Hula girls es el primer estreno cinematográfico de Mediatres Estudio. Escrita y dirigida por el joven japonés de origen coreano Lee Sang-il.
Esta película, basada en unos hechos reales acontecidos en Japón y que influyeron decisivamente en la historia de este país, ha sido reconocida en numerosos festivales internacionales y triunfadora en los premios de la Academia del Cine japonesa (mejor película, director, guión y actriz secundaria), además de ser la candidata elegida para representar a su país en la carrera hacia los Oscar®.
Hula girls es una comedia familiar en torno al heroísmo de unas mujeres que desafían las anquilosadas normas de la sociedad japonesa.
Notas de producción
1965 (Año 40 de la época Showa): el contexto histórico
En 1965, el año en que Kimiko, Sanae y las otras chicas descubren la danza hula, los Estados Unidos empezaba a bombardear el norte de Vietnam en febrero y en septiembre se iniciaba la guerra entre India y Pakistán. El número de habitantes de Japón rondaba los 98 millones, y la media de edad era de 67,24 años para los hombres y 72,92 años para las mujeres. Mientras la madre de Kimiko se las arregló para enviarla al instituto, Sanae tuvo menos suerte y tuvo que trabajar en la mina viendo como se le ennegrecían las uñas. Durante este año, el porcentaje de estudiantes nacionales que llegaron al instituto superó el 70% y, por primera vez, el número total de estudiantes universitarios sobrepasó el millón. En el mundo de la moda, la minifalda inventada por Mary Quant fue un éxito en todo en mundo al igual que el tema "Satisfaction" de The Rolling Stones.
De la minería a la danza hula
La cuenca minera de Joban, que se extendía desde el norte de la prefectura Ibaraki hasta la de Fukushima, fue explotada por primera vez a finales de la era Edo, y vivió su segunda época dorada en 1950 debido a los pedidos especiales de abastecimiento para la Guerra de Corea. Ya en 1953 había 130 minas en funcionamiento que daban empleo a 16.000 personas y producían 3,6 millones de toneladas de carbón al año. La mina de carbón Iwaki, donde la Joban Coal Mining Company concentraba la mayor parte de su actividad, estaba plagada de manantiales termales, lo que no sólo hizo empeorar las condiciones de trabajo, debido a las altas temperaturas y la humedad, sino que implicaba grandes costes adicionales para extraer el agua. Se calcula que por cada tonelada de carbón que se extraía, se bombeaban 40 toneladas de aguas termales. Una parte de esta agua ayudaba a abastecer el complejo de aguas termales Yumoto, pero la inmensa mayoría era vertida a los ríos cercanos.
Con la llegada de la revolución energética, la Joban Coal Mining Company anunció en 1962 la intención de reducir su plantilla en 2.000 personas. A fin de construir una industria regional que sustituyera a la decadente industria minera, la compañía decidió aprovechar la gran cantidad de manantiales termales de la zona para adentrarse en la industria del entretenimiento. En 1964 se constituyó la Joban Yumoto Hot Springs Tourism Co., Ltd. y el año siguiente se abrió la Joban Music Dance Academy. El Parque Hawaiano Joban abrió sus puertas el 15 de enero de 1966. Las previsiones de asistencia de público eran de unas 1.000 personas entre semana y 3.000 los fines de semana y festivos. Pero el recinto se convirtió en toda una sensación que atrajo a 1,5 millones de visitantes al año, todo un precursor de la cultura del centro de salud que proliferó en todo Japón. En 1990, cambió el nombre a Spa Resort Hawaiians y continúa evolucionando aunque se mantiene como manantial termal integrado en la estructura social de la región.
Ichizan Ikka: una familia y una mina
En los pueblos mineros hay un dicho: "ichizan ikka". Debido a que trabajar en el sector minero siempre ha resultado muy peligroso, las palabras "Una mina, una familia" eran utilizadas para inspirar la idea de todo el mundo uniéndose para perforar una sola mina. La nueva empresa también se emprendió con este espíritu de "Una mina, una familia". Los empleados, bailarinas y miembros de la banda eran antiguos trabajadores de la mina y sus familiares. Nadie había bailado hula anteriormente, pero todos entrenaron duro para preparar la apertura del recinto.
La profesora Hayakawa: el personaje encarnado por Yasuko Matsuyuki
Kaleinani Hayakawa fue la mujer que enseñó a las bailarinas en la Joban Music Dance Academy. Hayakawa había bailado ballet desde pequeña, pero en 1956 viajó a Hawai y allí fue donde aprendió la danza tradicional polinesia, y regresó en 1962 para profundizar más en su entrenamiento. En 1965, se convirtió en profesora de la Joban Music Dance Academy donde supervisó el aprendizaje, la dirección y la coreografía del espectáculo de danza hula en el Parque Hawaiano Joban durante 32 años. Paralelamente, abrió su propia escuela, la Hayakawa Dancing School (el primer estudio de danza hula en Japón) en 1976, enseñó hula en varios seminarios culturales y continúa activa utilizando la danza hula como punto de encuentro y entendimiento entre la cultura de Japón y la de Estados Unidos. Hayakawa, una figura clave en el actual auge de la danza hula que cuenta con unos 500.000 seguidores en Japón, todavía es consejera en la Joban Music Dance Academy.
Los orígenes de la danza hula
Hula es el nombre con que se denomina a la danza y música tradicional de Hawai. En Japón, se ha llamado durante mucho tiempo "danza hula", pero hoy en día se ha estandarizado como simplemente "hula". Los orígenes de la danza hula no son muy claros, pero se cree que se representaba como parte de las ceremonias religiosas en honor a los dioses. Debido a la ausencia de lenguaje escrito, según las fuentes, la danza hula se utilizaba para difundir ideas como el respeto por la naturaleza y las revelaciones divinas a la posteridad. Aunque los hawaianos habían practicado la danza hula durante siglos, los misioneros cristianos que llegaron a Hawai en el siglo XVIII prohibieron este baile, aduciendo que era una danza pagana. A finales del siglo XIX, los reyes Kamehameha V y Kalakaua fomentaron las artes tradicionales y la danza hula resurgió. Hoy en día, el atractivo de la espiritualidad del hula y la danza en sí misma la han llevado a ser conocida a nivel internacional, con unos 500.000 seguidores solo en Japón.
El diseño de producción: reproducción exacta de la época
El diseñador de producción, Yohei Taneda, buscaba la manera de combinar dos espacios muy contrastados, un pueblo minero y Hawai, bajo la estética del año 1965. Así, las viviendas de los mineros y la casa "tiki" (casa polinesia de tejado triangular construida sobre el escenario del Parque Hawaiano) se parecen, mientras que la gigantesca pila de carbón descartado evoca al cono volcánico Diamond Head de Honolulu. La producción descartó el uso de materiales de uso común como son el aluminio o el césped artificial, que no existían en 1965, y enfatizó el uso de la madera y otros materiales naturales, recreando fielmente el Hawai construido en medio de la ciudad minera.
Después de la apertura del Parque Hawaiano Joban
Hay películas y libros donde se pueden encontrar escenas ligadas a los mineros y al Parque Hawaiano Joban. Es el caso del film Hakuchu dodo (1968) de Yoshitaro Nomura, protagonizado por Kiyoshi Atsumi (el protagonista de la saga de Tora San).La historia se centra en personajes de origen minero. Yuki, una de las protagonistas, es la superviviente del suicidio de toda su familia después de la muerte de su padre por el derrumbamiento de la mina; y hay un detective novato que está enamorado de ella, cuya hermana trabaja de bailarina en el centro deportivo de Joban, y que también trabajaba de minero en Ibaraki. En Scrap Collectors (1968) de Tomotaka Tasaka, protagonizado también por Kiyoshi Atsumi, el personaje proviene de una familia minera cuyo padre y abuelo murieron por el derrumbamiento de la mina. Aquí se crea una villa turística llamada "Black Diamond Paradise" en una antigua mina.
La danza en el film
Todas las actrices tuvieron que someterse a un intenso entrenamiento durante tres meses antes de empezar el rodaje del film. Yasuko Matsuyuki encarna a Madoka Hirayama, una bailarina del prestigioso grupo teatral musical SKD (Shochiku Kageki-dan) que aprendió a bailar hula en Hawai y que viaja a la región desde Tokio. Ataviada con sus elegantes vestidos de los años 60 comprados en la gran ciudad y su sofisticado peinado, Madoka se pasea de manera altiva por la nada estilosa y tiznada ciudad, a la vez que es capaz de tomarse unos sakes con los mineros en la taberna del barrio. La oportunidad de aprender de esta mujer tan refinada entusiasma a las hijas de los mineros. Lideradas por Yu Aoi, el elenco de chicas que conforman el coro de baile hula (las flores que crecen en la mina de carbón) también se sometieron a un duro entrenamiento para exhibir su gran destreza en el baile en el espectacular número final.
El director Lee Sang-il descubre el encanto de las actrices
Desde 69 (protagonizada por Satoshi Tsumabuki y Masanobu Ando) hasta Scrap Heaven (protagonizada por Joe Odagiri y Ryo Kase), el director Lee Sang-il se ha ganado una gran reputación gracias a su trabajo con protagonistas masculinos. En Hula Girls, se adentra por primera vez en los retratos femeninos. Ha contado para ello con tres actrices principales (Yu Aoi, Yasuko Matsuyuki y Sumiko Fuji) que representan cada una a su respectiva generación. Obtiene de ellas unas interpretaciones de gran fuerza escénica en las que dejan su vulnerabilidad al descubierto. El reparto femenino se ve respaldado por Etsushi Toyokawa, Katsumi Takahashi e Ittoku Kishibe, veteranos actores que se encargan de retratar la lucha -y vitalidad- de estos hombres atrapados en un tiempo de cambios en que la ciudad intenta reactivar su economía.
El equipo técnico
El contraste entre el extravagante mundo de la danza hula y la tiznada ciudad minera de 1965 es dibujado vívidamente y en profundidad a partir del proceso conocido como "bleach bypass" por uno de los directores de fotografía más reconocidos de Japón, Hideo Yamamoto, quien ha trabajado también en Hana-bi, Flores de fuego (Takeshi Kitano, 1997), Ichi the Killer (2001) entre otros films de Takashi Miike, y The Grudge, la maldición (Takashi Shimizu, 2004). El experto diseñador de producción Yohei Taneda, entre cuyos trabajos destacan Hana and Alice (Shunji Iwai, 2004), las dos entregas de Kill Bill de Quentin Tarantino, e Innocence: Ghost in the Shell 2 (Mamoru Oshii, 2004), recrea fielmente la época, desde las viviendas de los mineros hasta el Parque Hawaiano Joban durante su inauguración, prestando una gran atención a los detalles. La banda sonora original ha sido compuesta por Jake Shimabukuro, un virtuoso del ukelele de origen hawaiano, que con Hula Girls ha accedido por primera vez a crear la música para una película. Este grupo de artistas internacionales son los encargados de contar la historia del origen de la danza hula en Japón, baile que está actualmente experimentando un auge sin precedentes.
Ficha artística
Yasuko Matsuyuki - Madoka HirayamaUna
Etsushi Toyokawa - Yojiro Tanigawa
Yu Aoi - Kimiko Tanigawa
Ittoku Kishibe - Norio Yoshimoto
Sumiko Fuji - Chiyo Tanigawa
Eri Tokunaga - Sanae