"Papá, soy una zombi" es una película de animación donde zombis, brujas y otros seres de la noche, conviven en una emocionante y entrañable aventura mágica, en la cual Dixie, una niña rebelde y arisca, aprenderá a enfrentarse a los problemas de la vida tras su estancia entre los muertos.
"Cinco años después del traumático divorcio de sus padres, Dixie se ha convertido en una adolescente arisca, que quiere escapar del odioso mundo en que vive. En la escuela se ríen de ella por su actitud introvertida y su aspecto gótico, e incluso su mejor amiga le esquiva, para poder flirtear a escondidas con el chico que le gusta a Dixie. El padre de Dixie se lleva a su amada hija a la feria en un loable intento por alegrarle las penas, pero las cosas se tuercen de tal manera para Dixie que la niña ya no lo soporta más y acaba estallando. Queriéndose morir, la jovencita huye por el bosque bajo la tormenta. De pronto, un rayo impacta contra un árbol y este se le desploma encima. Al despertar, descubre que se encuentra enterrada dentro de la tumba de un cementerio y es... ¡una zombi!
La joven averigua pronto que la vida entre los muertos vivientes no es mucho mejor. Por suerte o por desgracia, existe una manera para dejar de ser un zombi y regresar a su vida de mortal. Se trata de la vieja leyenda del Azoth. Según ésta, un día llegará al cementerio un zombi portador de un amuleto mágico, y usará los poderes mágicos del Azoth para abrir el umbral de regreso. Un portal mágico que permite que los zombis puedan regresar a sus vidas como mortales, exactamente al mismo momento en que la palmaron y poder enmendar así las faltas de su existencia.
El colgante que lleva Dixie, el que le regaló su madre antes de marcharse, se parece enormemente al Azoth que describe la leyenda. Descifrar el secreto del Azoth para conseguir que este despliegue sus poderes, parece el único medio que tiene Dixie de volver a la vida. Es así como la joven zombie inicia un viaje repleto de aventuras al amparo de las sombras de la noche. Le acompaña Isis, una joven momia egipcia extremadamente parlanchina, asustadiza y supersticiosa que, no obstante, le ofrece toda su amistad. Y pronto se une Gonner, un zombi pícaro y embaucador, que fuera grumete de un barco pirata, y de quien Dixie se empieza pronto a enamorar.
El viaje se complica cuando uno de los espías de Nigreda consigue engañar a Dixie y robarle el Azoth. Con la preciada joya en su poder, Nigreda comienza a preparar su venganza final contra los mortales. La suerte de nuestro planeta queda pendiente de un hilo. Dixie deberá recuperar el Azoth y aprender a reconciliarse con el mundo que la rechazó si es que quiere salvarlo y salvarse a sí misma".
Los personajes
Dixie, la prota
Se trata de una niña de hormonas turbulentas y confundidas. Dixie posee una tierna belleza que intenta tapar adaptando una apariencia gótica. La joven se ve a sí misma atrapada entre dos mundos, entre la felicidad de su infancia y el desconcierto que le produce hacerse mayor sin nadie que la guíe.
Vitriol, el zombi hippy
Zombi psicodélico de unos 45 tacos que sigue anclado en los años 60 que debió de ser cuando la palmara. Vitriol es apresurado e inquieto, de predisposición natural hacia el consejo fácil y a los comentarios jocosos. En fin, que le gusta soltar la chapa!.
Ricardo, el estrafalario padre
De sonrisa bonachona y ojos amables es el propietario del tanatorio Villahuesos. Un profesional impecable que ejerce su trabajo con gran orgullo y se esmera por devolver a todos los fiambres la belleza de sus mejores años. Como buen optimista, nunca ve el vaso medio vacío, ni siquiera medio lleno
sino rebosante de agua.
Piroska, la pequeña arpía
Joven zombi con pinta de Maria Antonieta, en miniatura y venida a menos
Engreída, recalcítrate y carente de cualquier tipo de compasión hacia los demás. Va a todas partes con un hacha clavado en la cabeza con carita de chihuahua cabreado.
Gonner, el pícaro pirata
Joven zombi vestido de pirata El muchacho resulta atractivo, y no tanto por su cara medio descompuesta sino por su personalidad divertida y arrolladora. Gonner aprendió de los piratas toda la picaresca del Caribe. Es inteligente y atrevido, embaucador y juerguista.
Papá soy una zombiDirigida por Ricardo Ramón, Joan Espinach