Cinco extraños en Filadelfia empiezan el día con la rutina habitual. Van a un edificio de oficinas, entran en un ascensor y se ven obligados a compartir un espacio reducido con desconocidos. Nadie mira a nadie, sólo estarán juntos unos momentos. Pero lo que hasta ahora parece un hecho casual, no tiene nada de coincidencia cuando la cabina se detiene. El destino acaba de llamar. Estas cinco personas verán cómo sus secretos salen a la luz y deberán rendir cuentas por lo que han hecho.
Lenta y metódicamente, los cinco extraños pasan de estar en una situación molesta a sentirse impotentes y a catar el terror más profundo. A cada uno de ellos le empiezan a ocurrir cosas terribles y la sospecha pasa de uno a otro, ¿quién es el culpable de todo esto? Hasta que se enteran de la tremenda verdad: uno de ellos es el Diablo en persona.
Mientras desde el exterior intentan liberarlos en vano, los ocupantes del ascensor se dan cuenta de que la única forma de sobrevivir es enfrentarse a la maldad que les ha llevado hasta aquí.