El último capítulo del gran fenómeno
La serie cinematográfica de La Saga Crepúsculo está protagonizada por Kristen Stewart, Robert Pattinson y Taylor Lautner, y cuenta la historia de una chica de 17 años, Bella Swan, que se muda a vivir con su padre al pueblecito de Forks, Washington, y no puede evitar sentirse atraída por Edward Cullen, un pálido y misterioso compañero de clase, que parece empeñado en mantenerla a distancia. Pero ninguno de los dos puede negar la atracción que los empuja el uno hacia el otro... ni siquiera cuando Edward le confiesa que tanto él como su familia son vampiros. Para complicar el asunto, el mejor amigo de Bella, Jacob Black, es un hombre lobo, creado con un único fin: matar vampiros.
Las novelas y las películas constituyen un auténtico fenómeno mundial. En los cuatro años transcurridos desde que "Crepúsculo" llegara inicialmente a las salas de cine, en noviembre de 2008, las posteriores novelas se han convertido cada una en el bestseller número uno de ventas, y cada sucesiva película se ha estrenado con espectaculares cifras de taquilla, tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo. Las cuatro películas de La Saga Crepúsculo hasta la fecha han acumulado más de mil millones de dólares brutos en la taquilla estadounidense, mientras que la recaudación en el resto del mundo ha superado los 2.500 millones de dólares. En cuanto a sus lanzamientos en DVD/Blu-ray, solamente en Estados Unidos ya se han vendido más de 30 millones de unidades. La cuenta de Twitter de la saga cinematográfica - @Twilight es la primera cuenta de una película en conseguir alcanzar el millón de seguidores.
El productor Wyck Godfrey, que ha trabajado en todas las entregas de la saga, resume: "La primera película trataba sobre el nuevo amor, la segunda sobre la pérdida, la tercera sobre la elección, la cuarta sobre los retos del matrimonio y la familia, y esta última película trata sobre proteger esa familia".
LA SAGA CREPÚSCULO: AMANECER (PARTE 2) muestra cómo cada uno de los tres personajes principales - Bella, Edward y Jacob acepta el hecho de que Bella se convierta por fin en vampiro, para a continuación llenarse de acción cuando se ven todos obligados a luchar para defender a sus seres queridos.
"La película empieza en el momento exacto en que acabó la anterior", explica el director ganador del Oscar® Bill Condon, que rodó ambas partes de La Saga Crepúsculo: Amanecer de manera simultánea. "Decidí empezar con una secuencia de créditos completos, que utiliza como banda sonora una obertura que toma elementos musicales de todas las entregas anteriores. Cada uno de los compositores queda representado y vuelve a meterte en el ambiente de la primera película de Crepúsculo. Inmensos paisajes, que se intercalan con lo que está sucediendo en el interior de Bella mientras el veneno se extiende por su cuerpo... y entonces abre los ojos. No ve más que estrellas y una imagen abstracta, hasta que se acostumbra a su nueva forma de ver. Entonces la imagen se aclara y vemos a Edward".
Condon agrega: "El corte de una película a otra te permite hacerte a la idea de ver a Bella convertida en vampiro. Bella empieza ahora una nueva vida es una película diferente, ahora es un vampiro. A estas alturas de la serie, su padre, Charlie, es prácticamente el único humano que queda. Todos los demás son ya criaturas mágicas. La Parte 2 es una experiencia realmente distinta y eso era lo que me resultaba interesante... tenía realmente la oportunidad de hacer dos películas muy diferentes a partir de la misma novela".
"Empezamos con el despertar de Bella como vampiro", reitera Godfrey. "Todo lo que hemos mostrado y descrito en las películas anteriores sobre los vampiros neófitos es por lo que está pasando ahora Bella, el personaje que hemos venido siguiendo durante cuatro películas. Visualmente, intentamos meter al espectador en el modo de ver cada detalle muy cerca y, a la vez, muy lejos; escuchar los ruidos a tu alrededor, y la rapidez y la fuerza de tus movimientos. Sobre la marcha, Bella está en pie, Edward todavía la ama, Renesmee está viva, pero Bella siente enseguida una sed insaciable, así que emprenden su primera cacería".
La autora y productora Stephenie Meyer agrega: "Bella ahora percibe con una claridad asombrosa... todo ha cambiado para ella. De pronto, todo lo físico se vuelve sumamente sencillo para ella... casi como si tuviera superpoderes. Aunque, al mismo tiempo, tiene que controlar una sed increíble. Pero ya sabía lo que le esperaba. Es el primer vampiro en la historia de mi mitología que ha elegido ser un vampiro vegetariano antes de su transformación. Así que, a diferencia de todos los que la precedieron, se mete en ello decidida a no matar a nadie. Sabía que iba a sufrir una sed espantosa y se preparó para eso, de modo que no tiene los mismos problemas que muchos de ellos. Bella tiene esa determinación y preparación, lo que le permite controlarse como neófita".
A su regreso a casa de los Cullen, Bella conoce por primera vez a su extraordinaria hija Renesmee y descubre su don especial: su alarmante e inaudita velocidad de crecimiento... así como su vínculo especial con Jacob.
Aunque a Jacob todavía le importa mucho Bella, su principal prioridad es ahora Renesmee. "Una de mis escenas favoritas del libro fue el momento en que Jacob revela que se ha imprimado con su hija. Bella reacciona de manera similar a como seguramente también lo hagan los espectadores: ¿Me estás tomando el pelo? Y entonces le da una paliza de mucho cuidado", explica Rosenberg entre risas. "Es una escena muy divertida, en la que tenemos ocasión de ver a Bella como madre, protectora y un vampiro fuerte, capaz de repartir leña. Ayuda a los espectadores a entender de verdad y a empezar a asimilar la situación de Jacob".
"La Saga Crepúsculo: Amanecer (Parte I)" se centraba en Bella y Edward y en la creación de su propia familia, mientras que en LA SAGA CREPÚSCULO: AMANECER (PARTE 2) tratan de mantener a salvo a esa familia. "Hilamos el primer acto con la novedad de Bella como vampiro, y ver a su hija por primera vez. Esta familia Bella, Edward y Renesmee tiene un hogar en su casita y están disfrutando de esa nueva vida juntos", comenta Godfrey. "El problema llega cuando confunden a Renesmee con un niño inmortal, que es algo prohibidísimo por los Vulturis. Así que el gran peligro de LA SAGA CREPÚSCULO: AMANECER (PARTE 2) es que los Vulturis se enteran de que Renesmee es una niña inmortal, que es algo que no pueden permitir. Los Vulturis se ponen entonces a reunir fuerzas para librarse de una vez por todas del clan de los Cullen".
Un niño inmortal es un niño humano convertido en vampiro y, dado que los neófitos sufren una sed incontenible, un niño inmortal es incapaz de mantener el secreto. Una de las hermanas Denali informa a los Vulturis sobre la niña de los Cullen. "Irina malinterpreta a Renesmee al verla a lo lejos y pasamos entonces a una película completamente distinta... una épica cinta de acción en la que los vampiros de todos los rincones del mundo se juntan para enfrentarse entre sí", explica Condon.
"Los Cullen vuelven a estar en peligro, aunque esta vez se trata de algo más importante", señala Meyer. "En ocasiones anteriores, era Bella la que se veía amenazada y ellos se exponían para protegerla, pero no los iban a aniquilar. Ahora se encuentran en una situación en la que sí los pueden exterminar. Los Vulturis se disponen a atacar y piensan eliminarlos. Los Cullen no pueden hacer nada para evitarlo. No pueden huir, ni tampoco esconderse. Los han sentenciado a muerte".
Meyer agrega: "Los Cullen saben que no han cometido el crimen del que se les acusa, así que, ¿se trata realmente de eso? ¿Creen sinceramente los Vulturis que han cometido ese crimen imperdonable? ¿O se trata más bien de la forma que tiene el tal Aro de librarse de la posible competencia, en cuyo caso no importa lo que hayan hecho? Pero, esperando que la suerte los acompañe, los Cullen reúnen a todos los amigos que pueden para decirle a los Vulturis que Renesmee no es lo que ellos creen. Los Cullen esperan que, si consiguen frenar lo suficiente a los Vulturis, logren razonar con ellos y aclarar el malentendido".
Un reparto de Miles
LA SAGA CREPÚSCULO: AMANECER (PARTE 2) recupera a todo el reparto principal de las películas anteriores y presenta a la extraordinaria niña Renesmee, además de 30 nuevos personajes de vampiros procedentes de todos los rincones del mundo. Los queridos actores que interpretan a Bella, Edward y Jacob, así como sus familias, los Vulturis y los lobos, ven todos resueltas sus complejas historias.
Bella, Edward y Jacob... y ahora, Renesmee
Kristen Stewart, Robert Pattinson y Taylor Lautner retoman sus icónicos papeles protagonistas para conducir a Bella Swan, Edward Cullen y Jacob Black con mano firme a la madurez. La joven actriz Mackenzie Foy no tenía más que 10 años cuando rodó su papel de Renesmee Cullen, la joven criatura que cambia mágicamente todas sus vidas.
"Cuando la gente vea por fin las dos partes, quedará asombrada por la increíble labor que ha hecho Kristen Stewart con su papel", afirma Condon. "Desde cómo empieza como Bella a cómo acaba es algo realmente asombroso. Sobre todo, teniendo en cuenta que consiguió todo eso mientras rodábamos de forma completamente desordenada: lo mismo estábamos haciendo un día el final del tercer acto de la parte 2 como vampiro neófito, que a la tarde siguiente estábamos al principio de la parte 1, como humana, viviendo un embarazo en condiciones extremas. Me embarqué en este proyecto entusiasmado con la perspectiva de vivir esa experiencia y salí realmente satisfecho de haberla tenido".
Robert Pattinson señala que la nueva película explora el mundo de los vampiros más allá del romance entre Bella y Edward: "La historia abarca todo el mundo y engloba a muchos personajes distintos, lo que permite mostrar la gran variedad de poderes y talentos que pueden poseer los vampiros. Pero la película también trata sobre cómo Bella se realiza como personaje, verla por primera vez como vampiro va a suponer un momento muy impactante".
"Mientras escribía el libro, daba la sensación de que el personaje de Bella estaba realmente encontrando su identidad", agrega Meyer. "No encajaba muy bien como humana. Era torpe, no se sentía cómoda con su cuerpo. Siempre ha sentido que no estaba en el lugar adecuado. Cuando se convierte en vampiro, está más cómoda consigo misma, y eso fue algo divertido de escribir. Hay un momento en el que siente que verdaderamente nació para esto, que estaba destinada a convertirse en esa persona y que ha alcanzado su potencial. Eso estaba muy bien, porque buena parte de lo que preocupaba a Edward a lo largo de todos estos libros era que Bella odiara haberse convertido en vampiro y que eso la hiciera muy infeliz. Así que el hecho de que Bella pase por la transformación y sienta: Por fin, aquí estoy. Esto es lo que debería ser, es realmente genial, tanto para Bella como para Edward, y para su relación. Es estupendo que exista al fin esa igualdad entre ellos".
"En el libro, la cacería es mi parte favorita. Me encantaba lo viva que se sentía", asegura Stewart. "En el libro, se dejaba muy clara la idea de que, como vampiro, Bella es distinta y es especial... podía sentirse al instante. Todo le resulta muy fácil. Ahora destaca al fin".
Stewart disfrutó con el carácter más físico que adquiría su papel: "Ha sido realmente alucinante interpretar conceptualmente que soy la persona más fuerte de todas las presentes", bromea Stewart. "Eso afectó a cómo se me ve junto a esos tipos tan enormes, que son claramente más fuertes que yo. Tuve ocasión de realizar escenas suspendida de cables y de dar patadas. Sienta bien hacer la parte física, porque siempre he tenido que escudarme detrás de otras personas".
Condon agrega: "¡Kristen se moría de ganas de hacer esto! Le encanta la acción y el aspecto físico del papel. Resultó todo muy emocionante para ella. Siempre ha sido capaz de identificarse con Bella Swan y aporta mucho de sí misma al papel. Kristen puede ver las películas anteriores y comprender los momentos que más le gustan. Pero en esta ocasión su personaje, la Bella vampiro, tiene algo muy diferente, por lo que creo que Kristen sentía una gran curiosidad. No obstante, seguimos trabajando para que siguiera dando tanto como le fuera posible de sí misma, aunque creo que es algo más distante. Por ejemplo, cuando tiene la escena del pulso con Emmett, después de ganar y romper la roca, exclama: ¿Has visto eso?. Es puro Kristen y dejé ese momento en el filme para asegurarme de que el personaje no resultara tan diferente a como Kristen lo había mostrado en las demás películas".
Stewart no tenía más que 17 años cuando fue elegida para dar vida en "Crepúsculo" a la torpe y tímida Bella Swan, que se ha acabado convirtiendo, al llegar a esta quinta película, en un poderoso vampiro y en una madre ferozmente protectora. "Empecé todo esto cuando era muy joven y, en la primera película, soy muy humana... llena de rarezas y con claras inseguridades. Tartamudeo mucho en "Crepúsculo", que es algo que me gustaba. Le iba muy bien a la serie porque, cuando Bella se convierte en vampiro en la última película, estoy completamente tranquila y me controlo perfectamente. Abordo el movimiento y la forma de hablar de una escena de forma totalmente distinta, porque la mente de Bella ahora funciona muy rápido".
Tanto la actitud como el aspecto físico de Bella han evolucionado. "Kristen ha acometido las dos últimas películas con verdadero entusiasmo", afirma Godfrey. "Estaba deseando interpretar por fin a Bella de vampiro, se moría de ganas, y nos lo hemos pasado bomba viéndolo. Kristen se ha mostrado muy entusiasta en todos los aspectos, no solamente trabajando con los departamentos de peluquería y maquillaje para crear algo con lo que se sintiera muy segura, sino que ha creado una forma distinta de comportarse y de hablar. Ha sido divertido para ella, porque ya no es la Bella de antes, es una nueva Bella".
La primera vez que los espectadores ven a la Bella vampiro es memorable, con su perfecta piel pálida, sus ojos rojo carmesí y su llamativo vestido azul. "Su transformación en vampiro supone un cambio completo de aspecto para ella", concuerda el diseñador de vestuario Michael Wilkinson. "Reflejar todas esas distintas etapas que atraviesa resulta emocionante como diseñador de vestuario. Kristen es la verdadera alma de estas películas, su eje central. Lo que ella aporta es realmente impresionante, es un gran trabajo, muy sólido y con mucho sentimiento. Acompañar a una actriz tan inteligente y estimulante a lo largo de este periplo de transformación ha resultado una experiencia increíblemente satisfactoria".
Bella y Edward tienen ahora casa propia una casita en un rincón del bosque donde pueden vivir como marido y mujer con la privacidad necesaria para conocerse como vampiros en igualdad de condiciones. La escena más apasionada de LA SAGA CREPÚSCULO: AMANECER (PARTE 2) tiene un tono claramente distinto al momento más íntimo de "La Saga Crepúsculo: Amanecer (Parte I)", ya que ambos participantes son ahora inmortales. "Bill entendió perfectamente la diferencia entre las dos escenas", asegura Meyer. "La primera tenía la novedad, el descubrimiento y una cierta incertidumbre. Ahora, en la segunda hay una seguridad total".
Meyer prosigue: "En la primera parte, el aspecto romántico era un momento muy incómodo, porque se trata de dos personas que no han estado nunca antes juntas de esa manera. Además, tienen que ponerse unos límites realmente aterradores. La Bella humana podría salir muy malherida, que no es precisamente su sueño. No es su ideal. Eso planteaba una cuestión un tanto espinosa que debían sortear, pero siempre quiero tener problemas a la hora de escribir, ya que resolverlos es lo que lo hace divertido. Ahora, en la segunda parte, es muy agradable tener como contrapunto que les resulte algo tan natural y perfecto".
"Tenía muchísimas ganas de desarrollar el tema vampírico de Bella", afirma Stewart. "No solamente su aspecto. Sus poderes son los que más me gustan. Es sin duda mi vampiro favorito. Bella ni siquiera se da cuenta de que posee esos grandes dones... pero a mí me gustaría tenerlos. Aunque se ríe un poco de ello, su super-autocontrol en realidad es seguramente el poder que más mola de toda la serie. También puede proyectar su escudo, como una membrana. Bella puede proteger a cualquiera que se meta dentro, y ningún otro poder vampírico surte efecto alguno en ella, que es por lo que Edward no puede leerle la mente. Empieza a encajar por qué ha sido todo tan difícil, por qué se han sentido atraídos el uno por el otro y por qué ha sido ella un misterio tan grande para él... todo ello cobra ahora sentido".
"Nos damos cuenta de que el poder de Bella no es solamente la razón por la que Edward no ha sido capaz de leerle nunca la mente, sino que también explica por qué Aro no podía ver sus recuerdos, ni le afectaba el dolor de Jane", explica Godfrey. "La razón es que ella es un escudo natural. Está protegida de los poderes de los demás y en esta película asistimos a la culminación de ese poder, que se ve reforzado cuando se convierte en vampiro. Se dan cuenta de que, si se entrena para extender esa protección alrededor de todos ellos, pueden tener alguna oportunidad cuando lleguen los Vulturis".
Meyer se muestra encantada con todo lo que el reparto y los cineastas han sido capaces de conseguir a lo largo de cuatro años y cinco películas. "Estoy entusiasmada, porque Kristen lo hizo estupendamente como la Bella humana, que avanzaba tambaleante por la vida... la dotó de una cierta torpeza e incomodidad que ahora, en la última película, ha desaparecido. Ahora es completamente dueña de sí misma. Kristen siempre ha sido muy buena con las cosas físicas... tiene un aspecto muy intenso cuando se mete en ello, y eso es fantástico. Es como verla encontrar su identidad. Así que esa trayectoria, ese periplo para ella es muy similar al de Bella. Kristen ha sido capaz de llevar a este personaje a un punto en el que se siente muy fuerte".
"En un primer momento, a Bella le preocupa cómo va a comportarse como vampiro, si se va a poner como loca. Sobre todo porque al principio es más fuerte que todos los Cullen juntos. No tardas en descubrir que ejerce un dominio completo de sí misma y le resulta incluso más fácil que a todos los demás que se han transformado en vampiros. Es un comienzo muy feliz", observa Pattinson.
El obstáculo que habrá que superar en ese principio tan feliz es que Bella acepte lo que ha sucedido con Jacob... y Renesmee. Le pilla por sorpresa y le cuesta entender que eso es lo que da sentido a su enrevesada historia de amor.
"Al terminar la primera parte, Jacob ya se ha imprimado con Renesmee, pero la situación aún no se ha resuelto. Al empezar la segunda parte, después de la primera gran cacería de Bella en la que no mata a nadie, vuelve a casa, ve a Renesmee, y se encuentra allí a Jacob sin despegarse de ella. De repente, Bella se da cuenta de lo que ha pasado. Como le pasaría a cualquier madre, se siente tan furiosa como lo estaba Edward al principio. Con el tiempo, se acaba dando cuenta de cómo funciona la imprimación, porque está claro que Jacob no podría tocarle ni un pelo a Renesmee. Jacob hace entender a Bella que esta fue siempre la razón del vínculo que había entre ellos, y sirve como colofón a la relación entre Bella y Jacob. Ahora nos queda una sensación de verdadera familia y de que todo tiene sentido".
Pattinson agrega: "Evidentemente, crea muchos problemas en casa de los Cullen, teniendo en cuenta que Jacob se imprimó antes incluso de que Bella hubiera tenido ocasión de ver a su propia hija. Edward puede leerle la mente a Jacob y sabe que sus propios genes obligan a Jacob a imprimarse. Así que Edward entiende la situación más rápido que Bella".
"Me sacude y me lanza de un lado a otro del jardín, lo que fue bastante divertido de rodar", reconoce Lautner. "Bella se descontrola por completo y la verdad es que Jacob no puede hacer nada, además de que tampoco se va a defender y a pelear con ella. Lo comprende, así que piensa aguantarse. Es muy intenso, pero a la vez resulta bastante cómico, porque tienes a Bella lanzando a Jacob de un lado a otro y gritándole a la cara. Él intenta explicárselo, pero ella no está en ese momento para entender nada. Kristen y yo nos lo pasamos bien filmándolo, desde luego".
"Taylor Lautner tiene un gran instinto para la comedia", señala Condon. "Imprimarse es quizá el concepto más controvertido de esta novela, sobre todo para personas que no son fans de este mundo y no son especialmente receptivas. En el momento en que se encara con él, me encantó la manera que tiene Kristen de interpretarlo completamente en serio, se comporta con la gravedad de una madre que protege a su hijo, mientras Taylor interpreta la escena de manera cómica, aunque luego se pone serio. Presenta el argumento emocional que consigue conectar. El argumento que plantea es que esta es la razón de ser de todo lo que han estado pasando, todo esto era porque Jacob estaba destinado a acabar con Renesmee. Le da a Bella un momento para pensar y recordar que viven todos en un mundo mágico, que se rige por unas reglas distintas".
Incapaz de dejar pasar la oportunidad cuando va ganando, Jacob le pone además un apodo a Renesmee. "En mitad de esa escena tan intensa, Jacob empieza a llamarla Nessie, lo que no le sienta nada bien a Bella. Se pone como loca, arremete contra Jacob y lo agarra por la garganta", explica Lautner riendo. "A Bella no le hace ninguna gracia el apodo. La imprimación no es para nada como habían imaginado. Es algo muy serio. Es lo que tenía que pasar y es la razón por la que todo ha sucedido de esa manera, así que aprenden a aceptarlo. Jacob se convierte en parte de la familia".
Jacob pasa casi toda la película sin perder de vista a Renesmee, como su protector. "¿Qué no tiene Renesmee de especial? Hasta donde yo sé, en ese momento, es algo único, una extraña y encantadora mezcla de humano y vampiro", describe Meyer.
"El bebé Renesmee crece rapidísimo. Para cuando tiene cuatro meses, parece una niña de cuatro años", explica Rosenberg. "El truco con Renesmee es conseguir transmitir su inteligencia, quieres que tenga una cierta presencia, que es algo que Stephenie señalaba a menudo. Además, se ciernen ciertos nubarrones negros sobre ellos. Por un lado, Renesmee está creciendo demasiado rápido, lo que plantea la gran cuestión de lo rápido que va a seguir creciendo y, por tanto, de qué esperanza de vida podrá tener. Pero, por otro lado, está el problema mucho más grave de los Vulturis. Llevan tiempo queriendo deshacerse de los Cullen y por fin tienen una excusa para ello".
"El ritmo acelerado al que se desarrolla su intelecto es fascinante. Tiene una personalidad encantadora, es una persona amable y cariñosa desde el primer momento. Se preocupa por sus padres. Le preocupa el aprieto en que los ha puesto a todos. Renesmee es un encanto y todos responden positivamente a ella", señala Meyer. "Una de las extrañas leyes de la naturaleza es que, cuando cuidas de otra persona, cuando la proteges, la quieres. No ocurre al revés. Cuando te sacrificas por alguien, así es como nace el verdadero amor".
"Todos quieren muchísimo a esta niñita que nunca esperaron. Saben que nunca volverán a tener algo así", agrega Meyer. "Es una oportunidad única en la vida para todos ellos y único en la vida no es cualquier cosa cuando esa vida dura miles de años. Renesmee podría morir, lo que sería algo casi imposible de superar. Así que tiene dos caras, está ese increíble don, pero también está el miedo a lo que puede suponer. Renesmee se vuelve muy importante para ellos".
Al igual que su padre y su madre, Renesmee tiene su propio don. "Tiene un poder especial: puede comunicarse a través del tacto. Nadie puede ignorar lo que tenga que decir, porque todos saben lo que está pensando, que viene a ser casi lo contrario del poder de Edward de leer prácticamente cualquier mente. Eso acabará resultando muy útil para ellos cuando tengan que explicar el tema de Renesmee a todos los vampiros que se presentarán desconfiando automáticamente de la situación. Cuando ella se la explica, no tienen más remedio que creerla", sostiene Meyer. "Si te toca, puedes ver sus pensamientos y es imposible dudar de ella, porque estás metido en ellos. Puedes ver que es la verdad, así que, como testigo, es muy convincente".
"Es la niña más hermosa del mundo. Renesmee es una pequeña verdaderamente especial", concuerda Stewart. "Tiene su propia manera de comunicarse. Es alucinante ver a una madre comunicarse con su bebé mucho mejor de lo que podría en el mundo real. Seguro que todas las madres sienten que están hablando con sus hijos, pero Bella y Renesmee están hablando realmente entre ellas por medios místicos. Estoy deseando ver cómo queda eso visualmente".
"Renesmee es el mayor reto de este proyecto", afirma Condon. "No solamente desde un punto de vista técnico, sino que creo que Renesmee es seguramente el personaje que más intrigaba a los fans de esta película. Con Crepúsculo, tratas siempre con una comunidad de fans sumamente apasionada, y estás en contacto con parte de ellos y eres consciente de qué es lo que más les interesa. Se mostraron muy generosos al aceptar el hecho de que teníamos que hacer un gran cambio en lo referente a la velocidad a la que envejece el personaje".
"El gran reto era decidir cómo íbamos a hacerlo. ¿Usábamos a varias actrices distintas? ¿Usábamos todo infografía?", plantea Godfrey. "Decidimos empezar con el aspecto que acabaría teniendo Renesmee, tomando a la actriz que encontráramos, para modificarla digitalmente y dotarla de un aspecto aún más propio de otro mundo. Tuvimos una suerte increíble al recibir una audición de Mackenzie Foy".
"Desde que empezamos el proceso de selección, teníamos claro que este papel exigía ciertas dotes interpretativas", agrega Meyer. "En la primera ronda, Mackenzie vino a hacer una prueba y, desde ese momento, pensé, por favor, que le guste a Bill, es perfecta. Y resulta que Bill estaba pensando lo mismo: por favor, que le guste a Stephenie, es maravillosa y sabe actuar. Encontrar a una niña que fuera capaz de despedirse de su madre, pensando que toda su familia va a morir, no era nada fácil. Es mucho pedir para una chica de 10 años".
"En cuanto vimos a Mackenzie, lo tuvimos claro", recuerda Condon. "Tenía algo, primero estaba su aspecto, y además su serenidad, es muy bonita, y encima buena actriz... no podríamos haber conseguido a nadie mejor".
"Mackenzie realizó su audición bastante pronto, en realidad, y fue estupenda. Sin embargo, seguimos buscando, ya que creo que todavía nos interesaba alguien un poco más joven", recuerda Meyer. "Pero Bill y yo estábamos completamente de acuerdo desde la primera vez que vimos las cintas. Esta niñita de rostro angelical e interpretación perfecta era la que buscábamos".
"Mi primera prueba fue guay", señala Mackenzie Foy. "Estaba un poco nerviosa, pero sobre todo entusiasmada. Cuando leí el guión, me gustó de Renesmee que era una niña muy dulce, que quería mucho a su familia. Entonces entré e hice lo que me dictó mi corazón".
"La primera vez que vi a Bill Condon, hablamos sobre lo que nos gustaba de Renesmee y la clase de chica que era... sobre lo lista, inteligente y valiente que es. Cuando me dijeron que iba a interpretar a Renesmee, me puse a bailar de alegría. Trabajar con Bill Condon es todo un honor... cuando sea mayor y me convierta en directora de cine, quiero ser como él", admite Foy.
"Todos tuvieron la misma reacción con Mackenzie, no solamente parece una combinación perfecta de lo que Rob y Kristen podrían crear, sino que posee una cualidad natural como de otro mundo. Es deslumbrante, pero también posee esa cualidad de parecer que tiene el alma de alguien de 100 años de edad. Sus ojos transmiten una sabiduría que creíamos que habría que crear digitalmente", agrega Godfrey.
El papel suponía la primera vez que Foy pisaba un plató de cine. Los cineastas usaron una serie de dobles de distintos tamaños y edades, y llevaron a cabo una sofisticada sustitución de rostro, que utilizaba la interpretación de Mackenzie en los cuerpos de otras actrices más jóvenes. "Mackenzie interpretó tan bien las escenas en las que hace de su tamaño, que queríamos intentar usar su interpretación cuanto nos fuera posible cuando interpreta versiones más jóvenes de sí misma", prosigue Godfrey.
"Renesmee tiene que acabar más o menos de la edad de Mackenzie pasado cierto punto de la película, así que fuimos retrocediendo, siguiendo la trayectoria que la llevara desde aquí hasta allí, a lo largo de los meses en los que se desarrolla la película", explica Condon. "Preparamos una serie de tablas muy específicas sobre el aspecto que tendría en las sucesivas edades. Elegimos niñas, desde bebés hasta unos 5 o 6 años de edad, que se encargarían básicamente de poner el cuerpo de Renesmee y luego insertábamos el rostro debidamente ajustado de Mackenzie y su interpretación".
Foy añade: "Para interpretar este personaje, hubo que hacer muchas cosas por ordenador. Mi mamá me ayudó a elegir viejos vídeos y fotos mías de pequeña y de bebé. Tengo que ir e interpretar todas las partes porque necesitan mi cara, y luego cambian el resto de mi cuerpo. Mientras me escanean la cara, tengo que quedarme muy quieta. A veces, me quedo ahí sentada y mantengo la cabeza muy quieta y no muestro emociones, otras veces me piden que diga líneas de diálogo e interprete las emociones. En realidad es muy divertido intentar actuar a la vez que mantienes la cabeza quieta. Es como un reto".
"Mackenzie realizó su interpretación facial en lo que parece una especie de silla de dentista aterradora", explica Condon. "Interpreta cada escena con los mismos ángulos con los que las rodamos y luego tomamos su rostro, lo pasamos a la edad adecuada y lo juntamos con el cuerpo de la chica que estuviera en el set. Fue un proceso intenso de efectos visuales en el que invertimos la mayor parte de 2012".
La imaginación de un niño es una gran ventaja al trabajar con efectos visuales. "La verdad es que todo eso me pareció super, super divertido", desvela. "No todos los días puedes levantarte, vestirte, ir a un plató y ver todo un mundo de película. Mola mucho y nunca, jamás, me parecerá agotador hacer algo así. Es cierto. Me gusta trabajar sobre fondos verdes y con efectos".
Meyer prosigue: "Vamos a ver crecer a esta niñita. Va a quedar asombroso. Estoy deseando ver el resultado final. Hemos tenido mucha suerte con Mackenzie. Fue como un regalo del cielo porque, no solamente era perfecta, sino que también es una gran actriz y muy trabajadora. A esta chica le encanta. Le encanta actuar. Quiere estar allí toda la noche. Está siempre muy animada y es totalmente profesional. Tiene alergia a los frutos secos, por lo que tuvimos que guardar todos los frutos secos del plató a cal y canto para protegerla. Cuando se marchó de Baton Rouge, dejó un montón de frutos secos en la mesa del catering con una nota para el equipo agradeciéndoselo. Es sumamente atenta y encantadora a todos los niveles, es un placer tenerla en el plató. Fue una gran suerte dar con Mackenzie Foy".
Durante el rodaje, Foy tenía una edad similar a la que tenía Stewart cuando la actriz trabajó con Jodie Foster, otra antigua actriz infantil, en la película "La habitación del pánico". Condon señala: "Kristen ya ha pasado por eso. Ahora trataba de enseñar un poco a alguien cómo funciona todo. Se pasaban horas juntas. Cuando estábamos listos para rodar, a las que más costaba sacar de su conversación eran a Kristen y Mackenzie. Se hicieron muy íntimas".
A los actores les resultó muy sencillo acostumbrarse a interpretar a una familia unida. Stewart afirma: "Ha sido una gran suerte contar con Mackenzie. Cuando trabajas con buenos actores, todo se te hace más real y natural, y se crea un ambiente más completo. Mackenzie es tan lista que le encanta hacer esto. Seguramente sepa más sobre lo que está pasando y cuál es la siguiente escena que toca que la mayoría de los actores del plató. Es sencillamente asombrosa y me siento muy orgullosa de tenerla interpretando a mi hija".
"Kristen es muy maja", afirma Foy. "Al interpretar las escenas, me hace sugerencias, déjame hacer esto o aquello, y me ayuda mucho. Además, trabajar con Rob Pattinson es muy divertido, porque es muy gracioso, es un ganso y es realmente agradable. A veces también me hace sugerencias y otras simplemente se le escapa la risa".
"Mackenzie es genial", confirma Pattinson. "Está muy segura de sí misma para ser tan joven, es muy lista y tiene mucho talento. Ha tenido que hacer cosas muy difíciles. Ha tenido que poner el rostro sobre el cuerpo de otras muchas niñas de distintos tamaños y edades, lo que es verdaderamente difícil para cualquier actor, no digamos ya para una niña que está haciendo su primera película. Es muy graciosa. Nos ha enseñado muchas cosas sobre la vida y sobre cómo ser educado con la gente. Es muy profesional y le gusta cobrarnos multas por cada taco que soltemos. Ya nos ha sacado mucho dinero a Kristen y a mí".
"Algunas de las escenas entre ellos en la segunda parte eran preciosas", asevera Meyer. "Había un aire muy cordial entre Taylor y la pequeña Mackenzie. Eran amiguetes. Mackenzie lo adoraba y él pensaba que era la niña más mona y graciosa del mundo. Se llevaban muy bien, podía sentirse que había una relación muy natural entre ellos".
"Taylor es a una persona divertida y encantadora. Jugaba conmigo todos los días, como a intentar atraparme la mano. La movía rápido, arriba, abajo, demasiado lento... Jugamos mucho a eso, o también a ver quién podía mantener la mirada más tiempo. Jugábamos a un montón de cosas juntos y luego me tenía que ir a clase", recuerda Foy.
"Ojalá hubiéramos podido tener una cámara enfocando solamente a Taylor y Mackenzie fuera de cuadro", opina Meyer. "A él le parecía la niña más encantadora del mundo y ella lo adoraba. Tenían una relación estupenda, como de hermano y hermana, que era muy divertida de ver. Mackenzie afectó a la gente de maneras de lo más dispares. Kristen se sintió muy maternal hacia ella. Rob se entendía muy bien con ella. Hacía aflorar en la realidad las emociones que luego también veíamos en la pantalla".
A Lautner le encantaba hacer de hermano mayor en el plató. "Ni siquiera sé por dónde empezar con Mackenzie. Es la niña más mona del mundo, muy divertida y llena de talento", la elogia Lautner. "Y además es muy lista... básicamente, todo el mundo adora a Mackenzie. Nos divertimos mucho pasando el tiempo con ella y encima lo hizo asombrosamente bien interpretando a un personaje fundamental. Es una película muy intensa, que vuelve a tener mucha acción. Todos los personajes se ven de forma distinta a como se habían visto hasta ahora. Todo empieza a tener sentido en LA SAGA CREPÚSCULO: AMANECER (PARTE 2). Jacob ha superado por fin lo de Bella... Dios mío, es un milagro".
Las familias de Bella y Edward: Charlie y los Cullen
Billy Burke vuelve a interpretar una vez más a Charlie Swan, padre de Bella y jefe de policía de Forks. El aquelarre de los Cullen, compuesto por Edward, así como por Peter Facinelli como Carlisle, Elizabeth Reaser como Esme, Kellan Lutz como Emmett, Nikki Reed como Rosalie, Jackson Rathbone como Jasper y Ashley Greene como Alice, también retoman todos sus papeles. El conocido actor Wendell Pierce aparece como el humano J. Jenks, que servirá para conocer un nuevo detalle sobre el pintoresco pasado de Jasper.
Por fin ha llegado el momento de que Charlie conozca la existencia de criaturas mágicas, aunque sin llegar a saber toda la verdad sobre su hija y su familia política. "Jacob no puede decirle a Charlie que son vampiros, pero lo que sí puede hacer es mostrarle a Charlie lo que él es", explica Godfrey. "Hay una escena muy divertida en la que Charlie está cortando leña y Jacob se transforma en lobo delante de él. El mensaje es: el mundo no es como tú crees que es y tienes que ver a tu hija".
Lautner prosigue: "Jacob descubre que todos, incluida Bella, van a tener que marcharse de Forks para mantener el secreto y la seguridad, así que Jacob siente que tiene que hacer algo. Se va directo a toda prisa a casa de los Swan para enseñarle a Charlie algo que no ha visto nunca. De repente, Jacob se transforma en un hombre lobo gigante, y así es como Charlie descubre por primera vez que existen todos esos elementos sobrenaturales".
"Todas las criaturas que saben lo que está pasando lo encuentran necesario, no solo para proteger lo que tienen, sino para proteger al propio Charlie, para hacerle partícipe de parte del secreto", explica Billy Burke. "Se lo dicen por el bien común y no tiene más elección que creérselo".
"A Charlie le dicen que Bella y Edward han adoptado a una niña y, cuando se la presentan, se da cuenta sobre la marcha de que la pequeña posee no solamente algo único y quizá incluso extraño, sino que también reconoce el gran parecido que guarda con su hija", continúa Burke. "No tarda nada en atar suficientes cabos para pensar que esa niña podría tener algo de su propia sangre".
Stewart explica: "Charlie sabe que Jacob tiene algo un tanto extraño y luego está el hecho de que mi hija adoptiva se parezca mucho a mí, todas esas cosas le resultan fáciles de soportar si se limita a fingir: mientras estén todos contentos, mejor no pregunto nada".
La actriz agradeció la experiencia de trabajar en varias películas con Burke: "Es divertido hacer algo durante tanto tiempo, porque se crean dinámicas muy especiales con los demás actores en una película que continúan en las posteriores, y estás deseando tener escenas con ellos en las siguientes entregas. Echando la vista atrás, esas han sido algunas de las mejores escenas", comenta Stewart. "Billy y yo tenemos ocasión de hacerlo una y otra vez y, como esas escenas son tan escasas a lo largo de la serie, tanto para interpretarlas como para verlas, cuando llegan, te hacen sentir como en casa".
Burke agrega: "Ha sido un trabajo maravilloso para mí durante cuatro años. Siempre me gusta volver y disfruto interpretando a este tipo. En realidad, Charlie Swan y yo no tenemos mucho en común, pero me cae bien. Me hace reír. Me gusta hacer de él y lo he pasado estupendamente. Si hubiera más libros, volvería para interpretar otra vez a Charlie, pasármelo bien y tener ocasión de formar parte de lo que ya es, al fin y al cabo, historia de Hollywood".
Algunas de estas escenas resultan muy divertidas y sirven como contrapunto al peligro mortal que no tardará en dominar la trama. En algunas de ellas participan los miembros del clan Cullen. "Cuando Charlie se dirige a ver a Bella por primera vez desde que se ha convertido en vampiro, ella tiene que serenarse lo suficiente para estar presentable. En el libro, los demás Cullen le dan ciertas indicaciones sobre cómo sentarse y hablar, pero Bill quería ir más lejos. Quería que los Cullen la instruyeran de verdad e hicieran unas lecciones rápidas, que ella no acaba de captar", recuerda Rosenberg.
"Le estábamos enseñando a Bella cómo ser un vampiro, pero actuar como un humano", prosigue Peter Facinelli. "Que la familia Cullen tenga que enseñarle a Bella cómo ser humana queda bastante raro, ya que a los Cullen no se les da precisamente bien hacerse pasar ellos mismos por humanos. Siempre están intentando encajar, aunque no acaban de hacerlo. Pero se creen verdaderos expertos, por lo que resulta muy divertido. Nos lo pasamos bien rodando esa escena".
"Cuando la familia Cullen llegó al set, fue como una reunión", asegura Condon. "De pronto, este grupo de actores que habían empezado juntos, volvían a estarlo, y fue divertido ver cómo se restablecía la dinámica familiar. Todos tienen vínculos y pasados interesantes, y se convirtió más bien en un gran esfuerzo de grupo".
"He disfrutado con un montón de detalles distintos en este guión y estaba deseando hacer la escena del pulso con Kristen", aporta Kellan Lutz. "Es uno de los grandes momentos de mi personaje, y los fans lo esperan con impaciencia. Fue divertido de rodar".
"En ciertos aspectos, es un alivio para nosotros que Bella ya sea también un vampiro", observa Elizabeth Reaser. "Bella es feroz; la verdad es que podría matar a cualquiera de nosotros. Es una neófita, lo que la hace peligrosa y más fuerte que todos nosotros, y un poco... imprudente, pero es estupendo que sea uno de nosotros. Es divertido verla tan poderosa, fuerte y rápida".
"Jasper ha tratado con muchos neófitos, como se pudo ver en Eclipse", explica Jackson Rathbone. "Bella ha superado ampliamente cualquier expectativa que Jasper o Alice pudieran haber tenido en cuanto a cómo se adaptaría, sus poderes y su fuerza. Jasper sabe que es una formidable aliada para los Cullen".
"Bella lleva muy bien su transformación en vampiro neófito, y eso desconcierta un poco a Jasper", admite Rathbone. "Está muy sorprendido, pero a la vez se siente orgulloso de ella. Además, por fin podrá estar cerca de ella sin querer matarla. Pone en evidencia a Emmett y demuestra lo fuerte que es, y tiene todos esos nuevos poderes que empieza a darse cuenta de lo útiles que resultarán para el final de la película".
El bebé tiene especialmente encantada a Rosalie. "Está en modo madre, ocupándose del bebe y luchando por su familia", plantea Nikki Reed. "En el libro, algunos de los mejores momentos son entre Rosalie y Renesmee. Se trata de un sueño hecho realidad para Rosalie. Es muy agradable ver el estrecho lazo que se crea entre Rosalie y Renesmee, porque es lo que siempre había querido ella. La familia apoya totalmente su relación y también está muy agradecida de que Rose sea capaz y esté lista para ser madre. Está preparada. Aquí es donde entra la familia y todos se esfuerzan y contribuyen mientras Bella está sumida en su transformación".
"Mi mayor temor con Rosalie desde el primer momento siempre fue que resultara muy superficial. Sí, es una incomprendida, pero en el libro está menos incomprendida, porque se sabe más sobre por qué se comporta como lo hace", apunta Reed. "En la segunda parte, Bella y ella tienen ese momento de triunfo juntas, de haber superado todos los problemas de la primera parte. Evidentemente, todos están completamente locos por Renesmee, pero Rosalie fue la defensora más acérrima de Bella durante su embarazo y la ayudó a salir adelante. Bella y Rosalie tienen ese vínculo a lo largo de la segunda parte".
Surge un problema cuando confunden a Renesmee con un niño inmortal. "Una regla cardinal del mundo de los vampiros es que no se crean niños vampiro. Es algo que simplemente no se hace. Se castiga con la muerte", explica Facinelli. "Siembran el caos, así que, cuando los Vulturis se enteran, no se molestan en preguntar. Se ocupan del problema y de todo el que lo rodee. Descubrimos que los Vulturis saben de la existencia de Renesmee y no hay manera de hacérselo entender: Pero, esperad un momento. Solo es medio vampiro, también es medio humana. No se molestarían en escuchar".
Como preparativo a la llegada de los Vulturis, los Cullen se dispersan por todo el mundo en busca de apoyo. "Empezamos a reunir testigos", explica Facinelli. "Lo que esperamos es conseguir frenar a los Vulturis lo suficiente para explicarles que no creamos a una niña vampiro; tenemos que explicarles que no se creó, sino que nació. Carlisle lleva 350 años vivo, así que ha conocido a mucha gente, a la que va a ver y le pide que haga de testigo, lo que básicamente significa pedirles que se jueguen la vida".
Reed prosigue: "Vamos en busca de amigos u otros familiares, gente a la que hemos conocido a lo largo de los años, para que vengan a conocer a Renesmee, para que entiendan lo que es y luego sirvan como una especie de amortiguador. Antes de que los Vulturis puedan acercarse a ella, tal vez lleguen a oír de unas cuantas personas que no se trata de una niña inmortal".
La familia se entera una vez más de las intenciones de los Vulturis gracias al don de Alice de ver posibles futuros los ve enfrentándose a los Cullen cuando la nieve haya cuajado. Jasper y ella se marchan misteriosamente del pueblo.
"Alice se ve obligada a ocultárselo a sus seres queridos. Tiene una visión en la que los Vulturis vienen a atacar a su familia, pero se da cuenta de que, si piensa cualquier cosa, Edward podrá leerle la mente", explica Ashley Greene. "Para mantenerlos a salvo, se lleva a Jasper en busca de gente que pueda ayudarlos a convencer a los Vulturis para que no destruyan a su familia. Alice deja una pista que únicamente Bella puede descubrir, acaba regresando por fin en el último tramo de la película y tiene un papel decisivo para salvar la situación".
Alice no está dispuesta a darse por vencida, así que deja una pista que solamente Bella puede encontrar... una pista que lleva a Bella hasta J. Jenks. Cuando lo conoce, Bella descubre que Jasper lleva años utilizándolo para conseguir documentación falsa de gran calidad que le permita viajar: pasaportes, carnets de conducir y certificados de nacimiento. Alice ha conducido a Bella hasta una posible medida con la que garantizar la seguridad de Renesmee... una forma de escapar de los Vulturis en caso de que la situación se ponga especialmente fea.
Condon estaba encantado de que un actor de tanto prestigio quisiera hacer un papel tan pequeño, pero a la vez importante, que no tiene más que una escena. "Me alegró mucho saber que a Wendell Pierce le interesaba. HBO estaba rodando a la vez Treme en Nueva Orleans y soy un gran fan suyo. Es la escena más larga de la película y es un auténtico duelo entre Kristen y Wendell. Se puede apreciar que hay mucho más de lo que dejan ver a simple vista, mientras se tantean el uno al otro. Es un auténtico misterio. Fue una suerte contar con tan gran actor. Kristen lo agradeció. A Rob le dio mucha envidia que Kristen tuviera ocasión de trabajar con Wendell, ya que él lo idolatra".
Alice demuestra que la razón de Aro para atacar no es válida. "Nahuel, un adulto medio humano, medio vampiro, demuestra básicamente que esta clase de híbridos pueden existir sin hacer peligrar nuestro secreto", explica Greene. "Pero a Aro en realidad no le importa gran cosa la supuesta niña inmortal, lo que de verdad le interesa somos yo, mi hermano y, en definitiva, Bella, por nuestros dones. Quiere que nos unamos a los Vulturis. Valiéndose de su don, Alice tiene que mostrarle lo que va a pasar en el futuro como no cambie de rumbo: Bella va a vencerlo. En última instancia, decide no atacar. Alice se marcha durante buena parte de la película pero, al final, desde luego, se redime".
Gracias a la visión de Alice, los espectadores podrán experimentar la emoción de un choque incontrolado entre las dos fuerzas contrarias de vampiros. "Por fin habrá ocasión de ver la gran batalla entre los Vulturis y los Cullen que parece que siempre está a punto de suceder, pero nunca acaba de hacerlo", comenta Greene riendo. "Se podrán ver de verdad muchas muestras de valor, cuando todos tengan que unirse y confiar los unos en los otros para proteger lo que más nos importa".
Los Vulturis: agentes de la ley o adquisición de vampiros
Michael Sheen, Jamie Campbell Bower y Christopher Heyerdahl encarnan al legendario aquelarre de los Vulturis: Aro, Cayo y Marco. Este venerable trío de vampiros eternos sopesan e imponen las leyes del mundo de los vampiros, y están protegidos por la guardia Vulturi, representada por Dakota Fanning y Cameron Bright, en los papeles de los poderosos hermanos Jane y Alec, así como Charlie Bewley y Daniel Cudmore como los matones Demetri y Felix. En LA SAGA CREPÚSCULO: AMANECER (PARTE 2), todos los Vulturis se desplazan desde Italia, realizando escalas por el camino para reclutar partidarios, hasta el Noroeste del Pacífico, para juzgar a los Cullen.
Entre los que se pondrán de parte de los Vulturis figuran: Masami Kosaka como el vampiro japonés Toshiro (asesinado por los Vulturis en Londres), el especialista brasileño de cine Lateef Crowder como el matón Santiago (a quien se pudo ver por primera vez en la sala del Oculus de los Vulturis, de nuevo en el enfrentamiento final en el campo nevado y también en la visión de Alice, persiguiendo a Jacob y Renesmee), y Amadou Ly y Janelle Froehlich como Henri e Yvette, dos de los numerosos testigos del bando de los Vulturis en el enfrentamiento culminante.
"Aro es un vampiro antiguo, que ocupa una posición de poder para mantener el orden y la ley en el mundo de los vampiros... una especie de mezcla entre el papa y la mafia", explica Michael Sheen. "Cada uno de los tres Vulturis soporta el aburrimiento de tener siglos de edad de forma distinta: Marco parece ser un vampiro de pocas palabras que ansía la aniquilación, la verdad, ya ha tenido suficiente, Cayo parece regodearse en su crueldad y Aro está completamente loco".
Aro y Marco tienen dones sobrenaturales: cuando Aro toca a alguien, puede percibir todos los pensamientos que esa persona ha tenido en su vida; Marcus puede ver las relaciones o vínculos que las personas tienen entre sí y sentir la fuerza de esos lazos. Pese a que Cayo no tiene ningún talento especial, a Aro le atrajo su ambición y capacidad para odiar. A Cayo siempre le ha interesado el aspecto punitivo de gobernar.
"Marco es el vampiro más antiguo que existe y nunca se siente muy feliz de seguir existiendo. Es el juez que observa desde lejos", explica Christopher Heyerdahl. "Es el que parece llevar su labor de juzgar hasta el extremo. Es también un constante flujo y reflujo de sentimiento y pensamiento. Oleadas de deseo de desaparecer, mientras se suceden acontecimientos de tremenda importancia, que no despiertan su más mínimo interés. Marco es estupendo, porque no dice mucho y resulta encantador interpretar a un personaje que habla únicamente cuando siente que es absolutamente necesario".
Jamie Campbell Bower prosigue: "Siempre he visto a Cayo como el esbirro de un rey que, si dicho rey flaqueaba o le surgía la oportunidad, mataría al monarca, Cayo intentaría entonces llenar el vacío de poder ocupándolo. Parece estar permanentemente furioso y muy disgustado con el mundo".
La majestuosa guardia Vulturi también incluye a vampiros con dones especiales. "Mi personaje siempre ha sido capaz de ocultarse tras su poder para infligir daño a los demás con solo mirarlos", explica Dakota Fanning. "Alec puede emitir una niebla que aísla los sentidos de la gente, así que forman una buena pareja. Lo que me encanta de interpretar a Jane es que parece inocente e infantil, pero en realidad es sumamente peligrosa y malvada".
"Felix es un guardia de élite al que se le da muy bien despedazar a otros vampiros y ser ultra-agresivo y fuerte. Considero que tener una gran habilidad para arrancar brazos y piernas es un poder", bromea Daniel Cudmore, que mide 1,98 m. "Es divertido interpretar a alguien que es simplemente sanguinario y no le importa mucho ser así. Así es él y ya está".
"Se describe a Demetri como el mejor rastreador del mundo, mucho más poderoso que James o Alistair", aporta Charlie Bewley. "Puede rastrear el tenor de los pensamientos de alguien. Demetri no ha rehuido nunca lo que es, y es un vampiro muy agresivo".
En esta entrega, los espectadores ven por primera vez a los Vulturis en su castillo de Volterra, cuando reciben falsa información de Irina Denali de que los Cullen tienen una niña inmortal. "Escribir para Michael Sheen es muy divertido, su personaje posee una gran riqueza y pude crear un par de escenas nuevas para él", confiesa Rosenberg. "En el libro, todo sucede desde el punto de vista de Bella, y te enteras de cosas una vez sucedidas que pueden haber pasado en Italia. En la película, podemos mostrar la escena, así que pude imaginar qué estaba sucediendo en la sala del Oculus. Michael Sheen es simplemente delicioso. Aro quiere lo que quiere. Se ve forzado hasta el límite al final y se deja llevar. Michael es un actor extraordinario para encarnar a ese personaje".
Los Vulturis van a por los Cullen con el pretexto de hacer respetar la ley que prohíbe la creación de niños inmortales, un tabú para los vampiros, dado que es imposible razonar con un niño loco de sed. Hace mucho, los Vulturis prohibieron a los niños inmortales porque corrían el riesgo de exponer el mundo secreto de los vampiros a los humanos, un concepto que queda ilustrado a través de un flashback a una aldea rusa del siglo XII.
"Hay pocas oportunidades de salir del mundo de Forks, y tener a Aro y a su gente con sus vestidos de época era genial, además de ser la primera escena en la que pude trabajar con Dakota Fanning", comparte Condon. "También hay una antorcha ceremonial que ves primero en la aldea rusa y vuelves a ver en el enfrentamiento. La pompa de los Vulturis al llegar me recuerda a Roma y a las visitas papales con los cardenales, están recibiendo a la corte, dictando sentencia y ejecutando el castigo".
Sin embargo, los Vulturis también están condenando a los Cullen, porque Aro quiere apropiarse de los talentos especiales que poseen ciertos miembros de su aquelarre. "Aro siempre ha codiciado a Alice y su don. Además, desconfía de la fuerza del clan Cullen y de su elección de ser vegetarianos, pero no deja de ser todo una treta para hacerse con Alice", explica Godfrey. "Un verdadero crimen como el de crear a un niño inmortal proporciona a Aro la excusa perfecta para reunir a todos los Vulturis, y a tantos testigos como pueda, y desplazarse a Forks para someterlos a juicio. Gracias a eso, seguramente consiga destruirlos a todos para poder quedarse con los que tienen dones".
Condon agrega: "Aro lleva siglos encerrado bajo tierra en ese ridículo lugar de Volterra y se ha vuelto completamente loco. Me encantan los grandes riesgos que asume Michael Sheen. El momento en el que estalla con esa risa de loco capta perfectamente para mí el tono que necesitaba esta película. Otro director podría haberse tomado el filme completamente en serio, y podría haber sido una decisión interesante. Pero, por sus raíces en la literatura de ficción para jóvenes adultos, para mí poseía cierto nivel de teatralidad que era importante".
"La risa de Aro es interesante porque no estaba seguro de si me permitirían hacerla, ya que es muy exagerada", sostiene Sheen con una sonrisa. "Pero me gustaba porque normalmente muestra una imagen falsa, con un tono de voz muy suave, quería algo que de vez en cuando mostrara fugazmente cómo era de verdad... como un destello fugaz. De repente te hacías una idea de lo que verdaderamente pasaba por su cabeza. La risa era una forma bastante buena de transmitir eso de forma muy económica y sorprendente, que da una sensación de locura total, de algo de pesadilla, completamente demente. A primera vista, la risa parece algo agradable, pero en realidad desvela lo absolutamente loco que está. Es algo que resuena mucho después de haber salido de una habitación, una risa que se te queda grabada de forma horrible y escalofriante. No querrías volver a oír jamás esa risa cerca de ti".
Pese a sentirse en un primer momento consternado al no encontrar a Alice presente en el campo de batalla, Aro queda rápidamente cautivado al descubrir la verdadera naturaleza de Renesmee, mitad humana, mitad vampiro. "La primera vez que ve a Renesmee, Aro siente una mezcla de curiosidad, quizá miedo, y rabia", desvela Sheen. "Justo antes de que Renesmee le toque la cara, sientes verdadero miedo por esa niñita. Debería resultar horrible y extraño, pero entonces se vuelven las tornas cuando ella le pone la mano en el rostro y de repente lo domina por completo. Cuando descubre el don de la pequeña, el equilibrio de poder cambia por completo".
Los Vulturis no habían visto ni oído hablar nunca antes de híbridos de humano y vampiro. "Es preciosa", observa Heyerdahl. "Nos han traído algo totalmente nuevo... un ser cariñoso, tranquilizador, inteligente, radiante y aún en crecimiento, que podría ser capaz de unir a vampiros y humanos... es verdaderamente el futuro".
"Los sentimientos de Aro hacia Renesmee cambian radicalmente en muy poco tiempo, de ser una posible amenaza, pasa a ser tal vez útil y luego a convertirse en una nueva fascinación. Le atrae Renesmee pero, al mismo tiempo, supone una decepción, dado que eso significa que ya no podrá castigar a los Cullen, lo que pone en peligro su objetivo último de intentar quedarse con esas personas que siempre había querido para su colección particular".
Después de que Cayo mate a Irina como castigo por denunciar equivocadamente a Renesmee como niña inmortal, los caldeados ánimos casi se disparan. Como preludio al combate, Jane inflige su dolor, Alec despliega su niebla entumecedora sobre sus rivales y entonces todos los Vulturis descubren el don de Bella.
"Cuando las dos facciones se encuentran frente a frente, queda claro que los Cullen cuentan con ciertas habilidades defensivas desconocidas para los Vulturis hasta ese momento. Aro está atónito", admite Sheen. "Hay una especie de escudo protector que surge de Bella, la vampiro neófita. Su poder tiene sentido, porque incluso antes de convertirse en vampiro, podía de algún modo evitar que las habilidades de Jane la afectaran. Eso cambia mucho las cosas. Por supuesto, Bella se vuelve infinitamente más interesante para Aro como posible pieza de ajedrez de su partida".
"A Jane no le gustan nada los Cullen, sobre todo Bella. Está claro que siente cierta envidia. A Jane no le hace mucha gracia ver a Bella convertida en vampiro, o que tenga un poder especial, o ni siquiera que siga viva", comenta riendo Fanning. "El escudo de Bella hace a Jane prácticamente inservible, algo que le resulta muy frustrante y no hace más que aumentar la rivalidad. Jane es leal fundamentalmente a Aro, y hay un momento en que el Vulturi le dice a Bella que es preciosa como vampiro. Aro ve una nueva joya que quiere incorporar a su colección y Jane ya no es su niña mimada. Por culpa del escudo de Bella, Jane necesita ahora desarrollar habilidades físicas, en vez de poder limitarse a mirar a alguien para infligirle dolor".
Heyerdahl agrega: "El verdadero poder de Bella es el amor. Ese poder del amor es lo que la mueve a salvar a su familia, al hombre que ama y a su hija. Sin él, jamás habría podido descubrir que podía extender su escudo".
"Bella es muy ladina, ¿verdad? Demetri y Felix se sienten casi satisfechos de que Jane y Alec se queden sin sus poderes especiales, porque así ellos pasan a cobrar mayor relevancia", señala Cudmore. "Nuestra destreza y fuerza bruta serán claves cuando empiece la gran batalla".
Mientras el preámbulo continúa intensificándose, Alice y Jasper llegan al campo nevado. Cuando Alice le muestre a Aro su visión de cómo se desarrollará la inminente batalla, los espectadores tendrán ocasión de ver los extraordinarios talentos de los distintos vampiros enfrentados entre sí - don contra don y fuerza contra fuerza.
"Aro no es tonto. Ve la posibilidad de nuestra inminente muerte, si da este paso, es muy probable que nos aniquilen a todos y, más concretamente, a él", agrega Heyerdahl.
"Se perderían vidas... Alice se lo muestra a Aro para tratar de evitar que empiece el combate", prosigue Fanning. "Si ve lo que le depara el futuro, tal vez prefiera no atacar".
Dado que ahora se juega la vida, Aro sabe que debe optar por la paz. "Aro no libra esa clase de luchas", asegura Stephenie Meyer. "No le van las peleas justas. Lo suyo son las ejecuciones. No va a jugarse la vida metiéndose en algo así. De pronto, se encuentra que corre peligro. Así que la decisión está tomada. El don de Bella, que hace peligrar la vida de Aro, lo cambia todo. Lo que hicimos con la batalla es idear una forma de mostrarle eso tanto a él como al público. Puede ver su muerte y se da cuenta de lo que le espera si sigue adelante con esto, y deja muy claro por qué decide no hacerlo. Me gusta, porque Aro no es un tipo valiente".
Pero hace falta una última garantía, algo que pruebe que Renesmee no será una amenaza, puesto que su rápido crecimiento hace del futuro una gran incógnita. Para satisfacer ese último requisito de Aro, Alice presenta a otro vampiro que nació de una madre humana. El indio ticuna Nahuel y su tía Huilen acuden desde Sudamérica con Alice y Jasper para ofrecer esa prueba y una vía de paz, que proporciona a Aro una salida para poder echarse atrás.
Los lobos: las manadas se reconcilian para hacer frente a una amenaza mayor
Además de Jacob, varios miembros de la nación india quileute regresan para LA SAGA CREPÚSCULO: AMANECER (PARTE 2), incluidos Chaske Spencer como Sam Uley, Julia Jones y Booboo Stewart como los hermanos Leah y Seth Clearwater, así como Alex Rice como su madre Sue. Otros miembros de la manada (Paul, Embry, Jared y Quil, así como varios jóvenes quileute nuevos) luchan en su forma de lobo en la batalla final.
La división de la manada que se produjo en "La Saga Crepúsculo: Amanecer (Parte I)" está solucionada. "Jacob y Sam se reconcilian cuando los Vulturis entran en juego, porque desde ese momento todos tienen mucho que perder", explica Chaske Spencer. "Tienen que proteger no solamente a Bella y a Renesmee, sino toda la zona alrededor de Forks. Unen fuerzas, y eso me gusta. Es un buen modo de rematar la historia".
"Sam se topa con Alice y Jasper cuando se están marchando del pueblo y esta le entrega una nota para su familia", señala Lautner. "Jacob y Sam hacen las paces cuando acude a casa de los Cullen para entregar la nota. Nos damos cuenta de que no tenemos elección... tenemos que ser hombres. A medida que van llegando más vampiros a la zona, cada vez más quileute se van transformando a muy temprana edad y con mayor frecuencia. Tenemos que dejar atrás el pasado y preparar a estos jóvenes quileute, educarlos como hizo Sam con Jacob".
El único propósito de la manada de lobos es proteger a los humanos de los vampiros. "A la tribu no le hace especial gracia que empiecen a aparecer todos esos vampiros, pero se avecina un mal aún mayor. Optan por el menor de los males posibles, que es aliarse con el ejército de vampiros amistosos, contra una amenaza mucho mayor", aporta Rosenberg.
Sue Clearwater, como leal miembro del consejo tribal quileute, conoce la existencia del conflicto sobrenatural que se libra en La Push y Forks. "Nuestra madre ayuda a consolar a Charlie, el padre de Bella, porque vive en un mundo en el que sabe que existen vampiros y hombres lobo", comenta Booboo Stewart. "Sabe lo que está pasando".
El vacilante principio de romance entre Sue y Charlie, que pudo apreciarse por primera vez en la boda, se ha convertido finalmente en algo más. "Su marido murió hace años y sus hijos pasan la mitad del tiempo como lobos, así que encuentra alguien de quien cuidar y con quien estar, y ese alguien es Cha