Marko es un treintañero que acaba de publicar su primer libro. Reside en Berlín desde sus días de Universidad, lo suficientemente alejado del estilo de vida burgués de sus padres Gitte y Günter, al que nunca hubiera podido acostumbrarse. Su relación con ellos se limita a visitarlos una vez o dos veces al año, principalmente para darles la oportunidad de pasar unos días con su nieto.

Sus esperanzas de pasar un tranquilo fin de semana con su familia se desvanecen cuando su madre, que ha sido mentalmente inestable desde que Marko era un niño, les comunica que va a dejar su tratamiento. Gitte pide ser tratada de ahora en adelante como un miembro de pleno derecho de la familia, ahora que su marido Günther finalmente está vendiendo su editorial, y encaran sus días de retiro juntos.

El anuncio de Gitte desencadena reacciones contrapuestas en los miembros de su familia. Temiendo por su salud, el hermano pequeño de Marko, Jacob, insiste en que siga con el tratamiento. Por otro lado la recuperación evidente después de los años de Gitte parece frustrar los planes de retiro de su marido, Gunter. Marko es el único que respalda la decisión de Gitte, viendo en ello una oportunidad para rehacer su familia.