Notas de la directora
Todos tenemos un plan cuenta la historia de Agustín, un hombre que en su mediana edad, decide abandonar todo lo que hasta ese momento ha construido para emprender una búsqueda desesperada e improvisada, de una segunda oportunidad.
Instalarse en la vieja casita del Tigre que había frecuentado durante su infancia provoca en él un viaje interior, y al mismo tiempo que se hace pasar por otro, Agustín se encuentra con algo pendiente que permanece flotando desde su infancia, algo que determinó su vida y que ya no soporta.
Todos tenemos un plan habla de las contradicciones, de esas dos caras que viven dentro de todos; y sobre la necesidad, muchas veces acallada, de encontrar la manera de integrarlas.
Ana Piterbarg
El delta del tigre
La historia de Todos tenemos un plan se desarrolla mayormente en las islas del Delta del Tigre, uno de los siete deltas más grande del mundo, el único que no desemboca en el mar. El Tigre tuvo su momento de esplendor durante algunas décadas a partir de mediados del Siglo XIX, con la llegada del tren. Con el paso de los años, y el desarrollo automovilístico las islas volvieron a quedar en el olvido, y aunque nunca dejó de ser uno de los lugares más atractivos para el fin de semana de los porteños, el Tigre ha recobrado en gran parte su calidad como lugar ideal donde esconderse o pasar inadvertido.
Notas de producción
La película
La película trata del viaje que hace el personaje de Agustín, buscando qué es lo que en realidad quiere en la vida. Tiene que ver con la posibilidad que se le presenta, a partir de una crisis, el replantearse lo que de verdad quiere.
Para su directora, Ana Piterbarg, "la película habla de los cambios que uno decide llevar a cabo en determinados momentos de la vida que, aparentemente, parecen imposibles. A partir de la historia de este personaje, que entra en una profunda depresión, aparece una circunstancia que lo lleva a situarse en otro sitio y a encontrarse en el punto de inicio de una nueva vida".
Según el actor protagonista Viggo Mortensen: "en nuestra película, como en toda historia enmarcada en el génerodel cine negro, policíaco, en un thriller de estas características, casi todos los personajes de alguna manera son culpables y fracasados, con una gran frustración. Pero a la vez todos esos personajes tienen la oportunidad de demostrar coraje, y cierta garra que les hace llegar a entenderse a sí mismos.
Lo que me gusta es que no es una historia limpia. Todos los personajes están manchados, y los que llegan a aceptar esa realidad lo pasan mejor, me parece. Se encuentran a sí mismos y llegan a comprender algo sobre la razón de sus vidas, sobre la compasión, aunque solo sea al enfrentarse a la muerte."
Para Soledad Villamil: "Es una historia de suspense. Tiene acción y una trama que te atrapa y que nunca va por el camino convencional. Que siempre te sorprende. Nunca ocurre lo que uno piensa que va a ocurrir. Creo que eso es lo que se va a encontrar el espectador: una sorpresa tras otra".
La idea
Cuenta Ana Piterbarg que "de pequeña iba al Tigre a pasar algunos fines de semana a la casa de una amiga
íbamos a una isla, donde no había ni luz ni agua y era toda una aventura. Todos esos fines de semana, quedaron en mi recuerdo, porque muchas de las historias que hay en la película tienen que ver con esos recuerdos.
A partir del momento que decidí hacer la historia en El Tigre, me puse a investigar cómo era la gente que vive todo el año en El Tigre, porque me interesaba contar una historia sobre la gente de ahí. Y ciertos aspectos de esta historia, recogen temas o conflictos que me fueron contando estos personajes en las visitas que yo hacía para escribir".
Un día cuando Ana llevaba a su hijo a clases de natación en el club San Lorenzo se encontró casualmente con Viggo Mortensen y se animó a presentarse y contarle que estaba preparandoun guión sobre una historia quetiene lugar en el Tigre y que le gustaría que la leyera.
Viggo le contestó que sí y le dió una dirección postal a la que Ana envió un paquete con toda la información y elguión. Al cabo de 4 meses Ana recibe un email de una dirección desconocida que dice: "Ana, pasó mucho tiempo. Sigo pensando en tu cuento. Viggo Mortensen".
"Empezamos a tener mucho diálogo a través de mail, nos conocimos, fuimos hablando del proyecto, y lo más maravilloso de esta historia, es descubrir que alguien tan alejado puede tener tanto que ver con uno mismo. Que una historia que yo escribí, que tiene tanto que ver con mi propia historia, podía interesar a alguien que vive en la otra punta del mundo y que había algo en esta historia que a él, también le interesaba contar.
La entrada de Viggo hizo crecer el proyecto por montón de motivos, no sólo financieros y económicos, sino porque permitía concretar todo lo que la película pedía que fuera así. Además, Viggo es una persona muy especial, se compromete de tal manera con la película, que no se pierde ni un solo detalle, y siempre trabajando a la par".
Explica Mortensen, "Cuando leí el guión, me sorprendió lo bien que estaba estructurado". "Los personajes estaban muy bien definidos y me parecía un thriller muy original, que no es nada fácil. Se han hecho muchos thrillers en todo el mundo en la historia del cine, y el guión de Ana no parece adherirse a ninguna fórmula, es un cuento muy especial. Una de las cosas que más me atraía cuando empecé a leer el guión era la posibilidad, como actor, de hacer dos personajes, dos hermanos gemelos. Pero lo que te atrae muchas veces
te da miedo, porque lo que te atrae suele ser un desafío nuevo, diferente a lo que te has enfrentado antes. Le agradezco a Ana el regalo de poder encarnar estos dos personajes tan interesantes".
Notas de las productoras
Mariela Besuievsky
Conocimos el proyecto de "Todos tenemos un Plan" cuando se presentó en el Taller de Guiones de la Casa de América que dirige Gerardo Herrero. El guión ganó el premio " Julio Alejandro" que da la SGAE y comenzamos a pensar en participar en él. Lo analizamos con nuestra socia, la productora Argentina Vanessa Ragone. La historia transcurría en su mayoría en el Tigre, en el agua o en islotes solo abordables con lanchas, era una historia complicada y costosa para ser una primera película. El entorno era un personaje más. Mantuvimos numerosas reuniones con Ana, su directora y guionista y le comentamos que sólo con un nombre importante podríamos financiarla, y armar la coproducción. Ana tenía en mente a Viggo, pero por aquel entonces aún no lo conocía y conseguirlo parecía algo inalcanzable. El tiempo pasó y asumimos que quizás el proyecto fuera irrealizable. Pero tiempo después, quizás un año o más Ana nos volvió a llamar para contarnos que tenía a Viggo interesado
Entonces, volvimos a reconsiderar junto a Vanessa y Gerardo Herrero retomar la producción. Vanessa y los equipos de Haddock Films y Tornasol Films se pusieron manos a la obra para hacer un plan de trabajo y presupuesto a fin de determinar el coste de la película. Tal como nos habíamos imaginado era una película de un presupuesto más elevado de lo habitual para una coproducción entre Argentina y España. Tanto Telefé de Argentina, como Televisión Española se sumaron al proyecto. Mientras seguíamos con la búsqueda del resto de la financiación se realizaron varias versiones del guión donde colaboraron con sus notas guionistas como Ana Cohan y la directora Julia Solomonoff, así como Vanessa y yo. Fue un proceso muy intenso, muy creativo. Hacia octubre de 2010 FiP (Fox International Productions) se interesó en el proyecto, en Argentina se había incorporado Ars Magna como Productor asociado. Después de Berlín 2011 cerramos la financiación, las fechas de Viggo, que además se incorporó como productor asociado a la película, y el resto del casting, lo que nos permitió empezar la pre producción. Ésta fue larga porque como Viggo hace dos personajes requería que le creciera la barba entre el rodaje de algunas secuencias en Buenos Aires y el rodaje del resto de la película en El Tigre. Por lo tanto hicimos un primer día de rodaje, que fue como un gran ensayo general en Abril 2011 y arrancamos el rodaje principal 6 semanas después con un Viggo ya barbudo.
Para el resto del casting contamos también con actores de primera línea y mucha experiencia como Soledad Villamil, y Javier Godino con quienes ya habíamos trabajado en "El Secreto de sus ojos" o Daniel Fanego con quien también hicimos "Luna de Avellaneda". Con Sofía Gala también habíamos trabajado en "Tetro" en un papel más pequeño. El rodaje fue largo para el standard de una película independiente, 9 semanas entre El tigre, Buenos Aires y los Estudios de Ciudad de la Luz en Alicante.
El montaje se realizó en España, pero también los montadores viajaron a Argentina, y gracias a las nuevas tecnologías se pudo hacer esta postproducción con un Océano de por medio. Para la música contamos con dos músicos excelentes como Lucio Godoy y Federico Jusid, ambos de origen argentino, lo que les permitía conocer la sonoridad del lugar y aportar muchos matices.
La película es de una belleza muy particular, su director de fotografía Lucio Bonelli retrató el Tigre con gran personalidad, lo que nos permite a los espectadores viajar al Tigre con el protagonista, y a su vez vivir las sensaciones que el entorno le causa. La película se estrenará en muchos países del mundo donde ya está vendida y empezará a caminar sola. Cuando uno convive tanto tiempo con un proyecto, el momento en que la película hecha a andar es de mucho vértigo ya que cobra vida propia, sale del laboratorio y le pertenece al público.
Todos tenemos un Plan ha sido un gran viaje para todos los que trabajamos en la película y nuestro Plan es que la gente pueda también compartir este viaje con nosotros.
Mariela Besuievsky
TORNASOL FILMS
Vanessa Ragone
La producción de un film tiene mucha similitud con la imagen de una gran colmena, plena de intenso trabajo. El paralelo es pertinente en "Todos tenemos un plan", porque la metáfora de las colmenas y el funcionamiento productivo de las abejas recorre toda la película y es posible trasladar esa idea a su proceso de producción.
Para poder realizar "Todos tenemos un plan" hicieron falta muchas abejas obreras, incansables y dispuestas a afrontar todo tipo de desafíos con decisión e imaginación, y capacidad resolutiva. No hubo zánganos en nuestro equipo. Sólo un gran trabajo de grupo decidido a concretar las ideas de la "abeja reina", nuestra directora.
Producir cine en Argentina es trabajar para hacer realidad el proyecto que un director nos propone. Su mirada, su manera de narrar, su relación con los actores, su propuesta estética, todo ello es lo que lleva a un productor argentino a asumir los riesgos, los desafíos y las responsabilidades de una empresa tan compleja como la de producir una película.
"Todos tenemos un plan" es un guión que conozco desde hace más de 5 años, un proyecto que siempre me sedujo pero que tenía importantes complicaciones logísticas que lo hacían poco viable para una producción puramente argentina.
La llegada del imprescindible Viggo Mortensen al proyecto, la asociación artística y financiera con Tornasol Films de España, la asociación con Fox International y Fox Distribution, más el acompañamiento de Partners habituales de los proyectos de Haddock Films Telefé (Televisión Federal Argentina), Ars Magna Films- permitieron retomar el proyecto en condiciones adecuadas, y realizarlo.
Para Haddock Films y para mí como productora, producir "Todos tenemos un plan" fue dar un paso más hacia delante, del gran reconocimiento que significó obtener el Oscar a Mejor Película Extranjera en 2010, por"El secreto de sus ojos".
Reunir a una figura de la talla internacional de Viggo Mortensen con nuestros mejores actores locales, llevar adelante con éxito y sin ningún inconveniente el complejo proceso de producción en las Islas del Tigre, en el agua, bajo la lluvia, entre abejas enojadas, con buena cantidad de efectos especiales, durante largas semanas invernales, fue una experiencia enriquecedora y valiosísima. Más de un productor amigo me confió que creía que no íbamos a lograrlo. Pero lo logramos, en tiempo y con todo lo que el guión requería y hoy "Todos tenemos un plan" es un film intenso y poético con proyección internacional que vuelve a poner al cine argentino en una vidriera que es observada por Festivales Internacionales y por cinematografías de otros territorios.
Como productora de un país que tiene una larga trayectoria cinematográfica y que tiene el desafío actual de ser capaz de exportar su cine al mundo entero, me siento feliz y orgullosa de "Todos tenemos un plan".
El arte, la fotografía, el vestuario, la música, los sonidos ambiente, la marcación actoral, el ritmo de montaje, cada elemento dela película se conjuga para dar como resultado un relato cinematográfico que atrapa y seduce desde su guión, pasando por sus rubros técnicos y encarnándose en las extraordinarias actuaciones de todo su elenco.
"Todos tenemos un plan" es un film de profundo contenido humano, anclado en un paisaje muy especial. Habla de cuestiones universales sin perder su identidad específica. Y eso es quizá nuestro mayor logro de equipo. Haber podido traducir una gran idea, un gran guión en una película a su altura. El triunfo de la colmena.
Vanessa Ragone
HADDOCK FILMS
Abril 2012
Los personajes
"Fue muy divertido trabajar con todos los actores de "Todos tenemos un plan". Son muy comprometidos, les gusta muchísimo aportar desde lo que sienten y lo que les parece, y aunque muchas veces discrepamos y tuvimos momentos difíciles, para todos fue muy intenso y divertido" dice Ana Piterbarg.
Viggo Mortensen agrega: "Todos los personajes tienen un obstáculo, que es el culpar a los demás, una cierta amargura típica del cine negro. Son gente frustrada, gente que se siente fracasada, inútil, rencorosa, y hasta que superen eso no van a ser libres".
"Todos los personajes de la historia tienen dos costados. Uno donde están más bien plantados y otro donde tienen inquietudes, pero conviven con esa dualidad" señala Piterbarg.
Agustín (VIGGO MORTENSEN)
Agustín es un tipo muy serio, muy responsable. De los dos hermanos fue el que mantuvo el apego a la familia, el apego un poco a la expectativa social, y el que tiene valores morales un poco más estrictos, es más responsable en general.
Según Viggo Mortensen, "El personaje de Agustín no está vivo. Y al ponerse en una situación de alto riesgo, de mentir y de simular que es otro y tratar de actuar como el otro
fracasa mucho, porque no es un actor, y aunque fuera un buen actor, sería imposible. No eres otro, eres tú."
Y agrega: "lo que tiene de interesante y original, para mí, esta película, es que de alguna manera se llega a la verdad a través de la mentira. El personaje de Agustín miente. Obviamente lo hace cuando hace de su hermano Pedro, pero hasta cierto punto ha mentido también como Agustín. Nunca ha sido Agustín en realidad. Ha sido el Agustín que él creía que debía ser, como muchos hacemos de alguna manera. Es el Agustín que Agustín pensaba que sus padres querían que fuese, o el que su mujer, la sociedad y él mismo imaginaba podría complacer a los demás. Llega a un momento de crisis, donde empieza a mirar a su alrededor y no se cree nada, no se cree su profesión, su casa, su mujer. No ve un futuro como Agustín, y de repente se le presenta una oportunidad inesperada: Siendo físicamente casi idéntico a su hermano Pedro, cuando este desaparece, decide hacerse pasar por él. Irse de Buenos Aires y llegar a un sitio mucho menos poblado, vivir una vida solitaria, piensa que va a ser sencillo y no lo es. Tiene que mentir de otra manera todo el rato, porque cada persona que encuentra, lo mira, lo saluda, y él no sabe si se trata de un buen amigo, de un enemigo o un tipo que conoció la semana pasada. No tiene idea. Un perro se le acerca y lo mira, o le ladra
¿Es mi perro? ¿Es el del vecino? No lo sabe. Es mucho más complicado de lo que esperaba. Instalarse como Pedro en el Tigre supone un rompecabezas psicológico. Al hacer de Pedro, va conociendo todas las cosas que no sabía de Pedro... que piensan los demás de Pedro, que vida ha llevado ese hermano al que no ha visto en diez, doce años. Aunque está mintiéndole a los demás, poco a poco, se va dando cuenta que no se está mintiendo a sí mismo. Está en un sitio donde quiere estar, haciendo lo que quiere hacer. Ahora de repente, mintiendo totalmente, haciendo de su hermano, llega a ser tanto Pedro como Agustín."
Pedro (VIGGO MORTENSEN)
Pedro es la otra cara de estos dos hermanos. Es muy egoísta, en un punto, y al mismo tiempo, despierta un poco la envidia de todos, porque siempre fue muy leal a lo que sintió, a lo que se le antojó.
Viggo Mortensen comenta: "Con el desafío de hacer dos personajes, lo que nos preocupaba, y de eso hablábamos cada vez que me reunía con Ana en Buenos Aires durante los años antes de empezar el rodaje, era que tenía que haber una diferencia tanto física, por muy leve que fuera, como psicológica entre los dos hermanos que pudiera ayudar en lo narrativo. Aunque se parecen mucho, siendo gemelos idénticos, había que marcar diferencias importantes con sutileza. Esa era la idea."
Claudia(SOLEDAD VILLAMIL)
Claudia es una mujer muy fuerte, y es la que tiene el sentido común en la historia. Es la más concreta, la que está más apegada a la realidad a llevar adelante un proyecto hasta el final. Lo que no le cuadra dentro de su plan, trata de no verlo. Al encontrarse en una situación inesperada se empieza a replantear todo lo que hasta el momento no quiso preguntarse, ni quiso escuchar, ni quiso ver.
Soledad Villamil define su personaje como: "Claudia, es la mujer de Agustín, de uno de los hermanos. Es una mujer, una profesional de clase media, que ha podido desarrollarse muy bien en un aspecto de su vida, que es el aspecto profesional y en el desarrollo personal, tiene una cuenta pendiente, un deseo muy fuerte por cumplir un sueño, el de ser madre.
Es una mujer muy fuerte, muy decidida, y creo que lo atractivo, no sólo de este personaje sino de otros personajes de la película, es que ellos creen que las cosas son de una manera o deberían ser de una manera, y la vida les empieza a revelar otra cosa bien distinta. Y a Claudia le ocurre un poco esto. Ya tiene sus planes, tiene su vida organizada, y cree que todo, digamos, va a ir en la dirección que ella se propone, y sin embargo los acontecimientos le van demostrando que no.
Claudia y Agustín tienen una relación compleja y contradictoria. Porque si bien ellos son un matrimonio, una pareja afianzada de años,con el paso del tiempo, se ha ido desarrollando una distancia entre ellos, que el personaje de Claudia no asume del todo. De repente la vida se ha puesto como en un automático, y la relación ha continuado por inercia sin tener grandes inconvenientes, cada uno se ha desarrollado profesionalmente, pero el mar de fondo, se ha ido desarrollando para otro lado, por caminos divergentes y Claudia es un personaje que hasta que la vida no se lo pone delante, bien patente, no lo ve o no lo quiere ver."
Adrián(DANIEL FANEGO)
Adrián, se crió en las islasjunto con los dos hermanos que son Agustín y Pedro. Nunca salió de allí. Vislumbra que hay un mundo fuera, y eso se ve a través de la ropa que él usa y de un cierto aire que pretende darse. Pero no pudo despegar de la isla y tampoco pudo construirse una vida, de modo que hizo lo que pudo, y lo que pudo no es demasiado. La película toma un momento crucial de su existencia.
Para Daniel Fanego su personaje "se relaciona através de una razón de supremacía, que creo que es el código y la ley que conoce Adrián. El más fuerte es el que manda y es el que puede tomar la iniciativa."
Rubén(JAVIER GODINO)
Rubén es la víctima dentro del triángulo de Pedro, Adrián y Rubén. Es el último que se sumó a esta sociedad. Es un personaje que tiene mucho de torpe, pero que al mismo tiempo tiene cierta sensibilidad intuitiva.
Para Javier Godino: "Rubén es un tipo salvaje, de Tigre, muy sencillo, muy humilde, al que con vivir de la caza y la pesca con su familia, le basta. Pero tiene que ganar dinero para comer, para dar de comer a sus hijos, para que sus hijos tengan materiales para la escuela, y entonces tiene que agachar la cabeza ante las órdenes de su padrino, Adrián, el personaje de Daniel Fanego, y entrar en cosas turbias, tiene que ir por el mal camino y traicionar a su propia naturaleza, para conseguir dinero."
Rosa ( SOFÍA GALA CASTIGLIONE)
En cierto modo Rosa es quien cuenta esta historia y la que la continuará.
Es el personaje que tiene más consciencia de esas dos facetas de luz y oscuridad, y es la única que pone en palabras cuál es su plan. A diferencia de los demás Rosa es trasparente, no miente ni tampoco intenta dar una imagen diferente de lo que es.
El rodaje
Cada película tiene sus propios desafíos. Implica la entrada en un universo nuevo del que aprender y saber a lo que se dedica cada uno de los personajes, saber de eso y estudiarlo. Un trabajo de documentación bastante profundo a nivel logístico, práctico y por supuesto escenográfico.
Para Ana Piterbarg "Hacer películas es muy complicado. A mí lo que creo que me resultó más difícil, fue tratar de no perder de vista lo que uno quiere contar, de qué se trata, qué es lo que le tienes que pedir al actor, al director de fotografía
, o sea, hacia donde va, a donde apunta lo que uno está haciendo. Porque la presión del rodaje y de la producción en general, desde el origen y en cada uno de losprocesos, es tan grande que muy fácilmente puedes desconcentrarte. Además esta película, tiene las características de ser una ópera prima que se podría llamar grande, o por lo menos, más grande de lo que yo imaginaba que iba a ser mi primera película. Con más focos de atención y con más foco sobre la obra. A veces uno quisiera simplemente poder estar construyendo sin tener que pensar en toda la expectativa que se genera a partir de lo que uno va haciendo."
Y agrega: "El escenario del Delta, siempre fue pensado para la historia como si fuera un protagonista de la historia, en la imagen de la película, tiene una presencia muy importante. Con el río que sube y que baja, con el frío y la ola polar que nos tocó durante el rodaje, con lo difícil que es a veces filmar escenas en las lanchas.
Una de las secuencias más difíciles de rodar, que sin embargo en la pantalla, probablemente dure poquito tiempo, pero que fue difícil de hacer, fue la escena de los juncos, donde de repente, yo me encontré que había, al menos, veinte personas metidas en el río, con el agua hasta medio cuerpo, metiéndose como lo hacen los junqueros. La única diferencia es que era invierno, que hacía mucho frío y que había que entrar con una cámara."
Leticia Tapia, jefa de producción de "Todos tenemos un plan" nos cuenta que "En este rodaje en particular, teníamos que tener en cuenta, no sólo el factor lluvia, sino que teníamos que tener en cuenta el factor del nivel del agua, que dos veces al día sube y dos veces baja. Nos hicimos un poco expertos en corrientes y vientos, como influían sobre el agua y en las subidas y bajadas de nivel, para planificar el día siguiente.
Otro desafío que tuvimos fue la secuencia de los juncos porque el río en esa parte no era muy profundo y tuvimos que trabajar con canoas que se adaptasen a esa profundidad, no con nuestros barcos. Tuvimos que ir todos en canoas con el equipo de la película.
Hubo que tener la película muy planificada y tener muy claro qué es lo que se quería contar, porque no había tiempo para imprevistos. Todo tenía que estar mecánicamente organizado y tratamos de que así fuera, intentando ir resolviendo los inconvenientes que surgían en el momento.
Es una historia cautivadora, que atrapa, pero además suponía un desafío importante, desde la parte de producción, y desde el aspecto logístico. Nunca había hecho una película en el agua. Existía el reto de trasladar los equipos, de resguardarlos, de llevar a la gente día a día, del transporte desde Buenos Aires, desde la Capital Federal hasta el Tigre, que son más o menos, 30/40 kilómetros, que no solamente se hacen vía terrestre, sino también por el agua. La infraestructura de maquillaje, de vestuario, la organización de las comidas. Siempre rodeadosde una vegetación que es bastante agreste y sin contar con la ayuda de ningún camión. Todo en lancha"
Viggo Mortensen señala: "Ana se preparó muy bien, casi todos los días ocurrió algo inesperado y ella supo resolverlo, siempre. Supo formar equipo, todos estaban involucrados, todos aportaban y siempre respetaban las decisiones de ella"
La directora artística, Mariela Rípodas, señala: "En cuanto al aspecto visual de la película, intuimos que era una película muy plástica y muy pictórica, en cuanto a las texturas y el color, el año pasado hicimos una exploración en abril, mayo y junio, con la intención de ver cuál era el aspecto visual que más nos convenía para la película. En cuanto a los escenarios, finalmente decidimos rodar a partir de junio, cuando ya hay menos cantidad de verde en los árboles y se ve todo más ralo y más abrupto".
Por su parte la directora comenta, "Mariela Rípodas (directora de arte) hizo un trabajo increíble con los decorados. El hecho de filmar en las lanchas, en el río, implicó realizar una gran cantidad de pruebas y de proyecciones para ver como funcionaba trabajar en digital con el movimiento de la lancha. Fue un proceso de varios meses muy concienzudo, de mucha concentración de ir buscando qué es lo que le correspondía a cada personaje. De la misma manera, el vestuario para mí, diseñado por Valentina Bari, es algo que termina de dibujar muy bien a los personajes dentro de la película".
Lucio Bonelli, director de fotografía de la película nos cuenta que "Estuvimos de acuerdo en el punto de que debía ser una película cruda, no demasiado prolija desde la cámara, por lo cual optamos por hacer casi todo con cámara en mano o en pulpo. Sobretodo porque al estar filmando mucho en lanchas, el tema de manejar trípode, es imposible.
La complicación de filmar en el Tigre, es que hay que trasladarse en lanchas. Teníamos una lancha de cámara, una lancha de luces, una lancha de grip, en vez de tener camiones. Todo se movía por agua. Había posiciones de cámara, que la única manera de hacerlas era desde una lancha, estabas filmando la tierra desde lanchas. A esto fue difícil acostumbrarse, que uno dependa de manejarse en el agua para poder hacer algunas cosas. A veces la filmación estaba enun lado del río y había que poner la cámara en la orilla contraria. A veces estábamos todo un día sobre una lancha rodando una secuencia. En ese sentido este rodaje ha sido muy particular."
El invierno en el Delta
La película fue rodada en invierno. Una época muy dura en el delta del Tigre ya que las bajas temperaturas y el viento son muy extremos.
Por su parte Lucio Bonelli nos remarca "La primera exploración la hicimos en mayo de 2010, y volvimos a hacerla en junio de 2010, y ahí decidimos que el mejor momento para hacerlo era en invierno, por la luz que había, el clima, la gente, la ropa.
Me imaginé que tenía que ser una historia más bien fría, de tono frío, contrastada, oscura. Tenía algo de sordidez, era evidente que el Tigre en invierno, y los personajes curtidos que había, iban a ayudar un poco a conseguir lo que queríamos. Todo eso de mantenerlo en la oscuridad
un poco de frialdad en toda la imagen.
Es difícil trabajar con frío, en el agua y en el Tigre, pero no debería verse reflejado en la película, lo que debe estar es el clima y la hostilidad de las imágenes, eso sí debería estar en la película. Se eligió el invierno justamente para conseguir la sensación de un terreno hostil, que no se sienta que estás en un lugar de vacaciones."
Viggo Mortensen
"Todos tenemos un plan" es la cuarta película que rueda en español, pero la primera que rueda en Argentina, hablando el castellano de su infancia.
Dice Viggo: "Me liberó poder actuar en español, hablando más o menos como hablo yo normalmente. No digo que para Pedro y Agustín, hable igual. Ninguno de los dos habla exactamente como hablo yo, pero tenía la medida...conozco los acentos de Pedro y Agustín, me crié con esos acentos. Era algo más cercano.
Cada vez que llego a Argentina me siento muy bien, me siento como en casa
La forma de hablar, de pensar, la cultura, la música, la comida, me recuerda a mi infancia. Pero es diferente estar una semana o dos, a estar meses. Estar tanto tiempo hace a la vez que vuelvas de verdad y por otro lado que te des cuenta que en realidad no se puede volver al pasado. Esa es una lección que también aprende el personaje de Agustín en nuestro cuento.
El idioma te cambia. El acento también, pero el idioma, hablar un idioma latino, comparado con el inglés o el danés en mi caso, es diferente, te cambia. Me gusta el desafío, la transformación. Me siento cómodo aprendiendo, adaptándome. Cuando tengo que hacer acentos diferentes en inglés, acentos regionales de Estados Unidos o de otros países, o meter un acento encima de un acento inglés, como el ruso, no me cuesta tanto. Es un trabajo que hay que hacer y hay que preparar bien. En castellano soy menos flexible, y creo que es por haber sido mi primer idioma, o el que más marcó mi infancia. He rodado en España y tuve que pensar mucho más en lo del acento, me costó un poco más adaptarme en ese momento porque no había vivido antes en ese país. Pero todo se puede aprender y hacer bien con tiempo y paciencia.
En el proceso de preparación fui muchas veces a Argentina para hablar con Ana durante los últimos tres años y medio, o cuatro años, no sé cuántos han sido
mientras se buscaba la financiación para poder rodar esta película, me reunía con ella cada vez que estaba en Buenos Aires, y hablábamos del guión, hablábamos de cómo enfrentarnos al desafío de hacer dos personajes distintos pero a la vez muy parecidos. Las diferencias entre los dos hermanos tenían que ser tanto físicas como de comportamiento, tono e inflexión de voz, pero no queríamos exagerar las diferencias, necesitaban ser sutiles.
El guión que escribió Ana es un thriller que tiene matices que conocemos de otras películas del género de cine negro, pero es muy original. Éste me llegó por azar, fruto de un encuentro inesperado con Ana en el barrio de Boedo, en Buenos Aires. Después ella me envió el guión, lo leí y pensé: Bueno, esta es la oportunidad que estaba buscando. Poder rodar en el país de mi niñez, en el idioma de mi infancia, una historia muy especial y muy buena. Fue un desafío importante para mi creativamente.
Las escenas en las que hago de los dos hermanos juntos fueron técnicamente complicadas de hacer porque en algunos momentos tenía que hablar a la nada. Rodábamos un plano y después, sin mover la cámara, a los dos días o tres días, cuando no me había afeitado y tenía una pinta diferente para interpretar el personaje del otro hermano, tenía que darle la réplica al que había hablado hace tres días -- o sea yo, hablándome a mí mismo, pero hablando a la nada. Cuando me acostumbré a hacerlo, fue divertido, y me encantó ver como Ana y Lucio encontraban soluciones técnicas para filmar con credibilidad estas secuencias. Tanto durante esa parte de la filmación como en el resto del rodaje fueron muy ingeniosos, con la ayuda de la gente de producción, aprovechando al máximo el presupuesto que teníamos para la película".