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Los pitufos cartel reducidoLos pitufos(The smurfs)
Dirigida por Raja Gosnell
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La película está protagonizada por Neil Patrick Harris, Jayma Mays, Sofia Vergara y Hank Azaria, este último, como Gargamel. Dirigida por Raja Gosnell. Producida por Jordan Kerner. Con guión de J. David Stem y David N. Weiss, y Jay Scherick y David Ronn. Argumento de J. David Stem y David N. Weiss. Basada en los personajes y obras de Peyo. Los productores ejecutivos son Ezra Swerdlow, Ben Haber y Paul Neesan. Director de fotografía, Phil Méheux, BSC. Dirección artística de Bill Boes. El montaje es de Sabrina Plisco, A.C.E. Los efectos visuales de Sony Pictures Imageworks Inc. El supervisor de efectos visuales es Richard R. Hoover. El diseño de vestuario es de Rita Ryack. La música de Heitor Pereira.

En 1958, el artista belga llamado Pierre "Peyo" Culliford creó a los pitufos para un libro de comics e inmediatamente se volvieron populares, generando una ola de cartas al editor pidiendo más; y en los siguientes 50 años se convirtieron en todo un fenómeno, cobrando vida en comics, libros, series de televisión, películas, vídeo juegos, espectáculos en directo y figuras (que vendieron más de 300 millones). El atractivo de los personajes ha superado generaciones, y los niños que crecieron con los pitufos -incluyendo los dibujos animados de los sábados por la mañana- luego fueron padres y presentaron los pitufos a sus propios hijos.

Según el productor Jordan Kerner, es fácil ver por qué los pitufos han entretenido a la gente de todo el mundo durante varias generaciones. No es sencillamente que sean adorables, también representan a la humanidad en su mejor expresión. "Los pitufos son la analogía de una nación", afirma Kerner. "Enfatizan la familia y la importancia de la cooperación. Y lo que es más importante, siempre ven lo mejor en los demás. Los pitufos realmente se preocupan los unos por los otros".

Ahora, los pitufos se aventuran por primera vez fuera de su aldea y aterrizan en la gran pantalla, en la película de animación de Columbia Pictures y Sony Pictures Animation, LOS PITUFOS. "Es una película fuera del entorno habitual de los pitufos", asegura Raja Gosnell, quien está a cargo de la dirección. "Hemos cogido su pitufesco código de vida y lo hemos contrastado con la vida actual, en la ciudad de Nueva York".

La historia de la aventura de Kerner de llevar a los pitufos a la gran pantalla se remonta a una reunión durante un desayuno en 1980 con el legendario productor ejecutivo de la NBC, Brandon Tartikoff. Tartikoff sugirió a Kerner que leyera una serie de libros basados en los pitufos, porque Tartikoff estaba pensando en desarrollarlo para una serie de televisión. Kerner se sintió atrapado desde el primer momento. Por supuesto, Tartikoff llevaría a "Los Pitufos" a la mañana de los sábados con la serie de Hanna-Barbera de 256 episodios a lo largo de más de ocho años.

En 1997, Kerner envió la primera de una serie de cartas a Lafig, el agente de licencias de la marca Pitufos, donde expresaba su interés en hacer una película. Y en 2002, después del borrador de la emotiva y exitosa adaptación de Kerner del clásico de la novela de E.B. White, "La telaraña de Carlota" (Charlotte's Web), los herederos de Peyo supieron que los pitufos estarían en buenas manos.

Véronique Culliford, la hija de Peyo, dice que su padre dotó a su obra de un atractivo universal. "Los pitufos son todos muy parecidos, pero cada pitufo es único", explica. "Todos nos podemos reconocer en alguno de los pitufos. Hay un pitufo para cada personalidad. Son muy amables y sociales. Tienen todas las cualidades que a la gente le gustaría poseer".

Como señala Culliford, algunas cosas cambian en la vida, pero los pitufos son siempre un punto de referencia. "Las historias siguen teniendo su popularidad a través de generaciones porque la gente sigue siendo gente. Continuamos siendo quiénes somos y los pitufos nos reflejan en nuestras vidas. Podemos adaptarnos con los años a diferentes tecnologías, pero lo que somos permanece inamovible".

Culliford y su familia quisieron hacer una película de los pitufos durante muchos años. Cuando fue evidente que Kerner compartía su visión y entusiasmo, Culliford vio algo mágico en ello. "Jordan fue la primera persona que conocimos que quería hacer la misma película de pitufos que nosotros", afirma la heredera.

Es la culminación de un largo sueño para Culliford, que creció con la creación de su padre. "Los pitufos llegaron en 1958, el año de mi nacimiento", cuenta Culliford, "así que los pitufos han sido parte de mi vida desde el principio. He vivido siempre con los pitufos. Mi padre trabajaba en casa, y cuando volvía del colegio podía ver pitufos por todos lados, y hablábamos en pitufo. Para mí es natural tener a los pitufos alrededor".

Kerner sintió que esta película era la forma perfecta para contar una nueva historia de los pitufos, la cual fue rodada íntegramente en la ciudad de Nueva York en sitios tan icónicos como el Central Park y Belvedere Castle, y también FAO Schwarz, el Russian Tea Room, el Rockefeller Center y el Prospect Park de Brooklyn.

Kerner agrega que la habilidad y el suave toque del director Raja Gosnell -sin mencionar sus manos- para combinar acción real con personajes animados generados por ordenador en filmes como Scooby-Doo y Un chihuahua en Beverly Hills (Beverly Hills Chihuahua), lo convirtieron en la perfecta elección como director. "Solo tengo que decir que Raja es una de las personas más inteligentes, intuitivas, amables y maravillosas con las que se puede trabajar", asegura. "Todos los días eran mágicos. Todos queríamos hacer una película de la que nos sintiéramos orgullosos, y ayudar a ejecutar la visión que él tenía de todos esos personajes".

La familia quería preservar el legado de los pitufos de la forma más fiel posible, y así lo hizo Kerner. "Lo más importante", agrega Culliford, "es que los pitufos sigan siendo los pitufos. Dejan su aldea por primera vez, eso es excitante".

Hay muchas preguntas que necesitan ser contestadas en la mitología de los pitufos y Kerner ve que podrían ser clarificadas en el marco de una franquicia. ¿Quiénes son los pitufos en realidad, y de dónde vienen? ¿Cómo apareció Gargamel y por qué es un tipo tan amargado? ¿Por qué creo a Pitufina?

Una de las muchas tradiciones es presentar nuevos pitufos. Los realizadores tuvieron la oportunidad de imaginar tres pitufos nuevos para la película: Pitufo Nervioso, Pitufo Loco y Pitufo Valiente, este último asumiendo un papel protagonista.


Acerca de Los Pitufos
Con 100 pitufos diferentes (más o menos), dando vueltas por la aldea pitufa, tener a todo el mundo contento puede ser una tarea difícil. Tienes que tener paciencia, cerebro, madurez... y tal vez barba. Como es el caso del sabio líder de los pitufos, PAPÁ PITUFO, que representa de verdad todas esas cualidades y sabe cómo manejar a sus pitufos. Papa Pitufo puede ser hallado con frecuencia con su libro de conjuros mágicos en su seta, elaborando pociones para proteger a sus pitufos del malvado hechicero Gargamel. Cuando la magia de Papa Pitufo predice un desastre inminente, se encontrará frente al mayor reto de su vida: seguirle los pasos a Gargamel y mantener a salvo a los pitufos y ¡todo ello en la ciudad de Nueva York!

La leyenda en el mundo de la comedia, Jonathan Winters, da su voz a Papá Pitufo. "Papa Pitufo es mayor y más sabio. Si no tiene todas las respuestas, ciertamente tiene la mayoría", asegura Winters.

"Papá Pitufo es el líder, pero lo hace de tal manera que todo es trabajo en equipo", explica Winters. "Con él a cargo, ningún pitufo es dejado atrás".

Winters tiene su propia historia con la franquicia: ha sido la voz de Abuelo Pitufo en la serie de animación de Hanna-Barbera.

Hay algo especial en PITUFINA. Ya sea su belleza, su suave voz, su encantadora personalidad o sencillamente el hecho de que es la ÚNICA chica entre 100 chicos, lo cierto es que hace que todos los pitufos se vuelvan completamente gagás. Originalmente creada por Gargamel para ponerle una trampa a los pitufos, la magia de Papá Pitufo la salvó y la transformó en una pitufa de verdad. Lista y espabilada, ha demostrado la fuerza de su puño cuando ha tenido que enfrentarse con su creador.

Da la casualidad de que los realizadores pusieron la mira en Katy Perry para el papel antes incluso de que dijera una sola línea de su diálogo. "Hicieron un test a ciegas donde pusieron ciertas voces de anteriores entrevistas y las asociaron a los personajes", cuenta Katy. "Les gustó mi voz sin saber siquiera quién era y luego se enteraron de que era yo, pensaron que funcionaría. ¡Mi nombre fue solo un plus!"

Katy se sintió identificada con el personaje que interpreta. "Me pidieron que le agregara mis matices: así que tuve la oportunidad de ser atrevida y mona, un poco traviesa y graciosa", relata la cantante. "Es realmente interesante, porque pude ser parte de la creación de su personaje. Es muy divertido, es básicamente mi voz pero... como si hubiera tomado demasiado café".

Katy explica que la transición entre famosa cantante y actriz de doblaje fue un paso hacia delante lógico. "Utilizo mi voz todos los días y a veces me siento bastante caricaturesca, en la forma en que me presento a mí misma. Así que fue una progresión, algo que para mí ha resultado completamente natural".

Si no fuera por la mala suerte, PITUFO TORPE no tendría ninguna clase de suerte, donde sea que vaya, sin duda la calamidad va con él. Con dos pies izquierdos y unas orejas y gorro desproporcionado, las buenas intenciones de Pitufo Torpe llenan de piedras el camino, y esta vez el camino que elige lleva a los pitufos a un nuevo y extraño lugar, la ciudad de Nueva York. Pero todo el mundo tiene un héroe en su interior, y cuando los demás pitufos lo necesitan, Pitufo Torpe demostrará que puede ser algo más que lo que dice su nombre.

La interpretación de Anton Yelchin como Pitufo Torpe es un poco diferente a la del Pitufo Torpe más conservador que todos los fans recuerdan. "Estoy familiarizado con el Pitufo Torpe de la serie de televisión, que tenía ese acento nasal sureño", cuenta el actor. "Volví a mirarlo y escucharlo, y luego Raja, Jordan y yo hablamos de ello. Entonces decidimos hacer a Pitufo Torpe más simple, un poco más dulce. Su voz tiene un tono más alto que mi voz hablada normal: está lleno de alegría, optimismo y entusiasmo por la vida. Pitufo Torpe no quiere arruinarle la vida a nadie, sencillamente es torpe y en realidad está bastante cansado de ser torpe".

"Pitufo Torpe es el corazón y el alma de la película", asegura Gosnell. "Su viaje es el más emocional. Es como un hermano menor del que todos se aprovechan -de alguna manera es el causante de todos los problemas- y que trata de encontrar su lugar en la gran familia pitufa. Anton tiene una voz increíblemente juvenil, una voz conmovedora, perfecta para nuestro pequeño Pitufo Torpe".

En todo pueblo hay un tonto, pero también en todo pueblo hay un FILÓSOFO. Excesivamente entusiasta y demasiado culto, es un poco ese "sabiondo" que en realidad no lo sabe todo. Pitufo Filósofo es por decisión propia la mano derecha de Papá Pitufo, y aunque a veces resulta un poco molesto con toda su palabrería de enciclopedia, es el pitufo que todos necesitan cuando Papá Pitufo no está.

Fred Armisen, conocido por sus personajes en el programa de televisión "Saturday Night Live", incluyendo al presidente Obama, afirma que Gosnell y Kerner son los colaboradores ideales. "Tienen muy claro lo que quieren del personaje", asegura Armisen. "Siempre es bueno trabajar con gente que le importa de verdad lo que está haciendo".

Ser un colaborador regular de "Saturday Night Live" hace que Armisen frecuentemente esté muy cerca de grandes estrellas. Para él, ¿quién es una estrella sin igual? "Jonathan Winters", afirma el cómico. "Estaba muy nervioso cuando lo conocí. Toda mi vida lo he visto en la televisión. Pero fue realmente estupendo".

Fácilmente distinguible por su falda escocesa, su aspecto rudo pero bien parecido y su acento escocés, PITUFO VALIENTE posee el coraje para enfrentarse a cualquier riesgo. Un tipo que primero pitufea y luego hace las preguntas, está dispuesto a precipitarse con rapidez en la aventura de sus amigos pitufos.

"Ha sido un honor ser el pitufo escocés", afirma el escocés Alan Cumming. "Fue una buena y graciosa responsabilidad: representar todas las cualidades pitufescas de mi país".

Cumming tuvo incluso la posibilidad de aportar algo de jerga escocesa a su parte: "Comencé a utilizar la palabra ‘numpty’, que significa idiota, como por ejemplo: 'Tú, estúpido 'numpty', gran 'numpty'. Yo solito estoy introduciendo el término 'numpty', no solo al idioma inglés, sino al mundo".

Pitufo Valiente fue creado para su papel en LOS PITUFOS. "Él es nuestro héroe de acción", explica Gosnell. "Es eternamente optimista y valiente, nuestro tipo duro está siempre preparado para ser el primero en enfrentarse a cualquier situación".

Cumming es conocido por su trabajo "subido de tono" -es decir, bastante arriesgado- en sus películas para adultos, pero es la primera vez que se viste de azul en la pantalla en un papel apto para todos los públicos. "Es divertido hacer una parte tan ligera, sencillamente algo gracioso", asegura Cumming. "Mi sobrina y mis sobrinos ahora son mayores, pero les encantaba, como cuando estuve en Spy Kids".

Cumming cuenta que actuar con la voz es una oportunidad única para un actor. "Es muy importante porque la voz es el único elemento humano del personaje. Cuando comienzas, no hay película, no hay animación y solo está tu voz para guiar el personaje. Lo disfruté bastante", apunta el actor. "A medida que creas el personaje tienes la oportunidad de probar diferentes ideas. Pitufo Valiente apareció muy rápido, es escocés pero con un acento más brusco que el que tengo habitualmente. A medida que avanzas te vas metiendo y encuentras el personaje".

A pesar de que los papeles se grabaron separados, darle la voz a un pitufo representó una especie de placa de honor para los actores. "Conocí a Katy Perry en una fiesta y fue muy gracioso conocer a alguien y poder decir, ‘Oh, tú eres Pitufina’ y que ella respondiera, ‘Oh, tú eres Pitufo Valiente’".

Antes de que nadie se haga la idea de que todos los pitufos son felicidad, luz y arcoíris hay que conocer a PITUFO GRUÑÓN. El pitufea y se levanta con el pie izquierdo... cada mañana. Odia la luz del sol, los arco iris le provocan náuseas y la felicidad lo hace infeliz. A pesar de todo, debajo de su gesto adusto y sus gruñidos tiene un corazón de oro... aunque probablemente también odie el oro.

"Los Pitufos son una franquicia mundial, también en español, así que en mi niñez los vi en los dos idiomas", cuenta George Lopez.

Lopez dice que para su papel sintonizó al cascarrabias que tiene dentro y subió el volumen hasta el nivel 11. "No me tomaba el café, elegía la peor hora de tráfico para ir al estudio, me aseguraba de tener mal aliento. Y además tengo una hija de 15 años, y solo eso hace que seas gruñón todo el tiempo. La primera vez que vi a Pitufo Gruñón, tenía los brazos cruzados, las cejas fruncidas, y pensé que era un triste reflejo de cómo me veo habitualmente".

Lopez ha doblado a numerosos personajes en el cine y para LOS PITUFOS vuelve a hacer equipo con el director Raja Gosnell (después de su colaboración en Un Chihuahua en Beverly Hills [Beverly Hills Chihuahua]). "Creo que el hecho de trabajar con la voz hace que a través de ella surja el alma", cuenta Lopez. Como todo personaje para la cámara, el papel no solo son las palabras escritas que entregan los guionistas, sino, como lo explica Lopez es: "La forma en que tú lo interpretas, como si estuvieras hablando con alguien, no es solamente leer un guión, estás conectando con el espectador".


Conoce a tu enemigo: Gargamel
Si lo feo tuviese un nombre, sería GARGAMEL. Si la obsesión tuviese un rostro, sería exactamente como el de Gargamel. Este malvado hechicero está devorado por todo lo pitufesco: es en lo único que piensa, es de lo único que habla, y lo único que siempre ha querido. Un cero en cuanto a magia y un -100 en el tema higiene, Gargamel está siempre maquinando intrincadas maneras de capturar a los legendarios pitufos para drenarles su "esencia": ¡el ingrediente clave para crear el más poderoso de los conjuros! Gargamel hará lo que sea para capturar a un pitufo, incluso perseguirlos a la ciudad de Nueva York, ¡todo para convertirse en el hechicero más poderoso del mundo!

Hank Azaria asume el papel del aprendiz de brujo. "Gargamel es malvado y está bastante orgulloso de ello", afirma Azaria. "Aspira dar el gran salto y pasar de ser un hechicero incapaz a ser un gran brujo. Por eso está obsesionado con los pitufos: necesita su mágica esencia azul para convertirse en alguien más poderoso".

Pero la relación de Gargamel con los pitufos no se explica tan fácilmente. "Creo que en realidad odia a los pitufos porque son una gran familia feliz y él está solo con su gato. Está motivado por un odio llano y antiguo. Es un personaje muy jugoso a muchos niveles".

Decantarse por las características vocales de Gargamel requirió de una combinación de diferentes enfoques. "Gargamel es muy teatral, no solo quiere ser un gran hechicero, sino que quiere ser venerado y que todos le consideren un genio. Quiere buena prensa", describe Azaria. "Tuvimos una larga conversación acerca de si debía sonar shakesperiano y engreído, como si fuera un viejo actor de teatro, o si deberíamos hacerlo más sarcástico en lugar de que gritara todo el tiempo. Pero finalmente, no puedes interpretar Gargamel sin gritar. No es posible. En el momento en que ve un pitufo tiene que perder la cabeza, si no, no es Gargamel".

Por supuesto, no era suficiente que Azaria sonara horrible, también tenía que verse espantoso. Para volverse lo suficientemente feo Azaria necesitaba varias horas de maquillaje. "Comenzaba con las orejas", relata el actor. "Gargamel tiene unas enormes viejas orejas y una gran vieja nariz y había que poner mucha pintura para que todo se viera parejo".

Entonces llegamos al cabello, pero Azaria facilitó el proceso, decidiendo afeitarse la cabeza. "El equipo aplicaba el extraño cabello tipo monje de Gargamel, luego las cejas y luego me ponían una inmensa dentadura postiza".

Esa enorme dentadura en ocasiones salía volando de la boca de Azaria durante alguna escena. "Al principio fue muy complicado", continúa. "Tuve que practicar mucho para poder hablar con ella. Y a veces salía despedida de mi boca en medio de alguna de las secuencias en las que más gritaba".

El socio criminal de Gargamel es Azrael, su gato. Y Azaria descubrió que no solo tenía que imaginar su relación con los personajes de la historia como un actor real, sino que también tenía que trabajar con un gato de verdad. "Quería que la relación con el gato fuera como el de un matrimonio mal avenido", explica Azaria. "Si le hablas al gato, tiene sentido. Y si el gato tiene como respuesta una actitud aburrida, es incluso más gracioso".

Cuatro gatos interpretan el papel, y en ciertas escenas, los realizadores decidieron emplear a un Azrael animado en CGl (de Tippett Studios). Azaria dice que aunque trabajar con animales requiere de mucha paciencia, la retribución vale el esfuerzo. "El gato verdadero incluso nos dio el perfecto maullido en cámara", concluye el actor.


Nuestro mundo
Cuando Gargamel y los pitufos llegan a la ciudad de Nueva York a través de la puerta mágica, entran en la vida de Patrick Winslow y su mujer Grace.

PATRICK WINSLOW es un joven ejecutivo de marketing de la empresa de cosméticos, Anjelou, establecida en la ciudad de Nueva York, y está a pocos meses de comenzar su propia familia. Todo le pone nervioso -incluyendo su próxima paternidad y su nuevo trabajo– y los nervios le van a jugar una mala pasada cuando inesperadamente los pitufos ¡aterricen en su vida!

Neil Patrick Harris interpreta el papel. "Patrick está casado y esperando un niño, es un ejecutivo tratando de triunfar en el mundo de los negocios, y teme constantemente perder su trabajo. Así que está pensando todo el tiempo en el trabajo y eso lo tiene a ambos, a él y su mujer, un poco preocupados acerca de su aptitud para ser un buen padre, o incluso que pueda estar presente para el nacimiento del niño, no solo física sino también emocionalmente".

"Cuando los pitufos llegan a su vida, tiene que comportarse con mucha paciencia, incluso de forma paternal con ellos, y es entonces cuando se da cuenta de que en su interior tiene el potencial para ser un gran padre", reflexiona Harris. "Grace es más naturalmente maternal a la hora de brindar su sabiduría a los pitufos, mientras que Patrick es un participante accidental que sufre un crecimiento y un cambio".

Trabajar con el director Raja Gosnell fue una experiencia satisfactoria y a la vez esclarecedora para Harris. "Raj ha hecho un gran trabajo; tuvo que manejar un montón de pequeñas cosas extrañas que sucedían al mismo tiempo. No solo tenías las cosas de siempre, como asegurarte de que los actores estuvieran en sus marcas y que la iluminación fuera correcta, también podía haber animales en la escena o posiblemente bolas con monofilamentos que en la última secuencia los pitufos llevarían de un lado a otro… Raj tenía que tener todo en la cabeza para que cuando se viera la película, nadie pensara en nada de todo eso, sino que sencillamente los pitufos fueran parte de nuestro mundo".

"Neil no solo es encantador y gracioso, sino que aportó muchos matices al personaje", asegura Gosnell. "Su personaje y Papá Pitufo tienen algunos momentos importantes juntos y él hace que esas escenas sean sorprendentemente emotivas. Y cuando recuerdas que Neil le hablaba a un pequeño cable cuando se rodaba, es una indicación de que Neil también estaba muy dispuesto. Una gran parte de la interpretación es responder a los otros actores, así que resulta bastante difícil trabajar junto a personajes que no están allí. Pero Neil se metió de lleno y abrazó la situación".

GRACE WINSLOW es una artista del mueble artesanal, un gran apoyo para Patrick y su esposa embarazada de cinco meses. Su marido está un poco nervioso con el nuevo bebé, el nuevo trabajo y las seis criaturas que han puesto su vida patas para arriba... pero la optimista Grace siempre está allí para ayudarlo a resolver las cosas.

Jayma Mays, que interpreta a Grace, ha visto los dibujos en la adolescencia, aunque sin muchas ganas. "A mi madre le encantaban, así que me hacía verlos con ella", se ríe Mays. "Hasta que se te meten bajo la piel, ¡siempre le decía que mis favoritos eran Gargamel y Azrael! Teníamos sábanas de los pitufos, vasos de los pitufos, tazas de bebé, lo teníamos todo. Pero en secreto yo era una fan –me encantaba la serie– pero estaba en esa edad en la que no quería admitir que me gustaba algo que mi madre quería que me gustara".

"Para Grace es emocionante que esas pequeñas criaturas hayan llegado a su mundo y su vida", explica Mays. "Los adora y le encanta su espontaneidad y su visión despreocupada de la vida, ella disfruta de que su propia vida haya saltado un poco por los aires. Es algo de lo que trata de convencer a Patrick: está bien divertirse un poco y que tu vida se desbarate. Y como están a punto de tener un bebé, toda su vida va a desbaratarse por un tiempo, y los pitufos los ayudan a que se preparen para ello".

Gosnell cuenta que el papel de Grace es sorprendentemente delicado. "Tienes que ser al mismo tiempo graciosa y emocional", cuenta Gosnell. "Ella fue la única actriz que nos transmitió y nos hizo creer ambas partes, sus dotes para la comedia son simplemente fantásticos, y también tiene una gran pasión y entusiasmo, lo que nos hizo creer que lo que estábamos viendo era real".

ODILE es la fuerte, bella y decidida dueña de la empresa de cosméticos mundial, Anjelou. Tiene un genio vivo y rápido, pero también cambia rápidamente de idea, y se convierte en una fuente de ansiedad en la vida de Patrick cuando le asciende y le nombra director de una nueva campaña de marketing para un nuevo producto... que se lanza en solo dos días. Esta directora general, un poco "diva", hará lo que haga falta para asegurar el éxito de su compañía, incluso invertir un poco de tiempo en un brujo mal encaminado que puede tener la clave de la próxima revolución en el cuidado de la piel.

Como Odile, Sofia Vergara deseó encontrar el equilibrio en el personaje y no estar desmesurada. "Quería que Odile fuera creíble pero también graciosa, fuerte y muy centrada en lo que quiere", cuenta Vergara. "Se trata de una mujer que está en lo que hace y se encarga de que todo el mundo alrededor de ella lo sepa".

Ella creció en los años 80 en Colombia y según cuenta: "Todo el mundo veía los pitufos, incluso mi hijo que ahora tiene 19 años, disfrutó de los pitufos cuando era niño".

Tim Gunn del programa de TV americano, Project Runway ,asume el papel de mano derecha de Odile. HENRI es el innovador teniente al mando de Odile que está siempre dispuesto a revolver el avispero, ¡especialmente cuando se trata de Patrick! (El personaje originalmente se llamaba Henry hasta que Neil Patrick Harris lo transformó en el sofisticado Henri.)

Gunn robó el espectáculo detrás de la cámara. La diseñadora de vestuario Rita Ryack recuerda: "Tim me pidió que mantuviera su vestuario en condiciones, porque deseaba lucir algunas de las prendas en la siguiente temporada de Project Runway. Me encantó la idea. Incluso llegó a no querer sentarse en su silla cuando estaba en el set, ¡porque no quería arrugar el traje! Eso sí que es un verdadero 'fashion victim'".

LOS PITUFOS también cuentan con algunos cameos que pueden dar rienda suelta a un verdadero Quién es Quién en el mundo de las personalidades más icónicas de la contemporánea ciudad de Nueva York. Para una escena en particular, el lanzamiento de un producto cosmético de Anjelou, era esencial que la fiesta fuera uno de esos eventos de Nueva York a los que todo el mundo tenía que asistir. Entre los asistentes estaban Joan Rivers, Liz Smith, Tom Colicchio, Olivia Palermo y Michael Musto. Cada uno de ellos asistió con su propio vestuario para que parecieran ellos mismos. Rivers, especialmente, fue una de las favoritas del equipo, cuando llegó, un poco antes de su hora, la producción se desvivió por encontrar la perfecta roulotte para ella. El productor ejecutivo Ezra Swerdlow estuvo encantado de compartir su espacio con la leyenda de la comedia.


De la aldea pitufa a la ciudad de Nueva York
Hasta esta película, los pitufos han sido representados en solo dos dimensiones. Llevarlos a un espacio dimensional animado por CG y nada menos que en 3D estéreo, fue un gran reto para los realizadores.

Comenzó en el set con el esfuerzo coordinado del director de fotografía, Phil Méheux, el director artístico de la película, Bill Boes, el supervisor de efectos visuales Richard R. Hoover, el supervisor de animación senior de SPI Troy Saliba, y la productora senior de VFX Lydia Bottegoni, de Sony Pictures Imageworks, para construir los decorados, iluminarlos y rodar la película de tal manera que las estrellas de tres manzanas de altura pudieran agregar después. El supervisor de efectos visuales 3D Rob Engle también estuvo a mano para asegurarse de que luego todo cobrara vida en 3D.

"En esta película había una cantidad asombrosa de partes que se movían", explica Gosnell. "Básicamente la dirección es mover a los personajes alrededor, y cómo se organiza la escena. En esta película teníamos que organizar escenas en las que seis personajes no estaban allí. Los actores tenían que interaccionar con nada y en ocasiones la cámara se tenía que mover siguiendo a algo que no estaba allí. Mi gran trabajo como director consistió en mantener el ojo en el premio, y hacer que todos se movieran en pos del mismo objetivo. Todos se comprometieron con la diversión y el reto del proyecto, y para mitad del rodaje, todos íbamos rapidísimo".

El equipo de Boes fue el responsable de la parte física de los decorados, incluido el apartamento de Nueva York de Grace y Patrick, las dos terceras partes de la réplica del Belvedere Castle y las mazmorras de Gargamel en el castillo. En realidad no hay mazmorras bajo el castillo, así que los realizadores construyeron la mazmorra ideal en un estudio.

La pieza central de la mazmorra de Gargamel es el pitufoextractor, la máquina que extrae la esencia de lo pitufos (si Gargamel alguna vez tuviera éxito y atrapara algún pitufo). "Él no tiene nada, así que construye el pitufoextractor con cosas que encuentra", explica Boes.

Para la secuencia de la batalla, cuenta Boes: "El castillo tiene varios niveles. Raja y yo queríamos que Gargamel aterrizara en un determinado nivel cuando bajara a pelear con los pitufos. Es como un asalto al castillo, con pitufos viniendo de todos lados para luchar contra Gargamel, que está en el medio. Tenía que transmitir la sensación de ser una batalla medieval".

Iluminar y rodar los decorados de Boes fue un gran desafío para Méheux, ya que seis de las estrellas solo existían en la mente (y más tarde, en el ordenador). "Porque, obviamente, los pitufos no estaban allí cuando rodamos, y es un gran trabajo de concentración imaginar lo qué hacían y cómo lo hacían", cuenta Méheux. "Teníamos que decidir qué tipo de luz queríamos sobre ellos y cómo se movería la cámara". Y no solo se trataba de entenderlo una vez. "Los pitufos se meten en todo tipo de situaciones: día y noche, dentro y fuera". Y todo eso hace que sea una película fotográficamente interesante pero pone muy alto el listón.

Para ayudar a iluminar el camino de los pitufos (y de sus animadores), Méheux y su equipo utilizaron modelos de tamaño real (eso es unos 19 cm de altura) para que ocuparan el lugar de los pitufos durante el montaje y los ensayos. "Entonces pudimos poner la luz en posición para que cayera adecuadamente. Los actores sabían dónde estarían los pitufos cuando fueran animados más tarde y entonces la dirección de las miradas coincidiría. Luego quitábamos los modelos y rodábamos la escena, y se veían bastante reales, llenando el hueco que les habíamos dado. Parecía que fueran parte del entorno". Durante este proceso, el equipo de efectos visuales empleó un nuevo sistema de cámaras para grabar la iluminación del set y que esta luego pudiera ser aplicada en el ordenador.

Uno de los efectos curiosos de poner a personajes de 19 cm en un mundo real es que rodar desde la perspectiva de esos personajes te hace ver el mundo de una manera completamente diferente. "En la mayoría de las películas en general los techos no aparecen. Pero si te acuestas en el suelo y miras hacia arriba, tienes una buena idea de lo que es ser un pitufo: todo el mundo es muy alto y siempre ves el techo". Para ayudar a crear la visión del pitufo, los realizadores construyeron un artefacto, el Pitufo-O-Vision, una especie de periscopio que le da al ojo la perspectiva que tienen esas pequeñas criaturas.

Con la película ya en la lata, la batuta pasó a manos de Hoover, Saliba y Bottegoni. Durante los meses de preproducción, los artistas de Sony Pictures Animation y de Imageworks desarrollaron diseños, exploraron conceptos y construyeron los modelos necesarios en 3D para rodar las escenas de acción real y preparar a los sencillos personajes dibujados por Peyo para que interactuaran con la acción en el mundo real. Los artistas de la casa Sony produjeron una secuencia test donde combinaron los pitufos CG y la acción real. Esta prueba validó el concepto y la transformación de los pitufos a CG, visualmente resultó tan impresionante que el proyecto se ganó la luz verde. Con lo cual, el diseñador de personaje y desarrollador visual, el artista Allen Battino, modificó el trabajo inicial para alcanzar el rediseño final.

La mayoría de la gente conoce a los pitufos o bien por los dibujos de Peyo o por los de la serie de dibujos animados de los años 80, afirma Battino; estos diseños de personajes son muy diferentes el uno del otro, y ninguno de ellos hubiera funcionado en una película. "Los diseños de Peyo son hermosos, con líneas rectas y curvas, y la composición de cada cuadro en sus libros es maravillosa. Pero las formas y los rasgos también son exagerados", por ejemplo, si un pitufo tiene que sostener algo sobre su cabeza, Peyo simplemente estiraría sus brazos. Como contraste, los pitufos de la serie de televisión fueron diseñados para adaptarse a los rápidos tiempos de producción de la animación en televisión. "Teníamos que lograr un diseño que bajara un poco el tono pero que siguiera siendo pitufesco", continúa Battino.

Rediseñar a los pitufos para que funcionaran en un mundo 3D y realizar el diseño de los nuevos personajes llevó varios meses, pero el resultado fue satisfactorio para todo el mundo, desde los realizadores hasta la familia de Peyo.

Tal vez el mayor cambio fue el de hacer a los personajes como si fueran de carne y hueso, que tuvieran una anatomía real. Como lo explica Bottegoni, la productora senior de VFX de SPI: "El gran reto de esta película es trasladar los históricos personajes animados de 2D a un mundo de tres dimensiones".

"Cuando ves esta película tienes diferentes expectativas para cada personaje", agrega Hoover. "Para hacerlos reales y creíbles hay muchas consideraciones en juego. Está la identidad del personaje, cómo se mueve y cómo camina. Tienes que pensar en la física, el peso y cómo la piel refleja la luz".

Tal vez lo más importante, fue la actuación de los personajes. "Raja quería que se viera un gran nivel de honestidad y naturalismo", afirma Saliba. "Así que ese fue el desafío: mantener a los personajes 'animados' -son personajes conocidos por todos- pero que tienen que ser igual de convincentes en su actuación que los actores".

"Lo más importante es que los personajes tuvieran corazón, y que fueran capaces de ofrecer una buena interpretación, de la misma manera que los actores de acción real", continúa Battino, el rediseñador de personajes. "Esta es la única manera en que los espectadores puedan identificarse con ellos y que les importe lo que les pase".

"Estoy muy orgulloso del trabajo realizado por los animadores, que combinado con los actores de doblaje han podido darles alma a esas pequeñas criaturas", asegura Gosnell.

Hoover explica que el arte de ayudar a convencer al espectador de que los pitufos pueden convertirse en parte de nuestro mundo es a través de la textura de la piel. Aunque sea azul, la textura indica que pitufo o humano, finalmente no hay tanta diferencia. "El ojo percibe la textura gracias a la forma en que la luz juega en la superficie. Dice mucho acerca de qué están hechos y de lo que tienen dentro. Nuestros pitufos tienen poros, pecas y pelusilla en la cara. Obviamente. Papá Pitufo tiene vello facial y Pitufina tiene una gran melena. Utilizamos todos esos elementos para describir a los personajes y hacer que la gente piense que son reales".

Aún así, los pitufos son una especie en sí misma. "Los humanos tienen, proporcionalmente, entre siete y nueve cabezas de altura. Los pitufos tienen entre dos y dos cabezas y media de altura. Tienen unos pies increíblemente grandes, tan largos o más largos que las piernas. Si fuera un pitufo, tendría unos pies de casi un metro y las manos del tamaño de los guantes de beisbol. Eso significa que tuvimos que encontrar su propia forma pitufesca de moverse, ya que al no tener las proporciones de un ser humano, no podían moverse de la misma manera".

Como ejemplo, Saliba, el supervisor de animación, cita una escena en la que los pitufos corren más que Gargamel. "Esos personajes tienen solo 19 cm de altura. ¿Cómo pueden ser más rápidos que un hombre de 1,80 m?", pregunta Saliba. "Lo que hicimos fue resolverlo con sus pies, gracias a su tamaño pueden usarlos de trampolín para lanzarse a sí mismos y así moverse mucho más rápido. Raja encontró en Internet la referencia de alguien que se había atado a un par de gigantes zapatos trampolín y eso nos sirvió mucho. Pudimos hacer que nuestros pitufos avanzaran 3 m por segundo. A la larga Gargamel los hubiera atrapado, pero en distancias cortas resulta creíble que un pitufo pueda escapar. Sin mencionar que pueden utilizar su tamaño a su favor y esquivar objetos que una persona jamás podría".

Hoover y Saliba también estuvieron en el set, ayudando a Méheux y a los actores a entender dónde estarían los pitufos y qué estarían haciendo una vez la animación estuviera completada. "Tratas de darle a los actores toda la información posible acerca de la historia, de cómo se comportan, dónde está la dirección de miradas. Utilizamos todo tipo de trucos para ello, pequeños puntos en la mesa o cables que perfilaran sus rostros", se explaya Hoover. "Cuando los actores tienen una mejor idea, en un espacio tridimensional de dónde están exactamente saben con precisión hacia donde tienen que mirar. Es muy importante para el público que los actores y los personajes animados se miren a los ojos cuando están hablando entre sí. Teníamos pequeños modelos de los personajes de los pitufos que utilizamos para ensayar las escenas y teníamos actores de doblaje en el set para que leyeran las líneas de los pitufos así los actores y el director pudieran escucharlos, porque todo eso es lo que le da la cadencia a la escena".

"Teníamos pequeñas versiones en silicona de nuestros personajes con cables para colocarlos", cuenta Saliba. "Abstraíamos la escena para que Phil la pudiera iluminar a nivel pitufo, luego entraban los actores y la ensayábamos tres o cuatro veces, literalmente actuando mientras yo manejaba a los pitufos como marionetas, así todo el mundo se acostumbraba a saber dónde estarían los pitufos. Y entonces, una vez que todos estaban cómodos, rodábamos sin los pitufos".

Saliba apunta que el proceso de animación es increíblemente técnico para el que se utilizan mapas del set, incluida la decoración e incluso modelos digitales de los actores reales, y todo ello se registra fotograma a fotograma en la escena que se ha rodado, todo esto antes de que un pitufo se agregara a la escena y se animara. Dicho esto, incluso si todos estos detalles técnicos están bajo control, los animadores tienen que estar muy pendientes de los aspectos creativos. "Nos preguntamos, ¿cómo tiene que fluir la secuencia? ¿Dónde estarán los gags que se supone van a pasar? ¿Cuándo suceden los momentos emocionales? El proceso de animación necesita de un tipo de persona que pueda manejar los aspectos técnicos pero que también tenga una buena sensibilidad creativa".

La creatividad de los animadores que daban vida a los pitufos también ayudó a resolver un delicado problema técnico: cuando se ve un plano abierto, el público debería poder identificar inmediatamente a cada uno de los seis pitufos. Algunos de ellos, como Papá Pitufo (barba blanca y ropa roja) o Pitufina (melena rubia) serían llamativos, pero, como explica Gosnell: "Pitufo Gruñón y Pitufo Torpe no tienen unos rasgos identificativos marcados". Pitufo Torpe es un poco diferente de Pitufo Gruñón -sus orejas y pies son un poco más grande, su sombrero está más caído- pero también es una cuestión de actuación", afirma el director. "¿Cómo se para el personaje? ¿Cuál es su actitud corporal?" Por eso, los animadores no solo tienen que ser artistas de gran talento, sino también actores fantásticos para poder agregar esas sutiles diferencias.

El equipo de efectos visuales también tuvo el honor de que el diseñador artístico Bill Boes elaborara diseños para la mágica aldea pitufa en el espacio animado CG. "Probamos con un montón de conceptos de diseño para la aldea pitufa", relata Boes. Pero finalmente hicimos lo que todo el mundo conoce, aunque de una forma más realista. Llevó mucha prueba y error para que saliera bien".

Finalmente resultó que se necesitaba todo un pueblo para hacer un pueblo. "Tuve todo un ejército de artistas", agrega, "y tratamos cosas diferentes. Por ejemplo, con las casas en forma de setas, probamos con algunas gruesas, otras largas y otras con chimeneas. Comenzamos a imaginar el lenguaje visual de cómo debían ser las casas setas. Originalmente las diseñamos como verdaderas setas en las que vivían. Pero cuando profundizamos un poco más en la investigación nos dimos cuenta de que en las historias de Peyo, los pitufos en realidad construían sus casas para imitando la forma de las setas".

Para completar la transformación de los pitufos de 2D a un mundo completamente en 3D, Rob Engle, el supervisor de efectos visuales de 3D de la película describe su papel de esta manera: "Mi trabajo es asegurarme de que cuando la gente se ponga las gafas 3D en el cine experimenten el mundo de la película y esta sea una experiencia coherente, multisensorial y divertida".

Debido a que la aldea pitufa y los pitufos existen enteramente dentro del ordenador, esos elementos se hicieron totalmente en 3D. "La forma en que Raja rodó la película nos dio gran flexibilidad a la hora de utilizar el 3D", explica Engle. "Podíamos crear los mundos en CG, y luego, para las escenas en las que integrábamos a los pitufos con el mundo de acción real, utilizamos una técnica híbrida donde agregábamos una dimensión al plató. Por ejemplo, se veía a Neil Patrick Harris en el plató con algo de decorado y a ese mundo le agregábamos dimensión y colocábamos al pitufo dentro, en 3D".

"Esta técnica híbrida nos dio una gran flexibilidad en términos de lo último en experiencia 3D", continúa Engle. "Tratamos el 3D como si se tratara de sonido. Nunca se pone el sonido a 10 todo el tiempo; se utiliza una amplia gama dinámica de sonido a lo largo de toda la película. Y, haciendo una analogía, nos gusta jugar con el 3D de la misma forma, encontrando momentos más silenciosos y otros momentos más estridentes".

"Lo más importante para Raja y Jordan fue que conectáramos con los pitufos, que sintiéramos que estábamos con ellos y que ellos estaban en nuestro mundo", concluye Engle. "Esto es lo increíble del 3D; automáticamente te hace sentir más conectado con los personajes. Lo que hacemos, en realidad, es tomar los ángulos de la cámara del director de fotografía y las elecciones del director en cuanto a la interpretación y le agregamos un nivel extra de conexión con el público".


Datos pitufescos divertidos

Acerca de la producción
- Los pitufos tienen la altura de tres manzanas, y durante los ensayos, cada uno era representado por una maqueta a tamaño real de 19 cm de altura

- Cuando llegaba el momento de rodar, cada pitufo se representaba con un punto de diferente color, los actores tenían que recordar qué punto era cada pitufo

- En una escena, había que arrojar un huevo a la cara de Gargamel. Después de que varios miembros del equipo trataran y no lo consiguieran, la tarea recayó en manos del director Raja Gosnell

- El test de maquillaje de Gargamel llevó tres horas, pero a mitad de la producción, la transformación tomaba unos 90 minutos. Hank Azaria decidió afeitarse la cabeza para que la transformación fuese más rápida

- Azaria se transformó en Gargamel más de 50 veces y pasó unas 130 horas en el sillón de maquillaje; durante el proceso escuchaba rock clásico

- Tim Gunn, quien por supuesto tenía una silla en el plató, en muy pocas ocasiones hizo uso de ella, no quería arrugar su traje

- La producción rodó durante cinco noches seguidas en la famosa tienda de juguetes FAO Schwartz de NY; se rodó casi toda la tienda, centímetro a centímetro

- El Pitufoextractor necesitó tres meses aproximadamente para construirse, porque muchas partes del elaborado artilugio eran muy difíciles de conseguir. Eventualmente, el equipo de producción tuvo que buscar algunos artículos en ventas de garajes, mercadillos, ebay y en la Craiglist

- Dos actores de doblaje estuvieron presentes para dar voz a los seis pitufos durante el rodaje, para que los actores tuvieran un diálogo con el que trabajar. (Los actores que dan voz a los pitufos también aparecen en la secuencia de Times Square con Gargamel)

- El vestuario de Odile (Sofia Vergara) consistió en piezas de Dior, Dolce & Gabanna y Christian Louboutin

- El decorado del Belvedere Castle fue construido como una réplica exacta del castillo real de Central Park y es 2/3 del tamaño verdadero de un castillo. El único elemento que modificó la producción fue el suelo, se agregaron listones de madera para crear un mayor contraste

- Durante la primera escena de Neil Patrick Harris con Tim Gunn, este decidió que no podía llamar al personaje por su nombre original –"Henry"–, así que Harris rebautizó al personaje como "Henri"

- Harris comió un caramelo azul, sin darse cuenta su boca se volvió azul y comenzó la escena, inmediatamente se tuvo que lavar la boca

- Durante el rodaje de la escena del taxi, Azaria rompió el parabrisas trasero del taxi con el anillo de Gargamel cuando se chocó con él

Animales en el set
- Cuatro perros de la raza basset encarnaron a Elway: Hank, Milo, Oleander y Ziggy. Dos de ellos son perros de rescate

- Seis gatos estuvieron en el set para dar vida a Azrael, pero solo cuatro terminaron trabajando. Uno de los gatos solo tiene una escena, la que Azrael "se lame sus partes"

- Los nombres verdaderos de los gatos son: Mr. Krinkle, Vino, Cheetoh, Blaze. Y FG: el fanático (abreviatura de Frank Gorshin)

- El entrenador de animales, Larry Madrid, tenía un extraño gato Burma en el set, llamado GusGus. El entrenador lo utilizaba para provocar gruñidos en los otros gatos. ¡Desde luego no les gustaba nada!

- Azaria disfrutó trabajar con los gatos, incluso dijo que fue genial tener una pieza de utilería viva con la que poder hablar

Acerca del reparto y el equipo
- El hijo de Azaria, Hal, cumplió un año durante la producción y con frecuencia se acercaba a ver trabajar a su papá

- La diseñadora de vestuario Rita Ryack le hizo a Hal una réplica exacta del vestuario de Gargamel

- El pitufo preferido de Neil Patrick Harris es Pitufo Gruñón

- La favorita de Jayma Mays es Pitufina

- Sofia Vergara fue una gran fan de los pitufos en su país, Colombia

- Harris jugaba con las maquetas, para deleite de todo el equipo. Los hacía pelear, besar y saltar de aquí para allá

- Azaria compara la relación de Gargamel y Azrael con un matrimonio, porque tienen un vínculo muy fuerte

- Mays creció de verdad con los pitufos, su madre era una forofa y coleccionista durante toda su vida

- El departamento artístico creó un artilugio llamado Pitufo-o-Vision, que permitía al usuario verlo todo desde el nivel de un pitufo

- Tim Gunn estuvo tan impactado con su vestuario, que la producción ha dejado que se lo quede y tiene pensado utilizarlo para la próxima temporada del programa de TV Project Runway.

Acerca de los efectos visuales
- En la película hay 1.014 efectos visuales rodados

- En la película hay 1.557 tomas en 3D estéreo

- 268 empleados de Sony Pictures Imageworks emplearon 358.000 horas en la animación de los pitufos

- Para completar la película, los ordenadores de SPI necesitaron más de 22.000.000 de horas de renderización. Algunos fotogramas tenían tanto VFX y trabajo de animación, ¡que podía llevar varias horas de renderización!

- Hay 115 "huesos" en un esqueleto de pitufo

- Hay 446 setas en la aldea pitufa y un adicional de 77 casas setas, un total de 523 hongos

- Pitufo Filósofo es empujado o pateado en 25 ocasiones, ¿pero a quién se le ocurre contar?

Acerca de los pitufos
- Peyo basó la "Pitufresa" en un arándano

- Peyo dibujó a Pitufina de 300 formas diferentes y la basó en su esposa e hija

- Hay 102 pitufos en la aldea (100 pitufos masculinos, un Papá Pitufo y una Pitufina). Para esta película se presentan tres pitufos completamente nuevos: Pitufo Loco; Pitufo Valiente y Pitufo Nervioso

- Los pitufos construyen sus casas setas, no son cultivadas

- Los pitufos son vegetarianos