Memoria
Cuando, en 2002 Albert Sánchez Piñol escribió "La piel fría" (Ed. La Campana) nadie podía ni siquiera imaginar que una novel.la de género fantástico se pudiera convertir en el éxito más abrumador de la literatura catalana de todos los tiempos. Traducida a 37 lenguas y con una cantidad ingente de ejemplares vendidos, "La piel fría" rompió todos los moldes y acercó toda una generación a la literatura mediante un estilo ágil y muy original que bebe, pero, de los grandes autores con los que todos hemos empezado a leer: Stevenson, Verne, Salgari o Lovecraft. Desde entonces Piñol ha sabido cultivar un público absolutamente fiel a su narrativa y consolidar a cada obra su peculiar y atractivo universo personal ("Pandora en el Congo", "Trece tristes trances").
La idea de llevar a la pantalla "El Bosc", uno de sus relatos recopilados en su primera obra de ficción publicada ("Les edats d'or", Ed. La Campana, 2001), surge de nuestra admiración por la obra de este autor, así como del deseo de realizar un cine de género diferente, basado en una mirada personal y en un estilo de contar propios.
"El Bosc" es una historia en la que se adivinan ya todos los elementos que configurarían después el universo de Piñol. Por un lado encontramos uno de sus temas más recurrentes: la lucha de lo natural (el caos y el fantástico) contra lo humano (la civilización y lo racional). Por otro, el miedo ancestral al monstruo (el desconocido y lo diferente), en la contemplación del horror nos vemos todos reflejados.
"El Bosc" transcurre en un paisaje duro y muy peculiar, el Matarraña, muy bien conocido por el autor ya que es la tierra de sus antepasados, donde pasó los veranos de su infancia y a la que suele retirarse a escribir. Esta pequeña región de rocas sinuosas y extrañas, olivos retorcidos y alimañas acechantes, está situada en la franja de Teruel que limita con Tarragona. Una de sus grandes peculiaridades es el idioma, un catalán antiguo con influencias aragonesas y valencianas que otorga a nuestra historia un rasgo de personalidad muy especial. Tanto esta lengua como el paisaje ayudan a construir el microuniverso propio en el que se mueven los personajes.
Los personajes de "El Bosc" aman, se ilusionan, sufren, pero sobre todo luchan por sobrevivir en este peculiar universo en el que hace falta lo fantástico, no sólo como una vía imaginaria de evasión a una cruda realidad sino como una literal vía de escape para salvar la propia vida. El guión utiliza la guerra civil como detonante de unos conflictos humanos mucho más antiguos y arraigados, que durante la contienda desencadenan en crueles venganzas y ajustes de cuentas, algo que se repitió en muchos pueblos de España en este periodo y que permanece en el subconsciente colectivo a través de historias familiares y mitos rurales.
Esta ambientación rural es otro de los elementos que más nos atraen de la historia. La fusión del costumbrismo rural con el elemento fantástico (algo que hemos bautizado medio en broma como "agrofantástico") no es algo muy frecuente en nuestro cine y estamos seguros de que atraerá al espectador. La lucha contra los elementos por el fruto de la tierra, la proximidad del bosque, la noche y sus misteriosos pobladores, son algo que en la mayoría de los casos sólo se separa de nosotros por un par de generaciones.
El rodaje se desarrollará durante seis semanas. Cinco semanas en la masía de Can Vinyals (cerca de Vila-Rodona en Tarragona) para rodar los interiores de la masía y el bosque, y una semana en el pueblo de Arnes (Terra Alta-Tarragona) para rodar el pueblo y los exteriores naturales.
Director
Óscar Aibar, Barcelona, 1967.
Empieza su carrera trabajando como guionista de cómics para las revistas Tótem, Makoki, El Víbora, Zona 84, Cómix Internacional, Creepy o Cairo, en las que publica historietas desde 1986 a 1994. Después alternará su labor como guionista, realizador de TV y de videoclips con el cine, además de publicar el libro de cuentos "Tu mente extiende cheques que tu cuerpo no puede pagar" (Debate, 2003) y las novelas "Los comedores de tiza" (Caballo de Troya, 2005) y "Making Of" (Mondadori, 2008).
Ha dirigido los largometrajes "Atolladero" (1996), película absolutamente pionera en el nuevo cine fantástico catalán y considerada una cinta de culto por especialistas de todo el mundo, "Platillos Volantes" (2004), referente para críticos y autores (entre los que destaca por su proximidad Nacho Vigalondo y su Extraterrestre), "La máquina de bailar" (2006), "Rumors" (telefilme, 2007) y la más reciente "El Gran Vázquez" (2010), que participó en la Sección Oficial del Festival Internacional de San Sebastían y que obtuvo el premio al Mejor Guión en el Festival Internacional de Montecarlo.
Autor y guionista
Albert Sánchez Piñol, Barcelona, 1965.
Antropólogo y escritor. Es autor del libro de relatos "Compagnie difficile" (2000) junto con Marcello Fois. Ese mismo año también publicó el ensayo "Pallassos i monstres", una biografía satírica de ocho dictadores africanos.
En 2001 publicó el libro de relatos cortos "Les edats dŽor", donde aparece el cuento "El Bosc" en el cual se basa el guión de la película.
En el año 2002 publica la novela "La Pell Freda" ("La Piel Fría"), traducida a 37 idiomas y en 2005 "Pandora al Congo", traducida a 15 idiomas.
En 2008 apareció la recopilación de cuentos "Tretze tristos tràngols" ("Trece tristes trances"). Ha obtenido diversos premios, entre los cuales destaca el Ojo crítico de narrativa (2003), el Grinzane-Francesco Biamonti (2005) o el Serra d'Or (2006).