Guido es tímido, reservado y educado. Trabaja como portero de noche en un hotel y ama la cultura clásica. Antonia es inquieta, pasional y sensible. Trabaja para una empresa de alquiler de coches, tiene una bonita voz y compone canciones. Sólo se ven por la mañana temprano cuando Guido regresa del trabajo, despierta a Antonia con el desayuno y hacen el amor. Su relación es indestructible, pero el deseo de tener un hijo que no llega provocará situaciones tan divertidas como imprevisibles.