Gerardo Herrero (director)
En su prolífica trayectoria como realizador, ha trabajado con prestigiosas figuras del ámbito cinematográfico.
Como realizador, ha dirigido a actores de la talla de Carmen Maura, Federico Luppi, Harvey Keitel e Imanol Arias, entre otros.
Como productor, ha impulsado la realización de películas de éxito como El hijo de la novia, El aura y Machuca; y ha producido las obras de célebres realizadores como Álex de la Iglesia, Cesc Gay, Ken Loach, Andrés Word, Adolfo Aristarain y Marcelo Piñeyro, entre otros.
El secreto de sus ojos, de Juan José Campanella (2009) fue galardonada con un OSCAR® a la Mejor Película en Lengua No Inglesa por su producción.
filmografía como director
2010 - El corredor nocturno
2008 - Que parezca un accidente
2007 - Una mujer invisible
2006 - Los aires difíciles
2005 - Heroína
2004 - El principio de Arquímedes
2003 - El misterio Galíndez
2001 - El lugar donde estuvo el paraíso
2000 - Las razones de mis amigos
1998 - Frontera Sur
1997 - Territorio comanche
1996 - Malena es un nombre de tango
1994 - Desvío al paraíso
1991 - Ni contigo ni sin ti (cortometraje)
1987 - Al acecho
1984 - El curso de las estrellas (cortometraje)
- Fotogramas salvajes (cortometraje)
Notas del director
EL ROSTRO DEL ASESINO es un thriller; lo que la hace diferente de otras películas del género es que la historia se centra en la División Azul (voluntarios que se alistaron después de la Guerra Civil Española, con el único objetivo de combatir contra el Ejérciro Rojo) durante la Segunda Guerra Mundial y en el frente ruso.
La División Azul, desplegada por el régimen del general Franco, estaba constituida por 18.000 soldados, todos ellos supuestamente "voluntarios", enviados a morir por sus ideales falangistas. Los hombres al mando eran militares de carrera, los recientes vencedores de la Guerra Civil Española. Las tropas estaban integradas por falangistas voluntarios, fascistas radicales que no pertenecían a Falange, así como republicanos que fueron "invitados" a limpiar sus pecados o los de sus familias. Se alistaron para luchar contra el comunismo, y muchos de ellos se dejaron la vida allí. Mucha gente ignora que buena parte de esos hombres eran voluntarios forzosos. Por ejemplo, el célebre director de cine español José Luis García Berlanga tuvo que alistarse "voluntariamente" para limpiar el expediente de su padre, que era republicano. En la mayoría de las ocasiones, aquellos que supuestamente tenían un pasado "dudoso" eran enviados a las misiones más peligrosas.
Nuestro protagonista es un inspector de policía que había permanecido en la zona republicana durante la Guerra Civil, por lo que fue invitado amablemente a que se alistara en la División Azul, motivo por el cual se convierte en soldado del frente ruso.
La cuestión es que es él quien, cuando se descubre a la primera víctima atrapada en el lago congelado, se da cuenta de que ha sido un asesinato, lo que hace que se le confìe la investigación subsiguiente.
Otro hecho poco conocido y que se refleja en el guión es que, una vez terminada la Guerra Civil Española, comenzó una caza de brujas entre los masones (tanto de derechas como de izquierdas) y este dato histórico aparece de forma sutil en nuestro argumento.
El protagonista, nuestro Sherlock Holmes, emprende la investigación con la mayor profesionalidad y los altos mandos le proporcionan a un Watson, un hombre con ideales falangistas pero que es plenamente consciente de que la guerra está perdida y que es muy posible que no vuelvan a España.
Todos los personajes viven con una simbólica soga al cuello, tambaleándose en la frontera intangible entre la vida y la muerte; están en medio de una guerra que está a punto de acabar. Todos ellos se mueven en un paisaje helado, constantemente cubierto de nieve y en el que reina la soledad, lo que se refleja en el estado emocional de los personajes: aparentemente son fuertes, pero si se les mira detenidamente puede verse lo frágiles que son en realidad.
Nuestro inspector es un auténtico profesional: observador, meticuloso, concienzudo, desconfiado... Su meta es sobrevivir, cueste lo que cueste. No puede hablar de su pasado, tiene que mantener ocultas sus simpatías políticas y, demasiado a menudo, ocultar también sus sentimientos. Sin embargo, su investigación es rigurosa y concienzuda.
Hemos tratado de dotar a cada personaje de una personalidad propia, que siempre refleje la coherencia política de la época. Hasta ahora no había ninguna película europea acerca de la División Azul. Ésta es una película europea que toma como punto de partida una historia española en la que hay personajes alemanes, rusos y lituanos. El auténtico hospital de campaña de la División Azul estaba situado en Lituania, donde hemos hecho las localizaciones y donde hemos encontrado la colaboración necesaria para llevar adelante esta fascinante aventura.
Visualmente, el guión requiere una meticulosa dirección y fotografía. En estos momentos estamos trabajando con el director de fotografía en la elaboración de un detallado storyboard para preparar con el mayor detalle las escenas más complicadas de rodar.
La historia en sí misma requiere una tensión narrativa constante: la cámara debe ser ubicada al servicio de los actores y tan cerca de ellos como para que pueda captar sus sentimientos y emociones. Asimismo, necesitamos amplias panorámicas para mostrar la fuerza de los escenarios y el paisaje.
Nuestro propósito es hacer una película que cautive al público involucrándolo en la historia y apasionándolo, y, por otra parte, que la película refleje una parte de la historia que los europeos, y los españoles mismos, desconocen en gran medida.
Silencio en la nieveDirigida por Gerardo Herrero