le atrajeron igualmente las múltiples facetas de su personaje, Crawford. "Crawford se obsesiona con la venganza, intentando deshacer lo que ha ocurrido si bien eso es algo que escapa a su control", explica el actor. "Al final, consigue aceptar el destino de su amigo, lo que le permite deshacerse de algunos de sus demonios internos".

Para ambas estrellas, el proceso de trabajar juntos fue muy gratificante. Statham comenta, "Li es un compañero de trabajo genial. Basta con mirarle a los ojos para tener una gran conexión".

"Es un gran actor", comenta Li de Jason. "Mucho mejor que yo".

Una vez asegurados los protagonistas, los productores tentaron a Phillip G. Atwell para que dirigiera el proyecto. Conocido ya por sus vídeos musicales para gente como Eminem y 50 Cent, el talento de Atwell para conseguir aspectos visuales llenos de nervio y estilo era perfecto para obtener la cruda intensidad de El asesino (War). "Cuando Lionsgate quiso hacer la película y discutimos directores, mi primera elección fue Phillip", recuerda Chasman. "Realmente sabe tomarle el pulso al público".

La producción de El asesino (War) tuvo lugar en Vancouver, donde Atwell pudo reunir un reparto internacional que incluye a John Lone (Manhattan Sur, El último emperador), Terry Chen (Casi famosos, Serpientes en el avión), Luis Guzman (Embriagado de amor, Traffic, The Salton Sea), Nadine Velazquez (Mi nombre es Earl, Biker Boyz) y Devon Aoki (Sin City).

La decisión más significativa de Atwell fue la de no darle al guión un aspecto visual florido, al estilo de la saga de Matrix. "Aún así, retenemos un cierto toque de cómic", explica el director. "Pero la idea era la de hacer una película hard-core y agresiva. No quería que el público dijese, ‘Espera, ¿cómo ha podido escalar esa pared así?’ Los especialistas quieren hacer grandes y exageradas actuaciones, y para algunas películas eso puede estar bien, pero en El asesino (War) era importante que las cosas fueran realistas".

Corey Yuen, probablemente el mejor coreógrafo de secuencias de acción y lucha del mundo, además de director por derecho propio (Transporter, D.O.A.), ayudó a Li y a Atwell a crear el estilo realista de las secuencias de lucha de El asesino (War). "Así como Jet es una leyenda en las artes marciales, Corey es también una leyenda tejiendo y coreografiando las escenas de lucha", comenta el productor Christopher Petzel. Atwell también reclutó al director de fotografía Pierre Morel, quien ya había trabajado con Li y Statham en Danny the dog y Transporter, y al coordinador de especialistas Scott Nicholson. La filosofía de Atwell, "menos es más", también es la que rige el trabajo de los artistas de efectos especiales Jason Ward y Ryan Nicholson de Flesh and Fantasy Makeup Effects, de Vancouver.

"Cuando en alguna películas ves cómo le disparan a un tío y salta un montón de sangre… bueno, no es así como sucede realmente", dice Atwell. "Creo que es más impactante mostrarlo tal y como es y hacer que los actores respondan de un modo real. Eso será tan doloroso como ver saltar un espeso chorro de sangre atravesando la pantalla".

Para garantizar que las escenas de acción fueran lo más realistas posible, Atwell sometió a su reparto a sesiones de entrenamiento con armas especiales y seminarios de tácticas policiales. Sung Kang, que interpreta a un francotirador, Goi, comenta, "hemos aprendido a manejar un arma con propiedad, hemos aprendido cómo se entra en un edificio, cómo cubrir la retaguardia, es decir, los procedimientos básicos de un equipo SWAT".

A pesar de las atenciones prestadas a los detalles, Li sostiene que "lo importante en las películas de acción es la historia, no las escenas de lucha". Statham está de acuerdo, y espera que los espectadores se impliquen en la caza de Rogue por parte de Crawford. "La acción porque sí no aporta demasiado peso", comenta Statham. "El asesino (War) es una película de acción para un espectador que piensa. El público va a estar tenso en su asiento, pensando, ‘¿van a pillar a este tipo? ¿Va a haber finalmente algo de justicia? ¿Acabará este tal Rogue pagando por su fechorías?’ y cuando finalmente esas preguntas sean respondidas, se llevará una gran sorpresa".