Una película de Gabriele Muccino, protagonizada por Will Smith, Rosario Dawson, Michael Ealy, con Barry Pepper y Woody Harrelson. Dirigido por Gabriele Muccino. Producido por Todd Black, James Lassiter, Jason Blumenthal, Steve Tisch y Will Smith. Guión de Grant Nieporte. Los productores ejecutivos son David Crockett, David Bloomfield, Ken Stovitz y Domenico Procacci. El director de fotografía es Philippe Le Sourd. La dirección artística es de J. Michael Riva. El montaje es de Hughes Winborne, A.C.E. El diseño de vestuario es de Sharen Davis y la música de Angelo Milli.
Acerca del equipo de realización
En el año 2006, con En busca de la felicidad (The Pursuit of Happyness), el director Gabriele Muccino y la estrella Will Smith se tropezaron con una historia extraordinaria, la de un padre sin techo que con coraje reconstruye su vida y se convierte de la nada en un éxito del mundo empresarial de la nada, sólo con sus agallas, amor y esperanza. La película se convirtió en un gran éxito, cosechó aplausos y honores en todas partes y la profunda interpretación de Smith ganó la nominación al Globo de Oro® y al Oscar®
Ahora, la alquimia de otra historia original, emotiva a la vez que provocativa reúne nuevamente a los dos para brindarnos Siete Almas, una estimulante historia de amor entre Ben Thomas, un hombre preparado para hacer algo extraordinario por siete desconocidos, y Emily Posa, una de esos desconocidos, ejerce un efecto sobre la vida de Ben que jamás fue parte del plan. Lo que atrajo tanto al director como a la estrella fue la oportunidad de crear una historia de amor para la pantalla diferente, que no sólo trata de un profundo romance impredecible, sino del poder de redención del amor altruista.
"La historia me atrapó porque es un misterioso viaje que en sí mismo es una declaración de amor", dice Muccino. "Para mí, habla de un hombre que está atrapado en la pérdida y que tiene una oportunidad inesperada de vivir una nueva experiencia vital. Es una historia desafiante, desasosegante y movilizadora con una increíble carga emotiva. El intercambio de ideas e inspiración ha sido increíblemente poderoso en esta película y sólo podía pasar con Will Smith".
Smith siente de la misma manera. "El guión me impactó tremendamente en lo conceptual", cuenta el actor, "la idea de encontrar un propósito, la necesidad poderosa de encontrar un sentido a nuestras vidas. Es una increíble historia de amor moderna que no creo haber visto antes. Y este equipo con Gabriele al frente ha tenido una potente visión de la emoción humana, ellos saben cómo encontrarla y nutrirla. Siento que cuando pones todo eso junto y agregas gente como Rosario Dawson y Woody Harrelson, tienes una verdadera receta para el éxito".
Smith continúa, "para mí, fue otra oportunidad de contar una historia acerca de la misma idea central que continúa fascinándome, ¿cómo la gente se sobrepone a un gran trauma? ¿Cómo continuamos cuando todo sale mal? En ese sentido Siete Almas es una historia de redención, una que verdaderamente tiene un final inesperado".
El guionista Grant Nieporte explica que él ve en la urgencia de Ben por su personal búsqueda de redención una historia de amor no convencional que amplía sus horizontes mucho más allá de lo que nunca esperó.
"Para mí la historia comienza siendo de misterio pero se convierte en la puerta trasera de una historia de amor que es tan inesperada para el público como lo es para el mismo Ben", dice el guionista. "El único objetivo de Ben es encontrar gente buena y decente a la que ayudar, pero en el proceso se encuentra a sí mismo en un sitio en el que jamás imaginó, siendo conquistado, atraído y sintiendo fuertes emociones por Emily. Él piensa que está esencialmente muerto para el mundo, y entonces la conoce y ya nada es lo mismo. Me encanta que él finalmente conozca a esta mujer tan especial que lo trae otra vez a la vida, que puede abrir su corazón. Él tiene que tomar una decisión muy difícil y es esto lo que cierra el círculo de la historia".
Cuando los productores Jason Blumenthal, Todd Black y Steve Tisch de Escape Artists que también produjeron En busca de la felicidad (The Pursuit of Happyness)- se toparon con el guión de Nieporte, encontraron una historia con la que no se habían encontrado anteriormente y que sobresalía en el Hollywood de hoy. Blumenthal recuerda, "en el momento que leí el guión, supe que teníamos algo muy especial. No se parecía a nada de lo que había leído, ni nada de lo que había visto. Me encantó el profundo misterio que evoluciona y se desenvuelve frente a tus propios ojos. Comienza con un agente del IRS (Tesorería de los Estados Unidos de América) haciendo algo que la mayoría de la gente que vea la película encontrará extraño, está buscando gente a la que ayudar. Entonces, tal y como descubrimos a través de la película, se convierte en una increíble historia de amor".
Black agrega, "esta historia de amor estaba de forma orgánica allí y la idea de contar una historia de amor única en el año 2008 era muy excitante. Supimos inmediatamente que queríamos hacerla".
Blumenthal, Black y Tisch también intuyó que sería el proyecto perfecto si reunía al equipo que tanto éxito cosechara, y tan cercano en el tiempo el uno del otro, de En busca de la felicidad (The Pursuit of Happyness). Dice Tisch, "tuvimos la oportunidad de contar con Will Smith para En busca de la felicidad (The Pursuit of Happyness), porque el material era muy bueno. Y sentimos, tal y como pasó en En busca... que le daría la oportunidad a Will de interpretar a un personaje que jamás había interpretado, de explorar un territorio nuevo y excitante". Así que, en su momento, llevamos el guión de Siete Almas al productor James Lassiter, el socio de Will Smith en Overbrook Entertainment. Lassiter recuerda que su reacción fue fuerte e inmediata. "Lo que me atrajo de Siete Almas fue la historia única de pérdida, sacrificio y redención", dice el productor.
El personaje principal estimuló, especialmente, el interés de Lassiter en hacer el filme. "El protagonista es un personaje enteramente original, uno que no se ve habitualmente en la pantalla", continúa Lassiter. "Me emocionó tener la oportunidad de narrar esta historia, como productor es algo que no se presenta todos los días".
Will Smith se sumó al proyecto, y hubo un consenso similar en que Gabriele Muccino, el director italiano que hizo su debut en Hollywood con un filme tan auspicioso como En busca de la felicidad (The Pursuit of Happyness), debería tomar el mando otra vez. Muccino desarrolló una excelente relación de comunicación con Smith durante el rodaje de En busca de la felicidad (The Pursuit of Happyness), incluso creó una vía de comunicación telegráfica con el actor. Y mucho más importante aún, los productores sintieron que Muccino tenía la sensibilidad justa para manejar esta película, que mezcla crudeza, romanticismo, misterio humano y cuestiones trascendentales con honestidad y una vibrante creatividad visual,
"Sentí desde el principio que la película estaría en muy buenas manos con Gabriele al frente", agrega Lassiter. "En busca de la felicidad (The Pursuit of Happyness) fue una experiencia muy gratificante para mí como productor, así que estaba encantado de volver a trabajar con Gabriele".
Conocido por su método de utilizar ensayos intensivos y profundas conversaciones para llegar al corazón de los personajes, el temperamento de Muccino era una combinación perfecta para la intensidad del drama. "Lo que Gabriele fue capaz de hacer tan bien fue evocar el sentimiento visceral de la historia de amor", dice Black, "y reflejarlo en la pantalla de una manera apasionada y convincente".
Tisch agrega, "Gabriele aporta un tipo de energía nada tradicional y un punto de vista del cine que es muy especial. Y porque era la segunda vez en que trabajaban juntos él y Will, lo hizo aún más intenso". Muccino estaba igualmente excitado de reunirse otra vez con el equipo. "Lo que fue particularmente genial de este equipo fue que me permitía mantener mi acercamiento europeo en una película hecha en Hollywood", cuenta el director. "Y en cuanto a Will, tenemos una confianza increíble el uno en el otro que hace que todo sea posible. Puedo decir simplemente que jamás trabajé tan bien y con tanta facilidad con nadie en toda mi vida".
Will Smith se pone en la piel de Ben Thomas
En Siete Almas, Will Smith interpreta a un hombre en busca de siete almas perdidas y de la aceptación de sí mismo. Motivado por un trágico accidente, Ben Thomas se impone la misión de mejorar drásticamente la vida de un grupo de absolutos desconocidos. Pero por más que Ben quiere ayudar al mundo, él es un hombre que se siente solo, aislado, incapaz de confiar en la humanidad a la que quiere ayudar, hasta que conoce a Emily, quien lleva la emoción y la alegría otra vez a su vida, complicándolo todo.
El papel era bastante diferente a cualquiera de aquellos a los que se haya enfrentado Smith en su celebrada carrera como uno de los principales actores más populares y diversos de Hollywood, con sus dos nominaciones a los Oscar® por su papel como el icónico Muhammad Ali en la película de Michael Mann, Ali y como padre esforzado en En busca de la felicidad (The Pursuit of Happyness). Smith dice que lo intrigaron especialmente los matices de este papel y la historia que trata de un hombre que está en medio de una transformación en la qué él no cree.
"Lo interesante es que Ben comienza esta historia como alguien que obviamente está tratando de comprometerse con actos de amor desinteresados, pero es incapaz de comprometerse con el dolor que significa amar a alguien realmente", explica el actor, "y repentinamente Emily llega a él. Ella lo atrapa de la forma en que todos somos atrapados, de tal manera en que un día miras a los ojos de otra persona y ella se ve diferente que el día anterior, está esa luz, ese brillo que lo ilumina todo y sabes que tu vida ha cambiado".
La vida de Ben cambia de una manera que él no esperaba, y ese cambio interno y profundo son el corazón de la interpretación de Smith. "Esa parte delicada de la historia que revela que en realidad Ben está pensando más en sí mismo al comienzo de su plan pero que después de conocer a Emily, de forma natural comienza a convertirse en alguien generoso de verdad. Ese pequeño desvío en el camino de la redención es lo que hace a esta historia tan poderosa", reflexiona el actor.
Aún así, la conflictiva perspectiva y el encierro emocional extremo del que comienza a emerger Ben en el curso de la película, por momentos era desbordante, admite Smith. "Ben es completamente opuesto a quien yo soy, esa oscuridad en sus pensamientos y sentimientos, ese fue un espacio emocional muy difícil en donde tuve que vivir durante toda la producción", cuenta Smith.
Parte de lo que ayudó moralmente a Smith a través de la oscuridad del alma de Ben fue la intensa química que se desarrolló entre él y Rosario Dawson. "Ella simplemente capturó el corazón y la humildad de Emily y fue una inspiración ver la manera en que Rosario se abría en la película. Una cosa que tiene Emily es que ella también ha pasado por una experiencia traumática, pero reacciona de una manera muy diferente a la que lo hace Ben. Ella continúa siendo capaz de reír y de soñar, mientras que Ben se ha negado por mucho tiempo incluso imaginar la posibilidad de una vida mejor. Creo que es eso lo que lo atrae de Emily. Él no puede entender por qué ella sigue peleando por la vida, y cuanto más lo ve, más le llega".
Pero lo que más inspiró a Smith fue todo el alcance de la historia. "La historia de amor entre Ben y Emily es hermosa, pero es sólo una pequeña parte. Tanto para Gabriele como para mí Siete Almas no es en última instancia la historia de un hombre y una mujer que se encuentran en un momento de crisis para ambos, sino una historia de amor entre un hombre y la humanidad".
Rosario Dawson como Emily Posa
Una vez que Will Smith se comprometió con Siete Almas, la búsqueda se concentró en encontrar a la actriz que interpretara a Emily. Fue Gabriele Muccino quien sugirió a Rosario Dawson, que es una actriz que se ha erigido como una de las más buscadas en la industria, con papeles que van de la acción de La conspiración del pánico (Eagle Eye) y Frank MillerŽs Sin City Ciudad del pecado (Sin City) al drama de El precio de la verdad (Shattered Glass) y La última noche (The 25th Hour). Dice Muccino, "Rosario lleva consigo una vulnerabilidad tangible que encaja con su sensualidad. Hay una inteligencia que se desprende de su actitud, y fue esa inteligencia la que sentí que necesitábamos para que fuera creíble que alguien como Ben pudiera ser rescatado por una mujer como Emily."
Dawson peleó duro por el papel. "Este fue uno de los mejores guiones que leí jamás y punto", dice la actriz. "En cuanto lo leí, supe que adoraba al personaje y que era un viaje que quería hacer. Estos personajes simplemente me emocionaron con su autenticidad. Cada uno de los personajes es increíblemente real. Así que me preparé como una loca para la prueba y me dediqué en cuerpo y alma para asegurarme de ser parte de esto".
Estas pruebas rápidamente se ganaron al resto del equipo. Dice Steve Tisch, "cuando Rosario hizo la prueba con Will fue fantástica la manera en que los dos se apoderaron de la pantalla. Había vulnerabilidad, honestidad, te importaban los personajes, se importaban el uno al otro, la química fue fantástica".
Una vez en el plató, Dawson estuvo a la altura del desafío. "Creo que la dificultad de esta interpretación era darle el mayor realismo posible. Lo que este filme trata de lograr en general es sutil y poderoso, y la clave está en permitir al público que crea en la realidad de esta gente", explica la actriz. "Muccino lo hizo muy fácil. Él es una de las personas, y desde luego el director más emocional que jamás he conocido. Y esto ha sido vital para el proyecto".
También ayudó la gran afinidad que tenía con Emily. "Me encanta que Emily sea obstinada e independiente. Me encanta que sea una superviviente y que siempre haya encontrado el modo de cuidar de sí misma", cuenta la actriz. "Pero ahora se siente sola y parte de ella se da cuenta de que cada vez está más a merced de los demás. Así que el reto era mostrar esa soledad a la vez que curiosidad, juventud y una fuerte determinación por la vida".
Otro de los desafíos para interpretar a Emily residía en los detalles de su afección cardiaca que se ve en la manera en que se mueve, que mira e incluso que respira. "Alguien en su condición estaría sin aliento todo el tiempo, que es algo muy difícil de experimentar", explica Dawson. "Pero quería dar la impresión de que ella se está abriendo paso con dificultad a través del agua todo el tiempo, para recordar lo difícil que es para ella y al mismo tiempo para mostrar su determinación".
Todo esto, dice Dawson, fue aún más inspirador por su colaboración con Will Smith. "Había trabajado antes con Will pero esta experiencia me impactó muchísimo", dice la actriz. "La manera en que él interpreta a Ben, con sus emociones contenidas, fue una elección increíble. Simplemente valoro el nivel de compromiso al que Will estuvo dispuesto a poner en su personaje".
De la misma manera que Smith, Dawson ve esta historia entre Emily y Ben como una parte de algo mucho más importante. "Veo que Siete Almas es acerca de muchos tipos diferentes de amor: el amor que esperas, el amor que tienes que aceptar, el amor por ti mismo, el amor por los demás y sobre todo el amor por la vida misma", concluye la actriz.
El reparto
Ben Thomas comienza su camino hacia la redención con una lista de siete nombres, cada uno de ellos desesperados en algún sentido, cada uno de ellos parte integral de su plan. Una de las personas de esa lista es Ezra Turner, un concertista ciego, que está interpretado por Woody Harrelson, actor versátil que ha cambiado el drama por la comedia con facilidad como se ve por los roles que ha interpretado en la ganadora del Oscar® No es país para viejos (No Country For Old Men) y en la comedia junto a Will Ferrell, Semi-Pro. Harrelson podría no parecer como la elección obvia para este específico papel, pero él tiene las cualidades que Muccino buscaba. "Woody tiene una gentileza en su alma que era crucial para Ezra, que es un personaje muy sensible, que se siente rechazado por su ceguera, pero tiene un corazón preparado para zambullirse en la vida, cosa que Woody es capaz de transmitir", dice el director.
Harrelson personalmente se sumergió en dos tipos de entrenamientos para su breve pero poderoso papel, tomó lecciones de piano con varios profesores y trabajó con el Instituto de Braille para experimentar lo más cercanamente posible la manera en que se mueve un invidente en el mundo. "Una de las razones por las que este papel fue tan gratificante fue la cantidad de gente maravillosa que conocí estudiando piano y aprendiendo la manera de retratar a alguien ciego", dice el actor.
Harrelson admite que el personaje fue un reto, un reto que siente que Will Smith ayudó a que consiguiera. "Recuerdo el primer día en el plató, estaba muy nervioso respecto a interpretar a un pianista ciego y Will vino al plató y todo eran abrazos y achuchones, y pensé es alucinante que la mayor estrella del mundo sea uno de los tipos más majos del mundo, y eso me relajó. Él se comportó en el plató de la misma manera todo el tiempo, sin embargo siempre estaba concentrado en el trabajo y probando cosas nuevas, creo que nos ayudó a todos a poder dar todo el contenido emocional de la historia".
Harrelson también disfrutó de trabajar junto a Gabriele Muccino en el desarrollo de Ezra y de su relación con Ben, cuya total naturaleza permanece oculta hasta los últimos momentos del filme. "Gabriele es un cineasta extremadamente talentoso", dice Harrelson. "Él realmente te presiona. Siempre te dice lo que siente directamente, y de alguna manera, él siempre parece saber qué es lo que hará la escena mejor y a tu personaje proyectarse más".
Otros de los personajes vitales del reparto que rodean a Ben son el hermano menor de Ben, interpretado por Michael Ealy, nominado al Globo de Oro® por la serie Sleeper Cell, cuyos papeles han ido desde La barbería (Barbershop) y 2 Fast 2 Furious (A todo gas 2) (2 Fast 2 Fourious) a Miracle at St. Anna de Spike Lee; y el amigo leal de Ben, Dan, interpretado por Barry Pepper, nominado al Globo de Oro® y al Emmy por su retrato de Roger Maris en el telefilme de Billy Crystal, 61, y conocido por sus papeles en películas como Banderas de nuestros padres (Flags of Our Fathers), Salvar al soldado Ryan (Saving Private Ryan) y La milla verde (The Green Mile).
El hermano de Ben está íntimamente conectado en su búsqueda de redención aunque están distanciados, él trata desesperadamente de quedar con Ben en persona en toda la primera parte de la película. Ealy recuerda cómo se le ocurrió la idea a Will Smith de hacer de sus conversaciones telefónicas momentos llenos de tensión emocional. "Cuando ensayamos nuestras escenas juntos, no funcionaban entonces Will tuvo la idea de que si estuviéramos hablando por teléfono durante la escena eso tendría mucho más sentido. Lo probamos y cuando no podíamos vernos ni ver nuestras respectivas reacciones, eso creó naturalmente una tensión que era la que tenía que estar allí. Fue absolutamente genial".
El papel, como muchos de los otros de Siete Almas , consistía en moverse en un amplio péndulo de emociones para Ealy. "A Gabriele Muccino le encanta el conflicto emocional", opina Ealy. "Para mi papel, la clave estaba en lograr un balance entre el enfado y el amor. Cuando el hermano de Ben al final lo confronta, es explosivo, es apasionado, pero existe una sensación de que es el tipo de sentimiento que sólo está entre dos personas que realmente se importan".
Al mismo tiempo, el amigo de toda la vida de Ben y abogado, Dan, se enfrenta al dilema de cómo ayudar a Ben a completar su misión que aunque excepcional, está llena de grandes cuestiones morales y legales. Pepper dice sobre su personaje: "Dan trata de aceptar la situación con una intensa lucha interior que lo pone en un conflicto espiritual, emocional y profesional. Él ve el tormento por el que está pasando su amigo y quiere honrar su pedido de ayuda, aunque esto signifique que tiene firmar un pacto para poner en marcha la tarea más difícil que pueda imaginar".
Trabajar junto a Smith permitió que todo esto se desenvolviera con naturalidad, dice Pepper. "A Will lo que le importa es encontrar la verdad. Lo que lo hace un gran actor es que siempre está presente y abierto, no importa lo que le arrojes encima. No utiliza engaños para emocionarse, simplemente vive cada momento. Me emocionó el guión porque trata de mis temas preferidos, lo que amamos de las historias de los clásicos de todos los tiempos, el sacrificio, el amor verdadero y la redención. Pero es sólo cuando ves de qué manera va a ir todo en conjunto, con la visión de los actores y del director, que sabes que va a funcionar, y esa era la electricidad que había en el aire desde el momento en que puse un pié en el plató", observa el actor.
Los demás actores para los papeles de la enigmática lista de Ben conforman un conjunto diverso que incluye a la actriz mexicana Elpidia Carrillo (Nueve vidas [Nine Lives]) como Connie Tepos (y la popular estrella infantil Madison Pettis como su hija) y Bill Smitrovich (La conspiración del pánico [Eagle Eye]) como George Ristuccia.
El estilo de Siete Almas
La imagen de Siete Almas está bañada con una urgencia y una belleza que se descubre de a poco y que Gabriele Muccino sintió que le daría a la película lo que él llama "otra capa en la historia que se cuenta". "Quería que se viera estilizada", dice el director, "porque la mente de Ben de alguna manera está intoxicada. Él ve al mundo de forma diferente, el mundo que lo rodea es muy bello pero él se siente totalmente desconectado de ese mundo. Él ve a otra gente experimentar esa belleza que él no puede hasta que conoce a Emily".
Para encontrar la estética justa para la película, Muccino reclutó al director de fotografía francés Philippe Le Sourd, que recientemente rodó junto a Ridley Scott la comedia romántica ambientada en la Provenza, Un buen año (A Good Year). "Trabajé con Philippe en un anuncio y sentí que tenía un talento increíble", dice Muccino. "Juntos utilizamos pinturas famosas como referencia y creo que Philippe fue capaz, casi, de pintar la película. Comienza todo en un lugar inhóspito y gris que va cambiando hacia un mundo brillante y colorido".
Una transformación similar se encuentra en el trabajo del director artístico Michael Riva, que previamente había trabajado con Muccino en En busca de la felicidad (The Pursuit of Happyness). Riva explica, "inicialmente, todo el diseño está teñido con la visión de Ben del mundo, así que usamos una paleta de color oscura y a los detalles del decorado se les quitaba el color para luego darle una explosión de color en ricos magentas. Después de que Ben conoce a Emily, todo lo que es oscuro e insulso se convierte en más y más colorido".
Riva señala que la adaptación al cine dirigida el año pasado por Julian Schnabel, la visualmente deslumbrante La escafandra y la mariposa (The Diving Bell and The Butterfly), ha sido una gran inspiración para él, así como la película francesa de los años 60, Las cosas de la vida (Les choses de la vie), un inquietante retrato de los arrepentimientos de un hombre, dirigida por Claude Sautet. "Ambas tienen una lírica y una belleza que quería ver en Siete Almas ", cuenta Riva.
En sus exploraciones por Los Ángeles, Riva trabajó codo a codo con Muccino para desarrollar el entorno de cada uno de los personajes. "Emily y Ezra, por ejemplo, cada uno tiene su propia firma en lo que los rodea", explica, "con una imagen diferente y sentimientos que hablan de sus personalidades. Así que los colores en la casa de Emily son vibrantes y atrevidos, mientras que todo alrededor de Ezra es espartano, organizado y sencillamente funcional".
Una de las escenas en que tanto la visión de Muccino, Le Sourd y Riva confluyen es el momento en que Ben y Emily conectan entre sí en un campo abierto y exuberante lejos de la actividad de la ciudad. La escena fue desde siempre la imagen central de la película para Muccino y él presionó al equipo artístico para que fuera de la manera en que él la visualizaba. Recuerda Riva, "Gabriele nos dijo que quería crear una sensación muy romántica, muy toscana y muy sentimental para esa escena. Pero aquí estamos en el medio de un desierto y no sabíamos de ningún sitio parecido aquí en Los Ángeles. Buscamos, buscamos y buscamos y sorprendentemente encontramos un campo de césped grande y bello en Charmlee Park en Malibú, y fue exactamente lo que Gabriele quería".
El productor Jason Blumenthal dice acerca de la secuencia, "es una de las escenas más románticas que he visto nunca. Los dos personajes ni siquiera se tocan, así de poderosa es la relación, y aún así, ninguno de nosotros podemos imaginar la película sin esa secuencia".
Muccino había intuido desde el principio que la escena en el campo sería la parte visual primordial del romance entre Ben y Emily. Él dice, "para mí era la manera de mostrar la sensación de vida que rodea a Ben y Emily, estos dos seres humanos perdidos en un momento de profunda belleza natural".
Para todo el equipo de realizadores, el compromiso de Muccino para lograr toda la emoción y amor posible de cada una de las escenas se convirtió en una fuente de motivación. "Gabriele estaba diciendo constantemente a los productores, a Will, Rosario y a todo el resto del equipo artístico y técnico, esta es una historia de amor en primer lugar y es lo más importante y no perdamos nunca eso de vista", recuerda Todd Black. "Y su mérito es que en cada punto, desde cómo se rodó la película, el diseño artístico, la música elegida, cada pequeño detalle que ha realizado, siempre volvía a contar una historia de amor".
Muccino espera que la historia de Siete Almas evoque en los espectadores tanto el amor personal como el lado más sublime del amor. "Deseo que los espectadores se lleven la sensación de lo única que es la vida. Algunas veces damos por sentado la vida y a veces una película nos puede hacer recordar lo volátil que es, lo frágiles y efímeras que son las cosas, pero al mismo tiempo, lo mágicas que son. A veces una historia nos hace dar cuenta de la belleza que nos rodea, la gente que amamos y del milagro que nos conecta a todos", resume el director.