Jimmy Bobo (Sylvester Stallone) es un sicario de Nueva Orleans duro e implacable. Tras su último trabajo, sufre un ataque inesperado por parte de Keegan (Jason Momoa), una imparable máquina de matar que ejecuta sin contemplaciones a su compañero (Jon Seda). Dispuesto a tomarse su venganza, Jimmy se verá obligado a colaborar con Taylor Kwon (Sung Kan), un detective de la policía no muy acostumbrado a los métodos expeditivos. Aunque pronto descubrirá que Jimmy es el arma más eficaz para acabar con una peligrosa organización que ha corrompido a la policía y las altas esferas de la ciudad.