La familia Canavaro se ha erigido como una dinastía del rugby. El padre de Jo fue una figura mítica, también el mismo Jo.
Ahora, sin embargo, Tom, el hijo de 13 años que Jo ha criado sólo, ha demostrado que para lo único que vale es para las matemáticas.
Para el deporte es un verdadero negado, lo cual decepciona a Jo, que cree con fervor que la leyenda de los Canavaro no puede detenerse tan pronto.
Por eso, después de haber recibido varias negativas para que Tom ingrese en los equipos de la región, Jo decide montar su propio equipo, empresa para la cual contará con la ayuda de sus amigos.