El tema de Un rockero de pelotas, de segundas oportunidades bullía entre los cineastas y el reparto. "Un rockero de pelotas es una comedia de personajes, conmovedora, acerca de un tío que tiene una segunda oportunidad, que para él es por derecho propio y que constituye su sueño de toda la vida", afirma el productor Tom McNulty, que ha desarrollado el proyecto con su socio de 21 Laps Entertainment, el destacado realizador Shawn Levly, director de Noche en le museo y Doce en casa.
"Es una historia de alcanzar la mayoría de edad, pero en este caso para un batería de rock con 41 años, al que ya se le ha pasado su momento", dice Rainn Wilson. Junto al tema de segundas oportunidades, añade el actor, se encuentra el sueño universal de ser una estrella de rock. "Todo el mundo, incluso las estrellas de la pantalla, desean formar parte de una banda de rock (y viceversa). Siempre ha sido mi sueño".
"Yo formé parte de la peor banda de rock en el instituto", comenta Wilson sobre su propia experiencia de aspirante a rockero. "Éramos malísimos".
Si alguien ha necesitado alguna vez una segunda oportunidad, ese es Fish. El director Peter Cattaneo, que estuvo detrás del éxito de la independiente Full Monty, destaca que el personaje "sufre el golpe más grande que una persona puede padecer, perderse la gran oportunidad de su vida por un pelo".
"Fish se ha quedado colgado en la adolescencia debido a que nunca ha superado el momento de su vida en el que perdió su sueño", cree Ryan Jaffe, que escribió el argumento de la película. "Se encuentra en un sitio bastante oscuro, y unirse a A.D.D. constituye el último suspiro antes de madurar. Tropieza con esta increíble segunda oportunidad para convertir su sueño en realidad".
"Ir al cine y ver cómo se despliega la historia de Fish es un deseo hecho realidad", continúa diciendo Jaffe. "Te sientes como si fueras parte de un sueño durante dos horas". Christina Applegate, que interpreta a Kim, la madre del cantante de A.D.D., Curtis, (y que se convierte en un potencial interés amatorio para Fish) agrega: "Creo que todo el mundo desea una segunda oportunidad. La gente puede identificarse y disfrutar con películas acerca del espíritu y la redención humanos".
Dado que el tema central de Un rockero de pelotas va de "lo que pudiera haber sido" y las segundas oportunidades, no es casualidad que el ex-batería de los Beatles, Pete Best, tenga un papel de reparto en la película. Best es conocido por haber sido el primer batería del gran cuarteto, se unió al grupo en 1960, sólo para ser despedido dos años más tarde, cuando The Beatles estaban a punto del super estrellato (Best en la actualidad tiene su propia, y exitosa, banda).
Aún cuando los cineastas señalan que Un rockero de pelotas no es la historia de Best, su vida sí que tiene paralelismos con la historia de ficción de Fish. Por tanto, Best fue invitado a aparecer dando réplica a Wilson en una escena clave al principio de la trama. Best leyó el guión y, apreciando el humor que contenía y los personajes, estuvo de acuerdo en interpretar el papel.
Pero antes de conseguir la participación de Best, incluso antes de que tuviera lugar la elección del reparto, los productores Tom McNulty y Shawn Levy, de 21 Laps Entertainment, con mucho cuidado se pusieron a desarrollar Un rockero de pelotas. McNulty puso a trabajar a Maya Forbes y Wally Wolodarksy en el guión. Los guionistas, cuya obra incluye un trabajo en "Los Simpson", aportaron verisimilitud al proyecto, además de muchas risas.. "Han crecido en el negocio del rock y les encanta", dice McNulty.
Mientras continuaba el trabajo sobre el guión, Cattaneo subió a bordo como director. Rainn Wilson siempre ha sido un fan de la película de Cattaneo Full Monty, y se mostró encantado de que Cattaneo se hiciera con los mandos de Un rockero de pelotas. "Creo que lo que Peter consiguió con Full Monty es algo notable", afirma el actor. "Parece algo totalmente real, como si estuvieras integrado en este pueblo inglés de clase trabajadora y te embarcaras en la situación de estos personajes. Cuando nos reunimos por lo de Un rockero de pelotas, inmediatamente me di cuenta de que poseía el humor y el tono que requería la película, y desde entonces estamos en esta enorme montaña rusa".
Lo primero y más importante para los responsables de la película fue encontrar su Fish: Rainn Wilson. "Queríamos que Fish fuera un personaje reconocible", cuenta Shawn Levy, "un protagonista narrable que se desata, que se convierte en la versión soñada de sí mismo. Rainn posee esa vibración contenida, pero además me sedujo como alguien con el que los espectadores disfrutarían cuando se desquiciara".
Wilson se sumergió en el personaje y en la historia, del que dice que "posee la combinación perfecta de buena diversión de rock n roll y mucho corazón. Es una odisea épica para un tío que pasa de rockero a agente de seguros y de ahí a un dios renacido del rock".
Si Fish es el prototipo de tipo duro del rock, su parte opuesta sería Curtis, el corazón y el alma de A.D.D. y el cantante de la banda. Los dos compañeros de grupo, a pesar de la distancia generacional, crean un lazo de afecto. "Curtis es algo introvertido", dice Geiger de su personaje en la pantalla. "Está en su propio mundo, componiendo canciones y cantando, pero sin pasárselo bien en realidad. Fish le ayuda a salir de su concha".
La capacidad de Curtis para desarrollar habilidades sociales facilita un intento de relación con Amelia, la bajista de A.D.D. Pero el verdadero amor nunca resulta sencillo, especialmente en una banda. La dinámica interior de la banda y los saltos generacionales intrigaban a Emma Stone, que interpreta a Amelia. En Un rockero de pelotas, al batería de 40 años le gusta salir todas las noches y vivir el estilo de vida de estrella del rock, mientras que los chicos sólo quieren irse a casa y descansar después de cada actuación. "Es una idea divertida y que atraerá a una amplia gama de espectadores", afirma Stone. "Si eres un chico, pensarás que Un rockero de pelotas es una película de rock divertida con un tío majo [Geiger] y un tío mayor raro aporreando su batería. Si eres adulto, pensarás, jo, tío, sé por lo que está pasando Fish. Es una historia inspiradora para cualquiera que haya tenido un sueño y le pareciera inalcanzable, pero que quizás no lo fuera".
El cuarto miembro de A.D.D. es el sobrino de Fish, Matt, que hace de bajista del grupo. Al igual que sus compañeros de banda, Matt pasa por grandes cambios después de que su tío entre en escena. "Matt es tímido y solitario", dice Josh Gad acerca de su personaje. "Gracias a Fish, Matt descubre una nueva faceta, y es capaz de enfocar su energía en algo productivo, como su música".
También en la interpretación de papeles claves tenemos a Jeff Garlin, el cuñado de Fish, que contempla el ascenso de Fish con admiración y sorpresa; Jane Lynch como la hermana molesta de Fish; Jason Sudeikis como el obsequioso hombre de la compañía y que se convierte en el manager de A.D.D.
Como podrán adivinar en una película titulada Un rockero de pelotas, la música era un elemento esencial. Cattaneo, quien afirma que fue la posibilidad de que la película incorporara muy buena música lo que le llevó al proyecto, insistió en disponer de la música perfecta. A este fin, todos los temas, que abarcan la vibración de banda de garaje de A.D.D. y el sonido power-rock, heavy metal de Vesuvius, tenían que ser originales.
Se encomendó al compositor Chad Fischer y al supervisor musical Patrick Houlihan la formidable tarea de hacer mover a Un rockero de pelotas, con Fischer haciéndose cargo de la mayoría de las composiciones. "El sonido de A.D.D. tenía que ser fresco y auténtico", destaca Fischer. Houlihan añade: "Es como si Fountains of Wayne se encontrara con Ben Kweller con algunas influencias de The Cars y Weezer."
Fischer y Houlihan, de manera similar insistieron en la autenticidad del sonido de Vesuvius. El éxito distintivo del grupo, "Promise Land", es un gran himno de rock que además refleja los golpes emocionales y temáticos de la película acerca de segundas oportunidades. "Necesitábamos conseguir una canción que [en la película] se convirtiera en la canción de heavy metal más grande de los ochenta y parte de los noventa, que pusiera a Vesuvius en el terreno de Guns n Roses,", dice Fischer. Otros potenciales éxitos de la banda sonora de Un rockero de pelotas son "Bitter" y "Tomorrow Never Comes".
Siguiendo con el deseo de los responsables del film de combinar risas con verisimilitud, a Wilson, Stone y Gad se les asignaron instructores personales para que los prepararan para interpretar las piezas musicales en el escenario. Según el productor Tom McNulty, la formación de los personajes realmente dio sus frutos. "Rainn, Emma, Josh y Teddy se convirtieron en una banda de verdad" nos cuenta. "Ellos eran A.D.D., con Teddy en la guitarra solista y cantante, Emma tocando las líneas del bajo, Josh a los teclados, y Rainn a la batería".
La formación de Wilson, a cargo del veterano batería Stuart Johnson, fue especialmente intensiva. Sus lecciones comenzaron con el aprendizaje de algunos ritmos básicos de bandas como AC/DC y Smashing Pumpkins. De igual importancia a la consecución del nivel necesario de musicalidad, dice Johnson, fue que Wilson proyectara una cierta actitud detrás de la batería, lo más grande en la vida, pelo al viento, escupiendo whisky y haciendo malabares con los palos. "Queríamos transformar a Rainn en Keith Moon [el legendario batería de Los Who]", relata Fischer. "Moon era un animal total detrás de la batería. Era una bomba, y rompía muchas normas precisamente porque tocaba demasiado. Pero él conseguía que funcionara de modo perfecto".
Un punto y aparte para todos en la producción fue el rodaje de la enorme y llena de clímax escena del concierto, en la que A.D.D. comparte cartel con los rockeros superestrellas Vesuvius. La iluminación circundando el estadio y las legiones de fans/extras gritando, hizo que la sensación fuera la de un concierto de verdad. Para los actores, muchos de los cuales, como ya nos han contado, probablemente tuvieran sueños ocultos de estrellato musical, era como una fantasía hecha realidad. "Es increíble ponerse a tocar y simular que eres una estrella de rock", cuenta Wilson. "Tuvimos que tocar en grandes estadios y enrollarnos de verdad con las canciones".
Al igual que con la música, otra cuestión crítica fue conseguir el vestuario perfecto. El ecléctico vestuario de Fish incluye un kimono, botas de vaquero, pantalones de cuero, muñequeras, bandas para el pelo, brillos, lamé, diseños de leopardo, y algunas veces nada de nada (ved los detalles en el sitio web www.IOnlyDrumNaked.com). Para la época pre-estrella de Vesuvius, hacia 1980, "la década que el tiempo olvidó", bromea el diseñador de vestuario Christopher Hargadon los mercadillos de rastro fueron una fuente clave de inspiración. "El look de los chicos debía dar una sensación casera, sencilla, no muy buena, como si la ropa se la hubiera cosido sus madres", cuenta Hargadon. Para el Vesuvius contemporáneo tipo dioses del rock, la situación exigía un atuendo de clase superior. "Una banda de gran éxito tiene su propio diseñador, lo que crea un look diferente y personal", explica Hargadon. Cattaneo agrega, entre risas: "¡No sé si Christopher se encontró esos pantalones de piel de leopardo, pero eran perfectos!".
Para la artista de maquillaje Elizabeth Gruszka, "todo debía rondar alrededor de los ojos
y el pelo". Y el sudor, en cantidades, puesto que la manera de tocar la batería de Fish se caracterizaba por golpes fuertes, con una actitud de a tocar a tope, a la cara, y prodigiosas cantidades de transpiración. Para conseguir el necesario "look mojado", Wilson pasó por una interminable sesión de lo que Gruszka denomina "tortura de sudor rokero". Para las partes sencillas de bañado en sudor, bañar a Wilson con una corriente uniforme de vapor de agua era suficiente. Pero para las escenas en el escenario, Gruszka empleó un producto de simulación de sudor; la vaselina mezclada con agua pulverizada conseguía el efecto, "es hermoso porque la vaselina forma las gotas de sudor", nos cuenta ella.
"Mi corazón estaba con Rainn", añade Gruszka. "Imagínate que estás atrapado en un aguacero durante horas y constantemente te están echando
bueno, cualquier cosa que esté a mano. Imagínate que esto sucede a diario y durante horas. Te sentirías muy, muy cansado y débil. Pero Rainn se comportó como un auténtico legionario".