El Universo Fantástico en plató
La aventura fantástica del director Sam Raimi, "Oz. Un mundo de fantasía" de Disney, imagina los orígenes del popular mago, que debutó en el primer libro de L. Frank Baum titulado "El maravilloso mago de Oz". Como precuela cinematográfica del libro, la película se adentra en los antecedentes del personaje del mago y ofrece una experiencia absolutamente única a los espectadores.

Baum, que escribió 14 novelas entre 1900 y 1920, todas ambientadas en el mundo de fantasía que creó con tanto realismo, no contó nunca con detalle los orígenes del mago. "Me gustan las historias que cuentan los orígenes y me encantó la idea de cómo el personaje llegó a ser mago", dice el productor Joe Roth. "Así que me pareció una gran idea acudir a los libros de Baum para investigar y crear sus orígenes".

Con "Oz. Un mundo de fantasía", Sam Raimi (la trilogía de "Spider-Man") aborda el proyecto más importante de su carrera de director al afirmar: "Esta es una visión enorme. Tiene una escala gigantesca. El mundo de Oz, tal y como Frank Baum lo creó, abarca muchos países y territorios diferentes. Es un universo totalmente inventado. A pesar de su grandeza, en las películas de Spider-Man había un personaje fantástico en una ciudad que todos conocemos, Manhattan. No era un mundo imaginado. Y eso es lo que Baum hizo en sus libros. Creó Oz, un auténtico universo".

La imaginativa historia, con guión de Mitchell Kapner y David Lindsay-Abaire, sigue los pasos de Oscar Diggs (James Franco), un mago de circo de poca monta y de dudosa reputación, que tiene que abandonar la polvorienta Kansas y dirigirse al brillante País de Oz. Y cuando llega, Oscar cree que le ha tocado el premio gordo ya que la fama y la fortuna están a su alcance. Hasta que conoce a tres brujas, Theodora (Mila Kunis), Evanora (Rachel Weisz) y Glinda (Michelle Williams), que no están convencidas de que sea el gran brujo que esperaba todo el mundo. Oscar tiene que enfrentarse a todo tipo de problemas en el País de Oz y también con sus habitantes. Así que deberá averiguar lo antes posible quién es bueno y quién es malo. Oscar utiliza sus juegos de magia, con ingenio, fantasía y algo de brujería, y no sólo se transforma en el grande y poderoso Mago de Oz sino también en un hombre mejor.

El director Sam Raimi comenta: "Me resulta muy interesante conocer a este misterioso personaje de Oz, que es un auténtico enigma en el libro de Baum. ¿Quién es este tipo? ¿Cómo ha llegado hasta aquí? ¿Cómo acaba con este fantástico montaje y se convierte en un líder si es un impostor?"

"Esta película explica cómo todos los personajes se convirtieron en lo que son y cuenta sus orígenes para que el público pueda comprenderlos un poco mejor", apunta la actriz Mila Kunis (Theodora). "Aporta un poco más de sinceridad y autenticidad a todos los personajes. Y, además de ser divertido y entrañable, es muy fiel a los conceptos originales que creó L. Frank Baum".

James Franco aporta su visión al decir: "En cierto sentido, la historia de nuestra película es una metáfora y una analogía de todo lo que hacemos como realizadores. Oz es un mago. Hace números de magia. En el País de Oz, crea ilusiones por otras razones. Y en eso consiste una película, en crear ilusión. Consiste en crear un mundo imaginario para el público".

"Oz. Un mundo de fantasía" puede presumir de un reparto estelar que incluye a James Franco, nominado a los Oscar® ("127 Horus" [127 horas]) como Oscar Diggs, el mago predestinado; Mila Kunis, nominada a los Globos de Oro® ("Black Swan" [Cisne negro]) como la atormentada bruja Theodora; Rachel Weisz, ganadora de un Oscar® ("The Constant Gardener" [El jardinero fiel]) como la hermana mayor de Theodora, Evanora, la bruja que manda en la Ciudad Esmeralda; y Michelle Williams, nominada a los Oscar® ("Brokeback Mountain" [Brokeback Mountain. En terreno vedado], "Blue Valentine", "My Week with Marilyn" [Mi semana con Marilyn]) que interpreta a Glinda, la Bruja Buena.

El reparto de Raimi también incluye a Zach Braff nominado a los Emmy® y a los Globos de Oro® ("Scrubs", "Garden State" [Algo en común]), que interpreta al ayudante de circo de Franco además de prestar su voz a una de las criaturas generadas por ordenador de la historia, Finley, el mono alado que acompaña al mago su periplo por Oz, y que hace las veces de Pepito Grillo; y la actriz de 13 años Joey King ("Ramona and Beezus" [Ramona y su hermana]), que pone la voz a otro personaje generado por ordenador, China Girl, la niña-muñeca de porcelana que también se une al futuro Mago en su profética incursión en Oz.

La película está producida por el veterano Joe Roth ("Snow White and the Huntsman" [Blancanieves y la leyenda del cazador], "Alice in Wonderland" [Alicia en el País de las Maravillas]), junto a cuarteto de productores ejecutivos formado por Grant Curtis (socio desde hace muchos años de Raimi que ha producido o coproducido los cinco últimos proyectos del director), el socio de Roth, Palak Patel ("Snow White and the Huntsman" [Blancanieves y la leyenda del cazador]), Philip Steuer (serie de "Las crónicas de Narnia") y Josh Donen, otro socio de Raimi desde hace mucho tiempo ("The Quick and the Dead" [Rápida y mortal], "Priest" [El sicario de Dios]).

Raimi reunió a su propio grupo de magos técnicos y del cine para dar vida al proyecto, incluyendo al galardonado director de fotografía Peter Deming, A.S.C. ("Drag Me to Hell" [Arrástrame al infierno], "Mulholland Dr.", "Evil Dead II" [Terroríficamente muertos]), Robert Stromberg, ganador de dos Premios de la Academia® ("Alice in Wonderland" [Alicia en el País de las Maravillas], "Avatar"), Bob Murawski, ganador de un Oscar® ("The Hurt Locker" [En tierra hostil], la trilogía de "Spider-Man"), el diseñador de vestuario Gary Jones ("Spider-Man™ 2", "The Talented Mr. Ripley" [El talento de Mr. Ripley], por la que fue nominado a los Oscar) y Michael Kutsche ("Thor", "Alice in Wonderland" [Alicia en el País de las Maravillas]), el compositor Danny Elfman nominado en cuatro ocasiones a los Oscar ("Spider-Man", "Spider-Man 2", “A Simple Plan" [Un plan sencillo], "Milk" [Mi nombre es Harvey Milk]), el ganador del Oscar a los Mejores Efectos Visuales Scott Stokdyk (trilogía de "Spider-Man") y el artista de maquillaje especial Howard Berger (serie de "Las crónicas de Narnia"), ganador de los Premios de la Academia, y Greg Nicotero; ambos crearon el aspecto de muchos de los habitantes de Oz, incluyendo criaturas como los Munchkins, los Tinkers y los Winkies.

Los visitantes del gigantesco rodaje de "Oz. Un mundo de fantasía", que abarcaba siete platós de las instalaciones de los Michigan Motion Pictures Studios en Pontiac, Michigan, no pusieron un pie fuera ya que todos los platós se construyeron en el interior, incluyendo la exuberante fauna de los Bosques de Whimsie. Los 111 días de rodaje se realizaron en estas instalaciones y todos los fotogramas se filmaron en los platós de los estudios. Allí se creó todo el mundo imaginario de "Oz. Un mundo de fantasía".

Para construir los platós y recrear el mundo fantástico, Raimi recurrió a Robert Stromberg, el diseñador de producción galardonado con los Premios de la Academia®. Para recrear la visión de Raimi de "Oz. Un mundo de fantasía", Stromberg creó platós tan emblemáticos como el la Ciudad Esmeralda, todos completamente inventados, junto con diseños nuevos tan esperados como la Sala del Trono de la bruja, los Bosques de Whimsie (donde Oz conoce a Theodora), el Bosque Oscuro, que sirve para presentar a Glinda, la bruja buena de la historia y China Town, cuyos habitantes están hechos de porcelana. En total, Stromberg diseñó y supervisó la construcción de 24 platós.

Al comentar el tamaño del rodaje, el director Raimi señala: "Es el reto creativo más importante al que me he enfrentado en toda mi vida. Para mí ha sido una experiencia totalmente nueva trabajar con alguien como Robert Stromberg porque nunca había tenido que construir un universo entero".

"Los otros proyectos que he realizado son mucho más virtuales", reconoce Stromberg. "En esta película en particular, quería hacer un plató que resultara teatral. No creo que eso pueda conseguirse de verdad a partir de mundos digitales. Así que la única forma de conseguir esa sensación de teatralidad era construir grandes platós en los estudios. Después se amplían utilizando efectos visuales en un papel secundario más que como protagonistas que se apoderan de todo el proceso de realización cinematográfica".

Sam Raimi añade otro plus a los platós reales: "Para mí fue muy importante contar con un montón de platós para los actores. Quería que tuvieran algo que tocar y ver que fuera real. No me importaba cómo imaginaban el mundo más allá de nuestros platós. Pero quería que Oz fuera un lugar real en la medida de lo posible".

El productor ejecutivo Grant Curtis confirma las palabras de Raimi: "Quieres ofrecer a tus actores todo lo que les dé pistas sobre su papel. Ese es nuestro objetivo. Siempre intentamos conseguir las mejores interpretaciones para contar la mejor historia posible. Y parte de esto fue desglosar lo tangible de los digital, y encontrar un equilibrio para los platós, los paisajes y el atrezzo. Ese ha sido nuestro enfoque".

Y los actores lo agradecieron. "Era emocionante ir a trabajar porque ese mundo mágico no estaba sólo en nuestras cabezas", afirma la actriz Michelle Williams (Glinda) al comentar la ventaja de trabajar en un entorno real para recrear no sólo la historia de Raimi, sino también los personajes individuales del reparto.

"Robert y su equipo nos construyeron los platós en los que hemos trabajado", apunta la actriz. "Había un Camino de Ladrillos Amarillos que era de verdad, y mi castillo era como un cuento de hadas. Estaba ante mis ojos así que no tenía que imaginarlo. Sam y Robert se esforzaron muchísimo para que los actores se sintieran a gusto en esos lugares".

El primer plató en el que Raimi situó sus cámaras fue el Kansas Circus. La ciudad de tiendas de tonos sepia se construyó en el interior del Estudio 1. El diseñador de producción Robert Stromberg afirma: "Quería algo que fuera un poco cutre. No es ese súper circo del estilo del Ringling Bros. Circus. Es un circo ambulante con poco presupuesto donde las cosas son antiguas y están gastadas. Pero eso no le impide tener personalidad y estoy muy contento con el resultado porque refleja el carácter de Oz. El quiere salir de allí y se nota muy bien la diferencia entre Kansas y Oz. Fue muy divertido diseñar todos los detalles del circo. Por supuesto, se rodeó todo el plató con pantalla azul donde añadimos el paisaje de Kansas".

La Sala del Trono fue sin lugar a dudas el plató más difícil de los creados por Stromberg. Tiene dos escaleras que permiten a Evanora hacer una entrada muy hollywoodiense arrastrando la cola de su vestido. "El plató de la Sala del Trono es único y diferente. Todo el plató se diseñó pensando en la iluminación; todo está detrás de la escalera en cascada y en la zona central hay aberturas para la iluminación, pero todo eso era en teoría. Tuve que construirlo y después verlo iluminado. El éxito de ese plató estuvo en la iluminación teatral de la pared posterior", explica Stromberg.

Pero el lujo de detalles que hay en todos los platós de fantasía también se trasladó al vestuario, el maquillaje y los efectos visuales, sin olvidar la preparación de los actores para interpretar sus papeles.

En el caso de Franco, fue aprender magia. El actor lo explica así: "De hecho, llegué dos semanas antes para trabajar con Lance Burton, el gran mago de Las Vegas. Teníamos sesiones diarias. Aprendí trucos con palomas, con fuego, a sacar objetos de la chistera y hacer que las cosas leviten. ¡Y la verdad es que me salía muy bien!”

Los diseñadores de vestuario Gary Jones y Michael Kutsche no lo tuvieron nada fácil ya que había que diseñar cientos de prendas originales para cada tipo de personaje de fantasía, desde las Brujas a los Munchkins. Un viaje a la sala de vestuario nos muestra un espacio enorme repleto de barras para ropa y estantes de sombreros hechos a mano y otros accesorios.

Los diseños de Jones y Kutsche para las tres brujas se realizaron con sumo cuidado, utilizando ilustraciones conceptuales como guía previa para diseñar los trajes y escoger las telas. Jones describe el enfoque que utilizó para perfilar las magas hechiceras opuestas a través de su vestuario: "Está claro que las brujas son claras y oscuras, como contraste entre el bien y el mal. Utilizamos un azul verdoso en consonancia con el diseño de la Ciudad Esmeralda de Robert Stromberg, para recrear la bruja malvada. Como no podía ser menos, Glinda es la chica pura y cristalina de la historia, así que creamos tres vestidos blancos para ese personaje".

Jones trabajó estrechamente tanto con Raimi (para quien diseño la segunda película de "Spider-Man") como con James Franco para crear el aspecto del personaje del mago y afirma: "Sam tenía una idea muy clara de lo que quería para la ropa de Oz. También me había reunido con James y todos íbamos en la misma dirección, así que fue fantástico".

"En esta película sólo tengo un look", cuenta Franco, "el traje de tres piezas que Oz lleva en Kansas". Y con esa sonrisa tan carismática que le caracteriza, añade: "Creo que no me equivoco si digo que es mi traje favorito de la película. La gente vestía muy bien en aquella época, así que me encantó llevar ese traje de tres piezas".

Al referirse al vestuario, Rachel Weisz señala: "Los trajes son muy extravagantes y exagerados. El mío para Evanora es muy brillante y lleva un montón de plumas. Es un auténtico disfraz. Es muy estrafalario. Me encanta".

En "Oz. Un mundo de fantasía" hay un montón de personajes diferentes que incluyen más de cien personajes que exigían multitud de prótesis. Los artistas maquilladores Howard Berger y Greg Nicotero diseñaron y realizaron todos los efectos de maquillaje que necesitaban muchos personajes de la película como las brujas, China Girl, los Munchkins, los Winkies y los Tinkers.

Berger, ganador de un Premio de la Academia®, habla sobre el enfoque del equipo en este proceso: "Tuvimos que coger los conceptos del libro y volverlos a diseñar para que encajaran en el mundo que Sam Raimi estaba convirtiendo en un universo totalmente nuevo, que necesitaba ser distinto y novedoso a la vez que familiar. Son personajes de fantasía, pero hasta cierto punto se basan en la realidad. Queríamos que dieran la sensación de ser reales, de estar vivos”.

Scott Stokdyk, el supervisor de efectos visuales galardonado con los Premios de la Academia®, también tampoco lo tuvo fácil. Afirmaba: "Nos va a llevar más de un año hacer todo los efectos de esta película. Todo depende de cuánto dure el montaje, pero podríamos tener hasta 500 tomas de efectos visuales".

Para el rodaje, se utilizó una marioneta como referencia de un personaje generado por ordenador. Para esta tarea, Sami Raimi recurrió al artista de marionetas Philip Huber con el fin de crear el personaje de China Girl, como si fuera una figurita de 45 centímetros. China Girl, a la que pone voz Joey King, está hecha de porcelana, como todo lo que hay en China Town. La frágil pero resistente China Girl entabla amistad con Oz.

Huber creó los movimientos que hacía China Girl en sus escenas. Pero en la película acabada, el público no ve la marioneta física, aunque los animadores fueron fieles al estilo de sus movimientos. La marioneta tenía una cara neutra, pero después, en los efectos generados por ordenador, se añadieron los rasgos de Joey King, para que fuera más expresiva.

"Oz. Un mundo de fantasía" se rodó en 3D utilizando cámaras 3D. Fue una experiencia nueva para Raimi. Rodar en 3D cambió su manera de trabajar con la cámara ya que las cámaras 3D no son tan móviles y al director le gusta desplazar la cámara por todas partes. “Aún así hay momentos en los que muevo la cámara más rápido o no me ando con tantos miramientos", dice el director. Y añade: "Además los técnicos no quieren que toque las dos lentes porque tienen que estar perfectamente alineadas".

Cuando los espectadores vean la película, al director Sam Raimi le gustaría que vinieran al cine para ver una gran aventura y una historia con la que se pueden identificar. "Espero que se rían y que se enamoren del Mago", dice Raimi. "y espero que les aterrorice la Bruja Mala y los babuinos alados. Creo que les esperan unas cuantas sorpresas en el Camino de Ladrillos Amarillos”.


Sobre la película
La aventura fantástica de Disney "Oz. Un mundo de fantasía", dirigida por Sam Raimi, imagina los orígenes del popular personaje del mago de L. Frank Baum. Oscar Diggs (James Franco), un mago de circo de poca monta y de dudosa reputación, tiene que abandonar la polvorienta Kansas y dirigirse al brillante País de Oz. Está convencido que le ha tocado el premio gordo y que la fama y la fortuna están a su alcance. Pero las cosas cambian cuando conoce a tres brujas: Theodora (Mila Kunis), Evanora (Rachel Weisz) y Glinda (Michelle Williams), que no están nada convencidas que Oscar sea el gran mago que todo el mundo estaba esperando. Oscar tiene que enfrentarse a todo tipo de problemas en el País de Oz y también con sus habitantes. Así que deberá averiguar lo antes posible quién es bueno y quién es malo. Oscar utiliza sus juegos de magia, con ingenio, fantasía y algo de brujería, y no sólo se transforma en el grande y poderoso Mago de Oz sino también en un hombre mejor.

"Oz. Un mundo de fantasía" está producida por Joe Roth, con guión de Mitchell Kapner y David Lindsay-Abaire (crédito no definitivo). Grant Curtis, Palak Patel, Philip Steuer and Josh Donen son los productores ejecutivos. "Oz. Un mundo de fantasía" se estrena el 23 de marzo de 2013 en los cines de España.


Curiosidades
- "Oz. Un mundo de fantasía" de Disney imagina los orígenes del popular mago, que debutó en el primer libro de L. Frank Baum titulado "El maravilloso mago de Oz". Baum, que escribió 14 novelas entre 1900 y 1920, todas ambientadas en el mundo de fantasía que creó con tanto realismo, no contó nunca con detalle los orígenes del mago. "Oz. Un mundo de fantasía" es una precuela cinematográfica de los libros de Baum y ofrece una experiencia absolutamente única a los espectadores. Aunque algunos de los personajes de "Oz. Un mundo de fantasía" están en los libros de L. Frank Baum, se han reinventado. Además muchos otros personajes de la película no se han visto nunca, como es el caso de China Girl y los Quadlings.

- El diseñador de producción Robert Stromberg, ganador de un Oscar®, ha creado el universo de fantasía de "Oz. Un mundo de fantasía". En total, Stromberg diseñó 24 platós completos más varios platós parciales, lo que hace un total de cerca de 30. Stromberg creó platós emblemáticos como el famoso Camino de Ladrillos Amarillos y la Ciudad Esmeralda, todos completamente inventados, junto con diseños nuevos tan esperados como la Sala del Trono de la bruja, los Bosques de Whimsie (donde Oz conoce a Theodora), el Bosque Oscuro, que sirve para presentar a Glinda, la bruja buena de la historia y China Town, cuyos habitantes están hechos de porcelana.

- James Franco, que interpreta a Oscar Diggs (alias Oz), tuvo que aprender trucos de magia para meterse en la piel de este mago de poca monta que trabaja en un circo. Llegó al plató dos semanas antes para poder trabajar con Lance Burton, el mago de Las Vegas. Franco recibió clases diarias en las que aprendió trucos con palomas y fuego, así como a sacar objetos de la chistera y hacer que las cosas leviten.

- El equipo de producción contrató al artista e ilustrador alemán Michael Kutsche para hacer realidad el aspecto y los mundos de las brujas, tal y como los había imaginado Robert Stromberg, diseñador de producción. Kutsche conceptualizó los trajes de las brujas y también fue diseñador de vestuario de la película junto con Gary Jones.

- Durante 23 semanas, el diseñador de vestuario Gary Jones y su equipo se embarcaron en un ambicioso proyecto para vestir a más de 1.500 actores, desde el Munchkin más diminuto al Winkie más alto. Se elaboraron más de 200 prendas sólo para los protagonistas Oz, Theodora, Glinda y Evanora.

- James Franco sólo viste una prenda en la película, el traje de tres piezas que Oz lleva cuando le expulsan de Kansas. Pero Gary Jones, el veterano diseñador de vestuario, investigó detenidamente la época de 1880-1930 para crear el traje perfecto. Después, se reunió con James Franco en Nueva York para enseñarle fotos antiguas de principios del siglo XX que inspirarían su diseño definitivo, un chaqué negro.

- Se han utilizado más de 3.000 elementos de atrezzo en "Oz. Un mundo de fantasía", y de ellos, 1.400 se fabricaron especialmente para la película. Esto no incluye las 5.000 monedas que el atrezzista Russell Bobbitt hizo para llenar el cofre del tesoro de Oz. Una de las caras de la moneda está grabada con una imagen del Camino de Ladrillos Amarillos y la otra con una imagen del escritor L. Frank Baum.

- El jardinero Dan Gillooly encontró con gran acierto elementos naturales en los alrededores de Detroit para realzar y embellecer los platós de "Oz. Un mundo de fantasía". Durante su búsqueda, se topó con un huerto de melocotoneros secos y utilizó las ramas para crear el espeluznante Bosque Oscuro. Otro hallazgo que añadió textura y carácter al Bosque Oscuro fueron los cardos, provenientes de un campo cercano que encontró en sus excursiones.