En los duros años de la posguerra rural en Cataluña, Andreu, un niño que pertenece al bando de los perdedores, encuentra en el bosque los cadáveres de un hombre y su hijo. Las autoridades quieren cargarle las muertes a su padre, pero él, para ayudarle, intenta averiguar quiénes son los auténticos responsables. En este recorrido Andreu desarrolla una conciencia moral frente a un mundo de adultos alimentado por las mentiras. Para sobrevivir, traiciona sus propias raíces y acaba descubriendo el monstruo que habita en él.
Sinopsis larga
Tras el asesinato de Dionís Seguí y su hijo de corta edad, la familia formada por Farriol, su esposa Florencia y su hijo de once años Andreu, se desmorona. Son los años más duros de la posguerra rural en Cataluña y Andreu, que pertenece al bando de los perdedores, ve como su padre, a quien adora, tiene que huir al verse amenazado por las autoridades que quieren cargarle las muertes. Su madre, ahora sola y trabajando día y noche en una fábrica textil, no puede mantenerlo, así que Andreu se ve obligado a abandonar su hogar para vivir en una masía en mitad del bosque junto a su abuela, sus tías y sus primos.
Andreu se aplica en los estudios porque quiere llegar a ser médico y no sufrir más las humillaciones de los vencidos. Entre sus nuevas relaciones surgen dos confidentes: su prima Núria, una niña devastada por todo lo que le ha tocado vivir, y un adolescente interno en un convento cercano, tísico, que siente la muerte cercana.
Pero su nueva vida se hunde cuando su padre es detenido y condenado a muerte por los asesinatos. Andreu, convencido de su inocencia, intenta averiguar quién o quiénes fueron los auténticos asesinos. En esta búsqueda descubre cómo los fantasmas del pasado caen una y otra vez sobre el mundo de los adultos, llenándolo de mentiras y ocultaciones. Nadie escapa a tanta falsedad, ni a la desolación moral que ha producido la guerra, ni siquiera su padre, la persona a la que más admira.
Cuando su padre ha pasado a ser un ídolo caído y ha sido ejecutado, su única idea es sobrevivir lejos de una familia de perdedores que no tiene nada para ofrecer. La ocasión se le presenta cuando los señores Manubens, los ricos amos de la masía, que no tienen hijos, le ofrecen apadrinarlo en sus estudios y llevárselo a vivir con ellos a la ciudad. Andreu no lo duda, traiciona sus raíces, abandona a todos y da rienda suelta al pequeño monstruo en que se ha convertido.