Primero fue una mina que explotó en medio del desierto de Marruecos. Años después, fue una bala perdida alojada en su cerebro. Bazil parece no tener mucha suerte con las armas. La primera le convirtió en huérfano, la segunda le mantiene al borde de una muerte súbita.
Liberado del hospital, Bazil se encuentra sin hogar. Afortunadamente, este inspirado y alegre soñador es adoptado por una panda de traperos de segunda mano que viven en una auténtica cueva de Ali Babá, cuyos talentos y aspiraciones son tan sorprendentes como diversos: Remington, Calculadora, Pedazos, Galeote, la Chica de Goma, el Pequeño Pete y Mamá Pan.
Un día, caminando junto a dos enormes edificios, Bazil reconoce los logotipos de los fabricantes de las armas causantes de sus desgracias. Con ayuda de su fiel pandilla de locos amigos decide vengarse.
MicmacsDirigida por Jean-Pierre Jeunet