Mejor… solteras tiene como protagonista a Dakota Johnson (Cincuenta sombras de Grey), Revel Wilson (Dando la nota), Damon Wayans Jr. (Vamos de polis), Anders Holm (Malditos vecinos, El becario), Alison Brie (Dale duro), Nicholas Braun (Las ventajas de ser un marginado), Jake Lacy (Girls, de HBO), junto a Jason Mantzoukas (Malditos vecinos, la serie de televisión La liga fantástica) y Leslie Mann (Si fuera fácil).

El director de la película es Christian Ditter (Los imprevistos del amor, Los cocodrilos), quien la ha dirigido a partir de un guion de Abby Kohn y Marc Silverstein (Todos los días de mi vida, Qué les pasa a los hombres) y Dana Fox (Todo incluido, Algo pasa en Las Vegas), historia de Kohn y Silverstein basada en el libro de Liz Tucillo (la serie de televisión Sexo en Nueva York, Qué les pasa a los hombres). Los productores de la película han sido John Rickard y Dana Fox. Marcus Viscidi, Richard Brener, Michael Disco, Dave Neustadter, Michele Weiss, Drew Barrymore y Nancy Juvonen han sido los productores ejecutivos.

El equipo técnico de Ditter ha estado a las órdenes de su colaborador habitual, el director de fotografía Christian Rein, además del diseñador de producción Steve Saklad (Juno, Up in the Air), la editora Tia Nolan (Con derecho a roce) y la diseñadora de vestuario Leah Katznelson (Sobran las palabras, Infiltrados en clase). La banda sonora ha corrido a cargo de Fil Eisler (la serie de televisión Empire).

New Line Cinema y Metro-Goldwyn-Mayer Pictures, en asociación con Flower Films, presentan una producción de Wrigley Pictures Production, Mejor... solteras. Warner Bros. Pictures, empresa del grupo Warner Bros. Entertainment, se encargará de su distribución en todo el mundo.


Si no te diviertes estando soltera
es que estás haciendo algo mal.


¿Soltero en Nueva York? ¿O en Londres, Los Ángeles, Múnich, Miami o cualquier otro lugar? Hoy en día la vida nocturna bulle tanto en ciudades grandes como pequeñas con noches de chicas, bares de solteros, citas por internet y rollos de una noche que conoces en cualquier aplicación del móvil sin que sea necesario que medie ningún romance. Los solteros de ahora no siempre buscan a su media naranja ni ahogan sus penas en sus solitarios pisos de soltero. Mejor… solteras es una divertidísima comedia que nos cuenta cómo todos ellos intentan aprovechar al máximo su soltería de las formas más extravagantes que puedas imaginar.

Christian Ditter, el director de la película, cuenta que "quería darle un toque moderno y fresco al género de la comedia y contar lo que significa realmente estar soltero hoy en día: ir de fiesta, pasárselo bien, salir con gente. Muchas de las películas que hablan de hombres, mujeres y sus citas tratan sobre cómo encontrar a tu media naranja, pero este no es el caso de nuestra película. En Mejor… solteras nos entregamos a esa época divertida y libre de nuestra vida que es la soltería, mientras buscamos nuestro lugar en el mundo, hacer amigos... En definitiva: qué queremos hacer con nuestra vida".

Mejor… solteras está protagonizada por algunas de las actrices de comedia más exitosas del momento como Dakota Johnson, Rebel Wilson, Alison Brie y Leslie Mann, además de por estrellas de la comedia en pleno ascenso como Damon Wayans Jr., Anders Holm, Nicholas Braun, Jake Lacy, Jason Mantzoukas y Colin Jost. La película nos muestra a un grupo de solteros en diferentes etapas de su soltería y cómo la vive cada uno de ellos.

El productor John Rickard comenta que "es una experiencia universal: eres joven, acabas de salir de la universidad y estás descubriendo el mundo. O cuando, unos años más tarde, te encuentras en otra encrucijada y piensas en qué es lo que de verdad te importa, en lo que quieres hacer con tu vida y en si quieres o no compartirla con alguien. A menudo pensamos que tenemos que encontrar a nuestra media naranja pero en realidad tenemos que encontrarnos a nosotros mismos, y eso asusta".

Por suerte, lo que en la vida real nos asusta puede hacernos reír sin parar cuando lo vemos en una película. Dana Fox, guionista, productora y veterana de las comedias, cree que "las comedias románticas siempre se centran en el romance, pero esta película muestra al espectador lo que ocurre entre una relación y otra; esa época loca de tu vida en la que quieres pasártelo bien, en la que estás colgado del móvil manteniendo conversaciones en 140 caracteres o menos y ‘dándole hacia la derecha’ para conocer gente. Una película con tantas historias divertidas que contar tiene muchas ventajas".

"Todas las películas", comenta, "buscan que los espectadores se identifiquen con la historia. Está el personaje de Dakota Johnson, Alice, que es el alma de la película, y también hay otros actores y actrices a los que conoceremos a lo largo de la historia y con los que nos reiremos sin parar".

O quizá nos reiremos de ellos. Dakota Johnson vuelve a sus raíces cómicas con Alice, una chica que intenta sin mucho éxito conocer hombres tras quedarse soltera. En esta aventura la acompaña Robin, interpretada por Rebel Wilson, una fiestera experta en el mundo de las copas, los líos y el protocolo de los mensajes. Alison Brie interpreta a Lucy, una mujer con una misión en las páginas de citas online, y Leslie Mann nos presenta a Meg, que está tan centrada en su vida profesional que ha olvidado que también tiene una vida personal. Todas ellas ejemplifican, junto con los chicos que conoceremos a lo largo de la película, las diferentes maneras de vivir la soltería.

Ditter ha declarado que le encantó el guion: "me pareció desternillante y a la vez fiel a la realidad, y siguió evolucionando una vez estuvimos en el estudio con Dana y con todos estos actores de tanto talento y tantas destrezas a la hora de improvisar. Así que al final hicimos una película en la que yo veo reflejadas mis propias experiencias y las de mis amigos. Creo que todo el que haya estado soltero, que al final somos todos, se divertirá y se reirá mucho cuando vea en la película cosas que le han ocurrido en la vida real".


¡Bienvenido a la fiesta!
Al salir de la universidad Alice cree que se está perdiendo algo. No sabe exactamente el qué, pero tomarse un tiempo con su novio Josh para asegurarse de que es la persona indicada le parece lo más normal. ¿O no?

Mejor… solteras nos acerca a la vida de Alice a medida que se aventura en un nuevo trabajo, una nueva ciudad (Nueva York) y una nueva vida de soltera, y todo lo que ello implica. Dakota Johnson, que interpreta a la dulce Alice, cuenta que le encantó "lo creíble que resultaba la historia. Todos hemos experimentado alguna vez lo que es ir de un sitio para otro intentando saber qué es lo que de verdad quieres".

Fox, que ya había trabajado anteriormente con Johnson, se alegró de verla volver a un papel cómico tras varios papeles más dramáticos. "Dakota tiene un talento natural, sobre todo cuando hace comedia, tanto física como verbalmente", ha declarado. "Como guionista, para mí es un auténtico placer volver a trabajar con ella, porque parece que nada de lo que dice ha salido de un guion".

Johnson cuenta que, cuando conocemos a Alice, "ella es una chica inocente y curiosa que empieza la universidad. Pronto conoce a un chico e inmediatamente se embarca en una relación cómoda y enriquecedora".

Avanzamos cuatro años. "Como muchos de nosotros, Alice siempre ha dependido de alguien, ya sean sus padres, su hermana o su novio. De repente tiene un momento de lucidez y se lanza a lo que ella cree que es un despertar, pero que en realidad no es más que una ruptura", comenta la actriz. "Pero tomarse un descanso se convierte en una explosión de la vida tal y como ella la conoce, así que tiene que averiguar cómo manejar la situación".

Tras convencer a su novio formal de que necesita sentir lo que es estar sola, Alice se muda a Manhattan para empezar a trabajar como ayudante de abogado. "Enseguida cae en manos de Robin, que está un poco loca", cuenta riéndose Johnson. "Alice ha estado siempre protegida y se ha puesto muchos límites. Robin no tiene límite alguno y no se preocupa de lo que los demás piensen de ella con tal de pasárselo bien".

El papel de Alice requirió una cantidad importante de inocencia "de chica normal" para que los espectadores pudieran ponerse en su lugar, o para que al menos recordasen el momento en que lo estuvieron. Ditter considera que Johnson es "guapísima, pero al mismo tiempo totalmente creíble. Tiene mucho talento y actúa de manera muy auténtica, así que los espectadores se pueden identificar fácilmente con ella. Prepara el terreno para el resto de personajes, que son mucho más excéntricos".

Ninguno es más excéntrico que la infatigable Robin, que toma como propia la misión de enseñarle a su nueva amiga no solo los entresijos de su trabajo, sino también los de los bares de después. "A Robin le encanta estar soltera y quiere que a todo el mundo le guste tanto como a ella", cuenta Johnson. "Alice, que por primera vez está sola, cree que quizá debería aprender de su nueva maestra".

Rebel Wilson defiende incondicionalmente a su personaje. "Robin es la chica eternamente soltera que sabe quién es y lo que quiere. Es muy independiente y tiene la mejor vida que puedas imaginar en la mejor ciudad del mundo. Sale de fiesta, bebe mucho, tiene rollos de una noche y no tiene que sobrellevar las cargas que conlleva una relación".

De hecho, Robin está en su punto álgido cuando la conocemos. "Está en una de las mejores discotecas de Nueva York, bailando como una loca", apunta Wilson. Los productores contaron con la ayuda de Aakomon Jones, buen amigo de Wilson que la coreografió en Dando la nota, para que le enseñase los pasos de su triunfal entrada. "AJ diseñó la coreografía de un pequeño baile para mí y lo repetimos unas 50 veces en un solo día, solo para esa escena inicial. Me lo pasé genial", añade.

Cuando conoce a Alice, Robin está decidida a enseñarle cómo debe ser la soltería. A su manera. "Robin le enseña literalmente lo que es la soltería para ella; cómo beber gratis en un bar, dónde liarse con alguien en el trabajo, cuándo escribir al tío con el que te acostaste la noche anterior... Todos sus trucos", cuenta Wilson.

En el estudio, Wilson es la que anima el cotarro. "Soy muy fan de Rebel", comenta Ditter. "Creo que todo lo que hace es muy divertido, y nos aportó muchas ideas y muchas improvisaciones estupendas. Por supuesto, siempre grabábamos escenas con un guion establecido, pero yo luego le decía: ‘Vale, ahora sorpréndeme’, y muchas de las cosas que hacía están en la película porque es muy ocurrente y un genio de la comedia. Pensé que íbamos a tener que estabilizar digitalmente todas sus tomas porque el operador de cámara no paraba de reírse".

Johnson también la elogia: "Rebel es increíble. No se parece a nadie a quien haya conocido. Es muy sensible, pero en un segundo cambia e improvisa sobre los temas más ridículos. Ha sido un placer trabajar con ella".

Para Wilson, el sentimiento es mutuo: "Me encantó trabajar con Dakota. Tenemos energías muy diferentes y también diferentes físicos. Somos como un dúo cómico clásico".

Wilson recuerda que a Ditter le gustó cómo actuaban juntas, "por eso añadimos muchísima comedia física; nada era demasiado para él. A Christian le gusta mucho todo eso y confió en nosotras, así que lo hicimos. Apoyó nuestras ideas y Dakota y yo hicimos muchas travesuras".

"Rebel está en la vanguardia de la cultura pop y está redefiniendo lo que significa ser una actriz de comedia", señala Rickard. "Cuando está en el estudio no puedes dejar de mirarla. No quieres perderte lo que va a hacer o decir, y eso se transmite a través de la pantalla. ¿Y Rebel y Dakota juntas? Algo único".

Si Robin es una fuerza nueva que desestabiliza la vida de Alice, su hermana Meg es su punto de apoyo. Leslie Mann es quien da vida al personaje. Ditter se refiere a ella como "una garantía cómica, muy divertida y a la que es un placer ver en acción".

"Mi personaje es obstetra, así que está rodeada de bebés todo el día. Ella, sin embargo, no tiene hijos ni interés en tenerlos, aunque sabe que se le está acabando el tiempo para ello", comenta Mann.

Meg es algo mayor y, al parecer, mucho más lista que su hermana: el claro ejemplo de una mujer con una brillante carrera pero, a diferencia de Alice, que busca desarrollar su vida personal, Meg ha abandonado la suya por completo.

Aun así, Meg tiene un lado maternal. Johnson apunta que "Meg le permite a su hermana pequeña ser quien es en realidad, todo el tiempo. Así que, cuando están juntas, podemos ver un lado totalmente diferente de Alice, algo inmaduro e infantil, pero todo se le perdona porque saca la dulzura y la amabilidad de su hermana y juntas son muy divertidas, porque son hermanas, y esa es una de las relaciones más importantes que puede haber".

A pesar de ser una médica que trae bebés al mundo, o a pesar del lado maternal que muestra con su hermana, Meg declara no sentirse cómoda con los niños. Pero una escena importante que aparece al principio de la película demuestra que quizá se queja demasiado. Para esta escena, Mann tuvo que pasar tres horas encerrada en el estudio con un bebé de seis meses. "Solo estaban conmigo Leslie y el bebé, dos cámaras y un operador de sonido en una sala muy pequeña", cuenta Ditter, "y una vez que entramos no podíamos salir. El bebé no hacía nada de lo que queríamos que hiciese, y pensé que ese iba a ser mi primer y mi último día con Leslie, pero es una actriz muy profesional y el bebé imitaba todo lo que ella hacía. Creó un ambiente genial y dirigió, literalmente, al bebé, así que esa escena se convirtió en una de las más increíbles de la película. Leslie estuvo impecable".

"Mientras Leslie actúa en la película, también saca un hilo de emoción que se nota en el ambiente", comenta Fox. "Creo que por eso es tan divertido ver cómo se funden sus personajes. Surge de una manera tan natural que piensas: 'me ha pasado lo mismo, yo también he hecho eso'. Es la mejor dejando discurrir esa locura bajo el diálogo".

Además de no querer tener nada que ver con niños fuera del trabajo, Meg también parece haber descartado por completo la idea de tener a un hombre en su vida. Considera que es mejor estar casada con su trabajo. "Y de pronto conoce a un chico mucho más joven que ella", revela Mann. Y aunque tiene miedo, está tan cautivada que decide arriesgarse, aunque sea solo algo de una noche".

A diferencia de Meg, Lucy es una mujer proactiva decidida a salir con todos los hombres que sea necesario y a conseguirlo de la manera más práctica y eficaz posible: por internet. No quiere encontrar a cualquier hombre, sino a su hombre. Ha hecho cuentas y ha aceptado la tecnología, convencida de que así llegará su media naranja a su vida, pero la mala conexión Wi-Fi de su apartamento no respalda sus esfuerzos, así que se apropia de una silla y de la señal del bar de abajo para monitorizar las múltiples páginas de citas que la conectarán con el amor de su vida.

Alison Brie interpreta a esta pragmática máquina de citas. "La vida social de Lucy depende por completo de las páginas de citas, así que una conexión a internet mala es un verdadero desastre para ella", cuenta. "Su prioridad es casarse lo antes posible. Es una chica inteligente cuyo cerebro viaja a 150 kilómetros por minuto y ha creado un algoritmo para navegar entre hombres en diferentes páginas, pero se siente presionada por el plazo que se ha impuesto. Siente que se está quedando atrás".

Aunque Brie no cree que su personaje esté desesperado o actuando por pura soledad, sí admite que Lucy "está cegada por un tipo muy específico de hombre, lo que limita aún más sus opciones. No se da cuenta de que ese es el problema: es demasiado organizada y demasiado estricta, así que no ve lo que tiene delante".

"Alison interpreta a Lucy con una energía increíble y una especie de 'tensión' que resulta muy divertida", comenta Fox. "Es como un cohete: ¡con una chispa ya está volando! Es muy rápida y es capaz de dar discursos muy largos y hacer que suenen muy naturales. Parece como si Lucy existiera de verdad".

Fox confiesa que, en cierto sentido, sí existe: "Lucy se parece un poco a mí en que está obsesionada con las estadísticas, y yo siempre he sido una persona a la que le encantan los hechos y hacer búsquedas, y la satisfacción que conllevan".

Estas cuatro mujeres, que buscan los diferentes tipos de satisfacción que se pueden encontrar en cualquier escena social, tienen una cosa muy clara, al menos según Robin:


¡Los hombres pagan las bebidas!


Para pagar, y para algo más, el equipo de Mejor… solteras ha elegido a varios de los mejores actores cómicos del cine y la televisión para interpretar a esos hombres dispuestos a hacer que las mujeres pasen un buen rato.

Tom, el eterno soltero, es un camarero con una fórmula comprobada y verificada para hacer que las mujeres salgan por la puerta de su casa antes de que amanezca. "Sigue la máxima de 'usar y tirar’ de manera sistemática", dice Anders Holm, que interpreta al mujeriego que tiene una falta premeditada de comodidades en su piso de soltero. "Está acostumbrado a salirse con la suya y a ligarse a la chica que quiere".

"Creo que Anders es uno de los actores más prometedores del mundo de la comedia", comenta Ditter. "El papel es el de un mujeriego, pero quería que lo interpretase alguien interesante y divertido que pudiese explotar el humor de Tom, y él supo cómo hacerlo".

Holm cuenta que él y Ditter debatieron largo y tendido acerca de hasta dónde debían llevar el comportamiento de "chico malo" de Tom: "Hablamos de si es un capullo simpático o un buen tío algo malote, y decidimos que en realidad es el peor tipo de buen tío. Es un tipo agradable que se ha atascado en un comportamiento de "chicas fáciles, sin compromisos" y no sabe cómo ser serio incluso cuando encuentra a alguien con quien podría serlo, y así lo ven las chicas como Lucy. Ha creado un estilo de vida que se ha convertido en su identidad, y se ha perdido en él. Aunque no le importa demasiado".

O al menos no hasta que Lucy aparece en el bar. "Ella tiene muy claro el tipo de hombre que quiere a su lado, y Tom no cumple con los requisitos", continúa el actor. "Esto le sorprende y hace que Lucy empiece a gustarle". Pero eso no le impide tontear con otras mujeres, como Alice. "Alice acaba de salir de una relación buena y larga, y está buscando algo malo, y ese algo es Tom".

Cuando Alice se sumerge en la oferta de hombres solteros de Manhattan, bucea hasta el fondo con Tom, un hombre completamente opuesto a su exnovio Josh. "Eran dos estudiantes que acababan de empezar la universidad y que se enamoraron el uno del otro", cuenta Nicholas Braun sobre su personaje y el de Alice. "Josh era la opción fácil; un chico bueno que la trataba bien. Creo que no había peligro de que Josh la sorprendiese, y que en parte por eso le deja".

"Alice es una chica con la que otras muchas chicas se pueden identificar", añade. "Está en ese momento de la vida en que no quieres sentirte atrapado y necesitas buscarte a ti mismo. Y aunque Josh es una de esas personas que piensan que esa relación es la única que quiere, no va a quedarse esperando mientras su novia se marcha y se acuesta con un montón de tíos solo para ver si él es realmente el indicado. Él también va a echar un vistazo".

En esa fase de búsqueda Alice conoce a David, un padre soltero que se siente atraído por ella pero que duda si volver a adentrarse en las oscuras aguas de las relaciones. Damon Wayans Jr. interpreta al cauteloso viudo que vuelve a adentrarse en el mundo de las citas.

"Está intentando volver a adentrarse en esa parte de la vida, pero puede que aún no esté preparado", comenta Wayans. "Ve una vez a Alice y le parece enigmática, pero hasta que no se ven más veces, al azar, no surge la chispa".

Wayans disfrutó trabajando con Johnson: "Dakota es muy divertida, muy independiente y muy despierta. Le gusta mucho improvisar, y a mí eso me encanta", cuenta el veterano actor cómico.

"Damon Wayans es un tío divertidísimo y me encanta su trabajo", asegura Ditter. "En esta película tiene uno de los papeles más serios, y lo ha hecho muy bien; no dejó que su personaje resultase demasiado pesado o dramático. Encontró el equilibrio perfecto".

Pero Alice no es la única que conoce al que podría ser el hombre perfecto en el momento equivocado. Meg, su hermana práctica y de vida-profesional-sin-vida-personal, se sorprende cuando Ken, un hombre mucho más joven, interpretado por Jake Lacy, se interesa en ella. Y el dulce y sincero Ken se está colando mucho. "Ella está de acuerdo en tener una relación de amigos con derecho a roce", comenta Lacy, "y a Ken le parece bien esa opción, pero quiere ir un poco más allá. Meg también está convencida de que es demasiado joven para ella, y me gusta que Ken intente romper las barreras que ella insiste en ponerle".

Los productores sabían que necesitarían a alguien con grandes dotes cómicas para actuar junto a Leslie Mann. "Jake nos deslumbró", confiesa Ditter. "En su primer encuentro con Leslie, a los dos minutos, ya tuvimos claro que iban a tener mucha química. Ella le lanzaba a él todo lo que se le ocurría y viceversa".

"Fue estupendo trabajar con Leslie", cuenta Lacy. "Es inteligente, divertida, rápida, preciosa y tiene un gran talento. Cada vez que empezábamos una escena ella daba ideas diferentes y se preparaba minuciosamente, así que me resultó muy sencillo imitarla y darle algo nuevo en cada toma".

Otro de los chicos que sorprende a una de las mujeres es George, interpretado por Jason Mantzoukas. Su casting resultó ser una sorpresa tanto para el actor como para los productores. Ditter lo explica: "Estábamos teniendo una mesa redonda con los guionistas, hablando sobre el guion y aportando ideas para chistes, añadiendo cosas aquí y allá. Invitamos a Jason a que se uniese porque también es guionista, y todos los chistes que él contaba eran divertidísimos. Además no solo los contaba, sino que los representaba. Tras la mesa redonda, nos miramos unos a otros y dijimos: 'Oye, este tío acaba de interpretar el papel. Vamos a contratarlo'. Los productores contactaron con Mantzoukas y le preguntaron si quería unirse al elenco. Solo tenía que volver a hacer delante de la cámara lo que acababa de hacer en la reunión. El actor accedió enseguida.

"Ya en el estudio", recuerda Mantzoukas, "teníamos un guion genial, con muchos chistes, así que grabamos las escenas basándonos directamente en él. Luego se nos ocurrían otros chistes alternativos y grabábamos tomas completamente improvisadas. También grabamos escenas con otras bromas que había escrito Dana Fox, así que intentamos tomar diferentes caminos. Fue una experiencia creativa genial para todos".

"Tuvimos mucha suerte, porque todos los actores improvisaban muy bien y se seguían la corriente unos a otros", comenta Ditter, "lo que hizo que hubiese mucha experimentación. Creo que encontramos el sentimiento fresco y actual que estábamos buscando porque nuestro elenco contribuyó de manera creativa".


Cortar con alguien es una mierda, ¿pero sabes qué es peor?
Desperdiciar una noche en Nueva York.


Mejor… solteras se grabó en Nueva York y alrededores. El calendario de rodaje fue muy ambicioso en cuanto al campo de acción, teniendo en cuenta que se trata de una concurrida metrópolis de ocho millones de personas e infinitas posibilidades. Se cubrieron unas 45 localizaciones en 47 días. "Estuvimos por toda la ciudad", cuenta el productor John Rickard. "En el Distrito de Meatpacking, en una azotea del Midtown de Manhattan, en Wall Street, en la Quinta Avenida... Y lo grabamos de manera muy realista. Christian sabía lo especial que era grabar en Nueva York, y lo supo captar todo".

"Yo quería sentir la ciudad, sacar la película a las calles, estar en los puentes, en los parques y en las azoteas del Nueva York real, no grabarlo todo en un estudio. Y eso fue lo que hicimos", señala Ditter.

"Creo que toda la gente que viene a Nueva York quiere conseguir algo, o está buscando algo, o está aquí por la cantidad de aventuras que ofrece esta ciudad. Creo que, cuando alguien da el paso y deja todo atrás porque quiere vivir y disfrutar plenamente de la vida, Nueva York es el sitio indicado para hacerlo. Por eso Alice se va allí, y nosotros la acompañamos en esa apasionante aventura".

Aunque la ciudad es una buena musa, supone un reto para la producción de la película. "Era la primera vez que grababa en Nueva York", cuenta Ditter, "y creo que lo abordé con algo de inocencia. Cualquier sitio al que mirase y al que apuntase con la cámara me parecía sacado de una película, así que pensé que no iba a ser fácil y, por supuesto, no lo fue. Hay mucha logística que tener en cuenta y es una tarea muy compleja. Por suerte contábamos con uno de los mejores equipos del mundo y lo sacaron adelante sin ningún esfuerzo".

"La ciudad nos tendió la alfombra roja, e incluso el tiempo fue increíble; todo quedó genial", añade Fox. "El mayor reto resultó ser el hecho de que estábamos rodando una película sobre gente que sale de fiesta, así que nos pasábamos la mayoría de las noches en vela grabando".

Ditter confió en su colaborador habitual, Christian Rein, para que se encargara de la cinematografía. "Llevamos trabajando juntos desde que estudiábamos en la escuela de cine; es uno de los mejores directores de fotografía de Alemania", cuenta Ditter. "Ha trabajado en muchas películas, anuncios y videoclips premiados... Con el nacimiento de aplicaciones como Instagram y Periscope, la fotografía ha cambiado y los cineastas tienen que trabajar de manera novedosa e innovadora. Christian siempre ha estado a la vanguardia a la hora de combinar los elementos más actuales con la calidad propia de una película de Hollywood. Creo que fusionó lo mejor de estos mundos. Y como ya hemos trabajado juntos en muchos proyectos nos entendemos muy bien, como pasa con los jugadores de béisbol: nos hacemos una señal y sabemos lo que el otro quiere decir".

En cuanto al diseño del aspecto físico de la película, el diseñador de producción Steve Saklad trabajó en base a sus propias experiencias como soltero en Nueva York. "La idea de encontrar un lugar increíble y crear tu propio rinconcito en él es una historia que todo el mundo entiende. Había muchos actores principales, y cada uno de ellos protagonizaba escenas en la película, así que cada uno necesitaba una zona. Empezamos preguntándonos si vivían en Manhattan o en Brooklyn".

El primer sitio en el que vive Alice cuando llega a la ciudad es el apartamento de su hermana Meg en el Upper West Side, que se creó en los estudios Kaufman Astoria de Queens. "Le dimos un bonito estudio de una habitación con todos los detalles de los preciosos edificios anteriores a la guerra que se pueden ver en las películas antiguas de Woody Allen", señala Saklad.

El exterior del edificio de Meg se grabó en la esquina de Broadway con la 77, en medio del concurrido barrio del Upper West Side. Allí rodaron Ditter y Rein una escena en la que Alice y Robin se enfrentan al reto que supone un día nuevo en la Gran Manzana... tras una noche de fiesta. "Grabaron una escena preciosa en 360°, con el ambiente preciso para ese momento de la historia", recuerda Saklad.

La librería independiente Book Culture, ubicada en la cercana Columbus Avenue, sirvió de localización para una escena en la que Lucy, afligida tras una ruptura, protagoniza una memorable sesión de cuentos para un grupo de niños.

Después de un tiempo durmiendo en el sofá de Meg, Alice cruza el East River, como muchos otros de su generación, para irse a vivir a Brooklyn. Saklad y su equipo encontraron un diminuto espacio en un edificio justo debajo del puente Williamsburg perfecto para el primer apartamento de Alice. "Lo convertimos en una especie de país de las maravillas de viejas molduras; una historia de antiguos inquilinos, papel pintado y cuadros que diesen al espectador la sensación de estar viendo un refugio dentro de una enorme jungla en el que Alice iba a empezar su nueva vida".

Un edificio de piedra en el barrio de Fort Greene de Brooklyn fue la localización del apartamento cómodo y cálido de Josh, el exnovio de Alice. El equipo diseñó en otra parte de Brooklyn (en la calle Grand, cerca del Navy Yard) una casa de soltero para el camarero Tom en un loft de estilo industrial.

De vuelta en Manhattan, un espacio en la calle Gansevoort, en el barrio de West Village del distrito Meatpacking, rodeado de calles empedradas, sirvió como localización para el bar de Tom y, justo encima, para el apartamento de Lucy. El equipo también grabó escenas en el restaurante The Park y en el Marquee Club, ambos situados en la Décima Avenida en Chelsea, antes de moverse hacia el centro, concretamente al número 44 de Wall Street, para rodar escenas en el bufete de abogados en el que trabajan Alice y Robin.

Ya en las afueras, el hospital Metropolitan en la Primera Avenida de la calle East 97 fue el escenario de trabajo de Meg, mientras que el East Side se utilizó para grabar una ruta de compras en Giggle (Lexington Avenue) y las aventuras cosméticas de Alice y Robin: Bloomingdale's en la Tercera Avenida, Drybar en la East 76 y MAC en la Quinta Avenida y en la calle 22.

Y qué película rodada en Manhattan estaría completa sin una escena en la histórica Grand Central Terminal, que sirvió de localización para una escena clave de Lucy. El igualmente emblemático Empire State Building fue el telón de fondo de una fiesta de cumpleaños que Alice se da a sí misma en una azotea. "La azotea fue una de las ubicaciones más complicadas", cuenta Saklad. "Necesitábamos un lugar en el que pudiésemos trabajar durante una semana y que tuviese unas vistas espectaculares, que sí o sí tenía que estar en la ciudad de Nueva York".

Los cineastas encontraron el escenario ideal en la calle 36, entre la Quinta y la Sexta Avenida, que ofrecía unas vistas impresionantes y que Saklad y su equipo transformaron. "Lo convertimos en la azotea de nuestros sueños", comenta. Incluyeron un letrero gigante de neón que ponía "Empire City" para iluminar la escena de la fiesta con colores que iban cambiando.

Cada personaje tiene también su propia paleta. "Nos dimos cuenta de que a Leslie, al igual que a Meg, les pega la gama de los fríos, entre grises y azules, que son los colores de los hospitales. Alice brilla con rojos y turquesas, así que esos fueron sus colores. También contrastan con su hermana y ponen de relevancia la diferencia entre las etapas que están viviendo".

Los rojos de la paleta de color de Alice se aplicaron además a su armario. Leah Katznelson, diseñadora de vestuario, explica cómo la ropa de Alice evoluciona con la historia: "Su look es algo masculino al principio, pero creo que, a medida que va reafirmándose como mujer, también se va afirmando en su feminidad y empezamos a verla vestir con telas y estampados más coquetos. Alice es una chica que iría a un mercado de ropa de segunda mano o a una tienda vintage y escogería cosas que puede que nadie más combinaría como ella".

Katznelson también trabajó codo con codo con la actriz Rebel Wilson para crear un armario magnífico para la sumamente segura de sí misma Robin. "Nos lo pasamos muy bien escogiendo colores e intentando convertirla en una versión de un tipo diferente de mujer neoyorkina, una que se conoce la ciudad y lo sabe todo: cuáles son las mejores discotecas, los mejores bares underground, los mejores sitios para cada momento. Su vida diurna está centrada en lo que pasa después del trabajo. E incluso cuando va a trabajar va vestida de fiesta; la oficina es solo un lugar en el que poder dejar el bolso durante el día".

Aunque la diseñadora tuvo que ser cuidadosa para no pasarse. "Robin es una chica que se viste para llamar la atención, pero no queríamos que su ropa hablase antes que ella", explica Katznelson. "Aunque es cierto que hicimos para ella un par de vestidos atrevidos y muy divertidos...".

Aunque Lucy también pasa mucho tiempo en un bar, es un tipo de chica completamente diferente. "El personaje de Alison Brie estaba al otro lado del espectro", comenta Katznelson. "Es mucho más sensible y un poco pija, así que tenía muchas camisas con cuello, americanas y trajes sastre".

En el caso de Meg, la hermana de Alice, que es obstetra, y David, promotor inmobiliario, su ropa refleja claramente su trabajo. "Vemos a Meg con uniforme y bata todo el tiempo", señala Katznelson. "Fue genial vestir a Damon, no solo porque le queda muy bien la ropa, sino porque era de alta costura. Es una persona que gana mucho dinero y su look está muy unido a su trabajo".

El estilo de los otros dos hombres presentes en la vida de Alice, su exnovio y su nuevo "amigo con derecho a roce" Tom, también es muy diferente. "Queríamos darle a Tom, encarnado por Anders Holm, un estilo muy diferente al de David", explica Katznelson. "Lo mantuvimos en el centro y cómodo; y Josh se corresponde más con el tipo de persona que crees que pega con Alice. Tiene aspecto de universitario y de tener una vida muy ordenada, y su ropa refleja eso".

Desde las localizaciones, los escenarios y la ropa, hasta las paletas de color y la música del compositor Fil Eisler, Ditter espera que la película capte la frescura y la diversión que rodean la vida de soltero en Nueva York y en cualquier ciudad del mundo. "Creo que conectará de verdad con adultos de todas las edades, desde los 20 hasta los 40 o más. Siempre hay películas románticas que se estrenan en esta época del año, todos los años, pero al comprobar las audiencias te das cuenta de que la mitad de los espectadores van al cine con una cita y la otra mitad son solteros que van con sus amigos a pasárselo bien. Esta es una comedia para cualquier persona que haya sido joven y haya empezado y acabado relaciones, tanto si en ese momento está pasando por una de esas etapas como si solo se quiere reír de su propia experiencia. ¡Definitivamente Mejor… solteras lo tiene todo!".